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Daddy issues por -oOYUKI-NII-Oo

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 Título: " Daddy Issues"

∞ Autor: YUKI-NII.

∞ Género: Hurt/Confort

Rating T

∞ N/A SpiderMan ni Deadpool me pertenecen, esto no es más que un hobby, todo es creación de Stan Lee y MARVEL.

∞ Resumen: Y entonces Tom Holland contesta al fin a Ryan Reynolds en Twitter y todo se descontrola.

∞ Advertencia: Insinuaciones sexuales y bisexuales. Webcam sex

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Backstage 7

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Hay dos cajas de regalo sobre la cama, Tom está sentado junto a ellas, de piernas cruzadas y semidesnudo, ha prendido la calefacción porque acaba de darse un largo baño. Nunca su limpieza personal había sido tan importante como en ese momento. Se ha preparado por días, comprando las cosas necesarias de apoco, para no levantar sospechas y para que Haz le deje en paz de una vez sobre su raro comportamiento con el teléfono y esa necesidad de estar últimamente solo. Cerrando la puerta de la habitación con llave y llevando grandes suéteres como si tratara de ocultar algo.

Haz ha terminado cansado justo al cuarto día, cuando prácticamente Tom se ha escabullido en la cafetería para hablar por su celular como si temiera que su conversación fuese escuchada por cualquiera y Harrison debe de decirlo, él no es cualquiera, es su jodido asistente y su mejor amigo, casi hermano. Tom al parecer no está pensando sobre ello, guardando secretos y actuando sospechoso. Esta nerviosos, Haz lo sabe, después de tantos años juntos, compartiendo horas en pequeños espacios y desvelándose solo para ver quién puede durar más tiempo sin dormir.

Esa mañana incluso Tom ha saltado en su cama para festejar su millón de seguidores por Instagram. Haz mentiría si no digiera que no quiso abrazarlo, a pesar de que la cámara del celular estuviese grabando en vivo y eso fuera visto en muchas partes del mundo, haciendo nacer la esperanza de que todo volvería a la realidad. Cuando sus ojos se han encontrado entre las almohadas, Tom ha dado un salto para separarse, mejillas caliente y su acento marcado.

Haz ha sentido la vena palpitar cuando su amigo se ha disculpado para salir, inventando algo sobre el desayuno, como si el abuelo no fuera a comprarlo durante su paseo con Little Tess.

Así que ha terminado por arrinconarlo horas más tarde bajo la canasta de basquetbol del pórtico, claro cuando le sacado una fotografía sin camisa y se la han intercambiado por mensaje para que pudiese postearla para acallar los rumores sobre el uso de photoshop en sus imágenes de una vez por todas. Haz se ha colado por delante de él, demasiado distraído en el celular para notar las manos cayendo sobre sus hombros, y el peso empujándole de un solo movimiento contra el pórtico

—Habla Tommy, y quiero que me digas la verdad ¿Qué me estas ocultando?

Si Tom no hubiese desviado la mirada, sino se hubiese relamido los labios antes de respirar profundo para enfrentarle entonces Haz le hubiese creído sin ningún tipo de réplica.

—Solo he estado pensando sobre las próximas grabaciones.

—Faltan días para que regresemos a Estados Unidos, y yo no he recibido ningún tipo de cambio para tus escenas. ¿Así que de que estas preocupado exactamente?

—No estoy preocupado, solo he estado pensando Haz, no hay nada de malo en pensar.

—Cierto, no lo hay. La cuestión Tommy es que desde que llegamos has estado evitándome, y no solo a mí, a nuestros amigos, incluso tu padre lo ha notado. No dejas que Little Tesis duerma contigo, y tu amas estar con ella, prácticamente llorabas en el remolque porque no tenías nada que abrazar para dormir.

—Yo solo tengo otras cosas que hacer y no quiero mantener despierta a Little Tess —. Trata de defenderse lo mejor posible, porque su espalda desnuda esta contra la pared fría y Haz solo a centímetros de su rostro. A Tom esa invasión del espacio personal ahora le pone nervioso. Se siente terrible porque Haz es tan parte de él que sentirlo ajeno es como un golpe en el estómago. La cogestión entera de sus pulmones y las ganas de arrodillarse y pedir perdón.

