¿Alguna ves han tomando tequila? Jamás en la vida lo había probado hasta hoy, todo empezó cuando Edy me presentó con todos los jugadores de americano de otras escuelas y como tradición siempre uno debe de tomarse un "shot" de tequila siempre que conocen a alguien nuevo. Después Krystal me llevo con todas sus amigas para que las conociera y chismeáramos sobre todas las personas que veíamos pasar, todas resultaron ser muy agradables, tenían el mismo humor que yo pero lo malo es que tomaban demasiado y por lo tanto ya estaba un poco ebrio, creo que solo un poco...
Ya lleva 4 horas la fiesta y apenas está "empezando" porque ya llego toda la gente que se esperaba hasta diría que más, acaba de llegar un dj que esta poniendo el ambiente, muchos ya consiguieron el ligue con el que van a pasar la noche, algunas siguen en busca de que algún chico le ponga atención, también algunos cuartos ya están ocupado por parejas al igual que los baños, ¿yo qué carajos hago? Pues ahorita estoy platicando con algunos chicos de americano de la escuela, debo admitir que algunos son demasiados guapos aunque estoy buscando a Axel porque no lo eh visto en toda la fiesta, es raro porque casi siempre estamos juntos para cuidarnos de no hacer una tontería, pero conociéndolo el siempre anda de aquí para allá, así que va a ser difícil encontrarlo en algún lugar de esta casa inmensa.
-Chicos, voy por un trago de tequila, regreso en un momento con ustedes-dije mientras agarraba mi vaso e iba a la cocina.
Entro a la cocina y raramente está vacía pero qué bueno porque creo que ahora sí estoy más que ebrio, todo me da vueltas, me siento con mucha energía aunque un poco estupido en mis acciones.
-¡Daniel! Qué bueno que estés por aquí-Dios, esa voz yo la conozco.
-Carlitos, ¿porque no voy a estar aquí? Es la fiesta de mi mejor amiga, sería un pecado no estarlo.
-Hace mucho que no escuchaba que me decías Carlitos, extraño que me digas así.
¿Eso a qué vino?¿Qué carajos fue eso? Dios nunca imaginé que volvería a hablar así con Carlos. Tal ves este ebrio pero aún recuerdo el plan que tenía....
-Carlitos...
-Vuele a decirlo.
-Carlitos...
-Me encanta que me digas así.
Creo que de alguna forma lo exitaba que le dijera así porque Carlos empezó a encerrarme en una esquina, entonces no es tan macho como yo pensaba porque no pensé que fuera a caer tan fácil cuando tratara de coquetearle.
-Hoy te vas tan sexy-empecé a acercarme a Carlos, mientras ponía mis brazos sobre sus hombros.
Me siento la persona más seductora de esta noche y también la más puta por coquetearle a la persona que me gustaba sabiendo que tiene novia.
-¿enserio? Pues eres el único que me lo ah dicho.
-No seas mentiroso, con esa playera tan apretada dudo que más de una te lo haya mencionado o bien lo haya pensado-le susurre en el odio
-¿Y no te gustaría tocar lo que hay debajo?-¿escuche bien? No pensé que llegaría tan lejos, rayos a que procede ahora, creo que noto que no sabía qué hacer por lo que tomo mi mano y la acerco a sus abdominales, era la primera ves que tocaba a Carlos de esa manera, estoy tan exitado.
-Pero solo si me dejas meter mano-Si voy a ser una puta, debo de serlo bien y no a medias.
-Yo dejo que la metas hasta donde quieras...
No iba a desaprovechar esta oportunidad, siempre quise hacerle algo como eso por lo que baje la mirada y empecé a subirle la playera, mi sueño echo realidad, ver así a Carlos. Mientras lo tocaba hacia expresiones un tantas raras, creo que eran de ¿exitación?
-Dani, deja que yo también te toque.
-Agarra todo lo que quieras.
Creo que ambos estamos muy ebrios porque tantos años de amistad y nunca nos atrevimos a hacer algo así. Carlos empezó a tocar mi trasero algo que hizo que sacara un escandaloso gemido que si no fuera por la música se hubiera escuchado en toda la casa. Ahora ya estamos en pleno faje, está empezando a acercarse a mí cuello para tratar de hacer un chupeton pero como soy la persona más "teta" de este mundo me da cosquillas por lo que creo que eso arruina el momento, pero para no quedar como un idiota voy a tomar la iniciativa de besarlo, voy a hacer lo que siempre soñé...besar a Carlos.
