Un ruido parecido a vidrios quebrándose le hizo despertar. Todo en él dolía. Desde sus hinchados ojos hasta sus agrietadas y rasguñadas manos.
Alguien se removió a su lado y lo puso alerta, se había olvidado que el mayor se había acostado con él haciéndolo dormir tranquilo. Están realmente agradecido de su ayuda pero no podía decirlo. No si el despertar a su lado dolía tanto como cada vez que le ve al lado de otras personas. Tan cercano y tan lejano a la vez.
La puerta fue sacudida de un tirón y dos cuerpos casi infantiles entraron corriendo y gritando a la habitación. Se le quedaron mirando mientras gritaban el nombre de Seokjin.
-Hyung, tenemos hambre, ¿dónde estás? - preguntó la grave voz de Taehyung. -Yoongi Hyung, has visto a Seokjin Hyung?
No sabía si responder que sí y le descubrieran a su lado o mentir y que los otros continuaran interrogándolo para saber su paradero.
- Ahora voy a prepararles su desayuno - dijo un somnoliento Seokjin sentándose en la cama. Yoongi al sentirse descubierto se paró rápidamente y se encerró en el baño.
- Hyung, ¿qué haces en la cama de Yoongi? - escuchaba la suave voz de Jimin interrogando al mayor, no tenía ganas de lidiar con palabras y gritos de parte de esos dos menores por lo que pensó seriamente en quedarse en el baño hasta que todos hubieran salido. - ¿Tuvo alguna pesadilla?
- Sí, y no me dejaba dormir así que preferí acostarme a su lado -mintió el mayor- Vamos a comer que pronto deberemos salir.
Los dos menores y Seokjin salieron de la habitación no sin antes darse una mirada de complicidad: todos sabían que no Yoongi no había tenido una pesadilla sino otro de sus ataques de pánico. A este último tiempo se estaban dando más frecuentemente y realmente necesitaban tomar cartas en el asunto, les preocupaba que volviera a suceder lo del 2010, realmente no se sentían preparados para eso.
Ya en la cocina todos estaban acomodando las cosas para poder desayunar y salir a ensayar para las nuevas presentaciones de Spring day y Not Today. Se sentían excitados y emocionados por el cariño de las fans, no les importaba mucho estar cansados y con poco dormir, ellos sólo querían demostrar con todo el corazón lo mucho que aman la música y lo preciadas que son sus fans para ellos.
Todos comían, todos menos uno. Yoongi no podía salir del cuarto de baño, se sentía enclaustrado en su propio cuerpo, no podía gritar, no podía hablar, no quería pedir ayuda pero si lo quisiera tampoco podría. Estaba en la bañera, con el agua fría tocándole el cuerpo que aún estaba siendo cubierto por el pijama. Creía que no podría salir de ahí en horas, no quería ausentarse de la práctica. No por una estupidez como esa. Él era fuerte. Él es fuerte, se decía mentalmente. Esta enfermedad de mierda no se la iba a ganar, no otra vez, no quería dormir nuevamente en el piso del baño pidiendo que por favor la mañana no llegara y que si llegara él ya no estuviera para contemplarla.
Unos suaves toques a la puerta le indicaron que alguien quería entrar, chapoteó en el agua e intentó hacer de cuentas que se estaba bañando para que la persona tras la puerta se fuera sin preguntar, pero eso no ocurrió, escuchó las llaves de emergencia abrir la puerta de golpe y un preocupado Seokjin entró sin darle tiempo de responder.
- Hoy iremos al doctor, lo hemos decidido todos. - dijo sin esperar respuesta - Tú, Hoseok y yo. Los demás irán a darle las explicaciones correspondientes a la empresa y luego nos reuniremos acá. No puedes seguir así Yoongi. No otra vez.
No era como si él quisiera sentirse así, se dijo mentalmente el más bajo. Tan débil, tan poca cosa, tan innecesariamente preocupando a los demás. Si tan sólo pudiera desaparecer esa parte de él que siempre le atormentaba todo estaría perfecto.
- Yo no iré al doctor Seokjin-hyung, estoy bien, sólo fue una pesadilla y ahora... ahora caí en la tina cuando la estaba llenando - dijo sin titubeos, mirándole firme y sin miedo, sin el miedo que sentía dentro - Debemos ensayar, prepararnos todos para los conciertos. No es momento de fallar.
- Es que no te estoy preguntando si quieres ir o no, te estoy ordenando que irás, quieras ir por las buenas o por las malas, y tú sabes que no te conviene verme de malas, ¿verdad, Yoongi? - dijo Seokjin acercándose más a él. El frío del agua y el nerviosismo por escuchar esa orden le comenzaba a helar los huesos ¿qué podía hacer contra ese hombre más alto, más fuerte y más determinado que él? - Ahora te voy a quitar ese pijama empapado y te darás una ducha con agua caliente, ¿me escuchaste Min Yoongi?
