-¿Puedes hablar de otro tema, que no mencione a Crocodile?- habló el pelinegro con la misma voz seria que lo caracterizaba
-Pero ¿Por qué?, acaso no quieres ver a tu mejor amigo feliz o,- lo miró seductoramente- estás enamorado de mí y te pone celoso que hable de èl.
-Bien, creo que estoy a punto de perder la paciencia- suspiró profundamente, para evitar golpear al rubio por la tremenda estupidez que había dicho- primeramente ¿desde cuándo soy tu mejor amigo?, si más no recuerdo tú me comenzaste a hablar porque pensabas que quería algo con Crocodile.
-fufufuff, eso fue divertido
-claro que no fue divertido, casi me matas, idiota
-Perdón, pero no me gusta que los hombres se acerquen a croco-chan, Él solo es mío
- Te lo dije una infinidad de veces y te lo seguiré diciendo:”NO-ME-GUSTAN-LOS-HOMBRES”
-¿um?¿enserio no te gustan o no lo quieres admitir?- un aura oscura se dibujaba alrededor del pelinegro, cansado de decirle lo mismo las veces que ponía en duda su hombría- está bien, está bien, te creo, pero enserio, deberías cambiar tu comportamiento, para que al menos las mujeres se interesen en ti.
- no estoy interesado en nadie, además mi comportamiento es de un adulto serio y responsable
-fufufufufu, no, en realidad pareces un anciano aburrido y amargado,¿ acaso el mocoso de tu hijo no te odia por ser así?
-claro que no- respondió algo dudoso, pues en verdad no sabía lo que pensaba zoro de él.
- esa repuesta no me convence- habló sarcásticamente- Como sea, deberías salir y divertirte, conocer, experimentar (con hombres). Tal vez algún día podamos visitar algunos lugares que desde hace tiempo no voy, pero eso sí- lo miro atentamente- será nuestro secreto, si croco se entera, me dejara de hablar por un largo tiempo y por supuesto que eso es lo menos que quiero.
- no saldré con un pervertido como tú
- Mihawk, todos en este mundo somos pervertidos, así que no te hagas el santo .
- Solo cállate- dijo, mientras veía que poco a poco se detenía el auto- ¿por qué te detienes?
-olvide decirte esto, pero iré a visitar a Crocodile, y ya voy demasiado atrasado
-apenas son las 8
-para ser precisos son 8:15 , debí estar allí hace 15 minutos
-¿cuál es el punto?- aunque no era necesario que pregunte, pues ya sabía lo que iba a hacer el rubio en ese momento
-estamos a dos cuadras de la estación de tren, así que me preguntaba si podías, ya sabes, ir por ese transporte a tu casa- dijo algo incomodo
--“maldigo la hora en que se me averió el auto”-pensó mientras bajaba del auto, sin dejar de mirarlo con enojo
- Te lo compensare luego
-sí, si como digas- dicho esto cerró la puerta del auto.
Solo pasaron algunos segundos, en donde Mihawk pudo ver como el auto de Doflamingo se desaparecía a lo largo de la autopista
…………………………………
Había llegado al tercer piso del gran edificio en donde se encontraba el apartamento de Crocodile.
Estaba ansioso por verlo, pues el pelinegro había agarrado un fuerte resfriado impidiendo que no asistiera al trabajo toda esta semana. Como consecuencia de ello, Doflamingo acudía a su casa todos los días, llevándole medicina y queriendo pasar más tiempo con él, pero este solo lo recibía de mal humor, impidiendo que entrase a su casa. El rubio se propuso que hoy no iba a hacer igual, hoy iba a entrar a su casa e iba a cuidar de él, o a las buenas o a las malas.
-¿qué quieres?- habló de una forma despectiva,solo había abierto un poco la puerta, dejando ver la mitad de su cuerpo y cara
-¡ah!, ¿enserio? , ¿croco todavía no me vas a dejar entrar a tu casa?
-¿Por qué lo tendría que hacer?
-porque necesitas el cuidado de alguien, y ese alguien soy yo
-kuhahahhaa, no me hagas reír flamenco, además solo es un resfriado no es nada grave
- Pero te ves pálido, déjame tomarte la temperatura aunque sea- dicho esto acercó su mano a la frente del pelinegro, pero rápidamente este le tiro un manotazo impidiendo que lo hiciera.
- ya me siento mucho mejor, ahora vete – iba a cerrar la puerta, pero el rubio se le impuso, empujando de forma contraria
- Déjame entrar Croco-chan- habló sin esfuerzo, después de todo, el pelinegro estaba débil.
-No tengo ánimos de ver a nadie, y menos a ti- dijo un poco cansado, perdiendo cada vez más su fuerza, dejando que el rubio ganase territorio, y abriera más la puerta dejándolo finalmente pasar
- Eres demasiado arisco, deberías valorar las cosas que hago por ti- dijo un poco cabreado
- tsk- dijo desviando su mirada, pues se sentía incómodo como el rubio lo miraba- como sea, ya que estas aquí, te invitare algo de cenar
- oh, una cena romántica - volviendo a su rostro carismático
- estúpido pajarraco- susurró, mientras iba directo a la cocina
-Fuufufufu , oye croco
-¿que?