-Carlos-alzo inmediatamente su cara para verme a los ojos.
Empecé a acercarme lentamente a él, sabía lo que iba a hacer porque cerró sus ojos para prepararse, estaba a unos cuantos centímetros de sus labios, solo era cuestión de dar un pequeño paso para besarnos pero oigo unos pasos acercarse poco a poco y se trata de una chica porque son unos tacones los que se escuchan.
-¡Carlos mi amor!, ven vamos a tomar algunos tragos con los del equipo de soccer-Mariana abrió la puerta de golpe.
-¡Mariana!-Carlos se separó inmediatamente de mi y volteo a ver a Mariana la cual se quedó paralizada cuando nos vio tan cercas, parecía que en cualquier momento iba a caer desmayada por tal impresión. A un jodido pasó de besarnos y llego esta maldita a arruinar mi momento, el momento en el que Daniel le tocaba un poco de Carlos, ¡CARAJO!
-¡Carlos qué rayos estás haciendo!, ¡EXPLÍCAMELO! Y ¡Tú!- Mariana volteo a verme- ¿Quién mierda te crees para besarte con el? ¿No recuerdas que es mi novio? Es MÍO, MÍO, MÍO y no voy a dejar que te lo lleves solo por tu calentura.
-Mariana, Daniel y yo no nos besamos, tranquilízate, deja de imaginar cosas, además hace mucho que no hablamos, solo iba a darle un abrazo por todo el tiempo que no nos vimos, sabes que no te sería infiel y menos con un hombre, no soy marica, así que bebé no estés celosa-Carlos fue directo a Mariana y la agarro del brazo. ¿Con qué no es marica? Dios si hace un rato me pone sobre la mesa para hacer todas las posiciones que sabe, hace un tiempo me hubiera dolido que Carlos me hubiera tratado de tal forma pero ahora me da igual, más bien ahora voy a dejarlo en ridículo frente a Mariana.
-Tranquila Mariana, solo estaba divirtiéndome un rato, solo reclamaba lo que me pertenece, recuerda que solo te lo eh prestado, en cualquier momento te lo puedo quitar, tenlo en mente bonita.
-¿Disculpa? No escuche bien lo que acabas de decir-Mariana me lanzo una mirada furiosa.
-Bueno pues yo solo venía por un trago y ahora que ya lo conseguí me pasó a retirar-agarre mi vaso y avance hacia la salida-Nos vemos luego Carlos-le guiñe el ojo y salí inmediatamente de la cocina.
Salí de la cocina con el ego tan grande, estaba con tanta adrenalina por lo que acababa de suceder porque si no fuera por Mariana tal ves esta noche si tenía algo más con Carlos, me hubiera encantado quedarme a ver cómo Mariana enloquecía al ver que su "novio" había estado liándose con su peor enemigo, pero seré una puta, más no un descarado.
Ahora estoy bailando con algunos jugadores de americano, creo que uno ya me agarro el trasero, lo malo es que no le pedí su numero porque no me acuerdo quién fue, tan machos que se ven. Ya son la 3 de la mañana y sigo bebiendo sin parar, cada ves me siento más estúpido, pero es como si no pudiera parar de tomar, no sé si se debe a la exitación que todavía traigo por culpa de Carlos o por la adrenalina de volver a ganarle a Maríana pero creo que ahora sí ya estoy mal por lo que optó sentarme en un sofá ya que estoy más que ebrio y ahora estoy más mareado, trato de relajarme cerrando los ojos por un momento, pero siento como alguien se sienta alado de mi y me agarra la mano.
-Dani, te eh estado buscando todo el tiempo y al fin te encuentro.
-¿Eduardo? No pensé que estuvieras aquí, como tampoco te eh visto en toda la fiesta.
-¡Pues aquí estoy! Aunque creo que nos encontramos en mal momento, luces muy ebrio.
-¡Pero que dices!, si yo estoy en perfecto estado, es solo que ya estoy cansado de estar bailando y me vine a sentar al sofá un rato-según yo soné lo más sobrio que pude, pero vi que Eduardo empezó a reírse.
-Te ves tan lindo tratando de fingir que no has tomado nada, pero da igual si estas ebrio o no, lo importante es que estamos juntos-Eduardo empezó a acercarse hacia mi.
-Valla, ¿pero porque quieres estar conmigo?-empecé a coquetearle.
-Pues quiero conocerte, me gustaría saber sobre ti, si tú me lo permites.
