El mundo actual está dividido en dos reinos, pero no era asi hace 50 años, Sabertooth, Lamia Scale, Extalia, Crocus fueron los últimos reinos en “desaparecer”, claro que solo cambiaron su nombre por Fiore, pero no quiere decir que la muerte no estuvo involucrada, el mundo estaba en guerra, la mayoría quería más territorio, Fiore solo quería que todos vivieran en paz y si no podían separados lo harían juntos aunque tengan que obligarlos, después de todo Fiore es el reino más poderoso que ha existido.
Pero hubo un reino que no se involucró en la guerra, aunque fueran atacados ellos no respondieron, aun así se sabía que Fairy Tail tenía el poder para destruir el mundo, literalmente, aunque eso solo era una exageración de la gente no se descartaba totalmente.
Mientras se dirigía hacia el castillo, Natsu recordaba todas las historias que le contaba su padre acerca de Fairy Tail, sabia y lo había confirmado que este reino era muy prospero, eran pocos los materiales que necesitaba de lugares fuera de su territorio, y de un momento a otro la gente de esos lugares les empezaban a negar sus productos, eran pocos pero necesarios, desde entonces Fairy Tail poco a poco iba decayendo en cuanto a lo que era, un paraíso. Aun con todo esto Fairy Tail es temido y Natsu quiere saber el porqué, estaba emocionado de saber al fin esa respuesta, seguro que el príncipe se la daría.
Por otro lado, Gray estaba nervioso, y no sabía porque, o más bien no quería admitir que lo estaba por ver a Dragneel, el personalmente se había encargado de cada detalle en la cena, la comida, la vajilla, los adornos y lo que se haría después, pero se había olvidado de algo igualmente importante, conversación, Natsu estaba a punto de llegar y él no tenía ningún tema de conversación, del chico no sabía nada solo que aparentemente le gusta luchar y usa magia de fuego, tal vez lo retaría a una pelea,, pero inmediatamente lo rechazo, ¿qué clase de anfitrión haría eso?
Tocaron a su puerta, el aún estaba arreglándose así que con “Adelante” ingreso a los aposentos del príncipe Freed, el consejero real y encargado del bienestar de Gray o niñero como quieran y le llaman los demás a sus espaldas, cosa que a él no le importa, su preocupación por Gray es sincera, y es por eso que decidió ir a buscarlo y tratar de calmarlo ya que lo había notado bastante alterado, y no se equivocó, solo le faltaba acomodarse un arma como accesorio en su cinturón y estaba listo pero al príncipe le temblaban las manos.
“¿Esta bien, Principe?” dijo haciendo una leve reverencia.
“¡Fredd! Te he dicho que no me digas Principe, soy Gray” respondió aun luchando con su vestimenta, Freed se acercó para ayudarle, Gray le dejo suspirando en resignación.
“Quiero que me acompañes, no podré hacerlo solo”
“Claro…Gray”
Ambos salieron de la habitación, el mayor sonriendo amablemente como siempre y el príncipe con su porte elegante de todos los días pero una vez más un sonrojo inoportuno le restaba seriedad a su actitud de príncipe orgulloso.
---Con Natsu
Nada más entrar al castillo sintió la temperatura descender, el era un mago de fuego así que para estas ocasiones no le resultaba problema regular su propia temperatura a un nivel cómodo para él, Fairy Tail no hacía más que sorprenderlo en cada momento, el paisaje en todo el recorrido era hermoso, fue recibido por la guardia del reino con una reverencia por toda la entrada hacia el castillo, el esperaba el típico palacio bañado en oro pero fue maravillado por decoraciones de cristal y plata, no sabía si era por modestia pero al parecer compartía el gusto por la plata.
Siguió paseándose por el lugar hasta que por fin Gray hizo acto de presencia, Natsu pensó que estarían los dos solos pero junto al príncipe venia un hombre joven de larga cabellera verde.
