*POV CHAN HEE*
—Termina tu desayuno, yo iré a sacar unas cosas a la bodega ¿Si?—Bese la frente de Juni que comienza a comer su cereal.
—Ami quiero ir contigo...—Mi nena hizo un puchero yo la mire divertido.
—No puedes, te dije que comieras todo en tu plato y que así consideraría si llevarte conmigo pero como no lo hiciste...
—¡El señor oso te mantendrá en custodia! ¡Arggg!—Changjo abrazo a Juni y comenzó a hacerle cosquillas.
_Ajajaja Señor oso....—Juni se abrazo a Changjo—Señor oso comamos juntos ¿Si?
—Claro que si señorita, su padre me ha encomendado que cuide de usted en lo que él ha salido a trabajar con el rey del castillo, yo seré su chamelan el día de hoy si usted me lo permite...—Changjo hizo una reverencia y Juni se llevo sus manitas a la boca y comenzó a reír.
—Jijiji—Juni me miro con esa sonrisita tan tierna que tiene.
—No le entendiste ¿Cierto?
—Jijiji Nop—Changjo le hizo cosquillas de nuevo y luego se levanto.
—Pff—Bufo—Por eso al señor oso no le gusta juntarse con la plebe.
—Plebe tu señor oso...
—Juni...—La llame con voz represiva—Changjo...
—Lo siento Channee fue un error, Juni no aprendas esas cosas, diculpate con mami...
—Ami lo siento mucho, no se lo digas a papi, porfis ¿Si?—Juni se junto ambas manos en forma de suplica.
—Come tu cereal, no vuelvas a decir cosas malas y no hagas travesuras, yo no tardare nada en bajar ¿De acuerdo?—Mire a Juni que asintio con su cabeza, su flequillo se movió con ella al igual que el resto de su lacio cabello, luego mire a Changjo que se reía aun, me miro y levando su mano derecha.
Subí al segundo piso, al final del pasillo izquierdo, la habitación que teníamos como "Bodega" La cual comenzó a ser así desde que nuestra Juni comenzó a crecer demasiado y por lo tanto su cuna, accesorios, ropa y juguetes que dejaba de usar se iban guardando aquí, hasta que Byung y yo decidamos en donde o cuando sera el momento para donarlos o venderlos, aun no llega ese momento.
Revise la habitación y sobre una repisa esta mi objetivo, una valija mediana perfecta para empacar las cosas que debo llevar a mi viaje con Niel a Nueva York, he pasado los últimos días pensando si sera mi decisión correcta y Byung trata de convencerme que si y ahora estoy parado en medio de una oscura y polvorosa bodega pensando en como mi viaje puede afecta a mi matrimonio y a mi familia, que tonto.
Busque la escaleta pequeña para poder subirme y alcanzar la valija, maldición, no esta, seguro alguien volvió a llevársela y no la trajo de regreso, a su lugar, en donde siempre debería estar, pero no, debo conversar con todos muy seriamente aquí.
Encontré un taburete pequeño pero lo suficientemente alto para darme lo que necesito y llegar a la valija, creo que no la uso desde que viaje a Vancouver con Byung, fue hace como dos años, llevamos a Juni con nosotros a pesar de que era una bebe, pero es que tengo problemas para dejarla sola.
Subí al taburete, se mece un poco pero no para tanto, me estire un poco hasta alcanzar la valija, pesa un poco, me sostuve de una repisa y comencé a bajarla, el taburete se meció y solté de golpe la valija, se atoro entre una repisa y unas cajas y yo me caí por completo del taburete, bueno no por completo
—¿Que pretendes? Ah joder Chan Hee—Como en un cuento de hadas caí en los brazos de mi molesto y enojon príncipe, me falta el vestido y a él modales.
—Si, también me alegra verte Byung-nee, me ha encantado ese beso de "Regrese mi amor" que me diste hace unos... ¡Byung la valija!—La valija se movió, Byung se volteo para protegerme, la valija choco contra su nuca y el inicio de su espalda, luego cayo al suelo, Byung levanto la cabeza preocupado.
—¿Estas bien, amor?—Sus ojos brillan aun en la oscuridad de la habitación, sus manos tiemblan mientras rodean mi cintura, esta preocupado, lo se, pero yo lo estoy mas, esa cosa lo lastimo, lo se.