-Me llamo Daniel, tengo 16 años, me encanta comer, odio los pescados, mi signo zodiacal es Géminis y amo a los perros, creo que eso es lo más importante de mi.
-Okey, creo que ya me aprendí todo lo que dijiste, así que es mi turno, me llamo Eduardo, tengo 18 años, amo el soccer, soy picis, odio a las aves y me encanta vivír la vida hasta el último momento.
-Creo que también yo ya me aprendí todo de ti, y dime ¿situación sentimental?-Digo para no quedar como un tonto, que tal si resulta que tiene novia y yo ya pensando tener una noche con el hoy.
-Por el momento soltero, dispuesto a todo, aunque claro, abierto a toda propuesta, ¿qué hay de ti?-¿acaso eso habrá sido un indirecta?
-Igual, disfrutando mi soltería, disfrutando de las experiencias que se me presenten, sin la presión de dar explicaciones-era mi turno de lanzar las indirectas.
-Y ¿hoy has tenido alguna experiencia? Cuéntame.
-No, ninguno me parece tan atractivo, los veo muy simples, pero para serte sincero, es que estaba esperando a que llegara alguien.
-¿Y y lo encontraste? Porque puedo ayudarte a buscarlo y así ya puedas morir en paz, jajaja.
-La persona que estaba buscando está tan cerca de mi, a unos cuantos centímetros, hoy se ve tan sexy que no puedo dejar de mirarlo-esa fue la indirecta más directa que jamás haga dicho.
Eduardo me vio con unos ojos de deseo que hizo que me excitara más, empezó a morderse los labios, me acarició la cara y empezó a besarme, no sabía si había más personas alrededor de nosotros, pero me da igual, se siente tan bien, después de un rato de estar besándolo empecé a meterle mano por lo que sin decir una palabra agarro de mi mano para llevarme directo a una habitación, creo que ya se imaginaran para que.
Empezó a buscar una habitación vacía para meternos, estaba tan emocionado, iba a tener relaciones con el más guapo de la escuela, con tan solo imaginarlo me hacía querer ya intimar con el.
-Esta habitación está vacía, entra.
Me tiro directo a la cama y empezamos a besarnos con mucha lujuria, podía sentir su gran ereccion en mi abdomen. Con mi boca empecé a desabrocharle la camisa, cuando llegue a la parte de los abdominales decidí juguetear un poco con ellos y por sus expresiones eso le estaba gustando. Cuando termine de desabrocharle la camisa se la quite. Ahora era su turno, él fue más salvajes porque rompió los botones de mi camisa, sé que me va a doler que hiciera eso porque me gustaba mucho la camisa, pero creo que lo que voy a hacer lo va a compensar. Estábamos los dos ya casi desnudos, seguimos besándonos, aún así este ebrio espero recordar este momento. Ya llevamos casi 10 minutos besándonos y creo que ya es hora de que la acción empiece, justo iba a dar el siguiente paso, pero Eduardo se me adelanto y se bajo los pantalones y dejó ver el gran miembro que tiene, ¡por favor dios, deja que recuerde este momento, o bien, deja que recuerde su gran pene!, ahora que lo veo, su pene se ve bien junto con las músculosas piernas que tiene. Creo que se dio cuenta de lo sorprendido que estaba porque empezó a reírse, estaba paralizado, no sabía qué hacer, pero por suerte Eduardo me dio un empujón, bueno un manotazo, porque puso su mano sobre mi cabeza e hizo que me agachara, creo que no es necesario decirles para que. Agarre su miembro con mis manos, iba a hacer mi trabajo, ya estaba dispuesto a empezar, ya tenía mi boca abierta, ya estaba apunto de introducirlo en mi boca cuando empezó a sonar mi celular y por el tono que sonó se trataba de alguien importante, ¿qué debería hacer? ¿Chupársela al más guapo de toda la escuela? O ¿contestar la llamada?
5 minutos después salí de la habitación, con el pantalón desabrochado, la camisa rota y totalmente despeinado pero eso no es lo más importante deje al más guapo de toda la escuela con su pene erécto, sé que mañana voy a arrepentirme por desaprovechar esta oportunidad, pero creo que es algo urgente porque le pedí a Edy que no me llamara solo si era una emergencia.
-Espero y en realidad se trate de una gran emergencia, acabas de arruinar la cosas más grande que me iba a pasar en la vida, así que si no lo es, date por muerto Edy.
