POV JADE
El agua corre por mis cabellos, baja por mi espalda y piernas para finalmente caer por el desagüe. Nunca pensé que una ducha podría ser tan estúpidamente relajante.
Es la primera noche que pasaré con Vega y juro que tengo miedo de que mi gatito pase a ser tigre y se joda todo. No sé de qué puede ser capaz ésta niña.
No digo que me haga daño, como que sea capaz de hacerme un daño físico, pero... Puede saborear algo... Llamar a su papá para que nos embosquen... Entregarme a la policía... O... Huír...
Mis ojos se abren de repente y me dispongo a salir lo más rápido que puedo de la ducha. Mierda. No pensé en la posibilidad de que Vega huyera. ¿Y si salgo del baño y ella ya no está? ¿Y si huyó con todo mi dinero? ¿Mis armas? ¿Qué voy a hacer?
Salgo rápidamente de la ducha y, para variar, no encuentro a Vega. No está ni su teléfono, ni su cartera y su maleta no está abierta, ¡Mierda! La dejé sola y ella aprovechó para irse, nunca debí de...
Momento, la puerta de vidrio deslizable que da para el pequeño balcón está entre abierta y la cortina está un poco corrida... ¿Habrá brincado?
Abro la puerta deslizándola y me encuentro una Victoria Vega recargada en el barandal, viendo la luna.
-¿Vega? - Logro pronunciar. La niña se sorprende un poco pero luego me sonríe cálidamente.
Me sonríe.
-Oh, Jade, no sabía que ya habías salido de tu ducha.
-Sí... Acabo de salir... - Vega asiente y vuelve su mirada enfrente, perdida en sus pensamientos - Am... ¿Vega? - Ella me mira intrigada - ¿Qué haces aquí afuera? - Deja salir un largo suspiro y después de casi 1 minuto sin respuesta, contesta.
-No lo sé... - Vuelve su mirada enfrente - No es una gran ciudad ni éste es un lujoso hotel pero... Creo que salí a relajarme... A pensar... Necesitaba aire fresco - Yo la miro embobada, realmente es muy hermosa, parece una escultura a la luz de la luna - Me iré a duchar - Dice, me medio sonríe y después desaparece por la puerta del baño.
Vaya, mis pensamientos van cada vez más allá.
Lo que me sorprende más de que me esté gustando una mujer... Es que me está gustando una desconocida a la cual debí de matar.
Curioso, ¿No?
Me libro de mi bata para cambiarme a mis pijamas, y volver al mini balcón.
La habitación está en el segundo piso por lo que no se puede ver mucho, pero alcanzo a ver un parque por allá, algunos carros, y uno que otro edificio.
Me siento en la orilla del barandal y dejo que mis piernas caigan hacia abajo. Después de pensar lo que me parecieron unas horas, escuché a Vega salir del baño, me tenté a voltear para verla pero me mantuve con la mirada enfrente.
Después de escucharla revolotear por ahí, comencé a escuchar música, tranquila con un piano, guitarra y una angelical voz de mujer.
Vega sale al balcón e imita mi posición justo a mi lado. Estuvimos así un muy buen rato, sentadas viendo a la nada en un silencio para nada incómodo que sólo lo interrumpía la suave melodía que tocaba al fondo.
Nunca me sentí más a gusto y tranquila en mi vida.
-¿Victoria?
-¿Hm? - la niña juguetea con sus manos, parece que está... ¿Nerviosa?
Claro que está nerviosa, estúpida, está a un lado de una asesina a sangre fría.
Me encojo con las fuertes palabras de mi cabeza. Y ahora que lo pienso, me doy cuenta que no tengo absolutamente nada qué decirle.
-La canción es bonita - ¿De verdad, West? ¿No quieres decirle de una vez que es hermosa bajo la luz de la luna?
Vega sonríe - Gracias... La escribí yo - Mis ojos se abren grande y la miro.
-¿De verdad? ¿Eres escritora?
-Sí... Y cantante también... La voz que suena es la mía - Ésta niña es una caja de sorpresas.
-¿Los instrumentos los tocas tú?
-No - Ella ríe un poco - Unos amigos me ayudaron a grabar los instrumentos.
-Oh - Es todo lo que pude decir antes de que cayéramos en un silencio cómodo de nuevo.
Después de un rato, sin siquiera pensarlo antes, rompí el silencio - ¿Puedes cantarla?
Vega detiene sus piernas después de estarlas moviendo en el aire y me mira de reojo, yo trato de seguir neutral e indiferente por fuera aunque me esté muriendo por la idiotez que acabo de preguntar; sí, es cierto, estaba pensando mucho en lo hermosa que se escucha su voz que de inconscientemente le pedí que la cantara.
