|SUNGYEOL|
Sentía las arcadas venir a mi nuevamente, apoye mis manos sobre la pared y deje salir todo lo que había comido ese día, dándome asco el aroma de mi propio vómito.
Ni una vez más, jamás volvería a beber otra vez, mi cuerpo no era nada tolerante al alcohol y después de cuatro botellas de soju, había terminado así, pero... Lo necesitaba, necesitaba de alguna manera olvidarme del dolor que estaba sintiendo, olvidarme de aquel dolor que me consumía y me arrastraba cada vez más hacía la oscuridad, no me gustaba la oscuridad, no me gustaba estar solo.
Pero no tenía de otra, hacía un mes exactamente, que despertaba solo y cubierto de un sudor frío, aún con la pequeña lamparita en mi habitación que dejaba encendida por la noche, aún así las pesadillas venían a mi.
Aún soñaba con aquella noche. La noche donde todo terminó.
| HACE UN MES |
Debía darme prisa si no quería que Woohyun me sorprendiera, el seguía en la ducha y no tardaría mucho en salir.
El siempre había sido un poco reservado, pero era su cumpleaños, quería que todos sus amigos vinieran y si bien teníamos unos pocos amigos en común, faltaban sus amigos del trabajo, solo anotaria sus números y ya, no era un novio chismoso, confiaba en Woohyun plenamente, lo amaba con todo mi ser, Woohyun en poco tiempo se convirtió en mi todo.
Tome su celular y justo iba a abrir sus contactos cuando ese mensaje llego, presione “abrir” sin querer y en el instante en que aquellas palabras quedaron grabadas en mi mente, mi mundo se vino abajo.
“Woohyun-ah, ¡felicidades por tu compromiso!, más te vale hacer feliz a Yeeun o te las verás conmigo”
El celular resbalo de mis manos y cayó al piso justo en el momento en que Woohyun salía del baño y mis ojos se llenaba de lágrimas, Woohyun se puso blanco y se acerco lentamente a mi, haciéndome retroceder cada que Woohyun daba un paso hacia mi.
ㅡSungyeol... Yo... Perdón, iba a decírtelo, esto tú y yo, ¡No llores! Por favor no llores.
ㅡ¿Cuánto tiempo? ¿Hace cuanto tiempo que tu y esa...
ㅡ¡No la llames así! Su nombre es Yeeun, no es esa, lo siento Sungyeol, pero ella esta esperando un bebé, no importa cuanto lo piense o como lo vea, tu jamás podrás darme un bebè y yo... Yo quiero un hijo.
ㅡ¡Vete a la mierda Woohyun! Es la excusa mas patética que he escuchado en mi puta vida.
ㅡNo hables así, no va contigo bebé.
ㅡ¿Entonces que va conmigo? Esto se acabo Woohyun, ¿Me escuchaste? ¡Terminamos!
Ni siquiera intento detenerme, es más, podría jurar que lo vi aliviado mientras me veía empacar mis cosas, mientras intentaba mantenrme fuerte frente a el, pero por dentro, estaba completamente destrozado.
Cuatro años, le había regalado cuatro años de mi vida a ese jodido idiota hijo de puta, cuatro años en los que mi amor por el, solo iba en aumento, no me importaba que nunca me llevara a las cenas de su empresa, que a veces me soltara la mano cuando nos encontrabamos con alguno de sus amigos, porque me lo compensaba nada mas entrar a la hermosa casa que me había comprado, apenas se cerraba la puerta detrás de nosotros, me hacia el amor hasta que se cansaba, nada importaba porque el me hacia sentir especial.
| PRESENTE |
Y ahora me encontraba aquí, emborrachandome hasta casi perder la conciencia, pues justo hoy, justo ahora Nam Woohyun y Yeeun se estarían casando o mejor dicho, ya estarían casados y ahora deben estar celebrando.
Tome un taxi antes de olvidar mi dirección, cuando llegue a aquel pequeño cuarto cutre, apenas una habitación, un baño y la sala y la cocina en el mismo lugar, me deje caer en el sofá.
Mi vida era un desatre, los últimos años había dependido de Woohyun, había terminado una carrera en administración pero nunca busqué trabajo pues Woohyun no me lo permitió, ahora no podia conseguir una porque no tenía experiencia.
