~~~~~~~~~Capitulo 3 ~~~~~~~~~~~
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Al despertar nunca se imaginó que en el mundo de posibilidades, este fuera el resultado de una noche cardíaca
Lo tenía ahí adorablemente sonrojado, listo para ser devorado por él, claro que lo deseaba, lo deseaba más que a nada, sin embargo tenía que tener algo de moral escondida por ahí
Sabía que solo sería cuestión de tiempo para que el recordara que era su peor enemigo, que lo odiaba a muerte, que era un mounstro ricachón.
Así que sin dejar de mirarlo, le beso la frente y le susurro un "Voy a tomar una ducha", para después ir al baño y luego de cerrar la puerta, deslizarse tras ella hasta sentarse en el suelo, tocar su pecho y sentir como su corazón quería salir de su cuerpo
-Carajo es hermoso, es muy lindo ese perro idiota
Sonrió amargo mientras entraba en la fría ducha que lo relajaría, oh eso esperaba
Del otro lado del cuarto, Joey miro la habitación detenidamente, era bastante sencilla para ser de un ricachón, si bien era más grande que todo su departamento, no había nada particularmente ostentoso
Demasiados libros en un stand, un closet sencillo, un escritorio, la mesa de noche con una lámpara, y el reloj despertador.
Decidió incorporarse pero fallo, la espalda se contrajo y un dolor agudo lo regreso a la cama, fue ahí cuando se concentró en sí mismo, vaya que el cuerpo le dolía, así que sin poder hacer más empezó a hablar con el mismo
------Pv Joey------
Wow, creo que me saque la lotería, así que salgo con un ricachón...vaya eso si no me lo esperaba, es guapo no lo niego, pero hay muchas cosas que están confusas.
¿Porque me siento tan fuera de lugar? Me da la sensación de que es la primera vez que me habla así; ¿Que debería hacer si me trata de esa manera? Dahhh Joey, son novios, es tu novio, eso debería de ser lo más normal del mundo.
Cuando salga de ducharse no te quedes así como tonto, intenta sonreír, di algo y deja de ser tan ridículo, no es para tanto, pareces una niña de Secundaría sonrojándote; además verlo así ya debe ser tan común que el que te vea tan penoso, le debe recordar cuando empezamos a salir juntos
Ya tienes tema de conversación, vamos idiota, ve por él, quizás eso te recuerde por qué están saliendo
------- Fin del PV de Joey-----
Seto salió del baño, vestido, miro a Joey, le dedico una mirada amable que pareciera natural
-¿Cómo te sientes Joey?
-Para ser sincero, me duele todo y ni siquiera puedo levantarme
Se acercó preocupado a la cama, poniéndose a la orilla y le pregunto
-¿Te duele demasiado?
-Solo cuando me muevo jeje
-Imagino que quieres darte una ducha
-Si eso suena bien, pero es complicado cuando no puedes ponerte de pie por tus medios
-Descuida, te ayudare-Alejo las sabanas, y se inclino
-Joey ¿Podrías poner tus brazos por mi cuello?
-De acuerdo
Lo cargo de la cama de forma matrimonial, nuevamente ambos se sonrojaron, Joey se aferró al cuello de Seto pegándose a su pecho, él tenía un olor tan agradable, inmediatamente se relajó, su nariz identificaba ese aroma familiar
Fueron al baño, Seto dejo a Joey en un banquito que tenía cerca de la bañera, preparo el agua a una temperatura tibia, y se volvió a Joey
-Necesito que me ayudes a quitarte los vendajes
-Sí, me parece bien
Con mucho cuidado Seto fue retirando las vendas, las heridas se veían mejor que ayer, por fortuna no estaban tan profundas, aunque si noto a su perdición dorada demasiado delgado para su gusto, aunque no menos hermoso.
Al percibir la mirada de Seto extraña, Joey le pregunto
-¿Ocurre algo malo?
