El siguiente lugar donde el menor apareció fue en un cuarto súper oscuro, no podía ver nada.
Pero si escuchar.
Escuchaba gritos desgarradores, desesperados que clamaba para que algo se detenga, suplicaban por ayuda.
No espero nada y salió corriendo siguiendo esa vocecita en su cabeza que siempre lo ayudaba.
Cuando pillo por los gritos que estaba llegando a la fuente de estos se tiro de una sobre la persona envolviéndola en un apretado abrazo y bañándola con sus llamas mientras le susurraba que todo estaría bien.
El otro no tardo en aferrarse a él como si su vida dependiera de ello.
Y al parecer así era.
Oh almenos así lo sintió la otra persona.
No sabía lo que pasaba solo que en un segundo estaba siendo torturada por las imágenes, tan grotescas que ni ella misma podía mirarlas y eso de por sí ya decía mucho, estaba atormentada por esos demonios que querían arrastrarla al infierno, sabía que era su final y lo aceptaba. Una niebla que perdía el control sobre si misma estaba acabada y la poca cordura que sostenía por esa fina y delgada cadena que la ataba a esta realidad ya hace mucho había sido quemada,
Seria consumida,
Deseaba serlo si con eso pararían, las voces las imágenes, todo!!
Solo deseaba que parasen.
Y entonces el calor la envolvió.
Y por primera vez desde que tenía memoria todo se silencio, las voces que le estaban gritando hace un momento pero que siempre le susurraban, las imágenes que solían atormentarla cuando cerraba los ojos buscando tragársela no había nada, solo silencio y paz.
Dulce paz.
Se aferro a ese calor que ahuyentaba a los demonios y la consolaba como si fuera a desaparecer en cualquier momento.
No podía.
No podía dejarla sola con ellos.
No importaba el costo, por una vez el dinero no le importaba solo quedarse en ese calor y la paz que venía con el.
-Ya estás bien?- dijo una pequeña voz intentando separarse pero no le dejaría- quédate así, no te vayas pagare lo que sea.
-Tsu-kun no quiere que le paguen.
-Entonces te daré lo que desees.
-Tsu-kun no necesita nada.
-Entonces como hago para que no me tires de nuevo a ellos!!- estallo no quería ser torturada de nuevo, no cuando sabia la existencia de tan cálido refugio.
-Tsu-kun solo quiere saber si one-chan ya está bien.
-Lo estaré siempre y cuando no te vayas.
-Pero tsu-kun tiene que irse.
-No puedes!!- grito solo para ver como el niño brillaba- No me dejes!!
-Te demandare si lo haces!! Te quitare todo lo que tienes!!!
-Aquí esto ayudara a one-chan luce-onechan lo dijo
Le mostro un chupete para luego colocarlo a su costado, agarro su cara y le beso en la frente mientras le susurraba un “todo estará bien” para finalmente desaparecer.
No no no no No se fue y los susurros volvían, no quería, no podría aguantarlo.
AYUDA
Miro al chupete a su lado, y lo agarro, rápidamente la envolvió el calor del pequeño de nuevo silenciando las voces.
-Mmmm solo por este pequeño objeto disminuiré el interés por dejarme- acaricio el chupete y lo coloco en una cadena que tenia suspirando aliviada cuando sintió envolverla completo en su calor.
-Mmmm creo que podría disminuir un poco más de lo previsto la deuda, pero solo un poco.
Total el castaño se había ido cuando claramente le dijo que no podía.
Se fue tarareando complacida pensado en las ganancias que obtendría, y luego recordó el abrazo y ese calor pensando que siempre podía intercalar la deuda de diferentes formas.
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No importara a cuantas maquinas se atara o cuantos generadores estuvieran funcionando solo con su energía
no era suficiente.
Sobrecargo todos los sistemas
Sintió como otra descarga lo sacudía y rayos salían de él mientras escupía sangre.
Moriría.
Moriría aquí
Al perecer ni su intelecto podría ganarle a esta aberración del exceso de llamas.
Es una pena que el mundo sea privado de su genialidad.
Sintió como estaba por venir la ultima descarga que freiría sus órganos pero nunca llego.
