Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Gitano por Midori-Hikari1312

[Reviews - 14]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Holaa!!!

Midori está actualizado!! *-*

Hoy se acaba el mundo :V

Pero nah, el capítulo anterior dejaron un comentario, así que lo prometido es deuda :3

 

ADVERTENCIA: ESTE CAPÍTULO CONTIENE ESCENAS SE CONTENIDO SEXUAL :V

Pero no se preocupen, comienza como a mitad el cap, así que, los que no quieran leer lemmon, hay un poco de labia y así XD

Bueh, a leer *Q*

 

¡¡LEER NOTAS FINALES!!

 

PD: Hizo otro dibujo relacionado con este cap c:

Pueden verlo en mi sexy Deviantart uwu

Tengo el mismo Nick, Midori-Hikari1312 por si tiene dudas :3

 

 

 

El caballo recorrió las calles por un gran rato antes de que se detuviera en una clase de casa/choza relativamente grande y en lo más recóndito del pequeño pueblo, podría decirse que casi estaba bajo tierra. Lucca sólo había seguido las indicaciones de Theo, y él los había guiado hasta ahí.

 

– ¿Seguro que aquí no nos encontraran? – preguntó Lucca viendo el lugar extrañado.

 

–Sólo serán un par de horas. Ahora que Benjamín sabe que estás de este “lado del bando”, está más furioso que nunca. Éste es el único lugar donde de verdad tardaría en encontrarnos– aclaró Theo bajándose del caballo y observando a Lucca esperando a que este bajara también– ¿Qué sucede? – pregunto extrañado aun sosteniendo su herida.

 

–Pues…– Lucca apartó la vista y ladeó un poco la cabeza. Bajó del caballo con dificultad y se apoyó luego en el animal para no caer, quien al parecer comprendió la situación y se juntó un poco más a él para que no cayera, además de que uno de los pies de azabache no estaba tocando el suelo– Ocurrió algo…un poco malo– murmuró señalando su pierna alzada, Theo la vio extrañado pues la poca iluminación del lugar no lo dejaba ver muy bien que se diga. Con dificultad y un cara de dolor absoluto Lucca llevó su mano a detrás de su pierna, y sacó de esta de un solo tirón una flecha soltando un quejido y luego suspirando adolorido al tenerla fuera de su cuerpo.

 

– ¡Oh, Mi Dios!– exclamó Theo asustado acercándose de inmediato al seguramente ex-capitán, pasó el brazo con el que se sostenía del caballo por sus hombros ayudándolo a mantenerse de pie y que se afincara ahora en él– ¡¿Por qué no me dijiste nada?! ¡¿Qué acaso estás loco?!– preguntó  completamente angustiado, en comparación con la herida de Lucca, que parecía ser bastante profunda con respecto que toda la punta de la flecha estaba cubierta de sangre, su rasguñó se convirtió en algo totalmente superficial.

 

–Tranquilo Theo, no es para tanto– trató de calmar Lucca mientras el gitano lo ayudaba a entrar a la choza con algo de dificultad, pues de verdad estaba algo débil por el dolor que se expandía por toda su pierna.

 

– ¡Por supuesto que lo es! – Bravó el gitano mirándolo con completa preocupación y angustia en sus ojos– Siéntate aquí– le ayudó con la acción sentado a Lucca en el suelo sobre una alfombra y él corrió a una esquina de la choza. Lucca mantenía su pierna herida alzada y cerró sus ojos para tratar de olvidarse del dolor punzante. De su muslo brotaban lentamente las gotas de sangre que terminaba en la alfombra manchándola sin querer. Lucca observó el lugar, tenía un sinfín de cosas decorativas bastante exóticas, como elefantes tallados a mano, atrapa sueños colgados en las paredes, cuadros hermosos, espejos por todos lados y muchos muebles con abundantes cojines, además de que el lugar era perfectamente iluminados por lámparas de aceite, y algunas de ellas con cristales de colores logrando así un efecto más mágico. Todo era hermoso y lleno de colores, se notaba completamente que un gitano vivía allí, en especial uno tan maravilloso como Theo– Demonios…– murmuró Theo al llegar de nuevo frente al azabache con un par de cosas en las manos– ¿Duele mucho? – preguntó casi al punto de tener un infarto por la cantidad de sangre que había salido en sólo unos minutos, que aunque la verdad no era mucha, Theo era un “exagerado” y de verdad si parecía ser bastante doloroso.

