Capítulo 1: Pasadizo secreto
- ¡¡AYUDA!!.-esta era la milésima vez que el pelirosa gritaba sin optener una respuesta.
JiMin a estado encerrado por décadas en el sótano, o eso es lo que el cree...
- Por favor ayuda.-el chico se acurruco en el suelo con intenciones de llorar, puesto que estaba demasiado triste y tenia demasiado miedo, temía de la oscuridad.
Poso su rostro en sus rodillas y rompió en llanto, las lágrimas cristalinas caían por sus pómulos y después mejillas hasta desvanecerse.
Sus lágrimas eran puras y sinceras, una de ellas callo entre la madera seca del suelo. De la nada una rosa roja floreció.
JiMin abrió lentamente los ojos, sorprendiendose por la repentina aparición de esta.
- ¿Pero que rayos?, debo estar alucinando...-este seco sus lágrimas, las cuales al los pocos minutos volvieron.
Volvió a apretar sus ojos para dormir, quería pensar que todo esto era un simple sueño
JiMin no dejaba de derramar un mar de penas, no sabia la razón por la que se encontraba ahí en ese instante.
Este estaba muy cansado y confundido, por lo cual cayó en un sueño profundo.
***
~2 horas después~
El joven abrió lentamente los ojos, con la vista un poco borrosa por la hinchazón en estos, el chico se frotó los ojos encontrándose con un misterioso sendero de rosas.
- Aún debo de estar soñando...-se dio una cachetada a si mismo, dándose cuenta que no era lo que el pensaba.
De pronto una luz azul salió de entre las tablas, el pelirosado sorprendido y a la vez confundido comenzó a seguirla.
- por favor...ayudame...¡¡AYUDAME A SALIR DE AQUI!!.-esta vez el chico se excedía, toda la situación lo estaba volviendo loco...
- ¿Por qué debería ayudarte?.-Una voz le hablaba a JiMin...realmente se estaba volviendo loco...
- Tengo miedo...-se arrodilló en el suelo tapándose su cara con las manos.
- ¿Y a que le temes niño?.-volvió a hablar esa voz que estaba en cualquier lugar de la habitación o hasta quizás en su cabeza...
- A no poder ver la luz, a no poder verlos jamás...
- ¿Ver a quienes?.-comento confundido la voz, JiMin se sentó esta vez en el suelo, ensuciando sus manos con el polvo.
- Mi familia, mis amigos...,a todos en general...- poso sus manos sucias por sus cabellos, ensuciando estos también, dejándolos un rosa dorado.
- ¿Qué hay de Jungkook?.-el chico quedo inmóvil y sorprendido por la pregunta de la voz ajena.
Jungkook era el chico que solía amar, eran novios, y también cómplice de que lo hayan secuestrado y encerrado en esa habitación oscura, Jungkook JAMÁS amo a JiMin...
- Jamás conocí a alguien con ese nombre...-ese nombre hacia hervir su sangre, el odio y rencor hacia ese chico corria por sus venas.
- ¿Quieres borrar a Jungkook de tu memoria?, ¿fingir que jamás existió?.-el chico bajo la mirada pensativo, JiMin siempre amo a Jungkook, jamás seria capas de olvidarlo aunque el lo odie...
- No tengo que borrar a nadie y mucho menos fingir a alguien que jamás existió para mi...-el pelirosa tenia una lucha interna por no llorar.
JiMin miraba fijamente el suelo viendo algunos bichos pasar y más flores floreciendo, aun no puede entender lo que está sucediendo.
- Tienes 2 opciones, la 1era, te sacaré de aquí, pero olvidarás a todos y ellos a ti, será como si jamás existe.-muchos recuerdos pasaron por mi cabeza, no soportaría la idea de olvidar a todos, especialmente a JiHyun...-la 2da, morirás aquí, solo, sin comida, ni luz, ¿cual elijes?
- No es tan fácil como crees...-dice mientras tira de sus cabellos sucios.
- Tienes que elegir JiMin.-el chico lo pensó unos cuantos minutos, el chico que amaba lo traicionó, sus padres los abandonaron de pequeños, ¿que más da?
Pasaron unos cuantos segundos y el chico no dudó en elegir.- Elijo la 1era...
- ¿Estas seguro?.-JiMin no estaba seguro de lo que decía, aunque, a JiHyun no le dolera, ni a el, se olvidarán mutuamente, ¿que es lo importante ahora?, lo importante era salir de ese chiquero, de eso si estaba seguro.
- Sí...-el pelirosa estaba decidido a salir de ahí, aunque eso le costaría sus recuerdos...pero debía hacerlo.
- Tu lo dijiste.-a unos cuantos pasos una puerta se escuchó abrirse, JiMin se levantó rápidamente y se acercó a esta, pero cuando intento salir, esta se cerró en frente de sus narices.
- Aún no puedes irte.-hablo la voz, dejando inconcluso a JiMin.- Te daré un collar de flor, es lo que te mantendrá vivo, será como tu corazón, pero, no debes dejar que nadie lo arranque si es así que volverás en piedra.
- ¿Hablas en serio?, ¿Qué sucederá con mi corazoncito?.-hablo el chico golpeado el centro de su pecho suavemente.
