Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

La corta Distancia por Lei Chann

[Reviews - 74]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Leila: Hola!! Comoestan? Yo bien :v

Neres Hola!

Leila: Les traigo otro cap y espero lo disfruten.

Nerea: Ela uso lemon*-*

Leila: Nere se hace la inocente pero es mas pervertida qe yoxD

Nerea: Sin ma distracciones a leer!

-Takahashi-Kun está esperando en su vientre a un bebe de tres semanas… -Dijo el médico, sin quitar su sonrisa pero, aún así se lo notaba un poco preocupado. Yo abrí mis ojos grandes y me quede un poco boquiabierto.

 ¿Misaki? ¿Un bebe?  Pero, ¿Cómo es eso posible? Que idiota soy, el doctor lo acaba de explicar. ¿Qué es esto? Voy a ser padre, tendré un hijo… Me siento raro. No estoy enojado, ni triste, pero tengo un lio de emociones dentro de mí. Estoy nervioso y siento como si el tiempo se parara y solo importara el ahora.  Quiero sonreír, simplemente sonreír y abrazar a mi chico de orbes esmerarlas y no soltarlo jamás.  Porque ahora algo más que nuestro amor es lo que nos une de por vida y marcara esta etapa de ella.

-¿Qué yo qué? –Preguntó Misaki mientras tapaba su boca con sus dos manos y su ojos comenzaban a cristalizarse por la emoción.

-Felicidades Misaki…- Kusama-San habló felicitando a Misaki con una sonrisa y haciendo una leve reverencia. -… Vas a ser Mamá… o como quieras llamarte.

 Misaki lo miro sorprendido, se sonrojo un poco  y pequeñas lágrimas comenzaron a caer de sus bellos ojos, volteo a verme aún con las manos tapando su boca.

-¿Quién es tu novio? –Preguntó el médico – Debes de contarle sobre su hijo.

-Usagi-San… -Me dijo aún mirándome, quitó sus manos despacio  de su boca dejando a la vista una hermosa sonrisa, la primera vez que lo veo sonreír de esa forma, con tanta emoción y salieron más lágrimas de sus bellos ojos verdes. -…Usagi-San yo… tu…

 No soporte verlo por más tiempo y lo encerré entre mis brazos, estaba con una expresión de suma alegría, sus ojos demostraban completamente que estaba feliz. Escondió su cabeza en el hueco que estaba entre mi cuello y hombro, podía sentir las tibias lágrimas de él, y se aferró muy fuerte a mi espalda.

¿Qué pasaba? No estaba seguro, pero yo también levemente estaba llorando… De alegría. Saber que él amor que tengo con mi pequeño castaño dio como resultado el origen de una vida, simplemente podía estar feliz. Tenía ganas de abrazarlo más, si es que se podía, besarlo y decirle cuanto lo amo, y ahora aún más. No quería dejarlo ir nunca de mi lado. No, cuanto los amo, a él y nuestro hijo o hija.

-Misaki te amo. –Le dije en el oído y lo volví a repetir unas cuantas veces más. –No sabes cuánto te amo… -Mis lágrimas oscurecían su cabello y las de él estaban empapando casi todo el frente de mi camisa.- No sabes cuánto los amo.

-También los amo mucho Usagi-San. –Me respondió entre sollozos. –Los amo tanto…

 Kusama-San qué estaba frente a nosotros viendo la escena, solo rió un poco. Se escucharon unos golpes en la puerta y luego alguien la abrió, era Hiroki.

-¿Saben? La gente se cansa de esperar- Dijo, y entro como si nada a la sala. -¿Qué es lo que sucede? –Pregunto cuando vio que Misaki y yo estábamos llorando abrazados.

-Hiro-San, eres profesor titular de Takahashi-Kun y debes saber su condición, asique no hay problema si te enteras, en realidad, será necesario. –Menciono Kusama-San mientras miraba a Hiroki que estaba acercándose a su lado.

-¿Y cuál es su estado? –Se cruzo se brazos.

-Takahashi-Kun está en la dulce espera.