—Y-Yo si ¿Que hay de ti?—Acaricio su nuca buscando algo que espero no encontrar, por suerte mi deseo se cumple, no hay sangre, paso mis brazos por su cuello y lo abrazo recostando mi cabeza en su hombro—Mierda, lo siento, solo te causo problemas, dime por favor si te duele...
—No es nada, no te preocupes...—Olfateo mi cuello y lo beso suavemente—Te amo amor, ya regrese ¿Que tal tu día?—Con dificultad acaricio mi espalda con una de sus manos, mientras que la otra aun sostenía mis piernas.
—Horrible, mi Byung-nee no llego anoche y yo tuve que dormir solo, y ahora una valija casi lo mata, soy horrible, casi tanto como mi historia...—Escuche como se rió por lo bajo, esa risa sexy que tiene que tanto me encanta.
—Perdona, quería dejar el 80% de mi trabajo listo, así no tendré que preocuparme tanto esta semana, pero te llame anoche, antes que durmieras, dime por favor que descansaste bien ¿Fue así?
—Si...—Dije sonrojado.
Byung me sonrió de lado y acerco su nariz a la mía, con suaves roces dio aviso a lo que seguía, sus labios se acercaron traviesos a los míos para unirse en su danza que decía "Te extrañe, extrañe esto, extrañe tu presencia" Byung se separo un poco y me miro tiernamente, con esos ojos de cachorrito que hace cuando me mira, como si yo estuviese hecho de porcelana, a veces siento que quisiera meterme en un recipiente de cristal, atarme a un cordón de plata y llevarme colgado a su cuello a todos lados solo para admirarme así, tan detenidamente, tan delicado.
—No quiero irme, esta sera la ultima noche que dormiremos juntos...—Hice un puchero.
—Regresaras en tres días...—Beso mi frente—Todo estará bien, siempre lo esta, todo lo que tocas o deseas es perfecto...
—Ah, eso explica esto...—Tantee su pecho, tan perfecto y trabajado, aunque no pareciera a simple vista, se que había algo ahí y solo para mi.
—Ajajaja, mi dulce conejito pervertido...—Volvió a besar mis labios, me bajo al suelo y me abrazo por la cintura—Piensa en mi cuando estés aya ¿Si?
—No lo dudes, creo que no iré...—Me recosté en su hombro.
—¿Que? ¿Y que mi dolor de espalda sea de por gusto?
—¿Entonces si te duele? Maldito mentiroso, idiota, porque hac...
Me tomo de la cintura mas fuerte y me pego por completo a su cuerpo, metió su pierna entre las mías y me aprisiono contra unas cajas y su cuerpo, con sus manos recorrió toda mi espalda, desde mi nuca hasta mi trasero, nos separamos con un hilo de saliva entre los dos y sonreímos.
—Tan lindo...—Toco mi nariz con su dedo indice—Seguiremos en la noche ¿Si? Le prometí a Juni desayunar con ella, y también quiero desayunar contigo ¿Changjo ya comió?
—Ajaja no nadie ha desayunado, quería que Juni lo hiciera pero "Se ha negado a comer porque Apu no esta"—Hice un puchero e imite la voz de Juni.
—Ajajaja lo hiciste perfecto, Juni es tu vivo y hermoso retrato en una hermosa niña...—Tomo mi mano, con la otra mano tomo la valija que hace unos momento atento contra mi vida.
—Si, es casi perfecta si no fuera por esos feos lunares...—Bromee, Byung se detuvo y me miro con un puchero.
—Si tan feos te parecen porque no haces un bebe tu solo ¿Eh?
—Ajajaja Te amo y no puedo hacerlo yo solito... te necesito y sabes perfectamente en donde...—La ultima parte la susurre en su oído, sentí como se tenso—Vamos bajemos a desayunar, deja esa valija del diablo frente a nuestra habitación.
—¿Valija del diablo?—Byung rodeo mi cintura con una de sus manos, y se río.
—Si, trato de matarme y te hizo daño a ti, pero aun asi la necesitó...
Byung soltó una carcajada y camino atras de mi y dejo la maleta frente a nuestra habitación, bajamos abrazados hasta la cocina.
—¡Apu!—Juni bajo de un saltito del taburete y corrió a los brazos de Byung—Te extrañe mucho, mucho....