Metiendo la mano dentro de la bañera comenzó a quitarle la ropa no sin pelear un poco con el menor, diciéndole que ellos tenían lo mismo por lo que la vergüenza entre ellos no debería existir. Yoongi sólo quería morir en ese mismo instante y que por favor Seokjin olvidara todo sobre él. Cuando hubo terminado de desvestirlo dio el agua caliente de la ducha y se alejó diciéndole que se preocupara de quedar decente rápidamente pues saldrían dentro de una hora en la van de la empresa y así sin más salió cerrando nuevamente.
Yoongi dio un suspiro, quien le había robado el corazón desde el primer momento que le vio no sólo lo trataba como un niño sino que también lo había visto desnudo y en su peor momento de estado del ánimo.
Al pasar los minutos no tuvo más que bañarse y dejarse hacer por el agua, al estar caliente le calmó un poco los ánimos, relajó su cuerpo y su mente y decidió hacer lo que le dijeran, realmente no se sentía con ganas de pelear y menos de escuchar como Hoseok y Seokjin le gritaban que nunca se preocupaba por él. Quizás si era verdad, pero es que habían tantas cosas más importantes que hacer.
Unos golpes en la puerta le sacaron de sus pensamientos, se abrió un poco y se cerró, pensando que era el mayor nuevamente cortó el agua y le pidió una toalla, grande fue su sorpresa al encontrar al menor de todos sólo en bóxers entregándole lo que le había pedido.
- Me han venido a apurarte, debo bañarme, debemos salir, hyung - dijo sin un pizca de pudor - Seokjin- hyung dijo que tienes tu ropa ordenada sobre tu cama y que tiene listos tus papeles. Debo bañarme hyung, sales o te bañas conmigo.
Le sonrió, ese pequeño-no pequeño ser de 19 años siempre le hacía sonreír con ese tipo de cosas. Salió del baño cerrando la puerta y caminando lentamente hasta lo que era su cuarto, vio su ropa ordenada y se golpeó al ver que la única prenda de color rosado que tenía estaba sobre la cama, obviamente iba a pasar eso si Seokjin le buscaba la ropa. Sin dejar de refunfuñar se puso lo que se encontraba, calzó sus zapatillas y el reloj saliendo del cuarto y yendo a la cocina donde seguían los otros 5 reunidos.
- Estoy listo - dijo suavemente, su voz le pareció extraña, casi robótica.
- Así veo, comes algo y salimos, con Hoseok nos bañamos durante la noche por lo que ahora no es necesario - dijo un calmado Seokjin mientras le servía los panqueques que había hecho para todos. - Come.
- Hyung, deben bañarse ahora, bañarse por la noches es asqueroso - comentó Jimin mirándoles con los ojos en forma de medialuna mientras reía con Taehyung - Con TaeTae iremos a bañarnos ahora.
- No se bañen juntos por favor, la última vez que lo hicieron tú terminaste con una torcedura en el pie porque V te empujó, ahora vayan rápido a prepararse que la van ya pasará por nosotros - dijo Namjoon terminando su café. Se levantó de la mesa y lavó su taza mientras tarareaba una canción. - Yoongi, come.
Odiaba eso también, la preocupación, no sólo el hecho de sentirse débil sino la mirada que todos tenían, la mirada de que todos sabían que algo le pasaba, la mirada de que no podían gritarle ni retarlo ni criticarlo por el miedo a que se desmoronara. Ellos no sabían que esa mirada, esa preocupación excesiva sólo lograba que se sintiera aún peor, que el nudo en la garganta comenzaba a crecer y él solamente quería volver al lugar que estaba ocupando en la bañera.
- Lo haré, no te preocupes - soltó el pelinegro comiendo lentamente y como si le costara de sobremanera el panqueque dulzón que estaba sobre su plato. Realmente no quería comer. Sintió unos brazos colarse por entre sus costillas y una cabeza apoyada sobre la suya.
- Estaré contigo en todo momento, ¿ya, hyung? - le susurró al oído su mejor amigo, besándole la coronilla se levantó del lugar y salió por la puerta. Hoseok siempre hacía eso, decía algo y luego huía sin esperar una respuesta o alguna mirada de su parte. Él sabía, sabía que siempre estarían juntos, eran mejores amigos después que todo.
También sabía que los demás estaban preocupados, que no le quitarían el ojo de encima. Sólo quería desaparecer un par de horas de esos ojos invasores, sólo quería desaparecer de lo que su cabeza maquinaba constantemente, sólo quería desaparecer un poco de todo eso y ser libre.