Hiroki al escuchar eso casi se ahoga con su propia saliva, abrió sus orbes grandes y movió su cabeza para poder mirarnos a Misaki y a mí.

-Bakahiko… No me digas que corrompiste a uno de mis estudiantes. –Me dijo, pero como siempre está con el ceño fruncido no sabía si estaba enojado o que.

-No es mi culpa, el me tentó a corromperlo.

-¡Eso no es una excusa!

-Escuchen, Takahashi-Kun, Usami-San…-La característica sonrisa del médico cambio por una cara más seria. –La condición de Misaki es muy especial y requiere de varios cuidados si quieren que todo transcurra como debe.

-Está bien, yo cuidare de ellos, solo dígame que hacer. –Le dije.

-No son muchas cosas, pero igual son importantes ya  que es un embarazo muy delicado. Procura que no sufra cansancio excesivo ni golpes sobre todo, en el vientre obviamente, debe alimentarse bien y beber mucha agua.

-Está bien, no es nada del otro mundo. –Le dije mientras tomaba a Misaki de la mano con más fuerza.

-Tampoco debe pasar por emociones fuertes, eso es todo- Sonrió. –Qué envidia me dan…

-¿Qué? ¿Por qué? –Pregunto Misaki mientras se paraba de la camilla aún con una sonrisa.

-Es que yo también quisiera que mi Hiro-San me dé un bebe.- Al oír eso al igual que Misaki, nos sorprendimos y ambos miramos a él “Demonio Kamijou” quien ya estaba sonrojado hasta las orejas.

-¡N-Nowaki idiota! ¿Qué cosas estás diciendo?-Le grito enojado, pero estaba encogido de hombros y con las mejillas muy rojas. Además de que el, emanaba un aura negra que hasta yo sentí escalofríos.

-Ahahaha Lo siento Hiro-San.-Nowaki se rió y comenzó a negar con las manos lo que acaba de decir al sentir el peligro en su vida. -…E-Es una broma… T-Takahashi-Kun vuelve en una semana.

 Luego de el dijera eso volví a tomar a Misaki de la mano y lo saque de esa habitación en la que dejamos a Nowaki peligrando su vida con Hiroki. Estaba más que feliz, solo quería llegar a mi casa con mi castaño y besarlo, abrazarlo, volver a decirle cientos de veces cuanto es que lo amo, y repetirle que jamás me iré de su lado pase lo que pase. Este chico me vuelve loco, y cada día me sorprende con algo nuevo que solo logra que pueda aferrarme más a él. Verlo así, tan alegré, entusiasmado, comprometido a cuidar a esa criatura a mi lado y con una enorme expresión que reboza felicidad, solo hace que sienta que tengo la obligación, necesidad y derecho de protegerlo. Protegerlo a él, a nuestro hijo, a nuestro amor y nuestra felicidad. Sin duda alguna, lo amo con toda mi alma y daría todo por él.

 En el transcurso a casa en el auto no hablamos mucho, solo podía ver el reflejo de Misaki en la ventana con una sonrisa y mirando algo que seguramente solo podía ser visible para él, quizá un mundo en su mente, imaginando como serian las cosas de ahora en adelante. Lose porque yo estoy igual, ansioso por esta nueva etapa.

 Sería genial llegar a mi casa después de un exitoso y duro día de trabajo, no me agradan mucho los niños, pero siempre se puede hacer una excepción, abrir la puerta, ver a Misaki en la cocina preparando el almuerzo, saludarlo con un dulce beso, luego ir a sentarme a descansar en el sofá y que una tierna niña o un travieso niño venga corriendo hacia mí para saludarme y recibirme con un fuerte abrazo, sin duda, eso sería una vida perfecta, según yo.

 Llegamos al edificio, apenas baje del auto fui hasta el otro lado para abrirle la puerta a Misaki quien bajo agradecido, lo tome de la mano, el solo accedió, normalmente me diría “No me tomes de la mano a cada rato” y se iría corriendo dejándome atrás, pero hoy está un poco diferente, debe ser por la noticia.

