Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Fanatismo ostentoso- Yuri!! On ice por algodon Sibyl

[Reviews - 16]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

— ¡Ah! — Víctor se desparramó en el puf de que tenía en su cuarto. — Tres horas estudiando, estoy agotado.

—Oh vamos Vic, lo hiciste bien al igual que Yurio — Señaló al aludido, que tenía un libro en el rostro.

—Jódete.— Otabek miraba la escena con su típica cara de póker, mientras tomaba de su té.

—Vamos Yurio ¿No fue mejor estudiar todos juntos? El tiempo pasa más rápido— comentó Víctor con una sonrisa.

—No — Respondió cortante y le sacó la lengua.

—Supongo que eso significa gracias — dijo Yuuri levantándose de su asiento. — Yo me tengo que ir — Otabek se levantó con él y salió del cuarto.

— ¡Oh, vamos Yuri! quédate un rato más — dijo Víctor con ojos de cachorro, cosa que hizo que el otro se sonrojara fuertemente.

—Sí quédate, además no tenemos nada qué hacer en la mañana —dijo Yurio, de forma sarcástica yendo a la cocina.

—Ignora eso, realmente me gusta tu compañía. — El pobre chico japonés estaba que soltaba humo por las orejas cuando escuchó eso. — Además mañana es sábado, podrías quedarte aquí y ayudarme a hacer mi próximo vídeo. — animó entusiasmado.

— ¿E-en serio? — A Katsuki le brillaron los ojos.

—Sip, sabes que mi canal es de temas  variados. Pensaba hacer un video mostrando cómo es la comida rápida por estos rumbos.

—Oh, sería genial. Aunque sabrás que estoy totalmente familiarizado con ella — confesó apenado.

—Entonces podrás guiarme. — Katsuki asintió.

En el estudio, Otabek limpiaba la batería. Había pasado poco, pero se sentía enamorado de aquél instrumento, no sabía que el destino le permitiría volver a tocarlo.

—Hablé con Víctor el otro día — comentó Yurio rompiendo su burbuja, mientras le ofrecía otro vaso de té negro. — Él no tiene problema en que te quedes con ella. — El otro lo miró sorprendido.

— ¿Hablas en serio? — Sostuvo el vaso, no podía creer lo que escuchaba.

—Bueno, él no la usa y el dinero no nos  falta, así que está bien. Si quieres podríamos ayudarte a llevarla a tu casa, si aquellos dejan de estar de tórtolos — comentó señalando a Victor el cual hacía que Yuri se pusiera nervioso con tan sólo unas palabras.

—N-no es necesario Yurio — Sonrió agradecido. — Puedo pasar por ella mañana, tengo un amigo que tiene una camioneta, así que está bien. — Yuri se acercó al estudio,  viendo todo con fascinación.

—Wow, es  genial. Tienen muchas cosas — miró a Otabek — ¿Así que tocas la batería?

—Sólo algunas veces — Yurio lo miró con recelo. — ¿También tocas algún instrumento?

—Yuri compone canciones, supongo que también sabe tocar algún instrumento — dijo Victor,entrando al estudio.

— ¿Ah sí? ¡Pues cuéntanos sobre tus dotes musicales, Yuri! — Comentó Yurio,cruzándose de brazos. En verdad que ese cerdo le desagradaba.

Katsuki notó el burlesco tono de voz del más joven y frunció el ceño, ese muchacho malcriado le estaba colmando la paciencia. Los comentarios hacia su persona se habían vuelto arrogantes y pesados conforme pasaban los días, pero no todo era malo claro está, su relación con Víctor también se fortalecía mucho. Si a cambio de conocerlo mejor tenía que soportar a ese odioso chiquillo lo haría.

—Sé tocar el ukelele, guitarra, bajo, piano, teclado y la batería ¿Alguna otra cosa que quieras saber, Yurio? — Le respondió con sorna, levantando una ceja con cierta superioridad que hizo que el otro frunciera el ceño.

— ¡Increíble Yuri! — Victor aplaudió.

— ¿Qué hay de ti, Otabek? ¿Tocas algún otro instrumento? — Replicó Yurio, desafiante.

—Bueno, también toco la guitarra y el bajo, pero me gustan más las percusiones y los instrumentos de viento. Sobre todo la trompeta.

—Oigan, ya que están aquí ¿Por qué no tocan algo? — Animó Víctor, le agradaba saber que después de la pelea, Otabek y Yuri se llevaban mucho mejor. Incluso, Yurio era menos huraño desde que Otabek se volvió su tutor.

—Yo no tengo problemas — dijo Otabek mirando al otro, quien tembló ante la propuesta.

—E-este… Yo no sé cantar ¿Tú, sí?  — Río nervioso.

— ¡Oh  vamos, Yuri! por mí ¿Sí? — Víctor volvió a hacer su cara de cachorro, sabía que no se resistía a eso. Aun así, bajó la mirada apenado. — Apuesto a que cantas muy bonito.

— ¡T-tambiénOtabek! Seguro cantas mejor — Río nervioso.

—Lo sientoYuri, pero no sé cantar. Sólo podría hacerte segunda voz.

