Un policía manejaba a gran velocidad con dirección al sur dejando a todos a los que pasaba asombrados, que habría ocurrido para que una patrulla manejara a esa velocidad en un pueblo tan tranquilo como aquel? Sin dar aviso queda estacionado con una maniobra digna del mejor jugador de Mario card, enfrente de una primaria donde sale un joven policía como alma que lleva el diablo al interior del recinto y es que como su pequeño ángel termino en el despacho de la directora?
Al entrar a la dirección saluda a la directora y se encuentra con su peli azul hijo de tez ligeramente bronceada con increíbles ojos rojos como el fuego y unas muy extrañas cejas del mimo color de su cabello, de 7 años sentado en las bancas con un niño bastante lastimado y una furibunda señora que inmediatamente aniquila con la mirada a Daiki.
-Tsubasa que paso?-
-ahmmm-
- Lo que paso e que su salvaje hijo agredió a mi bebe sin razón alguna- interrumpió la señora mirando con desprecio a Tsubasa.
-Eso es cierto hijo?-
-…..-
-Tsubasa….-
Varios minutos pasaron en los que Aomine intento que su hijo hablara per este se mantenía en silencio y mirando al piso sin embargo apretaba sus pequeños puños haciendo entender que su temperamento no había disminuido del todo.
-Bueno oficial Aomine siendo que esta es la primera vez no lo expulsare de la escuela-la señora quería decir algo pero la directora la callo con la mirada- sin embargo con respecto al grado de violencia del acto Tsubasa quedara suspendido una semana y se le consignara un castigo de limpieza de dos semanas de su aula, queda claro?-
-Si señora, gracias-
Todos salieron con la intención de ir a sus casas sin embargo justo en la salida la señora murmuro algo que hizo explotar a Aomine.
-Si hubiera sido criado por una mujer esto no hubiera pasado, solo un salvaje criaría a un hijo así.-
-Que bien que lo menciona señora porque este salvaje es la mayor autoridad en esta ciudad y la pena de insultar a un oficial son 2 años en prisión- el aura de Daiki imponía, era como el de un animal salvaje, era la misma aura que solía sacar cuando jugaba contra un buen contrincante y la misma que le dio fama como uno de los mejores policías en Tokio.- pero como soy magnánimo la dejare ir hoy con solo una advertencia, la siguiente será directo al tribunal.
La familia Aomine se fue dejando a una aterrada señora y ellos avanzando con una sonrisa de satisfacción en los labios. Una vez en el auto el ambiente era tenso pero teniendo que sacar el tema se rompió el silencio.
-si sabes que estas castigado verdad?, pero como sé que tú no eres así y que no lo harías sin una buena razón escuchare lo que tienes que decir y así dictare tu sentencia bien?-
-…-
-estoy esperando…-
-…. Porque mi cejas son raras?-
-qué?-
-que por que mis cejas son raras?!, ni tu ni la abuela ni el abuelo las tienen así!!! Porque soy el único raro que las tiene así??!!- a ese punto Tsubasa ya gritaba, mientras que a Daiki el corazón se le estrujaba, sabía que pasaría un día, lo había hablado con todos sus amigos en su momento y aunque se decía preparado en ese momento sentía un pánico impresionante.
-ya te dije que es herencia-
-herencia de quién??!! Nadie más las tiene!! Ya vi todos los álbumes familiares y no hay nadie!! Por qué no me lo dices??!!-
-Tsubasa yo….- justo en ese momento ya habían aparcado en frente de su casa y Tsubasa salió corriendo entrando a la casa y probablemente encerrándose en su cuarto hasta calmarse. Mientras tanto Daiki entro y llamo a la única persona que le podría ayudar en ese momento.
-hola?-
-Tetsu… que hago Tsubasa quiere saber por qué tiene esas cejas….-se oyó un suspiro y con voz calmada y con la chillona vos de Kise en el fondo Kuroko hablo.
