Castiel camino por los pasillos, tardo algunos minutos hasta que encontró el aula, cuando se acerco a la puerta escucho la voz de una mujer -Buenos días, tu debes ser el alumno nuevo, ¿verdad?- el ángel volteo y vio a una mujer algo mayor, -Buenos días - el joven regreso el saludo. - ¡Siempre es bueno ver caras nuevas!,-la mujer lo tomo de hombro - espera un momento aquí por favor- la profesora abrió la puerta y la dejo entreabierta, dejo sus cosas en su escritorio y comenzó a hablar, Castiel se acerco a la puerta para poder escuchar mejor, -Buenos días jóvenes, antes de comenzar la clase, quiero presentar a un nuevo compañero que se incorporara con nosotros, - se acercó a la puerta y la abrió, dejándolo pasar, el ángel pudo sentir las mirada de los jóvenes humanos encima de él, en especial Dean que le regreso otra pequeña sonrisa, la profesora lo puso al lado de ella -el es Castiel Collins y desde ahora sera su compañero,- la profesora fijo su mirada hacia el ángel- puedes tomar asiento en el lugar que tu quieras- la profesora le dio una palmadita en la espalda y siguió -bueno chicos saquen su cuaderno por favor- Castiel vio que había algunos asientos vacíos, uno estaba delante de Dean pero opto por uno que estaba en el fondo, cuando paso a un lado de Dean, sintió que alguien le jalaba de su gabardina, cuando volteó se encontró con Dean, se miraron por un momento, pero Dean desvío la mirada y comenzó a hablar -oye, este lugar siempre esta vacío, si quieres puedes sentarte aquí-
-hmmm...si, gracias- Castiel se sentó y dejo su mochila a un lado de el, -no llevo mas de 30 minutos y ya lo estoy arruinando- pensó el ángel.
Después de un rato la profesora salió y los chicos empezaron a pararse y hablar, Cas estaba concentrado en sus pensamientos pero escucho que el rubio le hablaba.
Castiel se voltio ligeramente para ver al cazador.
-Oye, -Dean se apoyó en la parte trasera del pupitre de Cas- perdón por no presentarme hace rato, soy Dean- extendió su mano en forma de saludo, Cas se quedo en silencio unos segundos y envolvió la mano de Dean con con sus dos manos -Es un gustó conocerte- Dean no supo que decir ante la acción del ángel, y solo se rió -eres algo rarito he- Cas ledeo la cabeza unos segundos después el ángel le soltó, el rubio quería seguir hablando pero la profesora entro al salón y continuó con la clase, había algo diferente en el chico nuevo, algo que le intrigaba, cuando por fin la clase término, Dean pensó en seguir hablando con Castiel pero fue interrumpido por sus compañeros de equipó, Dean trató de buscarlo con la mirada pero Castiel ya se había ido,
Peto poco después Dean se dio cuenta que el nuevo estaba en la mismas clases con él, pero a diferencia de la primera de la primera clase no pudo interactuar nada con él pues en cuánto terminaba la clase Castiel salia lo mas rápido que podía del salón y Dean lo perdía de vista.
Cuando fue hora de almorzar, Castiel fue directo al comedor en busca del arcángel, paso algunos minutos asta que le encontró sentado en una mesa esperándole -¿Y como te fue con el muchacho cassie?- preguntó Gabriel con una sonrisa mientras sacaba un chocolate de su bolsillo.
- Fue diferente a lo que tenia pensado-el moreno se sentó a un lado de su hermano - hable con Dean mas rápido de lo que tenía planeado- .
Gabriel le dio un mordisco a su golosina y continuo -ok, eso si que fue rápido, bueno aun seguimos con el plan o asta que den nuevas órdenes- el rubio
Le dio otro mordisco a su chocolate, Castiel le miraba fijamente, Gabriel se percato de la curiosidad -¿Qué?, ¿estoy más lindo de común?- .
-Tu siempre te vez igual- Castiel respondió seriamente, El arcángel rodó los ojos, a su hermanito le faltaba mucho que aprender.
-¿Por qué comes eso, nosotros no necesitamos comer?-
-Bueno hermanito, ser guapo tiene sus recompensas- Gabriel le dio una palmada y saco otro dulce de su bolsillo -de nada-
Cas probo el dulce y se sorprendió mucho, eran realmente rico.
-ha si, también tememos que hacernos cargo del otro asunto aunque creo que tu puedes hacerlo sólo-
-Yo me encargó entonces- contesto el moreno.
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Después de clases Dean espero a Sam para regresar juntos a casa cómo todos los días,durante su camino de regreso hablaban de cosas de la escuela o de un caso que estuvieran investigando.
-¿Y cómo te fue a ti Dean-
-Pues que te digo Sam, hoy llegó un chico nuevo pero es algo raro ¿sabes?, se llama Castiel, traté de hablarle pero casi no cruzo palabra consigo y en cuanto tocaba la campana para cambio de clase salia disparado y...-
-para empezar desde cuando te da curiosidad alguien que no tenga pechos y use falda- interrumpió el menor.
-Oye yo no hago...bueno algunas veces... ¡Ya callate sam!- ambos comenzaron a reírse.
-cambiando de tema, ¿ya llamó papá, Dean?-
-De eso quería hablante, papá me llamó antes de la última clase, dijo que si todo sale bien, regresaría en dos días-
-Entonces tenemos que hacernos cargo del nido en lebanon-
Después de llegar a su casa hicieron sus cosas con anormalidad asta que oscureció, se prepararon y fueron camino lebanon una ciudad del condado vecino, si todo salia como lo habían planeado se encontrarían con un pequeño nido de vampiros,nada especial, ya habían combatido con nidos mas grandes ellos sólos o eso tenían planeado, cuando llegaron al escondite,un edificio abandonado se encontraron con los cuerpos de los vampiros sin vida, no era el trabajo de oteo cazador pues todos los cuerpos tenían su cabeza.
-¿Que mierda paso aquí?-
-Dean, esto no es normal, todos tienen cabeza, quien o que los mato- El menor tenía miedo pero tenia que aguantaselo, el miedo le nublaba el juicios y eso no estaba bien.
Dean se agachó y volteo uno de los cuerpos - ¿Pero qué?...tiene los ojos quemados, Sam fíjate si todos están igual-
Sam se fijó en los otros cadáveres, todos habían muerto por lo mismo, los hermanos no entendían que había pasado aquí, cuando estaban dispuestos a salir de aquel lugar un vampiro salio de alguno lugar y se lanzó al mayor, tirándolo, también tenia las cuencas de los ojos quemadas.
-Tienen que salir de aquí, tienen que salir de aquí- repetía el vampiro entre susurros-
Sam quería atacar al vampiro pero su hermano se lo nego, quería interrogarlo.
-¿Qué te hizo eso,¿qué le hizo eso a tu nido?-
-Estamos todos perdidos...todos vamos a morir- repetía el vampiro.
-¡Dinos quien hizo esto!- Ahora gritaba Sam, el castaño tenia mucho miedo, todo esto era desconocido para ellos y eso le revolvía el estómago- .
-Tienen que escapar... Tienen que...- y el vampiro finalmente murió, Dean se quito el cuerpo de encima, el rubio no había tenido tanto miedo desde la primera vez que había cazado.
El camino de regreso fue muy silencioso, ninguno de los hermanos quería o mas bien no podían hablar, no salían las palabras pata lo que habían presenciado en aquel lugar.