Haz da un suspiro fastidiado y se aleja con las manos en alto.

—Bien, supongamos que te creo, y que las grabaciones te tienen así, y que como el buen amigo que soy hoy iremos a practicar tiro con arco al bosque  y llevaremos a Little Tess para que te relajes —. Tom abre su boca y Haz se da la media vuelta —. Ni lo intentes Holland, no trates de escapar.

Tom deja caer su cabeza hacia atrás, soltando el balón naranja y apretando sus labios porque lo siguiente que hace es correr hacia adentro de la casa, cambiarse de ropa y tomar las llaves del auto de su madre. Hecha dos cajas de cartón en los asientos traseros y escribe una rápida nota, la deja pegada en el refrigerador, con su letra apretujada diciendo algo sobre llevar una cosas por paquetería cuando realmente lo que hace es escapar hacia un hotel barato por la zona sur de Londres, su laptop en el asiento del copiloto y su celular sobre el regazo, porque le quedan cinco horas antes de que la fiesta de Ryan empiece al otro lado del mundo y no va a arriesgarse a ir hasta el parque nacional para practicar tiro de arco con Haz.

Y ahí está ahora, tras un enema de farmacia, uso de jabón neutro y el recorte de todo su vello púbico. Tom entiende lo arriesgado que eso puede ser, los escándalos que más de un persona del medio han tenido por ese tipo de contenido, Tom sin embargo ha mando pinchar su propia laptop casi como si jugara con los pliegues de la deep web para que su señal de VPN salte a través de la red y se reconfigure en múltiples I.P.

Así que comienza por ahí, a escribir un montón de tecnicismo para que Ryan se vaya haciendo una idea de lo privado que será su regalo y las medidas de seguridad virtual que él se ha tomado para protegerlos a ambos. Tom está nervioso porque si Ryan no acepta, sino decide confiar en él sobre eso, realmente no sabe lo que hará.

La sonrisa torcida de su exnovia en un velo que aparece frágil sobre sus memorias, porque ella le enseño a hacer todo eso, mientras le preparaba con base de amor incondicional y abría las piernas por Ashley Madison a un tipo de California. Tom sacude su cabeza, porque no debería de estar hundiendo el buen humor en el pasado sino concentrándose en las mariposas que están en su vientre ene se isntante.

Sus manos abren las cajas de cartón que le han llegado de paquetería de ese sitio asiático del que se ha vuelto un cliente asiduo y comienza sacar con cuidado el contenido. Hay manuales en tres idiomas, bolsas plásticas transparentes con medias y delgada ropa de gasa y seda. Tom se recuerda que eso de ser un sissy boy no es la gran cosa mientras se mantenga como un secreto entre Ryan y él. Porque no es como si Tom fuese un pervertido que le gusta estar exhibiéndose, es solo que él ha estado experimentado, en cambiar su ropa lisa y de algodón por pequeños conjuntos de pantis de material hipoloargenico y suave que le envuelve los glúteos y le reacomodan la polla.

Tom quiere convencerse de que es una etapa, que el gusto por el encaje y la crinolina se ira eventualmente al igual que eso que tiene con Ryan.

Simplemente terminara.

Ignora la punzada en su pecho sobre su apocalíptico pensamiento y se levanta para quitarse su boxers y comenzar.

Toma un par de calcetas largas negras, las deslizas por sus piernas, hasta que los elásticos de ambas le rodean los muslos. Enseguida toma una camisa blanca dos tallas más grande y unas pantis de puro encaje, listones entrelazados en la parte de atrás que terminar en una moño, dejando ver solo pedazos de su piel y resguardado las zonas más íntimas. Y camina por la habitación, da brincos y se sacude el cabello, huele a miel y a trigo, huele a nervios y culpabilidad.

El buzón de su celular se ha llenado de mensajes de Haz que van desde la furia hasta el desconcierto, llamadas que mueren cada dos minutos y él no se ha atrevido a apagarlo por si todo se sale de control y tiene que llamar a casa para asegurar que está bien y solo un poco ocupado con alguna mentira de la película que Haz no apoyara. Pero no importa, no en ese momento que la alarma programada de su laptop suena para que envié lo que será el último mensaje a Ryan antes del regalo.

