— 1 año a pasado Daiki, un año y sigues con lo de siempre... !Solamente quiero tu atención¡, !Que dejes de ignorarme¡, que dejes hacerme sentir que no te importo.— exclamaba el rubio intentando guardar sus lágrimas.
— Te entiendo, pero es mi naturaleza, te lo dije y sabias a que te enfrentabas, tan solo déjame solo— menciono el moreno sin demostrar ninguna emoción resaltante.
— Yo confió en ti, yo sé que eres bueno y sé que me quieres... pero siempre fuiste un cabezota con mis sentimientos.
— Te dejare solo para que puedas calmarte, es lo mejor— bip...bip...bip.
Enserio es tan difícil hablar de nuestros problemas, porque no entiendes las cosas no se arreglan solo dándoles tiempo, porque no entiendes que quiero tu cariño... Acaso solo lo merezco cuando no hay nada mejor que hacer.
Acaso no soy lo suficientemente bueno...
(El número que intenta llamar se encuentra apagado o fuera de servicio)
Acaso me quieres de verdad...
(El número que intenta llamar se encuentra apagado o fuera de servicio)
Soltando lágrimas, intentando respirar sin éxito gracias a su garganta cerrada, gritando internamente para que nadie más lo escuche su dolor mientras su celular repetía lo mismo cada vez que llamaba a su novio.
Mientras tanto en la cabeza de Daiki pasaba pensamientos variados entre deporte, sus revistas y sobre si era realmente alguien bueno para Kise...
—Porque me comportare así, yo sé que se siente... porque simplemente no puedo escucharlo, debería llamarlo para disculparme...— pensaba el moreno mientras tomaba el móvil entre sus manos.
Tal vez mañana, mientras lo dejaba en la mesa y apagaba sus luces.
Y así paso la noche de la pareja, uno dormido pensando en sus cosas y que tal vez hizo algo bueno y el otro sufriendo porque sentía que hizo algo mal.
Pero que se puede decir es un día cualquiera para ellos, ya estaban acostumbrados. ¿Acaso algo cambiara para mañana?
El rubio con ojeras en sus ojos, solo tomo su teléfono y al ver que no tenía llamadas perdidas solo suspiro y se levantó intentando sonreír, tomo una ducha como todas las mañanas y se preparó para la preparatoria.
En el camino a la preparatoria encontró a su compañero Kasamatsu, con quien salió una vez pero terminaron como amigos debido a muchas razones.
— ¿Otra vez pelearon verdad? — Pregunto al notarlo con los ojos hinchados.
— No quiero hablar de eso, simplemente es difícil algunas veces, él está ocupado. — respondió con pocas ganas de hablar.
— Te lo he dicho antes, deberías buscar tu felicidad no solo la de él. —exclamo el sempai algo molesto.
— Por favor no quiero hablar de esto ahora—terminando la conversación.
Kise sabía que tal vez tenía razón pero como terminarlo cuando realmente lo amaba y lo había dicho de tantas maneras, él sabía que si lo hacia el que sufría más seria el mismo, también sabía que Daiki era muy duro pero sin él se sentiría vacío.
Para el rubio valían más los pocos momentos que era feliz que los momentos donde se sentía solo, pero hasta donde aguantaría, hasta donde llega el amor por alguien