-Jajaja, ya me imagino lo grande que era esa cosa, pero si es una emergencia, Axel se puso muy mal, está encerrado en la habitación de Krystal llorando y con una botella de tequila.
-¿No pueden arreglarlo ustedes? Se supone que somos mejores amigos.
-Ya lo tratamos de hacer, tanto yo como Krystal intentamos entrar pero no lo logramos, así que deducimos que al que quiere ver es a ti, así que por favor, te rogamos que lo saques de ahí, está muy mal y no sabemos porque está así.
-¡Diooooos! Me deben una, tanto Krystal como tú.
-Ya Dani, si quieres luego te muestro mi pene, hasta voy a dejar que le des un besito, eso va a recompensar "la cosa más grande de tu vida"
-¡IDIOTA!-le colgué inmediatamente, Edy siempre va a ser un idiota...
Creo que el idiota soy yo porque nunca se me ocurrió preguntarle a Edy cuál era la maldita habitación de Krystal, más de una ves abrí la habitación equivocada, pero el resultado era siempre el mismo una pareja teniendo relaciones, más de una me invito a quedarme, me hubiera gustado quedarme en donde estaba el negro pero no pude porque tenía que ir por Axel. Después de un gran rato encontré la maldita habitación, sabía que era esa porque era la única puerta que estaba pintada de rosa y sobre decorada, típico de Krystal. Me acerco hacia la puerta para poder escuchar lo que pasaba adentro, efectivamente, Axel estaba muy mal, se podían escuchar sus llantos junto con canciones muy despechadas mientras trataba de cantarlas, creo que una chica le rompió el corazón. Ya toque 5 veces y no recibo respuesta, solo voy a tocar una última ves y si veo que sigue en su plan de no querer abrir me voy a largar a tratar de acabar lo que deje empezado con Eduardo.
-¡MIERDA! Entiedan que no quiero hablar con ustedes, lárguense, nada en este mundo va a sacarme de esta habitación, saldré cuando yo quiera.
Era la primera ves que escuchaba a Axel enojado, no conocía esa etapa de él, pero lo más impresionante era que era la primera grosería que escuchaba venir de su boca, enserio esta muy mal.
-¿Ni siquiera yo puedo entrar?
-¿D-d-daniel eres tú?¿enserio eres tú?
-¿Me dejas entrar Axel? Estoy muy preocupado, porfavor.
-No, no quiero que me veas así, vete, vete, VETE.
-Axel...por favor...
Espere unos 5 minutos y escucho los pasos de Axel, espero y halla accedido a abrirme la puerta de una maldita ves, cuando salga de ahí, juro que le voy a partir toda la cara por ser tan marica.
Abre la puerta, y me quedó impactado, en realidad era peor de lo que le pensaba, tiene los ojos rojos e hinchados por tanto llorar, el cabello mucho más desarreglado de lo normal, su ropa está rota, creo que fue de una caída, huele demasiado a alcohol, ¿acaso tiene la palma de su mano sangrada?, creo que no disimule en nada mi expresión de aterrado porque Axel salió corriendo a la cama de Krystal para hacerse "bolita" y así evitar que lo siguiera viéndolo más. Como puedo partirle la cara viéndolo así...
-Creo que hoy no fue tu noche verdad Axel, ¿qué pasó?-trato de acercarme hacia el.
-Vete Daniel, vete, por favor.
-¿Fue alguna chica? Ella acaso te rechazo o te hizo algo-ahora que estoy más cerca de él, escucho que está llorando.
-Daniel, te lo suplico, vete, por favor.
-¿Porque estas tan lastimado? ¿Te caíste? O ¿te atropellaron? No me digas que eres un emo que le gusta hacerse daño-puedo notar ahora que está temblando.
-Daniel, te lo ruego, vete.
-¿Porqué? ¿Porqué quieres que me valla? Somos mejores amigos, me preocupa verte así, dime qué rayos paso y porque estas así, no me pienso ir de aquí si no obtengo respuesta creíble.
-Vete, vete, vete.
-No me pienso ir, me voy a quedar.
-JODER, vete, ¿acaso no ves lo mal que me veo? Doy asco, no quiero que me veas de esta forma, doy pena, VETE-volteo a verme y ahora estába todo rojo de la cara.
-¡No me voy a ir!
-Por favor Daniel, no me hagas sufrir más y vete, me veo del asco, no me gusta que me veas de esta manera, doy vergüenza.