-Es Aomine-kun, sabias que esto pasaría. Tsubasa ya es lo suficientemente grande para entender lo que sucedió… todo estará bien, solo dile la verdad. –
-está bien Tetsu gracias-
-No te preocupes Aominecchi, Tsubasacchi lo entenderá- al colgar y ya mas calmado Aomine fue hacia su habitación y de debajo de su cama saco una caja, la única con llave en esa casa y se encamino a la habitación de su hijo. Dando un hondo respiro toco y espero.
-Tsubasa déjame entrar, tenemos que hablar- la puerta se abrió dejando ver a un pequeño niño abrazando a un oso bastante viejo vestido de bombero, con lo ojos rojos que después de ver a su padre entrar se encamino a su cama sentándose seguido de este.
-supongo que todo esto comenzó con el hecho de que nunca te dije de tu madre verdad?-asintió
-bien primero, no era una mujer, era un hombre- como lo esperaba su hijo abrió los ojos lo más que podía, sabía que existían hombres llamados donceles que podían tener hijos, pero eran tan escasos que no conocía a ninguno y los que reconocía eran figuras celebres de mucho dinero que eran cotizados y muy cuidados por la sociedad.
-mama era un doncel?-
-aja-
-wow! Nunca conocí a uno-
-claro que lo hiciste- su hijo lo miro con duda- tu tío Tetsu, tu tío Kazu y tu tío Akashi son donceles-
-enserio?! Y por qué no tienen hijos-
-porque son muy jóvenes-
-pero tienen la misma edad que tú y tú me tienes a mí-
-si pero tu padre y yo éramos muy jóvenes cuando te tuvimos, apenas habíamos entrado a la universidad cuando tu papa se quedó embarazado de ti-
-ohh y por qué no conozco a papa?? No me quería??- los ojos del pequeño se empezaron a poner aguados otra vez y Daiki inmediatamente lo abrazo calmándolo.
-claro que sí!! Te amaba con todo lo que tenía!!-
-y por qué no está aquí?-
-quieres que te cuente nuestra historia?-
-si!!- Daiki agarro la caja y con la llave que siempre llevaba en el cuello la abrió dejando ver su misterioso contenido- conocí a Kagami Taiga gracias a tu tío Tetsu, iban juntos en la preparatoria Seirin y fueron el mejor dúo de básquet durante esos tres años-
-ohh mas que tú?-
-si más que yo- los ojos de su hijo brillaron intensamente al ver como su padre sacaba una foto donde había dos hombres uno que era una versión más joven que su papa con una sonrisa que nunca había visto y otro que era un hombre de tez bronceada con un extraño cabello bicolor y unos ojos y cejas que veía todos los días en su espejo, su padre señalo al otro hombre que sonreía.
-Taiga era una de las personas más hermosas que conocí, su belleza me atrapo instantáneamente, aunque lo negara durante mucho tiempo.-
-por qué lo negaste?-
-era un ególatra homofóbico en ese tiempo, me negaba a aceptar el hecho de que una persona que no solo era un hombre si no que tambien mi rival jurado me gustara.-
- y cuando te diste cuenta?-
-cuando casi pierdo a tu padre-
-ohhh y a papa le gustabas- su padre sonrió como una de las pocas veces que había visto.
-sí. Taiga me conto que yo le gustaba desde que me vio, pero que con la actitud que yo tenía no creía que tenía posibilidad algún-
- y como es que terminaron juntos si no se acercaban?-
-tu tío Tetsu es alguien de temer, recuerda mis palabras. Al parecer Taiga le dijo a Tetsu que yo le gustaba y él ya se había dado cuenta que a mí me gustaba así que le dijo a tu papa que empezara a hacerse mi amigo retándome a partidos de básquet.-
-y te daba una paliza a cada rato- dijo Tsubasa en pose de Batman, como si aquello fuera una gran hazaña, que era, haciendo reír a Daiki.