 Subimos por el ascensor, lo miraba y él seguía sonriendo. Demonios… No podre aguantar por mucho tiempo. Caminamos por el pasillo, y Misaki saludaba a nuestra vecina que bajaba con su Pomerania, llegamos a la puerta, yo la abrí, el paso y luego yo, después la cerré tras mío y dejando mi abrigo colgado en el gancho de la pared.

-Misaki… - iba a decirle algo, pero justo entes de eso el me interrumpió y comenzó a hablar como nunca antes lo había hecho conmigo.

-Usagi-San… Sabes… Estoy muy feliz. –Me acerqué a él, el gesto con el que me dijo esas simples palabras era muy tierno y reflejaba inocencia por donde lo veas. -…Estoy feliz de que pueda hacer una familia contigo. –Me sorprendí un poco, de todo lo que pensé, no se me cruzó por la cabeza eso. Una familia con Misaki, solo de nosotros. Levanto su vista, se acercó más a mí y me miró de frente, directamente a los ojos y por fin dijo. –Te  amo. –Me abrazó de repente. –Gracias por todo.

 Le correspondí el abrazo, pero no duro mucho ya que lo separe poco, solo un poco de mí para tomar con mi mano su mentón y acercar su rostro a el mío, para fundirlos en un tenue beso.

-Misaki… Te amo… Ahora tendré mi tan ansiada familia junto a la persona que más a amo en el mundo.- Lo volví a beso y cuando me separe de él divise que sus mejillas estaban salpicadas por el color carmín, cosa que me tentó a hacer algo más.

 No dude mucho, lo cargue como princesa, creo que él sabía lo que vendría y comenzó a reprocharme que lo bajara, lo ignoré y subí las escaleras hasta llegar a la puerta de mi habitación.

-¡U-Usagi-San! ¡Bájame idiota!  ¡¿Qué no ves que estoy en un momento delicado?! –Lo seguí ignorando y recosté suavemente en la cama gigante de mi habitación, me posicioné sobre él, mi pierna izquierda a su costado y la derecha entre las piernas de él.

-Misaki, te amo. –Le dije y volví a besarlo igual que antes, con la misma delicadeza e “inocencia” de parte mía. El me correspondió y solo se dejo llevar.

 Seguía besándolo, cada vez con un poco más de intensidad, hasta que llego a ser un beso rápido y un poco brusco que buscaba la forma de llegar a ser algo más. El deshizo el beso con la intención de tomar un poco de aire, cosa que solo duro unos pocos segundos ya que volví a atacar esos labios de sabor adictivo.

 -U-Usagi-San… -Aproveche que dijo eso, y metí mi lengua dentro de su pequeña boca, buscaba la lengua de él y cuando la encontré comencé a hacer un vaivén con ella, lamiéndola, succionándola y volviendo besar sus labios con un poco más de lujuria.

 Sentí unas manos en mi espalda que se aferraban a mi ropa y buscaban removerla, era Misaki. Aunque él lo niegue, siempre está tan ansioso y lujurioso como yo.

-Usagi-San… -Me dijo todo sonrojado por el acto.

-¿Qué? –Le respondí con una sonrisa de lado.

-T-tu camisa… S-sácala…

 Le hice caso, me quite la camisa y comencé a desabotonar la de él dejando a mi merced todo tu pecho y torso, delicioso. Bajé mis besos hasta su cuello, lamiéndolo un poco y mordiendo de vez en cuando. Pequeños, pero sonoros gemidos de mi castaño empezaron a parecer de repente, señal de que se estaba calentando. Mordí un poco su clavícula con fuerza a lo que él solo gimió más fuerte… pero yo quería más. No estarían tan equivocados si me dijeran que soy un tanto sádico, aún más sexualmente, pero no tanto como para lastimar el cuerpo de mi pequeño castaño.

 Baje más, hasta llegar a sus bellos botones rozados en su pecho, comencé a lamerlos, jugar con ellos y la punta de mi lengua.

-¡U-Usagi-San ¡ ¡Ah!