Deja el celular sobre la cama y se mete al baño, porque esta sudando, no por la calefacción, sino por la presión que siente bajo el vientre, Tom se siente tonto y virginal, como si nunca hubiese tocado a una chica en su sofá antes y no distinguiera la diferencia entre llegar a segunda y tercera base, la teoría se le ha olvidado completamente y su práctica esta tan deteriorada que quiere dar un home run con todo ese montaje de pagar una habitación de hotel lejos de casa y compra de lubricantes y plugs en sexshop por madrugada.

Su celular repiquetea con Careless Whisper y el salta frente al espejo, queriendo gritar toda la energía que se le ha cumulado desde el día de ayer bajo la lluvia de aquel café, con Elvis susurrándole cosas indecentes contra el odio y jurándole un amor que no tiene con Ryan Reynolds.

Se sacude las manos, corriendo, sus pies sintiendo las cosquillas de las medias y a la felpuda alfombra, brinca sobre la cama, pateando las cajas vacías y rodando sobre su estómago para desbloquear el celular.

Ryan habla sobre un retraso en el vuelo de Blake, sobre su madre recogiendo a James y que la celebración terminara siendo en la casa de sus padres.

{23/10/16, 17:20:12 P.M} VancityReynolds: Ellos quieren esperar a que Blake llegue, así que será una cena tranquila. Estoy solo.

Tom entiende la implicación de la última frase como un permiso de doble lenguaje que él ha estado esperando desde esa mañana que despertó.

{23/10/16, 17:21:39 P.M} tomholland1996: ¿Podrías darme tu cuenta de Skype? quiero verte

{23/10/16, 17:20:12 P.M} VancityReynolds: Oh Baby boy, ¿Cómo podría negarte algo después de todas tus explicaciones de computadores que no entendí? mi cuenta es Reynoldsxxx

Tom sonríe contra la pantalla del teléfono, estirando su mano para tomar su laptop e iniciar sesión en Skype. Siente las contracciones en su estómago iniciar, sacude su cabeza para reacomodarse el cabello y respirar profundo. Es fácil encontrar a Ryan, con su fotografía en blanco y negro que parece encantarle y ese estado donde hace referencia a Deadpool. Vuelve a respirar porque al parecer ha olvidado como hacerlo, cuando presiona las teclas de llamar y el sonido característico de la aplicación inunda todo el cuarto. Tom conecta los audífonos porque no es tan muy seguro que tan delegadas son las paredes de su cuarto y no quiere arriesgarse a averiguarlo.

Puede ver la pantalla en negro abrirse para enfocar la imagen de lo que parece un estudio, con un piano de media cola y une estante con discos de acetato, Tom puede adivinar la orilla de un tocadiscos y un par de botellas de cerveza sobre la mesita. Pero no hay nadie, escucha el susurro de Ryan, antes de que aparezca despeinado y con una camiseta negra, Tom se muerde el labio, porque ese hombre frente a él es considerado uno de los más sexy del planeta y él no podría estar más de acuerdo con ello.

Hay un silbido colándose por su tímpano que le hace enfocar los ojos claros de Ryan. Tom se siente sonrojar ante la intensidad de su mirada y la sonrisa de medio lado.

Hey Baby boy, si este es mi regalo, debo decirte que eres muy cruel —. Ryan tiene el ceño levemente fruncido y se inclina más frente a la cámara. Tom también se acerca negando.

—No soy cruel —. Tom juguetea con sus manos sobre su regazo y baja la mirada. Ryan sonríe como un lobo.

Claro que lo eres Tom —. Y lo dice lento, saborea cada una de las letras, las pedalea con la lengua y se inclina un poco más como si con eso pudiese ver a totalidad el cuerpo entero del futuro arácnido —. Muévete un poco hacia atrás Baby boy — Pide, reacomodándose sobre el sofá y estirando sus piernas. Tom obedece sin levantar el rostro y Ryan siente que puede correrse solo con eso.