Me senté alado de él para que tuviera más confianza.
-De qué hablas, nunca me darías vergüenza, a ti no te dio cuando me hablaste, o que ¿no te acuerdas que yo era el más "teto" de toda la escuela?, el más popular hablando con el más tonto del ciclo, qué raro ¿no?, pensé que solo me ibas a hablar ese día-Dios, ahora yo estoy llorando-que después ibas a ignorarme como todos los demás, pero hiciste todo lo contrario, me ayudaste, me sacaste del hoyo en donde estaba, ese hoyo en donde sentía que me moría poco a poco, no se como pagarte tantas cosas que has hecho por mi. No sientas vergüenzas por qué te vea así, me has visto en peores momentos, solo tuviste un mal día, y eso me hace recordar que si has estado para mí, yo voy a estar para ti.
-Daniel...
-Asi que, vamos, párate, date un buen baño y después descansa, porque ya estás más ebrio que yo, y eso que yo ya tome demasiado-lo agarre de su mano y lo lleve al baño para que se duchara.
Escuche como abría las llaves de la regadera, me senté de nuevo en la cama a esperarlo. Ya me estaba durmiendo pero por fin salió.
-Ven, acuéstate, descansa ya por favor.
-Si Daniel, voy a hacer lo que tú quieras.
Lo ayude a acostarlo, se puso cómodo y lo a cobije, ahora que lo veo, parece un bebé, un bebé gigante que me ah cuidado. Estaba apunto de irme pero Axel agarro mi brazo.
-Daniel, no te vallas, quédate, claro solo si quieres.
Su mirada, su mirada tierna que hacía ver lo inocente que es, sin prejuicios...
-Hazte a un lado para acostarme.
Apague la luz y me fui a acostar con Axel, quede viéndolo de frente, la luz de la luna que extravena la ventana hacia ver sus ojos color miel, resaltaban tan bien en el, sus cabellos tan suaves y ondulados que lo hacían ver cómo un niño, su nariz tan perfecta, sus pecas que no había notado hasta ahora, viéndolo bien si esta musculoso, la playera le queda apretada y lo hace ver bastante bien, solo quiero abrazarlo, como cuando él lo hace, sentir que si el está conmigo no corro peligro, no sé si es lo borracho que estoy, el momento pero ahora veo a Axel diferente, lo veo con deseo, quiero volver a besarlo, sentir sus labios, sus brazos rodeándome, su respiración cerca de mi, quiero saber lo que es sentirse amado.
-Axel, mírame, mírame por favor.
-Dani, ¿estás llorando? No no llores, para, voy a llorar yo también, ¿qué hice?, te hice sentir mal, perdóname, soy un estúpido.
-Abrázame, tengo miedo, mucho miedo.
Axel me rodeó con sus brazos y me solté a llorar, tengo miedo de lo que siento, de admitir lo que eh estado pensando...
Sin pensarlo lo beso, con un gran temor de que no me lo corresponda, de que se aleje, pero hace todo lo contrario, lo acepta.
-Daniel, no, no me hagas esto, no juegues conmigo no me lastimes.
-Estoy seguro de que quiero esto...
Axel está sorprendido por lo que acabo de decir, yo también lo estoy, espero no sentirme arrepentido después de esto.
Estoy besándome con Axel de una manera muy apasionada, ambos estamos desnudos, puedo sentir su piel con la mía, su gran ereccion en mi abdomen, tocando sus grandes gluteos, mientras siento su respiración en mi oído, ya ah tocado cada parte de mi cuerpo, yo también lo eh hecho, debo admitir que sin ropa se ve mucho mejor, mejor que Eduardo.
-¿Estás seguro de esto Daniel?
-Eso creo, solo espero que no me duela mucho.
-Bien, pues aquí vamos....
-¡Ah! ¡Ah! Más despacio Axel.
-Tranquilo, estas muy tenso, relaja tu cuerpo, voy a hacerlo al ritmo que tú quieras.
Siento poco a poco cómo va introduciendo su ereccion sobre mi, debo admitir que se siente bastante bien, lo hace despacio para que no me duela tanto. Mientras hace eso me pone sus dedos sobre mi boca para que los lama, eso es muy excitante, me levanta y me agarro de su espalda, tan grande y varonil...
-Más rápido Axel, métela más...
Puedo sentir como ambos ya estamos sudados, eso lo hace ver más sexy todavía.
-Me voy a venir...
-Si Axel, vente, hazlo dentro de mi...