 Llevé una de mis manos a la entrepierna de mi ojiverde y desabroche su pantalón, sobre la tela del bóxer acariciaba su miembro, ya podía sentirlo húmedo y duro.

-Misaki… Recién comienzo y ya estás tan duro…  Qué lindo.

-C-Cállate perver Ah aaaha pervertido…

-No te haré esperar.

 Con un rápido movimiento saque su pene de debajo del bóxer y comencé a masturbarlo rápido, jugando con la punto de este.

-¡Ah! U-Usagi-San… e-Espera…

¿Esperar? No puedo hacer eso ahora, no cuando la cara sonrojada de mi castaño excitado me mira de forma tan lasciva, hace que quiera estar ya dentro de él.

No puedo esperar, lo despojé de todas sus ropas y llevé dos de mis dedos a la boca de Misaki. El entendió el mensaje, sabía que él estaba tan ansioso como yo, asique comenzó a lamerlos y lubricarlos para hacer así menos dolorosas las penetraciones.

 Cuando ya sentí que estaban lo suficientemente ensalivados,  lleve los dos juntos  a su entrada y los metí en ella simulando embestidas y haciendo como tijeras dentro de él.

-¡Ah Ahh aah! Usagi… Usagi-San…

Después de unos minutos, cuando Misaki ya dejo de gemir y solo hacia sonidos de placer, decidí que ya podía meter un dedo más, lo hice y Misaki volvió gemir por el leve dolor al que aún no se acostumbraba del todo.

Ya no podía más, saque mi falo que ya estaba palpitante y lo introduje de una sola estocada en el ano de Misaki, quien grito con fuerza, esperé unos minutos a que se acostumbrara y cuando él comenzó a mover sus caderas fue mi señal de que ya podía comenzar.

-Misaki te amo… -Decía y embestía su cuerpo, cada vez más rápido y con más fuerza, quería  amarlo con desesperación. –Misaki, te amo tanto….

-Ah Ah Ah! Ahhh! U-Usagi –S Ahhn!

Seguía embistiéndolo, y con una de mis manos masturbaba su miembro erecto y del que goteaba líquido préseminal.

-U-Usagi-Sann ahh!! M-Me vengo! V-Voy a ven-venirme! Ahha!! –Se corrió en mi mano en gran cantidad, ese día el estaba más lujurioso que de costumbre, no le di mucha importancia, ya que me agradaba lo cooperativo que estaba siendo.

 Luego de un rato más, me sentí cerca del climax, asique comencé a embestir más rápido y fuerte, gemidos roncos salían sin mi permiso, Misaki el mismo se había colocado en cuatro para mi, y cada tanto pedía por más.

-Misaki… ahg… Voy a correrme…

-H-Hazlo!! –Solo tres estocadas fuertemente y me deje salir entre las paredes de mi niño, que me apretaron con mucha fuerza.

 Estaba cansado, pero feliz, salí del interior de mi amado y me recosté a su lado, él se abrazo a mí y yo jugaba con sus cabellos.

-Misaki, te amo… -No importan cuantas veces sean, se lo voy a repetir millones de miles de veces, y así será por siempre. –Te amo… -Sonara pesado, pero no veo nada de malo en decir lo que uno siente directamente a la persona que ama. Este chico que desde el inicio vio mi verdadero ser, ya puedo mostrárselo sin ninguna condición, el se gano todo de mí cuerpo y alma, solo a él lo puedo tratar así y solo a él le puedo decir: -Te amo.

CONTINUARA….

Disculpen si hay fatales faltas de ortografía

Notas finales:

Leila: Les gusto?  Si su respuesta es "Si"bueno yo lo escribi jeje y si la respuesta es "No" bueno, esculpa de Nerea:v

Nerea: Kha?! ;-;

Leila:Hasta la proxima uksillos!

Nerea: Algun seguidor de "Mundo yaoi Mi mundo perfecto" Se dara cuenta que eres Shbazeki-San?

Leila: Calla!! >:V Bye bye

Nerea: Espero leerlo en los reviews!! Aios!


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).