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Los Alfas del señor Stark por Evanences

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Capítulo 14: Redimirse.


Pepper no sabía en qué punto el mundo había perdido la cabeza, el día en que comprendió que entre ella y Tony, no podría ver nada más que una bonita amistad, empacó sus respectivas pertenencias, con la firme intención de regresar a de donde había salido. Justo antes de irse, el aeropuerto se volvió un caso, Pepper pensó que aquello era lo más similar a un apocalipsis zombie que alguna vez vería, la gente no se comía, pero sí mataba y golpeaba, pero sobretodo, buscaba violar y retener.


¡Ah! Fue una sensación horrible, pudo haber escapado, pero en su mente sólo estaba el que diría Tony de ella si llegase a enterarse de sus acciones, como si estuviese en algún lugar omnipotente, viéndola pecar y decepcionarse otra vez de ella, por lo que se vio obligada a hacer lo que pudo: Proteger a los omegas y crías vulnerables.


No fue hasta horas más tarde, en las que se dio cuenta que ella no estaba infectada, en absoluto, no sentía ni ganas de marcar omegas, maltratarlos o abusar sexualmente, todo lo contrario, tenía una férrea necesidad de protegerlos de los alfas que sí estaban haciendo tales actos, se preguntó si su tratamiento contra la violencia tendría algo qué ver en eso. No lo sabía, el genio no era ella.


¡El genio! Incluso cuando se encontraba resguardada en la torre Stark, junto al grupo de omegas que había tomado bajo su entera protección, se preguntaba qué habría sido de él, si estaba vivo, si Steve le había hecho daño, tantas preguntas a las que no hallaba una respuesta, y la ignorancia le ponía erizaba el finísimo vello del cuello, porque Jarvis, aunque le hubiese dado total acceso a la fortaleza Stark, todavía seguía desconfiando de ella y no le soltaba palabra alguna de su amo y señor.


A veces bajaba de la torre, en solitario, porque no quería arriesgar a nadie más, y con toda la cautela de la que era posible, se encargaba de realizar una búsqueda discreta por la ciudad, si por lo menos no hallaba pistas de su ex amante, al menos encontraba a alguien que necesitase ayuda.



-¿Qué? ¿Sentiste una contracción? ¿Estás seguro? –Peter se había puesto pálido. El misterio de la pandemia había llegado a su fin, si bien, no tenían idea alguna de quién la había propagado o con qué fin, en caso de que fuese un intencional, pero de lo que sí estaban seguros, era que se realizó un cambio en el ambiente, que desequilibraba las hormonas alfas, haciendo que su instinto de violencia se volviera más pesado y reinase sobre su raciocinio y pensamiento; afectaba a los alfas con una vida sexual iniciada, también tenía secuelas en betas, muy ligeras, y estas sólo despertaban por la presión y estrés dada por los alfas.


La cura, que era la parte más interesante del asunto, pues la solución termina siendo equilibrar nuevamente los niveles de la tierra, ¿Cómo? Tony había diseñado una vaga idea a la que le comenzó a dar forma con los meses, creó un dron capaz de esparcir una fragancia: La mezcla perfecta entre la esencia alfa-omega. Que provenía de la unión gasificada entre los miembros opuestos de la cadena de poder, alineados en armonía. Obtener aquello no era sencillo, pues provenía de una interacción larga y amena, pero también se necesitaba obtenerla de una relación sexual y al inicio, los únicos donantes de aquello eran Thor y Loki.


Generar una cantidad suficiente que llegase a cada persona en el mundo se transformó en un reto imposible, por lo que a la lista también se unió Peter, que no formaba parte de las listas de alfas de instintos comunes, y al parecer, también sería una pieza clave para regresar el planeta a la normalidad.


Hasta el momento, Thor había extraído 10 muestras, entendiéndose esas muestras como personas, y diez personas habían sido curadas por completo, sin recaídas ni nada parecido, claro que tiempo era lo único que no tenían, en un intento desesperado, treinta días fue el lapso que se le dedicó a cada caso para su observación. Thor había buscado a Steve más de una vez, para someterlo también a pruebas, pero encontró imposible su paradero, aquello mantenía sumamente inquieto a Tony, aunque este fingiera que estaba estable, la verdad era otra, su peso estaba muy por debajo del promedio, y eso era gracias a la fatiga a la que se enfrentaba cada que se encontraba pensando en Steve.