-¿Eh? No, solo que me tranquiliza que estas mucho mejor que ayer
-Hay tantas cosas que debería de recordar, me asusta preguntar pero ¿Tú sabes quién me dejo así?
-No tengo idea, y de saberlo, yo... ya tendría a mil metros bajo tierra a maldit@ bastard@ -Desvió la mirada un poco tratando de contener su ira latente-
Viendo su alteración, preocupación y autentico enojo, Joey se sintió querido, sin evitarlo un calorcito broto de su pecho y le dio un beso en la mejilla al castaño, quien dio un mini salto sonrojándose soltando un ronroneo suave
-No lo dudo, quizás tenga la cabeza hecha un desastre, pero algo me dice que no es la primera vez que te veo hablando en serio *Le sonrió alegre*
Seto se quedó un instante sin palabras, oh si tan solo se quedara así para siempre, ¿Cuantas veces había añorado una sonrisa así para él? Lo disfrutaría, disfrutaría y le demostraría que solo con él podría ser realmente feliz, le devolvió la sonrisa, tomo su mano que aún tenía heridas y la beso tan dulce que pensó que moriría ahí
-Claro que es un asunto muy serio, descuida, encontraremos a los responsables de todo esto, te lo prometo *tomo ambas manos, entrelazándolas con las suyas* Y cuando yo prometo algo, lo cumplo ¿Sí?
-Sí...
-Seto, me llamo Seto, cachorro despistado
-Disculpa Seto, aun es difícil asimilar todo esto
-No te preocupes, pregunta lo que quieras y yo te ayudare a recordar Joey, pero primero te ayudare a ducharte
Lo cargo hasta la bañera, Seto miro con atención cada cicatriz de la espalda de su cachorro, algunas les recordaban a las que Gozaguro le dejo, estaban muy profundas, no parecían recientes sin embargo no le comento nada, luego del baño lo ayudo nuevamente con las vendes y la ropa
-Joey ¿Puedes caminar ahora?
-Sí, pero se mi apoyo que aún me cuesta mantener el equilibrio
-Claro
Salieron del cuarto, Mokuba ya había terminado su desayuno cuando llegaron al comedor, pero se quedó acompañando a su hermano y amigo, mirando atónito como se llamaban con su nombre de pila, su hermano con una sonrisa inmensa y Joey a gusto de estar con el
-Seto-Dijo Joey
-¿Qué pasa?
-¿Solo tomaras café?
-Si ¿Porque?
-Porque eso no es un desayuno real
-Joey, esto es para mí un desayuno real
-Peque ¿No le vas a decir algo a tu hermano?
-Joey, he tratado años de decirle lo mismo, pero me ignora vilmente
-¿Cómo puedes ignorarlo así? Seto, es algo que no puede seguir, ten *le acerco su plato de desayuno americano*
-Mira come la mitad tú, y luego la mitad yo, no te pido que lo termines todo, pero de menos come algo
-Pero Joey...yo no
-Come ¿Cómo pretendes ayudarme si tu no estas sano?
Seto miro el plato, se tocó la frente, tomo el cubierto; ante la vista atónita de Mokuba y la servidumbre el comió la mitad, para después pasarle el plato a Joey
-¿Ves? No es tan difícil peque, solo necesita motivación
Nadie comento nada después de eso, al terminar, Joey agradeció la comida y se levantaron
-Hermano mayor
-Si Moki ¿Que sucede?