-jajaja que va, casi nunca me ganaba, era muy bueno pero algo torpe y le faltaba pulir su talento al cien. Sin embargo esas salidas son hicieron muy unido, a tal punto que ya no solo salíamos a jugar si no que a veces solo nos quedábamos encasa de Taiga viendo partido o jugando videojuegos.-
-y así comenzaron a salir?-
-no, era un idiota celoso en ese entonces, y un día casi lo hecho todo a perder.-
---------------------------------------- flashback---------------------------------------------------------------------
Iba caminando por la calle de camino a casa de Taiga cuando lo ve en la puerta siendo besado por un idiota, en ese momento su mente se nublo en rojo y aunque quería no podía moverse, viendo la escena donde Kagami empujaba al sujeto y voltea a verlo, inmediatamente palidece e intenta acercarse a él, pero Daiki da un paso atrás asqueado ante la imagen que tiene grabado en las pupilas y cuando Kagami intenta hablar se adelanta dice sin pensar lo primero que se le viene a la mente.
-Aomi…-
-así que aparte de marica, puto. No te acerques a mi zorra.- ve la cara de dolor de Taiga un segundo antes de sentir su puño en la mejilla y terminar de cara al suelo, observando como Kagami se mueve lo más rápido que puede a su casa.
-idiota-
-------------------------------------------fin del flashback---------------------------------------------------------
-PAPA!!! Por qué rayos hiciste eso??!!!-
-lo se… fui un idiota, pero fue tantos los sentimientos que me llegaron al ver a taiga ser besado por ese idiota que no lo pude evitar… y casi lo pierdo por eso…. De más formas de las que creí.-
-que quieres decir?-
-el tipo que lo beso se había obsesionado con Taiga al punto de hacer lo que sea para tenerlo, lo iba a secuestrar- dijo con rabia
-y que paso?-
-tus tíos me obligaron a ir ese día a hablar con él y a declárame, incluso fueron e hicieron de serenata y todo. No dimos cuenta de que algo malo pasaba cuando no respondió, él no era así, incluso si eran las tres de la mañana él se levantaba para abrir por si era una emergencia, así que con la fuerza de los seis derribamos su puerta de estrada y encontramos al tipo intentando llevarse a un inconsciente Taiga por la ventana. El maldito lo había drogado , por suerte para todos e incluso para el en ese tiempo, el tío Akashi se encargó de mover a la policía y a los médicos para que atendieran a taiga.-
-y papa estuvo bien?-
-SIP nada que no pudiera superar, ese día, más bien madrugada, cuando despertó me declare y nos convertimos en novios…-
-ohhh y por qué no está aquí?-Aomine suspiro, no podía darle más vueltas al asunto. Debía decirlo ya.
-cuando nos enteramos de que venias tu fue toda una faena, Taiga no sabía que era un doncel así que la sorpresa no fue mínima para ninguno de los dos aunque obvio después éramos las personas más felices del mundo, y gracias a eso tus tíos decidieron, o más bien Akashi decidió, que todos se haría la prueba resultando Tetsu, Kazu y el mismo donceles. Mas no solo fue eso unos meses después nos enteramos de otra cosa. El maldito que le hizo daño a tu padre se enteró, de cómo no sabes qué forma, que él estaba embarazado y decidió que si no era de él, no era de nadie.-
-y luego?- pregunto a su padre al ver que se quedaba un momento en silencio sumido en sus recuerdos, que no parecían muy placenteros.
-luego tu naciste, llegaste cuando aún te faltaban dos semanas, nos sorprendió a todos, tu papa y yo estábamos comprando un oso y peleándonos por como iría vestido, si de policía como yo o de bombero como el-
-papa era bombero?-interrumpió su hijo emocionado
-sí, y le encantaba aunque lo dejo cuando se enteró que te esperaba, era excelente en su trabajo aunque a mí me crispaba los nervios cuando había un llamado, como supongo yo lo ponía a él con los mío-
-y que paso después de que nací?-
-ese mismo día el escapo de prisión, nadie sabe como pero lo hizo y eso hizo que las alarmas de todos se dispararon, nunca dejamos a Taiga solo, siempre había alguien con él, pero seis meses después hubo una falla en nuestro sistema, me llamaron para una emergencia y Taiga dijo que el llamaría a Tetsu para que lo acompañara, pero no lo hizo, tu padre era terco como una mula y aseguraba que se cuidaría solo, era casi imposible que el supiera donde vivíamos así que no había problema. Nos equivocamos. Llegue cuando avisaron en la unidad de un incendio, y la dirección era la nuestra. Ustedes seguían a dentro y no podía apagar el incendio, hasta que uno de los sempais lo logro, no pude verlos, solo hasta que llegamos al hospital.-
-mu…murió?- pregunto Tsubasa con lágrimas en los ojos, su padre estaba estático probablemente recordando aquella escena.