 

–Nah, no demasiado– mintió el ojiverde, la verdad dolía como el mismo infierno y pensó que casi se desmayaría cuando Theo tocó ligeramente la zona con un pañuelo.

 

–Mentiroso– rió nervioso el castaño– Si quieres, puedes ponerte cómodo, quiero decir, esa armadura parece bastante estorbosa– opinó el gitano tomando un pañuelo y dejándolo en un recipiente con agua mientras el mismo se quitaba el chaleco color rojo que llevaba, al igual que la tela color salmón de su cintura.

 

–Jamás te mentiría– bromeó el ex-capitán soltando la capa roja que llevaba puesta y sacándose con un poco de dificultad la armadura, quedando un una blusa manga larga color negro además de un pantalón un poco holgado del mismo color.

Se quedó completamente quieto dejando que Theo curara la herida, de vez en cuando se quejaba un poco por el dolor pero esto no fue suficiente como para hacer que el gitano se detuviera. La limpió con agua abundante hasta que la hemorragia paró y como puedo la vendó sobre la ropa del chico con una cinta de color blanco.

Theo guardó las cosas que utilizó, claro, después de haber curado también la herida de su brazo. Luego botó el agua que se había teñido de color rojo claro, y sobándose la nuca se sentó frente a Lucca de nuevo con una expresión cansado.

 

–Estoy cansado…– comentó el gitano frente al Lucca.

 

–No eres el único– siguió el mayor– Con todo este tema de la “persecución”, ni siquiera me dio tiempo de comer algo desde esta mañana…Diablos, muero de hambre~ – se quejó Lucca sosteniéndose el estómago con ambas manos. Se escuchó una dulce risa que provenía del castaño, Lucca literalmente se enamoró de esa risa tan dulce y tímida a la vez, pero no dijo nada, sólo le sonrió con cariño.

 

–Pues, si quieres puedo ir por algo ahora mismo y…– trató de levantarse, pero fue interrumpido.

 

–No te preocupes, estoy bien– se apresuró a decir el mayor– No quiero que te vayas ahora– dijo Lucca mirándolo fijamente haciendo que Theo se sonrojara un poco por sus palabras y mirara a otro lado.

 

–B-Bien…– finalizó el gitano quedándose justo en su sitio sin poder mirar aún a Lucca al rostro.

 

Se quedaron en un silencio algo incomodo por unos segundos, ambos pensando sólo en el beso de hace unas horas. Anhelaban volver a sentirse tan cerca el uno del otro y compartir nuevamente sus respiraciones. Quería volver a hacerlo esta vez más tranquilos, a solas, sin miedos ni limitaciones. Sólo ellos dos, y la luna de testigo.

 

–Hey…– llamó Lucca cortando el silencio y viendo a otro lado, Theo lo miró curioso– Estás… muy lejos–  dijo en una clase de reclamo. Lucca seguía sin verlo, evidentemente avergonzado, y el castaño rió un poco antes de contestar.

 

–Soy justo frente a ti– informó divertido el de ojos dorados.

 

–Aún así…Es muy lejos– volvió a quejarse el azabache. Extendió una de sus manos hacia el gitano y este negó un poco con la cabeza con una pequeña sonrisa en sus labios, tomó la mano del mayor y este lo guió hasta que estuvo entre sus piernas de forma cuidadosa para no lastimarse y poder abrazarlo.

Ambos suspiraron al tenerse  de nuevo tan cerca y luego rieron por coincidir en esa pequeña acción. Nadie dijo nada de nuevo por un par de segundos, sin embargo este silencio no fue incomodo, fue más bien reconfortante.

Theo tenía su cabeza recostada en el pecho de Lucca, escuchando su lenta respiración y sus tranquilos latidos del corazón. Por su parte, Lucca acariciaba tranquilamente su cabello castaño, enredando de vez en cuando sus dedos en su lacio cabello y disfrutando del delicioso olor que éste emanaba. Al escuchar un suspiro largo de parte del gitano, Lucca detuvo sus caricias y lo miró curioso.