En vez de eso sintió como unas cálidas manos que se aferraban a las suyas y un calor que lo envolvía.
Mmmmm interesante un cielo dijo su mente.
El había estado deseando poder experimentar con uno por un largo tiempo pero el gobierno no le dejaba………aun.
Pero entre la bruma causada por esas llamas no encontró la fuerza para separarse de este y solicitarle que sea su conejillo de indias.
No, ciertamente no tenía fuerzas para nada que no sea bañarse en esa calidez.
Era embriagante, satisfactorio como una siesta bien merecida después del éxito tras días de experimentos sin descanso.
-Oni-chan ya estás bien? Para que son esos cables?.
-Ellos me ayudaban a drenar mi llama, pero veo que ya no son necesarios por el momento- respondió quitándose los cables- como encontraste mi laboratorio?, más importante como pasaste mi sistema de seguridad?.
Miro al pequeño niño que tenía que ser almenos 3 años menor que él con la ceja levantada, ni los mejores guerreros hubiesen sido capases de infiltrarse sin que él lo supiera y no creía que este escuálido y ciertamente inofensivo niño lo haya conseguido.
-Sistema de seguridad? Laboratorio? Tsu-kun no lo sabe oni-chan, en un momento tsu-kun estaba con luce-onechan y ella mostro como vos y los otros niños sufrían, luce-onechan dijo que Tsu-kun podía ayudar a onii-chans y tsu-kun acepto después tsu-kun apareció aquí.
Mire al niño con una ceja levantada
Estaba insinuando que era vigilado sin saberlo y que para colmo por ahí había una persona llamada luce que podía teletransportar a cualquiera a su súper secreto y seguro refugio cuando quisiera?
Lo observe con sospecha sonaba increíblemente imposible, pero esos ojos no mentían estaba seguro.
Sobra decir que no estaba para nada satisfecho.
Nota mental, redoblar la seguridad.
Volví en mi cuando el pequeño puso un chupete en mi mano.
Que extraño el chupete tenía el color de mis llamas pero irradiaba las del brúmate, aunque no podía sentir ninguna forzadura de unión como en otras veces solo un débil lazo pero era casi inexistente.
Interesante.
Aunque el hecho de que ese pequeño niño empezara a brillar lo era aun más.
-Bueno Tsu-kun ya tiene que irse y esta feliz que onii-chan ya esté bien…….aunque se quede mucho tiempo en las nubes- rio el castaño- luce-onechan dice que con ese chupete no volverás a sentirte mal así que cuídalo!!
-Nos volveremos a ver? aun quiero hacer pruebas contigo
-Pruebas? Hieee Tsu-kun odia las pruebas!! Aunque tsu-kun quiere volver a ver a oni-chan.
Y con una sonrisa radiante como el cielo que es desapareció.
Mmmm un niño ciertamente único, consiguió lo que nadie había logrado antes.
Lo dejo con muchas incógnitas y pocas respuestas.
Nunca se había sentido tan curioso, fascinado, intrigado y frustrado en la vida
Miro al chupete en su mano.
No podía esperar a volver a verlo para saciar su curiosidad recién despertada.
Y con una sonrisa que aria temblar a más de uno y causo un escalofrió en cierto castañito guardo el chupete en su bata.
Ciertamente no podía esperarlo ~
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Bueno debió haber tomado la oferta de unirse aun cielo cuando podía.
Ahora era demasiado tarde para echarse para atrás.
Otra contracción otro miembro que quería salir. Y más sollozos de su parte
Mierda seguro el gran skull –sama seria irreconocible ahora.
Solo una aberración horrible e irreconocible.
Suerte que ninguna sus fans podía verlo en este momento, o nadie para el caso.
Llevaba días extraviado, estaba practicando sus acrobacias aislado cuando perdió el control y termino en la situación de ahora.
Solo, en medio de la nada siendo consumido por sus llamas.
Genial bonito final para el gran Skull-sama.
Por lo que fue gratamente sorprendido cuando unas manitos alisaban su malformado cuerpo llenas de la más confortable y cálida llama que alla sentido nunca.
Era como si los ángeles se hubiesen apiadado de él enviado a uno de los suyos para salvarlo.
Hasta los cielos sabían que el gran cráneo-sama era demasiado bueno para morir de esa forma!!