—No más que yo princesa—Byung deposito un sonoro beso en la mejilla de Juni—¿Terminaste tu cereal?
—Sip, como Ami dijo, todito ¿Puedo ir a jugar con Changjo y bolita de nieve?—Byung miro a Changjo como si le preguntara si tiene tiempo para eso, Changjo asintió.
—Pues yo digo que si pero con cuidado y ¿Que dice mami?—Byung, Juni y Changjo me miraron un momento.
—Que sea con cuidado—Dije con una sonrisa, Changjo y Juni salieron al patio.
—Amor ¿Tu jefe te dio permiso para el resto de la semana?—Pregunte sirviendo la comida a Byung.
—Si, asi es, debe mantenerme contento, soy el unico agente financiero que queda cerca, desde que Min Soo renunció ¿Sabes como se lo ha tomado Daniel?
—Horrible, esta semana se ha pasado culpando de todo, pero luego culpa a Min Soo y luego...—Mi celular, que creo que tambien es del diablo, comenzó a sonar, lo ignore pero Byung me miraba y sonreía curioso asi que lo saque de mi bolsillo y conteste—¿Si? Diga... ¿Luca? Si te recuerdo, mi nuevo asistente...
Byung frunció el seño, desde hace poco mas de dos semanas, Daniel contrato un asistente para mi, ya que al tener que estar pendiente de Juni se e dificultaban algunas cosas, sin embargo, Luca tenia ganado el titulo de inoportuno.
Desde hace unos meses Byung y yo tenemos en mente algo, la posibilidad de un nuevo bebé, por lo que hemos dejado de cuidarnos sexualmente, pero desde que Luca se volvio mi inoportuno asistente, justo cuando Byung y yo estamos en 'eso' me llama o envía mensajes, suele interrumpir la atmosfera.
El punto es que no le cae nada bien a Byung, pero la verdad es que de todos los posibles asistentes de la lista, Luca es y era el mas capacitado, aunque a Byung no le parezca.
—Luca se que es importante pero lo arreglaré mañana temprano...—Me reí un momento, la manera en la que Luca se disculpa a cada momento es divertida, pero a Byung no le parece igual que se acaba de levantar del taburete y viene hacia mi.
—L-Luca yo...
Iba a decirle que colgara, lo junto pero Byung y sus malditos juegos comenzaron, me abrazo por la cintura y comenzó a besar mi cuello, mordi mi labio inferior, Luca no deja de hablar maldición.
—Luca, Luca, escucha yo ahora no pue Ah...—Mierda Byung eso queria decir, un maldito gemido salió de mis labios y Luca no habla y que vergüenza—¿Luca?—Me atreví a llamarlo—Hablamos mañana de acuerdo, tengo un problema con un maldito animal que se ha metido a mi casa.
Me voltee para ver a Byung, cruce mis brazos y él me miro inocente, odio que haga eso, como si no hubiera hecho nada.
—Tienes cinco minutos para defenderte...—Sentencie.
—Mmm... Te amo y quiero que hagamos otro bebe—Dijo con esa sonrisa tan horrible que me encanta tanto.
—Si, yo también te amo y tambien quiero eso pero ¡No mientras hablo por telefono, Byung Hun! Maldición, se supone que soy su superior y tu...
—Luca no me agrada—Agregó y aparto la mirada—Temo que te haga algo...
—¿Algo... como que?
—Como alejarte de mi...
—¿Quien es el que duda del otro ahora?
—No dudo de ti, se que nunca me harías daño, pero se cualquiera quisiera hacer te algo porque eres muy lindo entonces siento cierta sospecha de ese Luca...
—Byung-nee nadie me hara nada—Me acerque a él y tome su mentón entre mis manos—No me quedaría sólo con nadie que tu no conozcas, ósea nuestros amigos... Ademas esta noche apagare mi teléfono y lo intentamos una vez mas antes de irme.
—¿No será agotador para ti? Lo digo por el vuelo de mañana y todo eso...
—No te preocupes, esta bien, estare con Daniel, ni siquiera ira Luca—Mentí, no es que vaya a pasar algo, asi que no tiene por que saberlo.
Byung me sonrió, abrazo mi cintura y recostó su cabeza en mi hombro, solo desearia que con lo que pase esta noche se cumpla lo que tanto queremos, asi yo podría regresar de mi viaje con Byung y una pequeña sorpresa...