 

– ¿Estás bien?– preguntó casi en su oído en un ligero susurró para no alterar la admosfera que se ha ia creado.

 

–Excelente…–  susurró con una sonrisa en el rostro, luego alzó su vista y vio al mayor– ¿Te duele mucho? – preguntó por segunda vez el castaño aún con expresión preocupada y Lucca sonrió un poco.

 

–Estoy perfectamente Theo– aclaró volviendo a acariciar su cabello– He tenido dolores peores que esto…Ahora mismo no recuerdo ninguno pero ya se me ocurrirá algo– este último comentario le sacó una ligera carcajada al gitano, Lucca rió sólo un poco junto con él y luego lo tomó del rostro con ambas manos, Theo se sonrojó un poco pero no se apartó, sólo cerró sus ojos lentamente dejando que el mayor se acercará por segunda vez a sus labios. De nuevo un beso tímido y sin apuro, sus labios se movían lentamente unos sobre otros. Las manos de Theo fueron a parar a los hombros de Lucca de nuevo y las manos del mayor a la pequeña cintura del castaño. Ambos jadearon al separarse, pero de inmediato volvieron a unir sus labios esta vez con un poco de desespero. Con lentitud Lucca delineó los labios de Theo con su lengua pidiendo de forma muda que abriera sus labios, este hizo lo pedido apenado por esta acción y se estremeció cuando su lengua se enredó con la ajena.

Eventualmente Lucca coló sus manos dentro de camisón del gitano y subió por su espalda, Theo templó un poco y este le causó gracia al azabache.

 

–Espera… Lucca– llamó nervioso el castaño. Lo observó sin apartarse mucho de él dispuesto a escucharlo– R-Realmente vamos a…– no podía terminar de decir la oración, estaba muy avergonzado con sólo decirla frente al azabache.

 

–Si no quieres, no lo haremos– aclaró con tranquilidad viéndolo con cariño al mismo tiempo que sacaba sus manos de dentro de la ropa del pequeño.

 

– ¡N-No es que no quiera! – se apresuró a decir moviendo sus manos al mismo tiempo que negaba con la cabeza– E-Es sólo que…eh... Estoy nervioso– aclaró viendo a otro lado.

 

–No te preocupes Theo, no haré nada que tu no quieras ¿ok?– le dio un ligero beso en la frente y el castaño rió un poco.

 

–Ok– le devolvió una sonrisa.

Ambos continuaron con el beso, ahora más tranquilos y más necesitados. Lucca volvió a colar sus manos dentro de la ropa del gitano y logró quitársela eventualmente. Se quedó observando detenidamente su piel bronceada con anhelo, vio la herida en el brazo del chico que era cubierta por la venda que antes había colocado y con sumo cuidado la beso, Theo se sorprendió por eso, pero lejos estaba de que era acción de su parte le molestara.

 

Se dio un par de besos en el cuello de forma ligera, aún tratando de calmar los nervios del gitano, pues se notaba perfectamente como sus manos temblaban mientras se abrazaba a su cuello.

 

Mientras Lucca se entretenía besando el cuello del chico de forma ligera, las manos de Theo bajaron desde los hombros hasta su pecho y se quedaron ahí unos cuantos segundos, suspiró de forma lenta antes de descender aún más y tomar la orilla del camisón de Lucca y comenzar a jalarla hacia arriba. El mayor se dejó hacer y ayudó al pequeño a quitarle la prenda. Un sonrojo mayor apareció en las mejillas de Theo cuando tuvo el pecho desnudo de Lucca frente a él, el azabache rió por tal inocente expresión.

 

–Pensaba que eras más… “Atrevido”– opinó el mayor sosteniendo las caderas de Theo y haciendo pequeños círculos con sus dedos– Es decir, por la forma en la que me mirabas al bailar y esas cosas...–

 

– ¡Eso es diferente!– se apresuró a decir Theo de nuevo aún más rojo– A-Al bailar me siento tranquilo y confiado, p-pero ahora yo...Estoy nervioso y…y...– apartó la mirada un poco frustrado.