-dos horas después de llegar al hospital me dijeron que tú estabas bien, solo habías inalado humo que probablemente te acarrearía un asma permanente. Pero de Taiga nada, hasta 5 horas después, había estado en el quirófano, él te protegió del fuego con su cuerpo quemándose ¾ partes de este. Necesitaron injertos de piel y muchísima sangre para que finalmente saliera de peligro.-
-pero….-
-pero entro en coma, sus heridas eran muy graves, tanto que era un milagro que siguiera vivo. Pero al parecer su mente no pudo con el daño-Daiki lloraba como nunca lo había hecho frente a su hijo, o a alguien.
-entonces el…-
-lleva en coma más de siete años….-ahora los dos lloraban, Tsubasa entonces entendió muchas cosas como por ejemplo el que su padre todos los jueves iba a otro lugar, antes creí que era para ver a su novia, ahora sabía que iba a visitar a su padre a donde quiera que estaba. Como también el hecho de todo en esa casa fuera nuevo, excepto el pequeño oso que lo acompañaba desde que tenía uso de razón, era el mismo por el cual habían peleado sus padres para ver que vestido le pondrían.
Una vez más calmados Tsubasa le hizo un pedido a su padre.
-quiero verlo. Quiero ver a papa- Aomine acepto sabía que lo iba a pedir y no se iba a negar, ya se lo había impedido 7 años, ambos lo necesitaban.
En ese momento se oyó el timbre y extrañados abrieron en contraendose con Kuroko, Kise, Midorima, Takao, Akashi y Murasakibara.
-que hacen aquí?-
-Tetsuya nos llamó, supimos que pasaba y pensamos que necesitarías nuestro apoyo-
-ne ne tío Akashi, mi papa era muy genial verdad, salvaba vidas y me salvo a mí- todos se sorprendieron de como Tsubasa lo describía, al parecer ignoro la parte mala de la historia y solo le intereso su padre y sus hazañas. Después de eso y a insistencia de Tsubasa todos se quedaron hasta muy tarde contando las divertidas anécdotas de Kagami, la mayoría haciendo sonrojar a Aomine. Esa noche padre e hijo durmieron juntos, ambos con un nudo en el estómago por lo que ocurriría el día siguiente, un jueves, el único día donde se le permitían las visitas a Kagami.
La habitación olía a medicamento y desinfectante. En medio de ella una solitaria cama aguardaba con un jarrón a lado con flores ya marchitas de la semana anterior, descansaba la ahora frágil figura de un hombre de a mediados de los 20, viéndose más joven por su condición, con una tez más blanca que la foto, probablemente por no haber salido al sol en más de 7 años y con horribles cicatrices en la mayoría del cuerpo que para los dos peli azules eran las más hermosas que se podían observar.
-vamos, ve y salúdalo- Tsubasa se acercó viendo a su padre por primera vez, reconociendo esas raras cejas que ahora portaba con orgullo mientras su padre cambiaba las flores.
-hola papa-
-hola Taiga, adivina quién vino, aunque estoy seguro que ya lo sabes, por ser su madre y todo eso, nuestro hijo Tsubasa- Daiki acariciaba tranquilamente los cabellos de Kagami mientras que su hijo se armaba de valor para tomar su mano.
En cuanto toco sus dedos lo más increíble pasó.
-hola mis amores- Taiga dijo con vos ronca, con sus hermosos ojos rojos clavados en su pareja e hijo, con una tranquila sonrisa.
-papa/Taiga-.