Con Tom distendido sobre la cama, sus piernas embutidas en medias negras y esa camisa abierta que le resbala por el hombro, Ryan piensa en cosas como en Tom vistiendo sus propias camisas y en lo adorable que se vería, con su pequeño cuerpo y sus grandes ojos. Ryan puede aceptar las abdominales marcadas que Holland tiene, sus piernas trabajadas y su notoria fuerza al levantar pesas, Ryan también puede aceptar que puede derribar a Tom sobre la cama sin mucho esfuerzo, y quisiera tanto probarlo que algo en su pantalón palpita y duele.

Piensa de igual forma que la cámara no le hace justica a los pómulos marcados de Tom, ni deja ver el verdadero tono de su piel, que esos pixeles le son insuficientes y que deberían trabajar por una de mayor calidad, si piensa hacer de esto un hábito. Ryan ya se considera adicto mucho antes de probarlo, así que espera que Tom diga que sí, no solo a esa petición sino a las cientos de fantasías que le están revolucionando en la cabeza en el mismo instante que quiere levantarle la camisa para verle la ropa interior como si un par de bóxers tuviesen algo interesante, como ese toque misterioso que provocan las chicas con falda corta y que hace que los pervertidos tomen fotografías de sus bragas en áreas públicas y el subterráneo.

Tom repliega sus piernas para que la cámara pueda abarcarle entero y Ryan gimotea en desespero, porque ahora puede ver las curvas de su trasero, la piel siendo arropada por encaje y él solo piensa en expirar profundo antes de enterrarle la cara, ahí, entre las piernas, sin importar que en lugar de una mojada vulva este una húmeda polla. Se relame los labios y Tom lo descubre observando.

—Eres un pervertido —. Susurra, con medio rostro escondido tras sus rodillas flexionadas.

Cariño, tú lo eres más por mostrarte así ante mí.

—Yo solo quería ser tu regalo —. Replica, antes de echar su cabeza hacia atrás ante sus propias palabras. Joder ¿qué ha dicho?

Y eres el mejor regalo de todos preciosura —. Ryan le sonríe, suavizando la voz, para que salga de ese escondite provisional que son sus rodillas. Parece funcionar cuando Tom se asoma un poco, como un pequeño venado antes de ser cazado —. ¿Le importaría a mi regalo, comenzar a desenvolverse por mí? Lo haría yo mismo, lo sabes, pero no hay la suficiente tecnología para hundirte las manos donde yo quiero Tom.

Tom se cubre el rostro y a Ryan se le dulcifica la mirada porque, después de todo, hoy es oficialmente un adulto con el doble de edad que Tom, y eso aunque debería ser uno de los tantos factores que le detengas para estar con él, no hace más que aumentarle el morbo y el cariño.

Vamos dulzura, desnúdate para mí — Ryan habla ronco contra el micrófono de su computador. Ha echado el cerrojo a la puerta y se ha encargado de estar en la habitación insonorizada de la casa, su estudio, donde en ocasiones toca el piano y otras tanto pone música antigua a todo volumen para no molestar ni a Blake ni a su reina. Él también esta emocionado y nervioso, porque se siente como un chiquillo haciendo cosas sucias a espaldas de sus padres.

Tom comienza desabotonarse la camisa con manos temblorosas, y aunque eso le remueve la ternura a Ryan también le pone ansioso, porque si fuera él, si sus manos estuvieran puesta sobre esa tela, los botones hubiese volado es todas direcciones y su lengua caído directamente sobre la piel inglesa del menor. Ryan jadea, está seguro que lo hace, cuando en la cámara puede ver los pezones de Tom. Su mano izquierda comienza a acariciarse por encima de la tela de sus pantalones deportivos, ha regresado de correr, y no se ha duchado siquiera para la cena, Blake se molestara, su familia comenzara a llamar, mientras él continua empapado con el sudor del ejercicio, llenándose de la piel de Tom, y ahogándose de calor.