 

–Hey– llamó Lucca tomándolo del rostro para que lo viera de nuevo– Nunca dije que no me gustabas de esta forma...– aclaró antes de volver a besarlo, y Theo se dejó hacer de nuevo mientras con sus dedos delineaba cada músculo que lograba llegar a su alcance. Lucca continuó luego besando su cuello, no quería dejar algunas marcas por ahora, pues no sabía si al gitano le gustaría. Besó sus pectorales con tranquilidad y Theo saltó un poco al tener los labios cálidos de Lucca sobre esa sensible zona.

 

Ambos continuaron con las caricias por un rato, y el primero en profundizarlas aún más, de nuevo fue Lucca. Sus manos se paseaban con seguridad por las piernas largas y delgadas del gitano, incluyendo su trasero, logrando que Theo se ponga aún más nervioso y colorado al ser la primera vez en ser tocado de esa forma.

 

Lucca metió sus manos con cuidado dentro del pantalón de Theo para no ponerlo más nervioso, lo fue bajando lentamente mientras continuaba besando su cuello disfrutando el escuchar los pequeños jadeos de su parte. Algo tembloroso Theo ayudó a que Lucca terminara por quitarle por completo su última prenda, quedó arrodillado frente a él con la cara súper roja además de ver hacia el suelo mientras Lucca lo miraba fascinado.

 

–Ven aquí...– pidió el mayor tomando a Theo de las piernas e indicando que se sentara sobre él. Theo se separó de él con preocupación.

 

–Pero… ¿C-Cómo se supone que haremos esto? ¿Y si te lastimo? N-No creo que esto sea una buena idea. Estás herido. – una mirada de completa preocupación se demostraba en sus ojos, y esto le gustó a Lucca, que sin importar que tanto lo esté disfrutando o cuando asustado esté, él sólo quería su bienestar.

 

–En este momento, lo que menos me preocupa es mi pierna ¿me entiendes?– aclaró el azabache y de un movimiento ya tenía al gitano sobre el muy pegado a su cuerpo, algo alejado de su herida. Al sentir algo duro debajo de su cuerpo Theo soltó un ligero gemido sorprendido, y se removió aún más cuando Lucca por simple forma de molestarlo lo apretó más contra su erección.

 

– ¡N-No!–  reclamó el menor tratando de alejarlo sacándole una risa al azabache.

 

–Relájate ¿sí? Estás muy tenso...– se susurró al oído aún pegados, continuó con un pequeño vaivén entre sus cuerpo haciendo que Theo gima un poco. Desprevenido el castaño sintió una caricia en su zona más sensible y saltó al mismo tiempo que soltaba un gemido bastante adorable. Lucca comenzó a mover su mano de forma neutral sobre el miembro del chico, quién trataba de soportar los pequeños escalofríos de su cuerpo recostando su frente en el hombro del mayor y jadeando débilmente por las caricias. Lucca pudo sentir como el miembro del chico iba creciendo en su propia mano, además de que se volvía cada vez más duro y cálido, una sensación algo inquietante pero a la vez le confortaba saber que lo estaba disfrutando. Comenzó a besar con cuello del castaño de nuevo, ya consciente de que era un lugar sensible para él.

 

–Lucca...– jadeó el chico viéndolo suplicante, el azabache solo tragó saliva por lo erótico que se había vuelto la cara del chico sin saberlo si quiera, y la forma tan necesitaba en la que murmuró su nombre– Acuéstate...– susurró sobre sus labios con sus ojos ligeramente entrecerrados por el placer. El mayor hizo lo pedido y Theo se acomodó mejor sobre su abdomen. Una vista realmente interesante para Lucca. Theo paseó su vista un par de veces por la choza y estirándose un poco sacó de debajo de una mesa un pequeño frasco con un líquido de color rosa translúcido dentro del, y vertió el líquido dentro hasta que sus dedos estuvieron llenos de esa extraña sustancia.

 

– ¿Qué es eso?– preguntó curioso el ex capitán viendo el fluido escurrirse entre los dedos de Theo.

 

–Aceite de rosas, nunca lo había usado para esto pero, supongo se servirá de algo– Con duda llevó sus dedos hasta su entrada inclinándose un poco hacia adelante, introdujo el primer dedo dentro de él mismo y se quejó ligeramente mientras lo movía de forma lenta.