-he traído el vino que tanto te gusta – sacando de su maletín la ya mencionada bebida y ubicándola sobre la mesa que se encontraba cerca de la cocina-¿Dónde está el sacacorchos?
- en aquella alacena- dijo señalando el lugar
………
Ambos hombres se sentaron uno en frente del otro, después de que doflamingo terminara de llenar las copas y crocodile posicionara los platos en la mesa.
-Owww, pastel de carne- dijo agarrando el tenedor, probando y saboreando la comida de su amado - esta delicioso- habló sonriéndole-¡La comida de Croco-chan es la mejor!
No pudo soltar una pequeña risa, por el comentario del rubio, talvez era un idiota completo, pero a veces era tierno
- me gustas mucho cuando sonríes- mirándolo atentamente, mientras veía que el pelinegro evitaba mirarlo- Croco,¿Por qué casi no muestras esa hermosa sonrisa cuando estás conmigo?
-Porque eres irritante y me sacas de quicio- habló dándole una tonalidad suave a su voz, volviendo su vista al plato de comida
-Pero yo hago todo lo que puedo para que te sientas a gusto con mi presencia
- Deberías irte- dijo en seco, cambiando rotundamente el tema
-pero,¿ por qué quieres que me vaya?
- Acaso no te preocupa lo que le vaya a suceder a tu hermano
-Sanji-kun ya no es un mocoso de 5 años, debe de estar en casa viendo televisión o algunas otras cosas que hacen los adolescentes hoy en día., además- lo miró lujuriosamente - ¿ no quieres que te unte vaporub por todo tu cuerpo antes de que vayas a dormir?
- O…... Oye, ¿qué demonios estas diciendo?- el pelinegro bebió un poco de vino, para calmar el enrojecimiento que sentía en sus cachetes.
- me alegra que todavía mis palabras te pongan de ese modo
- Flamenco tonto- recuperando su mirada seria- no hables con doble sentido, cuando estemos comiendo. Además como vas a decir eso de tu hermano, que poca responsabilidad tienes, no quiero ni imaginarme como será cuando tengas hijos- rápidamente el pelinegro se arrepintió de decir eso, pues sabía lo que el rubio se estaba imaginando en su indecorosa mente
Una sonrisa se dibujaba de oreja a oreja- Croco-chan- habló emocionado- ¿Acaso estás pensando en casarte conmigo?
-“Mierda, ¿qué acabo de hacer?” –Pensó mientras veía al emocionado rubio- No es exactamente lo que trataba de decirte- trató de arreglar el malentendido, pero era demasiado tarde
-Claro que sí, y me gusta mucho esa idea, seriamos una hermosa familia, yo sería el padre por supuesto y tú la sexy señora de Donquixote Doflamingo
-DOFLAMINGO- le llamó la atención
-Perdón, perdón, solo que me alegra que te imagines una vida junto a mi croco- esta vez su sonrisa cambio a una sincera y tierna.
- Es caso perdido explicar algo que no quieres afrontar- dijo parándose de la mesa , llevando los platos al fregadero - Estoy cansado, así que te agradecería mucho que te retires, A-H-O-R-A.
-espera un segundo – miró preocupado a Crocodile, ya que este se estaba remandando las mangas -¿piensas lavar los platos en esas condiciones?
- Ya te dije que me siento mucho mejor.
- de igual forma croco-chan- se levantó de la mesa y agarro sus hombros por detrás- anda, ve y siéntate, yo lo hare
-¿sabes lavar platos?
- Sanji-kun me obliga a lavarlos cuando almorzamos o cenamos juntos, así que no hay problema
- Gra..gracias- vergüenza y culpa se mezclaban en los pensamientos del pelinegro
- No te preocupes hermoso- no podía evitar dejar sonrisas su sonrisa embobada al sentir que no era una molestia para crocodile.
……………………..
*Después de lavar todos los platos y ordenar la cocina *
-Crocodile?- caminaba en dirección a la sala, encontrándose con el pelinegro, quien se encontraba dormido en el sofá.
Se acercó lentamente, evitando hacer ruido. Verlo de esa manera, tan tranquilo, sin que ponga resistencia, simplemente ocasionaba que se enamorase más de él.
Se inclinó hasta llegar a estar a pocos centímetros de su rostro- nunca pensé verte de esa manera Croco- susurró y se acercó hasta su frente, depositándole un pequeño beso- Como me gustaría verte de esa manera más seguido- no podía parar de mirarlo, mientras rozaba la palma de su mano en su mejilla
-No volverás a ver esto ni en tus sueños- contesto el pelinegro con una voz adormilada
-fufufu, así que has estado escuchando todo
-tsk- desviando su mirada ya que el rubio seguía cerca
-Deberías descansar, yo ya debo irme - dijo alejándose de él, pero sintió que alguien le agarraba la mano
- o..oye, ¿te puedo pedir un favor?