Luego de unos minutos sentía como su cuerpo volvía a ser el mismo de siempre.
Suspiro aliviado
-Se encuentra bien oni-chan?
-Si mucho mejor!! como muestra de su aprecio el gran cráneo-sama le dejara ser su vasallo!!.
Quería a esas llamas para él, eran tan cálidas, tan amables y bondadosas.
No buscaban por sus errores o esperaban nada de el
Solo le aceptaban.
Era tan nuevo, tan liberador.
-Oni-chan que es un vasallo?
-Significa que serás el sirviente de skull-sama!!
-Pero tsu-kun no quiere ser el sirviente de nadie!!
-Muy tarde ya eres mi subordinado!!
-Hieeeee, pero tsu-kun no puede quedarse!! Aun falta un niño, y giotto-nii y natsu-nii también esperan por Tsu-kun!!! Además oka-chan estará asustada si tsu-kun no llega para cenar!!
-El lacayo de skull-sama no puede irse necesita quedarse para dar sus llamas a skull-sama y jugar con el!!
En eso el niño empieza a brillar.
-Hieee parece que tsu-kun ya tiene que irse!!,aquí oni-chan- le dio un chupete- tsu-kun no puede quedarse a jugar pero one-chan dice que este chupete te dará el fuego de tsu-kun así nii-chan ya no sufrirá .
-pero no quiero esto quiero a mi lacayo!!
El castañito le sonrió con cariño, y le beso en la frente- Tsu-kun lo siente pero no puede quedarse
Luego desapareció
Miro el chupete con un puchero.
Bueno solo tenía que encontrar a su esclavo de nuevo.
Si, no había ningún problema, mientras tanto esta cosa podría tomar su lugar.
Solo espera lacayo el gran skull-sama te encontrara.
Total no había nada imposible para el.
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Desde antes de aprender a hablar a tenido que aprender a meditar, entrenar su cuerpo, su mente.
Luchar contra la tormenta que se hallaba en su interior y para utilizarla a su favor.
Pero cada día se volvía más difícil.
Cada día la tormenta rugía con mayor fuerza.
El ya no podía contenerla y a esta estancia ya no sabía si quería
Ya no sabía que era peor vivir o morir.
Estaba tan cansado
Solo quería que terminara.
Volvió a retorcerse mientras las llamas llovían por su piel.
Ardía, todo su cuerpo ardía, sentía como se desintegraba parte por parte con cada estallido.
No pensó que dolería tanto!!
Otro estallido aun más fuerte de las llamas lo llevo de rodillas al piso y un grito de dolor escapo de sus labios, las lágrimas alfin se derramaron.
No era correcto mostrar su debilidad.
Pero estaba solo
Y almenos en su muerte no tenía porque fingir ser fuerte.
Mostrar la firmeza de un adulto cuando era solo un niño.
Solo un poco más y moriría su tortura alfin terminaría.
Oh eso creía.
De repente unas cálidas manos lo abrazaron con fuerza, acunando su cabeza contra un pequeño y suave pecho.
Por extraño que parezca no se alejo rápidamente como usualmente hubiese hecho, o siquiera se tenso por el contacto.
Es más, se fundió en él y soltó un suspiro aprobatorio.
No sabía si se debía a esas cálidas llamas que lo embriagaban o a los suaves y rítmicos latidos que lo consolaban.
Solo estaba seguro de una cosa, que aquí estaría seguro, que estaba bien apoyarse en esta persona y así lo izo.
Se dejo fundir en ese calor, se entrego por completo al confort que ofrecía este cielo.
No era el primer cielo que se encontraba, las triadas intentaron vincularlo muchas veces.
Pero si era el primero con semejantes llamas.
Eran puras, cálidas tan diferentes a esas otras llamas que buscaban consumirlo, imponerse sobre él, subyugarlo mostrando su dominio natural, esas llamas que reflejaban el egoísmo o la ambición de sus dueños.
Estas por el contrario solo buscaban acariciarle y sanarle, aceptarle en ellas y envolverlo con afecto para que nada nunca vuelva a dañarlo.