El grifo del fregadero había comenzado a gotear nuevamente aquel sonido se me hacía insoportable, ya me era difícil dormir y así me era imposible.
Miré el pequeño reloj de pared, las 3 am, a esta hora seguramente ellos estarían viajando a Bali, no es que los estuviera espiando y me importara en donde iban a pasar su luna de miel, no... Simplemente teníamos amigos en común y a uno de ellos se le había salido decirlo.
Tal vez era tiempo de llamar a mi mamá pero... No podía volver a la casa así como así, no después de haberle contado lo magnífica que era mi vida al lado de Woohyun, aún ni siquiera me había atrevido a decirle que ya no eramos pareja, que vivía en un cuarto donde el agua se filtraba cuando llovia y tenía que atrancar la puerta con algo por miedo a que alguien se metiera por la noche.
Woohyun me había ofrecido un hermoso apartamento cerca de Seul, pero mi orgullo y la poca dignidad que me quedaba me hicieron rechazarlo, el insistio mucho aún ahora me seguía llamando pidiéndome que me mudara, que no fuera terco, pero no podía, porque simplemente no quería verme débil ante el.
| 4 meses después |
Hoy he recibido, rectifico, visto, la noticia que estuve evitando por tanto tiempo, ni siquiera sé porque aun lo sigo por instagram, tal vez aún tenía la esperanza de que publicara que todo había sido una broma.
La bebé ya nació, Woohyun se ve jodidamente feliz, sabía que lo vería y por eso puso aquello.
“El mejor regalo que un hombre puede tener, una bendición, mi princesa, mi hija.”
Aún sentía que me faltaba el aire y las lágrimas seguían cayendo incontrolables, me dolía la cabeza y me era difícil respirar, debía dejarlo ya o terminaría destruyendome.
| 2 Semanas después |
Hoy Woohyun me ha llamado nuevamente, sentí mi corazón acelerarse y me odie por eso, odie sentir esperanza, odie sentir todo lo que sentía en aquel momento, justo antes de responder, me saludo y me pregunto como estaba, si estaba comiendo bien y si ya había conseguido trabajo, mentí, todas mis respuesta fueron mentira, dije que estaba bien, le dije qua comía a mis horas, a veces ni siquiera tenia dinero para una sopa instantánea, también le dije que trabajaba en una pequeña empresa, cuando en realidad era mesero en un pequeño restaurante, en pocas palabras, mi vida era una mierda.
Woohyun tuvo que colgar cuando se escuchó un llanto a lo lejos, se disculpó y nuevamente me dejo con un vacío en el pecho, dolido, y lo peor de todo... Extrañandole como un idiota.
| 1 semana después |
Mi celular volvía a sonar, toda la semana había estado así, habían estado llamándome de un número desconocido, pero cuando respondía, colgaban inmediatamente, ya me estaba cansando de eso y comenzaba a asustarme.
Eran las 8 pm y apenas había salido de trabajar, me estaba cambiando cuando mi celular comenzó a sonar nuevamente, el mismo número, bien... Ya era suficiente, respondi para gritar una sarta de groserías, pero me quede paralizado al escuchar la voz del otro lado del teléfono.
ㅡ¿Sungyeol? Yo... Lo siento, soy Yeeun, perdón por estar llamandote y no responder, verás no sabía como ibas a tomarlo...
ㅡ¿Yeeun?
ㅡSi eres Sungyeol, ¿Verdad?
ㅡSí...
ㅡSé que esto sonará extraño pero... ¿Podemos vernos? Hay algo de lo que quiero hablar contigo.
ㅡYo... No creo que eso sea buena idea.
ㅡPor favor, no te quitare mucho tiempo, es importante, por favor.
ㅡEs...Está bien.
ㅡGracias, ¿Puedes ahora? Ya te estoy enviando la dirección.
ㅡYo... Llego en unos minutos.
No sabía porque había aceptado, no sabía que hacía ahí, estaba a punto de regresar, cuando sentí mi celular vibrar, era un mensaje.