Tom tiene sus pectorales levemente inflamados por el entrenamiento diario de la película, Ryan piensa en que si alguna vez pudiese hacerlo usar un sostén, Tom seria talla princesa. Su pequeña princesa, dueña de todos sus movimientos, del aire que respira y el lineamiento de sus células.

Baby boy, eres tan sensual —. Ryan elogia, con la visita firmemente clavada en los pezones de Tom, que se estremece ante su voz. Ryan sonríe para sí mismo, porque le ha encontrado el punto flaco a la entereza que trata de sostener —. Cariño, abre tus piernas solo un poco —. Ruega, cuando la camisa resbala sobre los hombros y Ryan cree adivinar que hay pantis pequeñas en lugar de aburridos bóxers. Tom niega con su cabeza, rojo y caliente, Ryan presiona solo un poco más para deshacerle como caramelo fundido — Bien, bien Baby boy, entiendo, el show no es gratis, y eres un regalo consentido y caprichoso así que… — Ryan se separa solo un poco de la cámara atrayendo su atención. Lleva ambos brazos hacia la cintura y levanta su playera, la pasa por su espalda y cabeza para tirarla tan lejos como puede —. Ves, ahora estamos igual, nada de que avergonzarte, así que ¿me dejarías ver un poco más Tom? solo un poco Baby boy.

Tom asiente recorriéndose hacia atrás, hasta que su espalda pega contra la cabecera de la cama. Abre las piernas de apoco, como si fuera un empaque, y entonces Ryan lo ve, los pantis de encaje blanco, entrelazados por listones. Llevo su mano a la altura exacta donde un bultos se ha formado, haciendo una mancha más oscura, pre seminal traspasando el encaje.

Tom, dulzura tócate para mí, quiero ver cómo es que te lo haces. ¿Dime en que piensas cuando envuelves tus dedos alrededor de tu polla? ¿También juegas con tus pezones, o te gusta explorar más abajo, justo donde están los pliegues de tu entrada? ¿Cuéntame Tom, te gusta duro o despacio?

—Duro — susurra Tom, con el mentón hundido en el pecho, y su mano abriéndose paso por debajo de las pantis.

Entonces hazlo así cariño, tan duro y fuerte como quieres que yo te lo haga a ti. Muéstrame, enséñame lo que más te gusta —. Ryan susurra con voz gratural y su mano dentro de los pantalones, puede ver como a Tom le tiemblan los mulsos, como trata de esconder sus ojos con su cabello y ha empezado a jedar despacito, muy bajito —. Imagina que yo estoy ahí, que te sostengo entre mis brazos, y beso tu cuello. Porque Tom, si tan solo pudieras verte como yo lo hago, sabrías que estoy a punto de correrme por solo ver una porción de tu piel, que tus jadeos se me están clavando en los profundo de mi cerebro y que no podré olvidarte por el resto de la noche, con esas diminutas pantis y esas jodidas medias. Niño vas a matarme.

Tom abre uno de sus ojos, solo para ver el movimiento delante de la cámara, Ryan se ha alejado del computador, pantalones a mitad de sus muslos y su erección alzada orgullosamente, brillosa y grande. Siente como se le hace agua la boca con algo que no debería porque hasta hace unos meses él se hundía en un par de pechos suaves y una dilatada vagina sin embargo hay algo oscuro presionando al final de su vientre, apretándole los testículos y que le obliga a sacar la lengua, ante ese cuerpo que Ryan tiene y que se ha presionado contra él esa vez en el piso de Hyde Park. Tom quiere lloriquear por un beso, por la presión de los labios de Ryan contra los suyos, de su lengua hundiéndose en su cavidad, acariciándole el interior de las mejillas y el paladar. Y su movimiento se vuelve más rápido, más torpe, sus jadeos aumenta y el sonido del “Chop, chop, chop” de la mano de Ryan contra su pene solo le hace sentir más cerca del final.

—Ryan…Ryan —. Tom llama sin saber muy bien que es lo que quiere, si dejarse caer hacia enfrente para aplastarse su erección contra la cama, o ponerse en cuatro y abrir su trasero para ese hombre al otro lado del globo terráqueo. Y como no se decide seguí jalando, más rápido, más fuerte, su vientre contrayéndose, sus testículos chocando uno contra el otro. Tom abre sus ojos una vez más, estirando su mano frente a la cámara como si llamara a Ryan, el canto de una sirena haciendo caer al capitán del barco a las profundidades del mar.