-claro, ¿qué pasa?-
………………………………………..
-a..ah..ahh, no..no seas dema…demasiado tosco- gimió alterado, debido a que el rubio no era nada delicado untando el vaporub por todo su pecho y cuello
-fufuff, no que no querías
-ca…calllate , cof , cof cof
Ambas manos del rubio iban recorriendo el pecho marcado del pelinegro, iba bajándole lentamente el pantalón, adentrando sus manos hacia la parte de las nalgas de Crocodile.
-No seas pervertido, maldito flamenco- sacándole rápidamente las manos- ten un poco de consideración- levantándose hasta quedar sentado en la cama, de la misma forma en la que Doflamingo estaba, uno a lado del otro
-perdón, perdón, solo que no puedo controlarme, Croco- su voz emitía deseo
-tsk, que problemático que eres- sonrió ligeramente, pero esa sonrisa fue ofuscada por los labios del rubio- ¿que..que demonios te pasa?- lo empujó, pasándose la mano por sus labios para limpiarse del beso- Acaso no puedes entender que estoy enfermo, si nos besamos , puedo contagiarte
- ahhh, vamos croco, además tú dices que es una simpe resfriado, no es nada grave. No moriré si me contagias y si lo hago entonces moriré feliz
-“ es impresionante la manera en cómo te contradices”-pensó
- so…solo déjame probar un rato tus labios, so..solo eso- se acercaba lentamente cerrando sus ojos, posicionando una de sus manos en el cuello de Crocodile, mientras que la otra era un soporte para q se mantenga en esa posición.
-“¿por qué me gusta que me toques?”,”¿por qué me excitas de esa manera?”- pensaba el pelinegro mientras le correspondía el beso, que poco a poco se volvía más lujurioso, más propio de ellos.
- Croco, qui..quiero estar contigo para siempre- le susurraba en el oído, causando que el pelinegro se ruborizara y asintiera con la cabeza.
Ambos se dejaron caer en la larga cama, sin dejar de acariciarse y besarse.
Crocodile desvestía a Doflamingo , desabotonando su camisa, dejando a la vista su trabajado abdomen, posando sus manos en cada cuadrito que tenía, haciendo que el rubio temblara al sentirlo.
Apenas bastaron segundos para que se posicionara encima de las caderas del rubio, mientras que este acariciaba sus femorales, sin dejar de besarlo
-Do..do..dofla…fla…mingo- gimiendo con dificulta, al sentir como el bulto del pantalón del rubio crecía encima suyo.
- Croco-chan…te..te quiero
-yo..yo..te..te
*ring, ring ring”
-Tú..qué?- dijo exaltado, al ver que el pelinegro no había terminado lo que iba a decir, debido a que el teléfono de su casa había comenzado a sonar.
-Déjame contestar (*ring, ring ring*)
- NO, dímelo. Dime lo que ibas a decirme- habló más alterado sosteniendo con brusquedad los brazos de crocodiele (*ring, ring ring*)
-Flamenco tonto, me estas lastimando- un poco cabreado por su comportamiento- solo déjame contestar (*ring, ring ring*)
-Dime que me………..
Voz de la operadora: Su llamada será transferida al buzón
-Hola, Croco-chan- esa voz era bastante conocida para ambos hombres
-Corazón- dijo susurrando dirigiendo su mirada hacia donde se escuchaba la voz del mencionado
-¿qué tal?, ¿cómo has estado?, perdón por no llamarte esta semana, no vayas a pensar mal de mí, solo que he tenido demasiado trabajo, si supieras lo que me ha sucedido esta semana, pero bueno llame porque quería saludarte y hablar contigo, no sabes cuánto extraño, hehehehe, pero bueno, tal vez mañana te llame, así podamos hablar mejor.- la cara de culpabilidad lo consumía, se sentía mal, no podíacreer lo que le estaba haciendo a un hombre tan lindo y tierno que era corazón- Espero tengas buenas noches y por supuesto que te amo mucho mi lindo y hermoso Croco-chan.
- ¿lindo y hermoso Croco-chan?- habló molesto el rubio al ver que con tan solo escuchar la voz de corazón, Crocodile se había salido de su encima y estaba sentado a un lado de la cama- desde cuando él también te llama de esa forma
-Doflamingo- Dijo con una voz entrecortada, pareciera que iba a llorar- Vete ahora mismo
- o…oye- dijo un poco nervioso, queriendo reponer las cosas, acercándose al pelinegro -, yo..yo también te amo…yo…te amo más que corazón croco-chan
- Evita decirme de esa manera y solo lárgate - dicho esto último se levantó y fue directo al baño, encerrándose para que el rubio no pudiese entrar
CONTINUARAAAAAAAAAAAA……………………………………………………………