Yuri se sentía entre la espada y la pared.Por un lado, realmente quería cantarle a Víctor, pero temía a este le causara cierta incomodidad. Además,  desde aquél día, ya no había vuelto a cantar frente a nadie.Así que le daba bastante miedo.

—Yuri, por favor no te pongas nervioso — Levantó su rostro mirando a Altin, se notaba el sentimiento de Katsuki a leguas. — Mira, tengo una técnica para hacerte perder el miedo escénico.

— ¿En serio? — Lo miró esperanzado.

—Yo tampoco podía hablar en público. Mi madre lo sabía y gracias a ella pude superarlo poco a poco, pero necesitas mucha imaginación — Miró a Víctor — ¿Tienes un trapo?

—  ¡Claro que sí! — sonrió con emoción y rápidamente le llevó una fina bufanda azul, con la que Otabek le tapó los ojos, luego de quitarle los lentes.

—Bien gordito, imagina que estás cantando para una persona. Conforme vayas avanzando, vas a imaginar a más y más personas hasta llegar a una multitud, en algún lugar grande. Un estadio, un teatro ¡Deja volar tu imaginación! ¿Entiendes? — El otro asintió. — Si me tachas de loco, te pateo.

—Bien entonces— Suspiró — una persona. — De repente recordó a su padre, él había sido el primero que lo descubrió cantar, luego su madre, ahora apareció su hermana Mari. Todos estaban en la posada de su familia.

— ¿Lo tienes?

—S-sí — Sonrió con un poco de más confianza, de alguna manera aquello lo ponía nostálgico.

— Ahora canta, cerdo — Dijo Yuriomientras que Víctor lo callaba.

—Ahora, ve imaginando poco a poco a más y más personas ¿No te gustaría que muchas personas conocieran tu talento? ¿Poder expresar lo que sientes por medio de la música? — Otabek parecía bastante emocionado. — ¡Haz que sean miles y miles de personas  las que viajen desde muy lejos, solo para verte!

Yuri se quedó mudo. De repente, en su cabeza aparecían muchas personas en un estadio, más de las que hubiera podido imaginar. Todas ellas coreando una de sus canciones y gritando a todo pulmón su nombre, mientras saltaban emocionados. El olor de Víctor impregnado en aquella bufanda, le hizo recordar la primera vez que lo miró. Buscaba algo con qué entretenerse en youtube y su rostro de ángel apareció en una miniatura, nunca creyó que ese hombre de entonces cabellos largos, le cambiaría su vida por completo. De repente él estaba ahí, en medio de toda la multitud, viéndolo con ternura y una sonrisa llena de amor. Le extendió su brazo, mientras la gente se emocionaba con la escena donde ambos yacían en medio del escenario y Yuri le cantaba una de las tantas canciones que le había dedicado con su fiel ukelele, viendo sus ojos del color del cielo brillar.

— ¡Yuri! — Altin lo sacó de su ensoñación, retiró la bufanda de sus ojos y pudo notar que estaba húmeda. — ¿Te encuentras bien?

—Sí — Se limpió las lágrimas que comenzaron a salir de repente. — E-eso, ¡Fue asombroso! —Exclamó feliz. Víctor sonrió enternecido, de alguna manera sentía su corazón acelerarse ante aquella imagen — Siento que ahora podría cantar lo que sea frente a ustedes, pero antes — Corrió y salió hacia su departamento.

—Vaya, sí que se animó. — Comentó Yurio — Pero ¿Cómo supiste que Yuri sabía cantar? — Le preguntó a Víctor, con una ceja alzada.

— ¿Sabías que Yuri sabe cantar? — Nikiforov los miró con una sonrisa.

—Cuando nos pusimos a limpiar el salón de música, tuve que dejarlo solo…

***

Víctor salió a la bodega del conserje para tomar algunos trapos y otros materiales con los que limpiaría los violines, se tardó un rato debido a que el cuarto estaba totalmente oscuro y la luz no servía. Por suerte pudo encontrar lo que buscaba y regresar a su tarea.

Iba a medio camino cuando escuchó la voz de alguien en el salón, le pareció raro así que se acercó lentamente y miró a Yuri limpiar las ventanas mientras cantaba.

Shall I stay?

Would it be a sin?

If I can't help falling in love with you

Like a river flows surely to the sea

Darling so it goes

Esa Hermosa voz, Yuri no solamente componía sino que además cantaba, debió suponerlo. Le hubiera gustado escuchar un poco más pero por desgracia uno de las botellas con líquido resbaló y Katsuki se giró nervioso, como si tuviera miedo que lo escucharan.

***

En ese momento, el aludido entró al cuarto con su ukelele y una gran sonrisa.

—Ustedes me escucharán cantar después de mucho tiempo — Anunció nervioso.

—Oh, qué honor — Dijo Yurio con tono burlesco.

—Yurio. — Regañó Nikiforov, a lo que este sólo se giró a otro lado. — Entonces ¡Vamos a escuchar!

Katsuki sonrió y se paró frente al estudio, se vendó los ojos y tomó su ukelele. El consejo de Otabek estaba funcionando. Tomó aire y emitió algunos acordes.