“Es un placer conocerle al fin joven Dragneel, Soy el consejero real, me llamo Freed Justine y a nombre de todos en el reino le doy las gracias por salvar a nuestro Principe.”
Natsu no respondió, las palabras eran simples pero el hecho de que Fredd se arrodillara ante el como si fuera el salvador del mundo, no estaba acostumbrado a que lo trataran con tanto respeto y es lo que venían haciendo en toda su estadía en Fairy Tail, quería parar todo aquello pero no sabía cómo sin ser grosero, tenía prohibido comportarse de forma idiota como suele ser siempre.
Freed volvió a levantarse, su acción también había sorprendido a Gray, el peli verde les hizo señal de que le siguieran al comedor, mientras seguía hablando.
“Que no le sorprenda este trato hacia usted, joven Dragneel, su hazaña llego a oídos de todo el mundo, Fairy Tail ama a su príncipe y su salvador se merece el mejor trato que se pueda dar aquí, todos en el castillo se esforzaron para esta noche, y quien se encargó de que todo estuviera perfecto y listo fuel el mismo príncipe…”
Ambos chicos se sorprendían con cada palabra que decía Justine, Natsu sentía mucha más presión y Gray nerviosismo, justo cuando ya se había calmado Freed salió con esas palabras que aunque lo hacían sentir feliz que Natsu supiera que él era el responsable de todo aquello y que era por él, le avergonzaba un poco.
Ya en el comedor y cada uno en su lugar, a Natsu le extraño un poco que Gray no ocupara el lugar en la mesa del rey, suponía que porque aún era el príncipe y no el rey pero ese puesto no debía estar vacío mucho tiempo.
Los tres comenzaron a degustar de los alientos, al principio nadie decía nada comían en total silencio con los más finos modales, sinceramente Gray no se espera eso de Natsu, él quería ver algo diferente en su invitado, con el poco tiempo de conocerlo pudo hacerse de una imagen de él siendo un rebelde que no le importaba en presencia de quien estuviera el serie como es y trataría a todos por igual sin importarle el estatus social., le desilusiono un poco que le tratara tan formalmente, en su primer encuentro casi llegaban a una confrontación física y ahora cada que se dirigía a él lo llamaba “Joven Principe” odia cuando Freed lo llama así pero con Natsu siente una punzada de dolor.
Gray quería ver al explosivo Natsu, su enojo hacia el al menospreciarlo y la arrogancia en su sonrisa eran sentimientos que como príncipe no llegaba a experimentar.
Freed se dio cuenta del ambiente, él estaba ahí para apoyar a Gray aunque ni el mismo Gray supiera para que, ya que ninguno de los dos iniciaba conversación él les daría un tema.
“Joven Natsu, todos aquí nos encantaría escuchar su historia…”
Gray al fin cambiaba su expresión a una de interés, quería hacerle todo ese tipo de preguntas a Natsu, así encontraría un motivo para seguir viéndolo, cualquier excusa por pequeña que sea no importaba, no quería que esta fuera la última vez que se encontraran, y aunque por ahora no sabía el porqué, ya lo descubriría después.
“Naci y sigo viviendo en donde antiguamente se conocía como Magnolia, al sur Fiore, aunque ahora estoy entrenando en Sabertooth, no estoy solo, mi maestra…Erza Scarlet me acompaña…”
La pequeña pausa que Natsu hizo fue debido a que estuvo a punto de llamar demonio a su maestra pues eso era lo que ella era, no literalmente pero es lo que pensaba su pupilo de ella ya que consideraba más una tortura que un entrenamiento lo que le hacía con él, pero no era el único, Freed y Gray también lo pensaban, Erza Scarlet es reconocida como la guerrera más fuerte de Fiore, y en Fairy Tail aún conserva el título de Guardaespaldas del Rey.
Las sorpresas nunca se acaban, y el regreso de Erza a Fairy Tail traerá muchas mas.