 

– ¿Cómo sabes qué hacer? ¿Acoso has...Hecho esto con otros hombres?– Lucca observaba como la cara de chico se deforman a un poco por el dolor, pero nada de eso detenía lo que estaba haciendo.

 

–N-No realmente...– aclaró el menor cerrando sus ojos y concentrándose en lo que hacía– Solo pensé...Que debía hacerlo y y-ya– sus ojos veían fijamente a Lucca, tenía un dedo extra en su entrada y había comenzado a sentirse un poco bien en el poco tiempo que llevaba haciéndolo. Jadeaba débilmente mientras movía sus dedos y Lucca no quiso sólo sentarse a observar– ¿Q-Qué haces?– preguntó cuándo sintió que el mayor de removiste un poco bajo del. Lucca llevó una de sus manos al mismo lugar que Theo estaba estimulando– Si haces eso no podré… ¡ahh…!– un ligero escalofrío hizo que Theo terminara de caer sobre el cuerpo de Lucca, éste lo sostuvo con una de sus manos para que no se moviera mientras ahora era él quien tenía sus dedos dentro del chico. Theo se removió un poco e inconscientemente alzó su retaguardia para tener más contacto con los dedos del mayor– No…– jadeó pasito tratando de mirar hacia atrás.

 

–Se siente mejor cuando alguien más lo hace ¿verdad? – murmuró en su oído. Theo prefirió no decir nada más y dejarse hacer. Lucca era muy bueno, se sentía mejor que cuando él mismo lo hacía y no podía evitar que ligeros gemidos se escaparan de sus labios– ¿Crees que ya estás listo? – preguntó luego de un rato.

 

–Yo…ah… No lo sé. Tu dímelo– murmuró el gitano entreabriendo sus ojos acristalados y viendo al mayor.

 

–No quiero sonar como un apresurado, pero enserio ya no lo aguanto– rió después de decir esas palabras y Theo le siguió después, el tampoco quería esperar más.

 

Se acomodó de nuevo sobre Lucca y este lo sostuvo de las caderas impaciente, con lentitud Theo bajó un poco el pantalón que Lucca llevaba, sólo lo suficiente para no mover la cinta que aún estaba sobre su pierna. Se asustó un poco al ver el miembro del mayor alzarse sin pena alguna fuera de la prenda, con temor se posicionó sobre él y con lentitud fue bajando. Lucca sostenía las caderas de chico ayudándolo a bajar de forma lenta, Theo se sostenía con fuerza de los fuertes brazos del azabache y apretaba sus labios lo más fuerte que podía para evitar soltar quejidos demasiado fuertes.

 

–Theo… ¿Estás bien? ¿Duele mucho? – preguntó preocupado el azabache tratando de buscar la cara del castaño.

 

–Ah…– apenas salió de la boca del chico alzando un poco su rostro.

 

– ¿Quieres que me detenga? – su voz salió casi como un murmullo.

 

–N-No, estoy bien– se acomodó mejor aun sosteniéndose de los brazos del mayor y lo miró– Tranquilo, sólo no estoy acostumbrado…– indicó el gitano con una ligera sonrisa. Lucca apretó los labios y se enderezó de nuevo quedando así pegado al gitano, comenzó a besarlo y acariciar su cuerpo con dulzura y así calmar su dolor, Theo de igual forma recibía los besos y acariciaba con sus manos la espalda del mayor sintiendo como su cuerpo se relajaba con el pasar de los minutos.

 

Un vaivén lento comenzó entre ambos. Lucca sostenía la cintura de Theo mientras guiaba los movimientos, Theo jadeaba pasito antes la extraña sensación mientras continuaba aferrándose a los hombros del azabache. Enredaba sus dedos en el cabello del hombre y pegaba su frente a la de él cerrando sus ojos ayudando a llevar el movimiento.