-Recuerda que te dije que hoy tengo que ir con mis amigos a Kaibalandia
-Lo se Moki, y te dije que sí, pero que terminaras tu tarea primero y practicaras un rato el piano
- Claro que sí hermano, Voy a adelantarme a hacer mi tarea en la biblioteca, ¡Nos vemos Joey! Y gracias por hacer entrar en razón a Seto
-No hay de que peque
Al irse Moki, ambos fueron a sentarse en la sala principal, no tardo mucho el rubio a preguntarle al castaño unas cuantas cosas
-Seto...oye ¿Cuándo nos conocimos? *Lo miro con ojos tiernos llenos de curiosidad*
-El primer día de clases de la preparatoria *Sonrío nostálgico*
-Oh ya veo, oye y antes de salir como pareja ¿éramos amigos? *Ladeo la cabeza a un lado como un cachorro*
-Ahhhh... veras Joey no exactamente *Se puso ligeramente nervioso*
-¿A qué te refieres Seto? *Se acercó más a él y lo confronto más curioso que nunca*
-Veras no éramos amigos... *Su rostro se oscureció un poco*
-¿Porque? *Se sentía aún más perdido*
-Porqué hemos tenido nuestros momentos de orgullo, ambos tenemos un carácter difícil, somos muy cabezas duras y queremos tener siempre la razón *Se revolvió el cabello un poco para que luego cruzara los brazos, suspirando con una mirada algo triste y resentida*
-Seto, no logro entenderlo, tu hasta ahora has sido amable, cortés, más que un novio, un amigo leal *Se levantó y se puso frente a el tocándole los hombros y tratando de verlo a los ojos*
-Bueno, aprendimos a ceder en el orgullo cachorro *Levanto la vista y le sonrió con todo el cariño del mundo *
-¿Siempre me has dicho así Seto? *Se sentó a su lado sin dejar de hacer contacto visual*
-Es que pareces uno, ¿Te molesta que te llame así? *Le sonrió pegando su frente con la suya*
-No... no me molesta, siento que me haces sentir especial, es que no sé qué decir jejeje *Se sonrojo por la cercanía, a detalle definitivamente él era un hombre atractivo en demasía*
-Solo déjate llevar *No paraba de sonreírle a su ángel rubio*
-No puedo creer que no fuéramos amigos, si tu pareces ser una buena persona *Le devolvía las sonrisas más brillantes*
-Nadie es tan bueno Joey, yo menos *Sus ojos nuevamente se apagaron e hizo un gesto muy melancólico*
Sintió unas mano acariciar sus mejillas lentamente, y las coloco sobre las suyas sosteniéndolas firme
-Seto, puede que no recuerde mucho, pero tú no eres malo, no lo eres
Esas suaves caricias que solo en sueños de medianoche se presentaban, se materializaban frente a él, haciendo que se volviera loco de amor
-Joey yo no soy tan bueno, puedo ser muy frio con las personas, incluso un desgraciado infeliz...
-Shhhh...Antes de que continúes ¿Puedo decirte a que te pareces tú?
-Haber dime
-A un gatito
-¿Porque un gato? ¿Porque no un dragón?
-Pareces un gatito, uno muy lindo, que se ve rudo, pero en realidad no es así
-¿Cómo puedes decir esas cosas Joey?
-Decidido eres un gatito, a mí me dices cachorro; me parece algo justo
-¿Y porque no el dragón?
-Porque los dragones están extintos, vivían en cuevas feas, siempre tenían secuestrada a una princesa, y son los malos regularmente
-Cachorro ya te dije que no soy tan bueno
-Seto...*le sonrió nuevamente, cerro sus ojos, se fue acercando a sus labios, beso su frente, sus parpados, su nariz y abrió ligeramente sus ojos*
-Sabes aun no recuerdo nada que me lleve a ti, pero presiento que la pista esta justo aquí
Antes de pronunciar nada, Joey beso a Seto en los labios, muy tierno, disfrutando esa electricidad única al roce, recorriendo cada rincón de sus labios.
El hombre frio, sin corazón, ni sentimientos se derretía ante su astro sol sintiendo que sus piernas temblaban, su ser se estremecía, nunca en todo este tiempo llego a sentirse más vivo
-Joey...
-Seto *Lo abrazo con todas las fuerzas de su corazón y le susurro* Tú no eres malo gatito
-Creo que sí, pero si tú crees que no, entonces quizás yo no soy tan malo cachorro
Justo ahí, el timbre de la puerta sonó rompiendo el momento y el doctor llego