Utilizo sus llamas ahora calmadas para devolverle la caricia ganando un estremecimiento por parte del contrario pero acompañado de un suspiro satisfactorio mostrando su comodidad ante ello.
El otro intento separarse de él y le dejo, solo un poco para poder mirarlo sin soltarse por completo.
El pequeño se quedo mirando un punto en su frente, y luego le miro de arriba abajo horrorizado.
No le gustaba el dolor y la tristeza que se reflejaban en esos grandes ojos.
Ni un poco.
Estaba a punto de decir algo cuando este se le adelanto.
-No funciono!! Se supone que onii-chan debería estar bien, luce-one-chan dijo que si tsu-kun usaba su fuego los oni-chans estarían bien, pero no funciono- el pequeño empezó a llorar.
No, no, no ,no, no
Esos ojitos no deberían empañarse por el llanto.
Y menos si es por su causa.
-No te preocupes pequeño, estos sanaran rápido me ah pasado peores cosas te aseguro- dijo con una sonrisa reconfortante secando las lagrimas de sus ojos, intuyendo que se refería a las marcas de quemadura que seguramente empañaban su piel por el anterior estallido.
-Pero pero, tus brazos tu cara, oni-chan duele?- dijo acercando una de sus manitos a su mejilla y acariciándola.
Se apoyo en el toque, mirando como esos ojos denotaban la más pura preocupación.
Como podía afligirse tanto por un extraño?
Como podía existir un ser tan puro?
-No duelen mas gracias a ti, ya me ha pasado antes, te aseguro que sanaran rápido y será como si nunca hubiese pasado nada.
El pequeño asintió con la cabeza sin mostrarse muy seguro.
Pero luego empezó a brillar.
Eso no era bueno.
-Oh tsu-kun ya debe irse- dijo el menor para luego sacar un chupete rojo y extendérselo.
El solo lo abrazo con fuerza intentando envolverlo con su cuerpo, enterro la cara en su cuello y encendió sus llamas a su alrededor para ver si podía destruir lo que fuera que quería llevarse a ese pequeño ser puro de él.
-oni-chan?
-No te vayas.
El menor negó con la cabeza- Tsu-kun tiene que irse pero luce-onechan le dio este chupete para entregártelo y así evitar que oni-chan vuelva a estar en el dolor.
-No importa, si te vas lo estaré.
-Pero el chupete.
-No eres tú.
Lo abrazo con más fuerza eh izo que sus llamas los encerraran en un capullo.
Podía sentir las llamas del cielo viniendo del chupete que se encontraba abandonado junto a ellos, pero ellas no remplazarían a la pequeña bola de luz que se encontraba entre sus brazos.
Un pequeño ángel que ah logrado mantenerse puro en este mundo podrido.
Un ser tan bondadoso que llevaba el corazón en las manos.
Un alma que brillaba incesante sin ser consciente del peligro que corría.
Como podía ser aplastado por la realidad en que vivían.
De la carga que llevaba por su naturaleza.
De las leyes del mundo
No quería soltarlo
No quería que este cielo perdiera su pureza, su inocencia.
Quería protegerlo.
-Onii-chan todo estará bien, no importa qué, si tu lo crees profundamente así será- susurro
Y luego se esfumo en sus brazos, dejando solo el chupete a su lado como señal que alguna vez estuvo ahí.
Eso y un increíble frio en su ser.
Agarro el chupete y sintió como se calentaba un poquito pero aun no era suficiente.
-Espero pequeño cielo que sea cierto y que cuando nos volamos a ver aun estés bien y lo más importante que sigas siendo el mismo que ahora.
Porque estaba seguro que se volverían a ver.
Porque él lo buscaría.
Con un beso al chupete cerro su promesa y se marcho, sintiendo sus hombros liberarse de la carga que había estado cargando toda su vida, las expectativas, soledad, presión, ira , miedo todo se esfumo siendo remplazada por una nueva carga, una que se sentía muy confortable.
El sentido del deber y protección.
El voto de un elemento a su cielo.
Su cielo.
La tormenta rugía no de ira sino de placer.
Porque esta tormenta encontró a su cielo, y todos saben que la lealtad de ellos es de por vida.
Ya no había vuelta atrás y estaba seguro que nunca se arrepentirá.