 

–Ahh…– un ligero y tímido gemido escapó eventualmente de los labios del gitano, y a este le siguieron más y más. Las manos de Lucca apretaron un poco más fuerte la cintura del gitano mientras escondía su rostro en el hueco del cuello y hombro de Theo, comenzó succionar y morder su piel ya un poco perdido en el placer y los constante y dulces gemidos del castaño, dejando algunas marcas de las cuales era posible arrepentirse luego. Theo sólo continuaba perdido en todo lo que estaba sucediendo dejándose hacer por el azabache.

 

El calor había aumentado considerablemente y ambos tenían una ligera capa de sudor en sus cuerpos, una sustancia de la cual el azabache se dio cuenta le gustaba beber del cuerpo del gitano, pasar su lengua por cara rincón que lograba alcanzar degustando un sabor único de esa piel bronceada lo había alcanzar un nuevo estado de excitación. Sus respiraciones estaban agitadas y se escuchaba el gemir de ambos jóvenes amantes, ambos olvidándose del mundo, completamente concentrados en el otro, cómo se sentían sus pieles juntas, el calor que eso provocaba, sus respiraciones mezcladas y sus besos húmedos, todo había cobrado una magia que para ambos era completamente indescriptible, no querían pensar, no querían palabras, solo querían ser uno con el otro.

 

Un gemido aún más agudo y un pequeño apretón de parte del gitano le hizo entender a Lucca que había tocada ese algo que silenciosamente había buscada dentro de él desde hace unos minutos. Sonrió triunfante continuando con las embestidas justo en ese lugar que ya no olvidaría y recibiendo gustoso el fuerte abrazo de su gitano, quien en el desesperado intento por controlar su cuerpo se aferró con fuerza del cuerpo del mayor.

 

–L-Lucca…– llamó pasito el castaño, este sólo gruñó un poco por la excitación pegando aún más su rostro al pecho del chico, permaneciendo en su capricho de permanecer más cerca el uno del otro.

 

La voz de Theo se deformaba a causa de los constantes gemidos que se escapaban de su garganta, aunque quisiera evitarlo él realmente no podía parar de gemir. A Lucca le encantaba escucharlo gemir, era una faceta nueva del gitano que apenas notaba quería conocer a fondo, era más aguda que su voz normal y balbuceaba cosas completamente perdido en el placer, para él era demasiado hermoso, demasiado adorable, demasiado irresistible para detenerse a pensar en cada problema que pudieran tener después de eso.

 

–N-No…Lucca– jadeo el castaño.

 

– ¿Quieres que me detenga? – murmuró el mayor sin detener sus fuertes embestidas.

 

–N-No lo sé. Yo… Si sigues tocando ahí creo que yo… Y-Ya no podré soportarlo…– decía con dificultad el pobre gitano inerte en el placer– Por favor...– murmuró avergonzado.

 

–Ese es el punto, gitano…– susurró con una ligera sonrisa por lo sincero que Theo se había vuelto.

Sin embargo, Theo se encontraba en un extraño limbo de placer, no entendía qué pasaba con su cuerpo, vibraba con cada caricia que recibía del azabache y no podía callar su voz suplicante que sólo pedía más ¿Por qué se sentía tan bien si no tenia eso que toda mujer ya tiene? ¿Por qué su voz salía tan extraña? ¿Por qué no quería detenerse?

 

– N-No puedo…– susurró con un ligero hilo de saliva cayendo de la comisura de sus labios.

 

–Demonios, ¿como puedes ser tan lindo…?– dijo más para el mismo que para el gitano con una sonrisa un tanto boba y enamoradisa, Theo, aún perdido en el placer pudo escuchar sus palabras, ruborizándose aún más por el cumplido, más en esa situación que estaba teniendo.

 

Sin previo aviso, se vio empujado hacia el suelo de la forma más sutil que la extasiada y perdida mente de Lucca le permitió, este se volvió a colocar entre sus piernas y sin pensar mucho volvió a arremeter contra el cuerpo del pequeño, quien tembló por completo por lo brusco del movimiento, que lejos estaba de molestarle. Se aferró con desespero de la ancha espalda del mayor, dejándose hacer enredando sus piernas a la cintura de Lucca. Los sensuales y fuertes movimientos del mayor lo volvían loco, y el escuchar su agitada respiración y sus roncos gemidos contra su oído lo hacían perder la cabeza, pero no tanto como Lucca deseaba.

