-Ohhh si Chanyeol –dije ingenuamente – no, ya enserio quien rayos eres –pregunte una vez más mientras me ponía de pie Y sacudía un poco mi pantalón
-Veras, entiendo tu sorpresa –si bueno no me encuentro con un vagabundo en mi apartamento todos los días – soy el hijo de tu padrastro
Me quede en blanco por un momento, el me sonreía apenado, mientras yo solo lo miraba incrédulo
-¿Tengo padrastro? –llevo años sin hablar con mama, pero no creí que no me fuera a avisar algo tan importante como para avisarme que se volvió a casar, soy su maldito hijo único y no le dijo, esperen ¿le estoy creyendo a un vagabundo? –necesito pruebas, ósea crees que mi madre no me diría algo tan importante
-Lo lamento Baekhyun, pero cuando ella se casó con mi padre tú estabas comenzando con tus sesiones de fotos para Givenchy, y ella no quería distraerte de tu carrera, no la culpo, eres muy famoso y ocupado –no lo podía creer, si sabía mi nombre, pero no me hubiera molestado si mi madre se volvía a casar, o ¿sí? Conociéndome probablemente sí, que mal hijo soy –por cierto no eres una vaca, es más creo que eres demasiado delgado
Lo que me faltaba.
-Mira Chanyeol, que bien que seas el hijo de mi desconocido padrastro, pero no sé qué rayos haces aquí y segundo, tu que sabes de moda, hoy me dijeron que estoy gordo y que debo de adelgazar si quiero seguir con mi carrera de modelaje, y lo último que necesito es alguien que me venga a complicar más la vida. –comencé a respirar alterada, se había sentido bien sacar un poco de todo lo que se me había acumulado durante el día, aunque en realidad el chico no tenía la culpa, aunque ni siquiera se inmutara por todo lo que dije
Dejo escapar un suspiro el tipo alto despeinado, solo vi como tomo asiento y se metió a la boca el pedazo de dona que le hacía falta –hoy en día ya no saben apreciar la belleza natural –hablaba con la boca llena, dejando caer migas en mi carísimo comedor.
Solté un bufido y tome unas cuantas servilletas –cállate, no hables con la boca llena –decía mientras le cerraba la boca y limpiaba las migas de su boca y luego quitaba las migas del comedor. –dejando el tema de mi apariencia, dime que haces aquí? Necesitas dinero? Porque no tienes la mejor apariencia que digamos –dije tirando las servilletas en un pequeño contenedor de basura y luego tomando asiento en frente de el
-No busco dinero, solo un techo, y tal vez compañía, se me hace difícil trabajar cuando no tengo a nadie a mí alrededor –apoyo sus codos en mi mesa y sostuvo su barbilla con sus manos dedicándome una sonrisa inocente. –además que tiene de malo mi ropa, cumplen con su función de cubrirme, yo no soy superficial como tú.
Este tipo en frente mío, corrección este vagabundo en frente mío busca que lo deje dormir en mi apartamento y se atreve a llamarme superficial que clase de idiota es este, además no soy superficial
-Mira idiota, por lo menos respétame si quieres un techo y comida y no morir en el frio de la calle, y a todo esto, ¿tienes un trabajo? ¿Enserio? – quien rayos contrataría a este individuo tan … ¿especial?
-No es una falta de respeto, básicamente solo dije la verdad, lo siento si te pareció ofensivo, la verdad a veces duele, y bueno en realidad me caracterizo por exteriorizar todo lo que pienso –me saco la lengua y juro que si seguía así se la iba a cortar –y soy un artista independiente
Ay no puede ser lo que me faltaba, apuesto a que es uno de eso liberales, locos que van contra el mundo, un inadaptado, ya está que no me podre librar de esta.
-Pues entonces comienza a aprender a reservarte tus comentarios, por cierto trae tus maletas antes de que me arrepienta –no había visto maletas cuando entre, así que supuse que solo había venido a pedir permiso, supongo
-Ya las traje –se comenzó a reír, se levantó y se dirigió a la sala, dejándome solo en la cocina, de inmediato me levante y lo seguí, él ahora estaba sentado en mi sofá, solamente con un maletín de tamaño mediano, parecía antiguo, casi de esas reliquias que encontrarías en el sótano de tus abuelos. –Esto es todo lo que necesito ¿quieres ver? –sinceramente parecía un niño y eso me hacía querer reír, nunca me lleve bien con los niños pero era diferente.
-Está bien –tenía que tener un poco de paciencia, así que tome asiento a la par suya, cuando abrió su baúl, no pensé que eso fuera lo único que necesitaba, vi un estuche de acuarelas, botes de pintura acrílica manchados con la misma pintura, distinta pedrería, estuche de agujas y otro de pinceles, vi un brazalete que me llamo mucho la atención, se notaba que era de cuero pero el dije era lo más llamativo parecía como un pequeño espejo pero estaba quebrado, y luego me topé con dos muñecos de trapo, me asuste un poco supuse que eran de voodoo o algo así
-Son muñecos voodoo? –el noto mi nerviosismo y solo comenzó a reír, supongo acabo de quedar como un idiota.
-claro que no, a veces me gusta diseñar ropa, así que hago como una versión en pequeño, para ver si me gusta y una vez terminado, lo hago en tamaño real –tomo uno de los muñecos y me lo dio, era cierto, en realidad no me había dado cuenta de que el muñeco cargaba un muy lindo traje de pingüino, era bonito, aunque el otro no tenía nada puesto, hasta abajo note una pequeña libreta, abajo del muñeco que seguía en el pequeño baúl.
-Es muy lindo –sonreí al verlo, tener ese muñeco en mis manos me hizo recordar lo mucho que amaba los juguetes, bueno los sigo amando pero que vergüenza tener peluches y juguetes en mi apartamento, creo que he madurado lo suficiente.
-Aun no lo he terminado por eso, no he empezado a armarlo, siento que falta algo, pero he tenido un bloqueo, no he podido seguir con mis proyectos –se acomodó mejor en el sillón estirando sus piernas en el suelo.
-Hmm bueno, iré a dormir, definitivamente este no ha sido mi día, si alguien toca, no te atrevas a abrir, solo avísame, no importa si me tienes que despertar – deje el muñeco con delicadeza en la mesa, y despeine a Chanyeol mientras me dirigía a mi habitación, y no fue hasta medio camino que reaccione, y supe lo que había hecho, me ruborice al instante, ¿Por qué rayos hice eso? Apenas lo conocí hoy y ya es como si confiara en él, podría matarme mientras duermo o robarse todas mis cosas, pero parece un niño, no podría hacer eso ¿o sí? He pensado suficiente por hoy, solo dormiré.
Por alguna ridícula razón quería saber más sobre este individuo, nunca conocí a una persona así, tan despreocupada, tan desapegada a las cosas, que inspirara tanta tranquilidad, creatividad y felicidad, no sabía si odiarlo, envidiarlo o ¿amarlo? Eh no. Duerme, duerme, duerme.