-Muy seguro de que sentí una puta contracción. –Su voz era serena, pero el pánico que reflejaba su rostro distaba mucho de lo que su boca decía. Soltó un quejido que le hizo casi doblar de dolor y Loki se vio ligeramente contagiado por el mismo. Dios Santo, Tony simplemente no podía alumbrar, no así, no sin mínimo Thor como soporte. Necesitaban un alfa cerca, con el que se compartiera un lazo familiar, pero Thor, Peter, ¡Hasta Faldral! Se encontraban en Midgard, ejecutando el plan que les había muchas lágrimas y sangre. No se decía eso en sentido figurado. –Pase lo que pase, el bebé es primero y no va a salir por ningún lado, así que más vale que te pongas a hacer algo, ¡Ahora! –Un grito más y regresó a Loki a la realidad. Tony no tenía cuidado alguno en la necesidad de un alfa para su parto. Nunca había necesitado a uno para sobrevivir, y esa ocasión no sería la primera.



Era sumamente injusto, Peter maldijo a Steve más de una vez, llevaban más de la ciudad recorrida, rociando el bendito gas, no era un asunto difícil, se extendía con una facilidad ridícula, y ya se estaban viendo resultado, sin embargo, lo jodido era que algunos alfas parecían darse cuenta que lo que venía en camino era una cura, eso no fue visto como una ayuda e inmediatamente muchos decidieron que refugiarse en subterráneos, sótanos y cualquier otro refugio que les mantuviera a salvo de la peste.


Segunda jodidez: Steve no aparecía por ningún lado, y no sabía que pensar de eso, esperaba con toda su alma que se encontrase a salvo, pues no tendría coraje para decirle a su mentor que había sido demasiado tarde para él, simplemente no podía, el pecho se le estrujaba de sobremanera con tan sólo tener ese pensamiento asaltándole.


Tanto que le había costado que le agradase, en un principio se había afectado por ese terrible monstruo llamado celos, tampoco existía ser alguno que le culpase, había crecido como el único objeto prioritario de Tony desde que ambos se conocieron, sin ningún tipo de competencia, una pareja por ejemplo, que le robase el afecto y atención del castaño. Nada, por lo que le fue un golpe directo a su orgullo e inseguridad cuando un día, así sin más, apareció nada más y nada menos que el Capitán América. Demonios, sopesar aquello sí que había sido difícil, y ahora que lo había hecho, decidiendo que las cosas no eran tan malas como se veía, que Steve podía ser incluso considerado como una especia de figura paterna, tal vez estaba muerto, o algo así, que esperaba no fuera así, por el bien de todos.


-¿Algo, chico araña? –Tres horas y cuatro minutos después, la ciudad se encontraba totalmente empapada, no obstante, aquello no les daba motivos para celebrar, todavía, porque un porcentaje de la población seguía oculta. -¿El capitán?


-Nada. –Peter negó con tristeza y preocupación. –Iré a la base de SHIELD, debe de estar en algún sitio. –Thor asintió, no podía acompañarlo, porque necesitaban sacar a las hormigas de su colonia, pero reconocía que era importante encontrar a un miembro del equipo.


Había sido el mismo lugar de donde habían extraído a Tony, antes de que fuese tarde, no hallaba mucha diferencia, había cadáveres, descuido, destrucción, pero no se veía habitado, lo cual era peor, cuando la amenaza no se presentaba siempre era porque #doubledanger.


¡Vaya! Realmente había mucha muerte alrededor, agradeció tanto que su traje tuviese un filtro de aire integrado, porque con más de los cien cadáveres que ahí moraban, debía de apestar como el culo del infierno. La energía de reserva que mantenía el lugar iluminado, sorprendentemente, todavía funcionaba, facilitándole a Peter su recorrido para nada placentero por el lugar. Todavía no encontraba señales de vida, pero si se detenía a pensarlo por un solo momento, era una realidad bastante apegada a las consecuencias de los hechos, es decir, estaban en una base militar más armadas, mínimamente, del país, con alfas enloquecidos y betas asustados, era claro el resultado que tendría. Sólo esperaba no tenerse que encontrar el rostro de Steve entre los escombros.


Cuarenta y cinco minutos le costó verificar, dos veces y media, que Steve no estaba ahí, sin embargo, había un lugar que se evitó más de una vez, incluso cuando el apocalipsis omegaverse, no se había desatado todavía, que era el aérea donde se retenían a los criminales, la razón era fácil de entender: Era un sitio tétrico que prefería no visitar.


No obstante, ¿Y si estaba ahí? Por alguna bizarra razón, que alguien le hubiese ganado en batalla, pero que al no poder deshacerse cien por ciento de él, no le haya quedado otra alternativa más que agotar toda posible opción y hacerlo, ¡Vamos Pet! Escuchó a su mente misma dándole ánimos, para después impulsarse, con el miedo a flor de piel, los nervios derramándose por los poros y la paranoia acariciándole la espina dorsal.