 

–L-Lucca…Tu p-pierna…– dijo entre gemidos el gitano preocupado por la forma tan brusca en el que el azabache lo estaba embistiendo. Lucca alzó su vista para ver su cara, era una mezcla de preocupación y excitación, y la forma en la que su cabello estaba alborotado y que todo se haya echado hacia arriba cuando lo empujó, se alguna forma lo hacía ver más tierno.

–Concéntrate…– regañó volviendo a tomar con una mano el miembro de Theo, que desde hacía ya unos minutos lo sentía húmedo mientras se frotaba sin querer sobre su  propio abdomen, el hacer esto hizo que un gemido agudo realmente lindo escapara de sus labios de forma inesperada.

 

–P-Pero…– al sentir de nuevo una embestidas sobre ese punto que antes no sabía que existía, las palabras fueron sustituidas por más gemidos, rasguñó sin darse cuenta la espalda del mayor, y sin poder evitarlo hundió sus dientes en el hombro por un impulso involuntario, Lucca se quejó ligeramente, pero no hizo nada para apartarlo, es más, lo pegó más a él y trató de moverse más rápido que antes aún masturbandolo con rapidez.

 

Una corriente eléctrica recorrió todo el cuerpo de ambos, Theo arqueó su espalda de forma involuntaria y Lucca de aferró con fuerza de su cintura sintiendo que solo faltaban unos segundos para finalizar con todos eso. La corriente recorrió toda su columna vertebral y finalizó en su vientre bajo de ambos dando paso al orgasmo.

 

Se quedaron completamente quietos en esa posición, aferrados al otro y con la respiración agitada, temblando por los espasmos que aún tenían sus cuerpos.

Se había acabado, habían hecho algo de lo que ninguno de los dos estaba arrepentido, se habían acostado con un hombre, se habían hecho uno con una persona de su mismo sexo, pero, a todas estas ¿A quien le importa? Ellos decidieron eso, decidieron entregarse mutuamente y unirse como amantes a la luz de las velas. Ellos eran adultos y decían su propio destino, así eso los llevará a la muerte, irían juntos, porque así lo decidieron, pero primero, alguien tenía que delatarlos, y ese alguien no estaba presente para molestar esa espléndida atmósfera que ambos habían creado.

 

Ambos tenían una sonrisa en sus rostros mientras continuaban regulando su respiración. Lucca en una euforia controlado comenzó a besar la clavícula de Theo causándole unas cosquillas al chico, quien entre risas trataba de apartarlo de forma juguetona, Lucca subió lentamente por su cuello de igual forma riendo un poco hasta que sus labios volvieron a unirse y sólo se abrazaron aún sonriendo. Lucca se apartó un poco de Theo para poder abandonar su cuerpo y poder abrazaron de una forma más cómoda, ambos tirados en el suelo y Theo recostado sobre el viéndolo de forma dulce, eventualmente el gitano había arrastrado una manta que estaba sobre un mueble y la uso para cubrirlos. Se quedaron callado compartiendo un silencio maravilloso al mismo tiempo que se acariciaban mutuamente.

 

–Me gusto...– confesó Theo con las mejillas rojas y una sonrisa, Lucca lo vió divertido y acarició un poco su cabello castaño.

 

–Es bueno escuchar eso– murmuró cerrando sus ojos y dejando su cabeza recostada en el suelo– Lamento si te lastime, enserio no fue mi intención. Jamás lo haría a propósito– arrugó un poco la cara al sentirse culpable, él quería que todo fuera perfecto en todo momento, pero hubo algunos altibajos para los que no estaba preparado.

 

–No te disculpes, Luc, después de todo creo que es normal, es decir, nunca había hecho esto, mi cuerpo no estaba...Acostumbrado a esta clase de cosas– explicó el chico con tranquilidad para no hacer sentir mal al azabache.

 

–Aun así lo siento...– abrazó un poco más a su cuerpo al gitano y éste se dejó hacer feliz por el gesto– Y por lo de las marcas también...–

 

–¿Dejaste marcas– preguntó alzándose un poco e intentando ver su propio cuello, apenas y pudo ver unas que estaban cerca de su pecho. Eso sería un problema.