Sí, eso es cariño, hazlo más rápido. Muy bien, muy bien, dulzura, lo estás haciendo excelente —. Ryan alienta, ojos fijos en los movimientos y garganta seca ante cada tramo de piel que se escapa de las pantis.

Ryan le enfoca, sus muslos rozándose, su mano frenética, yendo hacia arriba y abajo de su extensión, su boca entre abierta, saliva escurriéndole de la comisura de los labios, y esta sonrosado, su cuerpo entero. Ryan piensa que esa es la sirena más bella que ha visto jamás, y que  ni siquiera tendría que cantar para hechizarlo, cuándos su ojos chocolate ya lo han hecho, Ryan ruge como un lobo en celo, cuando Tom abre por completo sus piernas está gritando, lloriquea, el semen escapándose  en chorros intermitentes, mánchale el estómago y la barbilla. Todo su cuerpo tenso en una explosión de reacción en cadena que hace que Ryan vea blanco tras sus ojos, cuando sus bolas se contraen en espasmos de variadas intensidades y él también se corre, manchándose el pantalón deportado y las teclas inferiores de la laptop.

La vocecita cansada de Tom, se cuela por el micrófono de sus audífonos, sus manos siguen aferradas a las sabanas y sus dedos presionan contra su piel sudorosa. Ryan continua corriéndose viendo el desastre que es Holland, pantis ligeramente recorridas y su polla flácida y húmeda contra la parte interior de su ingle. Tan hermoso.

Ryan acaricia la imagen de su pantalla, y presiona la tecla de “ImpPt” sin que Tom lo note, para guardarla como una fotografía secreta con la que se manoseara en las noches solitarias cuando la añoranza le supere y la excitación no se vaya con duchas de agua fría. Ryan tiene pensamientos egoísta, como incluir el “mi” como ante sala de cualquier oración que incluya a Holland, como “Mi Baby boy es un chico sexy” o “Mi Tom es el chico más hermoso de todos” pero se lo guarda, porque suena mucho a posesión y otro poco a celos, y no quiere asustar a ese niño que respira erráticamente, que se ha hecho una paja en su honor y que usa pantis y medias altas solo para él.

Sus dedos abandonas la superficie de la fría e impersonal pantalla y su voz se redirige viajando cientos de kilómetros para alcanzar a Tom.

Lo has hecho bien, muy bien, Baby boy.

Tom sonríe, su cuerpo laxo cayendo de a poco hacia la cama, su rostro hundiéndose en la fría almohada. Ryan suspira como un idiota cuando él gira para mirarlo, con los malos pixeles, la poca luz y a medio vestir. Ryan quiera abrazarlo, partirle la boca a besos, lamerle los hombros y respirarle el aroma a semen, sudor y lluvia pero se conforma con seguirle susurrando cosas, cosas que hacen que no solo el cuerpo de Tom tiemble, sino también el corazón, las tripas y las fantasías.

Ambos a veces piensas que todo es eso, una fantasía compuesta por momentos robados por el tiempo. Luces incandescentes de luciérnagas en un páramo oscuro. Son solo guías formadas por esfuerzos de lados opuestos que desafían la naturaleza de sus vidas. Ryan suprime aquello como lo hace con todo lo malo, para después retomarlo y volverlo un chiste de su propia existencia, como linterna verde y su traje a base de computadora emuladora. Un fracaso del que saldrá airoso. Tom sin embargo no es nada de eso, está lejos de ser una mala circunstancia porque es tan imperfecto para él que eso lo vuelve la persona perfecta.

—Ryan —. Dice Tom cuándo se ha recuperado un poco, apoyándose en sus codos, presionando su tórax entre sus brazos y con los labios hinchados. Ryan hace un ruidito con la garganta para que sepa que le está escuchando. —Feliz cumpleaños.