“Por favor entra, de verdad es importante”
A diferencia de lo que creí, aquella cafetería estaba algo escondida, no era tan elegante, entre aun sintiendo completamente nervioso, era la primera vez que la vería en persona, respire profundamente, y la vi agitando su mano para que me sentara frente a ella.
Era muy bonita, de facciones tiernas y bajita, no llevaba a la bebé consigo y aquello lo agradecí profundamente, me senté delante de ella y ella me examinó con sus profundo ojos color miel.
ㅡHasta que por fin te conozco, el famosisimo Lee Sungyeol, seré breve no te preocupes.
Podia notar cierto desprecio en sus palabras, tal vez solo lo estaba imaginando.
ㅡEsto es para ti.
Sacó un sobre amarillo y un folder del mismo color, ademas de una pluma.
ㅡ¿Qué es esto?
ㅡAbrelos.
Hice lo que me pidió, abrí primero el sobre, mis ojos se abrieron como platos al ver lo que había dentro. Un cheque, por 50 mil dólares, lo guarde y miré a Yeeun fijamentes, ella sonreía satisfecha mientras cruzaba los brazos sobre su pecho.
ㅡRevisa lo otro.
Ni siquiera quería ver, tenía una idea de que se trataba, pero terminé haciéndolo, eran las escrituras del apartamento, solo faltaba mi firma, comenzaba a cabrearme, ¿De qué mierda iba todo eso?
ㅡ¿Sabes? Ya estoy cansada de que Woohyun siga preocupándose por ti, que sus amigos le cuenten lo mal que la estás pasando, simplemente toma esto y desaparece de nuestras vidas, tómalo como una oportunidad, para que comiences de cero, ambos sabemos que solo fuiste la puta de Woohyun y...
Le había arrojado el vaso de agua que me habían servido, ella estaba en shock y su rostro iba poniéndose cada vez más rojo del coraje, todos nos miraban, me puse de pie, no sin antes romper en su cara todos aquellos papeles, se los lancé también, me puse de pie para salir de ahí.
ㅡ¡Yo no soy ninguna puta!
Tenía que salir de ahí rápido, no importaba que, yo seguía siendo hombre y acababa de gritarle abuna mujer, camine rápidamente hacía la entrada, el metro no quedaba muy lejos de ahí.
Entre, iba bajando las escaleras cuando escuché unos pasos detrás de mi, tacones, giré y la vi, hecha una furia, toda mojada y con el maquillaje corrido, me detuve en el primer descanso, por suerte no había más personas alrededor, solo dos estudiantes que pasaron de largo, caminó hasta donde me encontraba, lo vi venir y ni así me quité.
Para ser pequeña, su bofetada me dolió bastante, me ardía la mejilla, pensé que después de eso se iría, pero no fue así.
Comenzó a gritar cosas que yo no entendía, comenzó a acercarse a mi agitando su bolso de marca en el aire.
Sentía que veía todo en cámara lenta, un golpe y otro vinieron, luego araños en el rostro, solo pude retroceder, mi madre me había educado bastante bien, jamás le pondría una mano encima a una mujer.
Pero olvidé algo, algo sumamente importante... estabamos en las escaleras, mi pie tocó la orilla y sentí como perdía el equilibrio, me sostuve de lo que pude, la correa de su bolso, creí que estaba a salvo, hasta que la vi sonreír.
Lo soltó y no solo eso, lo tiró con tal fuerza, que sentí el bolso chocar contra mi pecho.
Todo fue rápido, podía escuchar el sonido de mis huesos al romperse, el dolor intenso, gritos, luego algo duro chocar contra mi cabeza... oscuridad.
Un fuerte pitido no me dejaba oír, pero alguien hablaba, se escuchaba muy lejos, solo escuchaba partes de la conversación.
ㅡTiene varias costillas rotas, una pierna y un brazo también, un fuerte trauma en la cabeza, logramos detener la hemorragia doctor Kim.
ㅡ¿Qué le paso?
ㅡAl parecer resbaló por las escaleras...
No... no fue así, me empujaron, ella me empujo, pero ninguna palabra salió de mi boca, una luz blanca me cegó, luego lo vi... era un hermoso ángel.
ㅡQuédate conmigo, vamos... quédate conmigo Sungyeol.
Más oscuridad.