 

Wise men say

Only fools rush in

But I can't help falling in love with you

Shall I stay?

Would it be a sin?

If I can't help falling in love with you…

 

Todos lo miraban con atención. Ese chico era una verdadera caja de sorpresas. Víctor, en especial,se sentía embelesado por aquella voz. Nunca pensó volver a escucharla. Lo miró sin poder apartar sus ojos de él, perdiéndose entre los versos.

 

…Like a river flows surely to the sea

Darling so it goes

Some things are meant to be

Take my hand, take my whole life too

For I can't help falling in love with you…

 

Yurio y Otabek estaban sorprendidos.Yurio no creyó que alguien como el cerdo,podía transmitir tanto con tan solo cantar algunos versos. Por su parte, Otabek sólo escuchaba sin decir nada.

—Interesante, tampoco pensé que Yuri tuviera un talento innegable para la música. — En eso una idea cruzó como un rayo por su mente. — Aguarda… Tal vez el grupo que tuve en la preparatoria puede revivir, con el talento de Yuri podremos despegar — Sonrió. Tal vez podía convencer a Katsuki de formar una banda.

 

Like a river flows surely to the sea

Darling so it goes

Some things are meant to be

Take my hand, take my whole life too

For I can't help falling in love with you

For I can't help falling in love with you.

 

Los presentes se quedaron mudos por un momento, hasta que Víctor fue capaz de aplaudir y levantarse emocionado.

— ¡Bravo! — Unas lágrimas casi escapan de sus ojos. — Nunca creí que una canción de Elvis se oyera igual de romántica que la original. — Yuri se sonrojó aún sin quitarse la prenda de los ojos. Yurio sonrió, al parecer ese cerdito se estaba ganando el cariño más que amistoso de Víctor, quien en esos momentos lo abrazaba cariñosamente, mientras que Otabek tomaba fotos debido al ocio.

 

— ¡Vaya! Miren el tamaño de esta hamburguesa — La mostró a la cámara — ¡Es enorme! Mi amigo Yuri, dice que es normal en Estados Unidos ¿Verdad? — Pichit miraba el vídeo que Víctor había grabado junto con Yuri. Se sentía sumamente feliz de ver a su querido amigo con la persona que quería, nunca pensó que un chico tan tímido se acercara a alguien tan popular como Nikiforov.

Debido a la universidad, el trabajo y ahora mudarse de casa con Leo. Sus conversaciones con Katsuki, habían disminuido considerablemente desde hacía ya tres semanas. Aunque se alegraba por él, los últimos vídeos que Víctor había subido tenían compañía a su gordito amigo, quien se veía sumamente feliz. Incluso algunos sitios en internet y canales sobre salseo, habían comenzado a rumorear acerca de una posible relación entre ambos debido a que aquél simpático joven,aparecía en los últimos que había subido, ya fuera en el fondo del estudio donde Nikiforov grababa o a veces haciendo actividades con él. Obviamente,  Pichit se moría por preguntar acerca de ello.

—Pichit ¿Qué haces? — Preguntó Leo,mientras salía de la ducha secándose el cabello.

—Veo el vídeo que subió Víctor hace tiempo, fue el primero donde salió Yuri.

—Ah sí, donde muestra cómo es la comida aquí — Se inclinó a ver en la computadora de Pichit el vídeo. — Debería hacer uno de la comida “mexicana” en Estados Unidos, eso es como una patada en la entrepierna. — Acto seguido quitó al chico de su lugar.

— ¿Qué haces? — Habló Chulanont curioso.

—Le voy a comentar algo, me siento algo traicionado ya que nunca quiso salir en mis videos.

—Bueno. No salía su cara, pero es cierto, ¡Reclámale!

Víctor checaba los comentarios sobre el vídeo, cuando vio una notificación. Recargó la página y pudo notar que era de Leo de La Iglesia, se sorprendió ya que no había hablado mucho con él, solamente habían cruzado palabras un par de veces en las reuniones de youtubers a las que había asistido.

LeoDeLaIglesia:DP

Me robaste al gordito… ¡La decepción! ¡La traición hermano!

Un momento ¿Acaso ese músico de pacotilla conocía a Yuri? ¿Por qué le escribía eso? ¿Y por qué llamaba ahora músico de pacotilla a Leo,siendo que no lo conocía bien? Nada de eso tenía sentido, sentía un extraño malestar en el estómago, digno de una indigestión. Como si aquello le causara enojo.

— ¡¡¡Ahh!!! — Gritó colocándose las manos en su rostro y miró al techo pensando en Yuri, no había pensado en otra cosa que no fuera aquél chico de rosadas mejillas. — No he podido dejar de pensar en él desde que cantó esa canción, no puede ser que de la noche a la mañana comience a gustarme — Se desparramó en el sofá y recordó cuando Yuri se quitó la venda de los ojos,  lo miró de una forma tan dulce que no pudo apartar su vista de él.

…Toma mi mano. Toma mi vida entera, también…

Es lo que dijo en voz baja, cuando cruzaron miradas.

 

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).