Vega se queda en silencio y yo me doy una súper bofetada mental por haberle pedido eso, de verdad que sólo a mí se me ocurre pedirle a Vega que cante cuando tenemos 2 días de conocernos, que idiota soy, de verdad, debí de llegar a quedarme dormida, o de plano no hablarle, pero no, se me ocurre llegar a hablarle de sentirmientos, ¿Por qué nunca puedo quedarme callada?
De hecho creo que debería callar mi batalla interna porque Vega ha empezado a cantar.
Empezó a cantar.
Me empezó a cantar.
Y juro que es el mejor sonido que he escuchado en mi vida.
La voz de Vega es mi sonido favorito a partir de ahora.
La canción es de lo más relajante, y mucho más con la voz de Vega...
La canción termina y yo sonrío, ella me sonríe y reímos un poco.
Ambas volteamos enfrente con una sonrisa en nuestro rostro y caemos de nuevo en un silencio cómodo, el tipo de silencio que nos hace disfrutar la presencia una de la otra.
Eso hasta que siento cómo cae la cabeza de Vega sobre mi hombro y me paralizo.
Mi sonrisa se borra y me tenso instantáneamente.
Vega tiene su cabeza recargada en mi hombro.
Y eso fue suficiente para literal joder todo en mi interior, estoy segura que mi cerebro dejó de funcionar, por lo tanto, dejó de mandar señales a mi cuerpo, y por tanto mis pulmones ya no reciben aire, por tanto la sangre dejó de circular por mis venas, por tanto mi cerebro dejó de pensar.
¿Pero saben qué? A la mierda.
Me permito relajarme y disfrutar el momento sin pensarlo.
Sin pensar que la mujer que tiene recargada su cabeza en mi hombro, es una desconocida.
Sin pensar que la mujer que tiene recargada su cabeza en mi hombro, era mi presa.
Sin pensar que la mujer que tiene su cabeza recargada en mi hombro, debería estar muerta.
Sin pensar que soy una asesina a sangre fría.
Sin pensar... Que la mafia más grande del país... Está buscando mi cabeza...
Por unas horas dejaré de pensar y me dejaré llevar... Algo que nunca había hecho.
Y se siente bien.
o-o-o
Después de estar afuera lo que pasó una eternidad, nos metimos a dormir cada quién en sus respectivas camas, y es que, por más que he tratado quedarme dormida, no puedo. En lugar de dormir, he visto la figura de Vega en la oscuridad, iluminada por la mínima luz de la luna que entra por la ventana entreabierta. Ella está dormida y refleja una tranquilidad enorme.
Juro que todo se me está complicando.
-¿Jade? - Me sobresalto un poco, creyendo que fui atrapada en mi espionaje. Trato de hacerme la dormida y no le contesto - ¿Jade? ¿Estás dormida? - Silencio.
Y el silencio nunca se rompió. No le contesté y ella no dijo nada más.
No sé que me habrá querido decir.
Pero no supe nada más hasta que escuché unos pasos moviéndose de un lado a otro. Abrí los ojos encontrándome a Vega moviendo algo en su maleta, sacó una secadora de cabello y al pararse, volteó a verme, sus ojos se abrieron grande y llevó una mano a su pecho para luego cerrarlos y suspirar mientras una sonrisa se instalaba en su rostro.
-Jade... - Pronuncia entre suspiros - Me asustaste - Ella ríe - Perdona, ¿Te desperté? - Y ahora que la veo, su cabello está mojado y no tiene maquillaje, acaba de darse una ducha... E incluso así... Es increíblemente hermosa.
o-o-o
POV TORI
Marcaban las 7 am cuando desperté, y aunque al inicio me asusté porque no reconocí el lugar, recordé mi destino.
Y la única razón está dormida aquí en la cama de al lado.
Levanto un poco mi cabeza y miro al bulto acostado en la cama, después de comprobar que está profundamente dormida, me siento en la orilla de la cama y la veo.
La veo y es hermosa.
Su piel pálida la hace parecer de porcelana.
Sus ojos cerrados y sus labios están ligeramente fruncidos.
Pero es hermosa. Incluso sin maquillaje es hermosa. Parece una muñeca.
Estuve viéndola dormir como un maniático por un muy buen tiempo hasta que decidí que era hora de mínimo darme una ducha y alistarme para lo que fuera que nos deparara el destino el día de hoy.
o-o-o
Después de alistarnos ambas, para las 10 am ya estábamos listas dentro del carro para seguir nuestro camino.
Y se puso incómodo el tiempo otra vez, pero sólo porque yo no sé cómo reaccionar. No sé qué carajos me hace sentirme así estando cerca de Jade.
Hablarle a mi papá para entregar a la policía la mafia para la que trabajaba Jade, ya es algo impensable.
Sólo quiero conocer a Jade.
Y todos mis pensamientos se reducen a una sola cosa.
Jade.