- Al cruzar esa puerta, tu corazón se congelará, por lo cual dejará de latir, por eso necesitas ese collar, ¿entiendes?.-el chico proceso todo lo que dijo y asintió.- Ahora puedes irte.
- ¿Así nomas?.-JiMin estaba emocionado por salir de ahí, pero tendrá que esperar una larga conversación o así es para él.
- Ahora que lo dice, no.-aclaro la voz.-Debes tener mucho cuidado.
- ¿Cuidado?, ¿De que?.-el chico comenzó a poner atención, todo no sería paz como el creía.
- De los campesinos, si descubren que eres del mundo alterno intentarán robar tu collar.-el pelirosa se asustó con tal comentario. - Pero ahí gente como tu allá, asique no te preocupes. Pero te diré algo todos usan collares u otros accesorios allá, pero distintos al tuyo, por lo cual debes ocultarlo entre tus ropas, tienes que pasar desapercibido.
- ¿Diferentes accesorios?.-el chico miro ofuscado a la luz.- ¿A que te refieres?
- Todos tienen diferentes dones, especialidades o conexiones.-dijo moviéndose de aquí para allá.- La tuya es la Flora.
JiMin sintió un ligero peso en su cuello, tenia el collar colgando, era una hermosa rosa roja.
- Hace millones de años, no recuerdo exactamente, hubo una guerra entre la flora y fauna, la "naturaleza" fue derrotada y los "animales" fueron victoriosos por lo cual la flora fue despojada de su territorio, ahora viven en los alrededores de los bosques
- Ya veo, pero ¿solo están ellos?.-pregunto JiMin deteniendo a la luz.
- En realidad, no. Están los cazadores y caníbales ellos usan anillos de calaveras, son rivales de los "animales". También están los herreros, ellos suelen tener collares de cristal o puedes ver a algunos con pulseras, además están los guerreros ellos usan gemas, son personas muy valiosas.
- Entiendo, ¿y los animales?, ¿Qué usan?.-pregunto entretenido mientras jugaba con su collar.
- Buena pregunta, ellos usan aretes de huesos o suelen tener tatuajes en su rostro según su bando, ellos viven en lo profundo del bosque.-la luz se acercaba cada vez más a JiMin.-Jamás debes entrar o acercarte, es peligroso, más de lo que te lo imaginas.
- No lo haré.-JiMin sentía curiosidad, ¿porque no podía acercarse y simplemente entrar? Eso es algo que ni el sabia, ¿debería averiguarlo por si solo?, no lo creo...
- Bueno...puedes irte...-la puerta volvio a abrirse, JiMin se acercó, era un poso sin fin y además de oscuro.
El chico no lo pensó más de dos veces y se lanzó...
- Recuerda no acercarte al bosque, no sabes el peligro que encontrarás en sus profundidades, ya lo sabes chiquillo, ya fuiste advertido...
El pelirosado sentía como el frío aumentaba y todo volvía a ser oscuro...sintió como su corazón se estrujaba, JiMin poso su mano en su pecho escuchó su corazón que cada vez se detenía aun más.
- Adiós amor...-Sonrió aun con su mano en el pecho, cerró sus ojos, estaba feliz...
De pronto el chico sintió algo húmedo en su espalda y un pequeño rayo que chocaba en su rostro, abrió sus ojos, pudo apreciar el hermoso cielo y ese radiante sol que tanto anhelaba ver.
- Todo parece un sueño...-se sentó en el el húmedo césped y observó su alrededor, hay había un hermoso jardín y una pequeña casa un poco deteriorada.
- Pero no lo es...-respondió una voz ajena que asustó al chico pero algo se le hacía familiar, esa voz, la había escuchado antes, ¿es posible que sea él...?
El chico iba a replicar cuando un fugaz beso por parte del otro chico lo detuvo.- ¿Qué creés que haces...?-el rostro de JiMin estaba rojo a causa de la acción del azabache.
- Por favor...permiteteme amarte...-JiMin miro fijamente los ojos del chico, estaba triste y su mirada lo demostraba. Algo llamo la atención de JiMin, el tatuaje en su rostro, "suelen tener tatuajes en su rostro según su bando", el chico no podía creer que fuese verdad, estaba en frente de uno de sus enemigos...
- No puedo...-el pelirosa miro asustado a al pelinegro, el primero comenzó a retroceder mientras miraba al chico.
- ¿Porque?, ¿hice algo malo?.-dijo mientras tapaba su cara con sus manos.
- Tu eres un animal...perteneces a la fauna...
- Me llamo YoonGi...Min YoonGi...-JiMin frunció el ceño, ni siquiera le había preguntado su nombre aunque además, ni siquiera le tomó importancia...
- Yo soy Park JiMin...-dijo extendiendo su mano la cuál temblaba por el miedo...- Un gusto...
YoonGi tomo la mano de JiMin y lo atrajo hacia él abrazandolo, a lo único que se limitó a hacer JiMin fue a abrazarlo.
Su aroma era tranquilizador, olía a hogar...JiMin se acurruco en su cuello, se sentía como un bebé recién nacido en los brazos de su madre...la cuál jamás tuvo...
Su rostro tenia una gran sonrisa, cerró sus ojos y cayó rendido en los brazos de morfeo...