Y Tom sonríe como si tuvieran todo el tiempo del mundo, como si jamás se hubiesen separados. Como si no fuera una falta de moral lo que tienen. Sonríe con promesas de un futuro, como en las comedias románticas, con guiones de finales felices y platos donde las escenas que salen mal se pueden repetir, reescribir para que todo tenga un bucle deseado, sin margen de error, y amor destilando por todos los poros del título ridículo de taquilla que se expondrá en premier.

Y Ryan es más idiota por corresponder, por acercarse a la cámara para besarle. Tom suelta una risa floja, de satisfacción mezclada con post orgasmo que le calienta el corazón y le hace creer en cosa imposibles.

Tom se sacude el cabello húmedo, y comienza una plática neutra sobre el nuevo número de Deadpool que se ha conseguido en una tienda de segunda mano, y extiende el escudo que los mantienen en terreno seguro, como compañeros actores, como amigos secretos, como algún tipo de amante que se conoce muy lejos de casa y se queda ahí, a distancia, para no interferir con la vida formada. Ryan le sigue el juego, fingiendo que no acaban de enseñarse la polla y un poco del alma en esa sesión de sexo por internet.

Sus ojos viajan para ver que lleva quince minutos de retrasos, el nudo se le forma mucho antes de interrumpir a Tom sobre Peter desconfiando de Deadpool y su reformación en la historia sobre un mono de la mafia que mata a grandes mercenarios.

Baby boy, cariño —. Comienza. Tom eleva una mano porque le reconoce el tono de despedida mucho antes que diga el adiós.

—Lo sé, es tarde, te entretuve —. Dice como si realmente no importara el conocimiento de Ryan estando junto a Blake. “Ella es tu esposa, lo sé, así que está bien. No es como si pudiese pedir que lo dejases todo por alguien como yo. No cuando tu carrera va en ascenso y James depende tanto de ti, que temo que si dejas a Blake, ella la aleja de ti, Ryan, morirías y yo no quiero que eso pase. Así que lo sé. Todo está bien”. — Que te diviertas en tu fiesta — Le desea a cambio, con una sonrisa que le tira la comisura de los labios pero que no le llaga al brillo de los ojos.

Ryan quiere decir un lo siento pero sabe que solo lastimara más. Así que asiente, moviendo su mano en son de adiós.

Baby boy —. Susurra antes de terminar la llamada —. Regresare. Siempre regresare a ti, no creas que podrás deshacerte tan fácilmente de mí.

Tom abre la boca pero Ryan no le permite ningún tipo de réplica, le sonríe y la pantalla regresa a ser negra, como un hoyo del espacio sideral, tragando todo a su paso y cayendo en silencio. Él rueda sobre la cama, porque hay un peso hundiéndole y al mismo tiempo las mariposas le siguen revoleteando, porque ahora es consciente de algo importante. Blake podrá tenerlo, tocarlo, e incluso amarlo pero Ryan es suyo, más suyo que de nadie más (Tom excluye a James, porque si no perdería en automático contra la reina) pero está bien, se dice, ahora realmente todo está bien.

 

Nota especial de autora: Pues nada mis Sweetums espero que el capítulo les haya gustado tanto como a Ryan y a mí, y este me lo he hecho como un auto regalo, ya que el día de ayer fue mi cumpleaños ( se aceptan besitos y abracitos virtuales con todo gusto. Así como reviews para saber que opinan sobre esta historia, de verdad sus comentarios e ayudan a darle un poquito de forma a este mercenario y al baby boy)

Oh si, y les tengo una pregunta, les gustaría tener un capitulo semanal (este sería más cortito con cositas que fueran saliendo tanto de Tom como de Ryan por diferentes medios) o quieren que el capítulo sea quincenal (Este será más largo como este que es de más de 4K palabras y que agregare todo lo que vaya surgiendo de estos dos).

No olviden que de verdad me importa su opinión, me la pueden dejar en sus comentarios o mandarlas por MP.

Mensaje especial a Angelic y a Erin;  Alguien me h comentado sobre el grupo y como pueden agregarme, así que ya he pedido ayuda sobre eso, muchas gracias de ante mano por todo.

Besos y abrazos YUKI-NII

 

 

 


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