Luego de pasar el resto de la noche despierto pensando en el moreno. A muy temprana hora antes de que saliera el sol, la puerta de su dormitorio fue abierta.
-Buenos días joven Naruto ¿Esta listo para comenzar su día?- Una religiosa entro sonriente.
-Que ¿Tan temprano?-
-Si. Por favor colóquese su uniforme y pase al comedor a desayunar- La religiosa se retiró.
Se miraba al espejo su nuevo uniforme no le agradaba, este consistían en una camisa de mangas largas, un pantalón de vestir negro, un chaleco negro y una corbata dorada. Tan pronto termino de ajustar su corbata, se colocó la túnica negra y finalmente la bufanda sin ningún nudo en especial.
Recorrió los pasillos, podía mirar a una gran cantidad de chicos de su edad. Todos portando su uniforme y cargando libros, todos parecía muy serios y concentrados en su estudio. Luego de ubicar su comedor, desayuno el sol comenzaba a salir, escucho como su primera clase comenzaba.
La tarde legaba y aún tenía dos clases más, aprovecho el receso para sentarse en una banca de un pequeño jardín. Todo era muy quieto.
-Este lugar es aburrido. Yo debería de estar paseando en algún lugar con Kiba justo ahora-Recordó los bonitos momentos al lado del moreno una enorme y nostálgica sonrisa salió de él.
-Ahora eso es un recuerdo- La sonrisa se esfumo. Miraba como chicos que ni siquiera se dirigían la palabra entre ellos, pasaban de un punto a otro.
-Todos aquí son unos aburridos. Este lugar le agradaría a Sai-
Luego de que su última clase término a eso de las ocho de la noche, se fue a su habitación, tenía mucho trabajo, para ser el primer día ya tenía bastante tare pero no quería hacer nada de eso.
-Tengo que hacer algo Shikamaru. Tienes que ayudarme, por favor – Kiba estaba histérico casi suplicaba de rodillas la ayuda de su amigo.
-No seas tan problemático. No hay mucho que se puede hacer ahora- Ladeo su cabeza al ver a su amigo en ese estado.
-¿Y si voy a visitarlo?- La sonrisa histérica de Kiba, asustaba al Nara.
-¿Crees que te dejaran entrar?-
-No pierdo nada intentando-
-No logras nada, ni siquiera podrás llegar a las puertas del internado-
-Es verdad. Tú conoces el lugar. Según me dijiste es un lugar para genio y niños ricos-
-Si, es por eso que solo fui a la visita de guía. Y rechace la beca. Son un montón de fenómenos-
-Ya se me infiltrare-
-Los guardias te dispararan-
-Ayúdame maldición- Kiba tomo del cuello a Shikamaru. Estaba desesperado, ya tenía más de una semana que el rubio se fue.
-Suéltame. Escúchame, ya te lo dije tendrás que esperar. Tengo un plan, pero tendrás que poner de tu lado-Aparto las manos del moreno de su cuello.
-Perdóname. Es solo que lo extraño- Se derrumbó sobre el suelo.
-Te entiendo, ya verás. Te prometo que te llevare hasta Naruto. Es un fastidio, pero a trabajar- Shikamaru, saco un libro de cálculo de un estante.
-¿Qué?- Kiba estaba confundido, como un libro ¿Lo llevaría a Naruto?.
Sin acostumbrase a aquel lugar el tiempo pasaba y pasaba. Ya iba para dos meses ene se lugar. Y no había sabido nada del moreno. Con cada día se deprimía más y más. Sus padres lo visitaban pero solo para regañarlo por las quejas que les deban de él.
Cerro su libro de literatura, y aunque estaba prohibido salir de la habitación de noche. Quería dar un paseo por el jardín. No le importaba si lo sorprendían.
-Kiba TE AMO- Dijo en un ahogado grito. Se tiro sobre el césped, a llorar.
-¿Qué hace un chico tan lindo como tu llorando? Vamos levántate- Sintió como alguien lo tomaba del brazo y lo incorporaba.
-¿Quién eres tú?-Miraba esos peculiares ojos color perla.
-No me sorprende que no hayas notado a tu compañero de clases. Siempre estas pensativo. Te he observado- Termino de incorporar al rubio.
-¿Y bien?- Aquel chico tenía unos ojos color perla, una piel blanca y un cabello negro que le llegaba hasta la cintura, la verdad era ¿Lindo? Pensó Naruto.
-Mi nombre es Neji. Neji Hyuga. Tú eres Naruto. Debo decir que es un placer. Si me permites me gustaría frecuentar contigo- Neji parecía ser muy refinado.
-Hola Neji. Ya sabes quién soy. Gracias por la ayuda- Un pequeño aire de ánimo le regreso, pues aunque no quería le daba una checada al Hyuga.
-Ven sentémonos. ¿Puedo saber por qué llorabas?- Ya intuía el por qué pero quería averiguar más.
-Lo extraño-
-¿A Kiba? No sé quién sea. Disculpadme si estuche de más, pero cuando llegue pronunciabas el nombre del mencionado-
-Sí, él es el motivo. Es mi, él es mi…-No supo cómo formular la oración.
-¿Tu pareja? ¿Tu novio?-
-Algo así, creo- Sola la idea de pensar en Kiba como su novio hizo que un fuerte y marcado rubor llenara la cara del chico.
-Ya veo. Que suerte tiene Kiba, bien por ustedes- Neji bajo su vista.
-Pero ahora estamos separados. Hace más de dos meses que nos e nada el- Nuevas lagrimas amenazaban con salir de los ojos azules.
-Tranquilo Naruto. Pronto todo se solucionara y esto será una fea pesadilla- Neji abrazo a Naruto. Quien por estar desconsolado correspondió el abrazo.
Siguieron charlando un buen rato, y aunque Neji no era una persona muy alegre, trataba de esforzarse por alegrar al rubio.
-Muchas Gracias Neji. Por ayudarme a sentir mejor. En verdad no puedo creer que estés en el mismo salón que yo. Nunca te había mirado-
-Eso imagine que ni me habías notado. Pero yo sí, recuerdo el primer día que te mire. Pensé que chico tan lindo, tiene unos ojos muy bonitos- Neji fingía recordar.
-Gracias JEJEJE-
-Por supuesto que intente acercarme a saludar pero te mirabas muy triste- Toma la mano derecha del rubio.
-Dis, disculpa. Ahora sabes por qué estoy triste- Naruto se ruborizo por el contacto con Neji.
-Bueno, yo me encargare de que tu estancia aquí sea mejor. Para mi será un deleite tenerte cercas de mi- Neji beso la mano de Naruto.
-Gra,,,gracias- No lo podía creer Neji era todo un caballero, pero tenía su instinto seductor.
-Hola Naruto. Buenos días- Neji ya estaba esperándolo en el pasillo, al día siguiente a primera hora.
-Si que te levantas temprano ¿Verdad?-
-Bueno quería ser el primero en darte los buenos días-
-Vamos a clases-
-Permíteme- Neji tomo los libros que el rubio llevaba en sus manos.
-No es necesario Neji. Yo puedo- Trato de recuperarlos, pero no pudo.
-Para nada. Vamos se nos hará tarde para la primera clase-
-Si- Naruto sonrió, siguiendo a Neji.