Sin que suene pícaro, en esta vida hay dos virginidades que perder y una es más íntima que el sexo; la virginidad mental y es muy poco placentero que te la arrebaten.
Aquel momento en que gracias a la calle o últimente más en los tiempos que corren ante una computadora, ves cosas tan atroces que te hacen sentir legítimamente que has perdido la fe en este mundo, para su desgracia; Byun Baekhyun no se dio la oportunidad de conocerla.
Nunca pensó que dentro de los tantos casos policiacos horribles en la t.v, uno fuera la historia de su familia, llamándose así, una barbaridas degenerada, de esas que nos hacen pensar que el infierno en realidad está aquí en la tierra.
Ellos eran una familia de cuatro, el Sr y la Sra. Byun, el pequeño Baekhyun de trece años y una bebé, su hermanita.
A pesar de que la Sra. Byun no era una mala madre, sí era un poco descuidada y como el hambre se junta con las ganas de comer, era de esas personas que tenía la mala costumbre de agarrar más de lo que podía abarcar.
Aquel día, mientras cocinaba, hablaba por teléfono y bañaba a su hija, creía que podía controlar bien los tiempos; así que mientras que ya hay algo que huele feo en el horno, la mujer salió del baño con el teléfono entre el hombro y el oído, dejando a la niña en la bañera, total el agua era bastante llana y no había peligro de que la bebé se saliera.
Pero cuando uno está distraído más si se está en compañía de otro así sea por medio de un teléfono, el tiempo pasa más rápido de lo que uno cree. . . Y la bebé es la única testigo de que su hermano la estaba mirando ansiosamente desde la puerta del baño.
Baekhyun estaba tratando de medir tiempos pero a decir verdad también estaba intentando de atreverse a algo.
Los minutos pasaban y pasaban y no había peligro de que su mamá subiera las escaleras, estaba en la cocina y la oía hablar así que finalmemte dio el salto y no hubo vuelta atrás.
Se arremangó hasta el codo, agarró a su hermanita de la nuca y le hundió la cabeza dentro del agua; la niña chapoteaba, se movía y sin duda estaba chillando, gritando y llorando ahí abajo.
El corazón del pre-adolescente latía violentamente, escuchaba a su madre, la paranoia no le jugaba una mala pasada, no la oía subiendo las escaleras, la cuestión estaba tomando más tiempo del previsto pero finalmente su deseo repugnante y atroz, cristaliza, mata a la niña.
Baekhyun batió el brazo sobre la bañera para sacarse la mayor cantidad de agua posible y se fue corriendo a su cuarto tan exaltado como emocionado, dándose ínfulas de criminal perfecto se secó muy bien el brazo y la mano con ropa al fondo del armario y finalmente tratando de hacerse el desententido retoce en su cama.
Escuchaba a su mamá subiendo las escaleras rato después, lo asutaba tanto como lo excitaba, dio un respingo cuando escuchó a su madre gritar.
Los paramédicos y la Policía no tardaron en llegar, la Sra. Byun estaba empapada en llanto pidiendo, rogando por su bebé, siendo sostenida por un par de policias y vecinos que trataban de controlarla, el Sr. Byun tenía entre sus brazos a la bebé, meciéndose y derramando lágrima tras lágrima.
Baekhyun simplemente se mostraba asustado, siendo consolado por su abuela, nunca había visto a tanta gente en su casa y mucho menos a policías de verdad, sin embargo era algo que sin duda le emocionaba. No había caso que investigar, todo quedó en un incidente en casa al haber resbalado la bebé dentro del agua.
Después de la tormenta inicial, el matrimonio se acabó, Baekhyun se fue a vivir con su mamá y tenía un extraordinaria capacidad de resumir su vida sin sentir remordimiento ni tampoco darle demasiadas vueltas a la barbaridas que hizo, a la pobre señora le tomó dos años pero conoció a otro hombre, se casó y con él. . . Tuvo un baroncito.