 

–Al principio tuve cuidado de no dejarlas porque sabía que serían problemáticas, pero supongo que con el “calor del momento” lo hice sin querer...– acarició con sus dedos una de ellas con cierta culpa en su mirada, otra vez.

 

–Qué se le va a hacer– se encogió un poco de hombros– Tampoco es como si yo no te hubiera dejado alguna– de igual forma también acarició con delicadeza la marca de mordida que el chico tenía en el hombro sabiendo que ya tenía la espada rasguñads por el, y extrañamente también una en el cuello, no recordaba haberla hecho, era más como un moretón que como una mordida, seguro se le pasó con toda la “agitación” y la hizo sin querer–Wim va a matarnos– Theo río un poco por el comentario, y Lucca le siguió también.

 

–Deberíamos vestirnos ya, hay que ir a donde está Win y sacarlo de ahí y luego hay que enfrentar a Benjamín para que te deje en paz y además...– Theo colocó un dedo en sus labios callando sus palabras.

 

–Hablas mucho, Tesoro– dijo con cierta burla– Uno, todo eso que me estás diciendo, es más sencillo decirlo, que hacerlo; dos, sabemos que Wim está bien con Damian, así que estamos más tranquilos con eso; tres, ni en tus sueños más locos te dejaré ir hasta Benjamín con la pierna así, apenas puedes caminar–

 

–Y ni en tus sueños más locos yo te dejaré ir solo con Benjamín, puedo tener una pierna herida pero no estoy invalido, Theo– aclaró el azabache.

 

–Lucca, por favor, con tu pierna así es muy probable que pueda pasarte algo malo, no quiero perderte ahora...– tomó con sus manos la cara del azabache y lo miró con completa angustia, Lucca colocó sus manos sobre las de Theo y lo miró conmovido.

 

–Y no lo harás, Theo. Estaré para ti no importa qué, así que no trates de convencerme de que me quede aquí de brazos cruzados mientras tú te enfermas a un loco...– apartó con ligereza una pequeño mechón de cabello que se le había ido a la cara y luego besó su frente antes de pegarla con la suya.

 

–Que terco eres...– lamentó en broma el gitano con una ligera sonrisa.

 

–Te aseguro que no soy el único...– beso de nuevo su frente– Ahora andando, es hora de Benjamín sepa lo que significa la palabra rendirse, sea por las buenas, o por las malas...–

.

.

.

.

Notas finales:

Ggg uwu

¿Qué tal?

¿Les gustó? QuQ

Díganme que si :'v

Perdon si actualice un poquito tarde xD Aquí ya son las 10:
40 pm :V pero es que tuve muchas cosas que hacer en el día ._. 

100% real, no feilk (?)

En fin, como saben, este fic está basado en la peli de Disney que antes ya mensioné, y ya deben saber que está llevando a sus capítulos culminantes :'v no estoy segura de cuántos serán, pero tengan por seguro que ya no queda mucho :'v

Ah, por cierto, no es que quiera retrasar más el hecho de que ya se va a acabar el fic (:'v) pero quería saber si estaban de acuerdo con que el siguiente cap sea de "Conociendo a los personajes"

Creo que debí hacer esto antes, pero es que apenas se me va ocurriendo XD

Algo así tipo, "Theo: Tiene tantos años, le gustan tantas cosas y nació tal día, no le gusta esto, esto y esto y quiere tal cosa"

O estupideces así y tal xD

¿Qué les parece?

Solo se los menciono, si no les interesa solo seguiré con los capítulos nos normales, solo se me vino a la cabeza que Theo y Lucca podrían no solo quedarse en este fic y ya, se acabó, sino que los podemos hacer personajes vivientes, es decir, que haya más fic donde ellos dos siguen siendo protagonistas  y como ya los conocen no sería tan mierda hacerlo xD

No sé si me estoy explicando bien xD

Espero en serio sus comentarios, supongo que dos o tres opiniones distintas me ayudaran a decidir :’3

Y no se pongan a pensar algo tipo "Nah, seguro ya le comentaron, vale verga" pues para un escrito nunca está de más ;) 

Recuerden, sin comentario, no hya cap :D

Nos vemos >wo

Besos <3


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).