Diez minutos después, encontró tan vacío como el resto del cuartel, eso hasta que encontró una trampilla al fondo, se quedó observándola por varios minutos, si algo que detestaba más, era el lugar de los presos, peor era que hubiese un lugar donde se retenían a los presos EN. UN. PUTO. SÓTANO.


Bien, ¿Qué diría Gwen si lo viera temblar como un niño pequeño ahora mismo? Demonios, tenía que golpearse a sí mismo y darse cuenta que estaba siendo ridículo, la puerta la abrió de un solo movimiento, entró en ella de un salto, la luz era tenue y de no ser por su visión nocturna, probablemente no hubiera visto nada salvo sus manos a una altura considerable de su rostro.


Detectó calor, justo al final, hubo esperanza nuevamente dentro de su pecho, ¿Sería el capitán? Eso esperaba, porque realmente sería desgarrador tener que explicarle a Tony que simplemente se había desvanecido como una bruma en un día de vientos fuertes. Tragó saliva, dos veces para armarse de valor y con toda la cautela que le fue posible reunir, se acercó hasta la prisión con barras de eléctricas.


-¿Cap? ¿Eres tú? Aplaude si eres tú. –Su voz fue una imitación de la que normalmente usaba, pero fue lo que pudo hacer, casi saltó de la impresión, cuando efectivamente, escuchó un aplauso débil que bien podría haber roto el silencio a 10 kilómetros a la redonda. -¡Gracias al cielo! ¡Hemos estado tan preocupados por ti! ¡No te preocupes! Voy a sacarte de ahí. –Extrañamente, en el fondo de su ser todavía estaba la imagen del amable Rogers, por lo que fue totalmente normal irse hacia atrás cuando un gruñido de advertencia le dio justo en el rostro, amenazándolo desde su cautiverio si daba un paso más.


-¡Vete! ¡Vete! –En efecto, era el capitán, fue doloroso verlo en esa fase repleta de desesperación, un vistazo más a su celda y se dio cuenta de las veces en que se repetía el nombre de su tutor, escrito a pase rasgaduras de varios centímetros. Steve estaba sumido en un estado psicótico, parecía tan fuera de sí, pero no recordó verlo tan cuerdo como ese momento, una sombra de la última vez. -¡No puedo salir! ¡No quiero matarte! ¡Es mi castigo! ¡Lastimé a mi omega, no puedo lastimar a nuestra primera cría también! –Algo se conmovió en el pecho del muchacho y estuvo a punto de sonreír, luego todo se borró cuando juró escuchar un sollozo de angustia. –Maté a mi omega, a la cría…Maté a todo el mundo.


¿El mismo se habría encerrado en ese lugar? ¿El mismo habría asesinado a SHIELD entera? La idea le perturbaba, porque a su vez, imaginaba cómo lo habría hecho, pero también estaba el escenario que veía todos los días, el gentil capitán saludando a quienes le saludaba, siendo estricto, pero cortés, fuerte, pero suave. Salvando y matando. Matando y salvando.


-Pero él está bien. –Aquello la captó la atención de Steve y por ende, su mirada desorbitada y peligrosa. –Ambos están bien, de hecho, la última vez que lo vi fue ésta mañana, y se encontraba muy bien, esperamos que tenga al bebé la siguiente semana, no son muy precisos los sanadores, porque nunca habían tratado con algún omega humano, pero no es nada que puedan manejarlo.


-¡No me digas dónde está! ¡Porque querré ir y volveré a ser malo! –Gritó tan fuerte, que no supo si fue de alivio o enojo, Steve temblaba de rabia y miedo, una combinación peculiar que hizo saltar a Peter otra vez, se rodeaba contra sus propios brazos y se mecía de un lado a otro. Era aterrador. Peter optó por un semblante compasivo.


-Oh, bueno, no quería decirte esto, pero hay otro alfa que se encuentra cortejándolo. –Steve dejó de moverse y su mirada azul llena de ira se posó firmemente en Peter. Cualquier atisbo de debilidad quedó rezagado y el joven sólo esperaba salir vivo de esta cuando Steve volviera a la normalidad.


-Repite lo que dijiste. –Hubo un silencio antes de la pregunta. Debía de estar bromeando. Hijo de puta, y no se refería exactamente a su castaño, no, ¿Qué culpa tenía él? Tony era un omega en estado, se encontraba vulnerable, ¡Peter hijo de puta por no permitir que otro alfa lo cortejara! ¡Era su cría y el alfa principal no se encontraba! ¿Entonces, cómo demonios había permitido que eso pasara?


-Por lo que escuché, está por dejar que sus aromas se mezclen, ya sabes, no está muy contento con la situación, pero el bebé viene en camino y es necesario un alfa que se encuentre presente durante el nacimiento, la probabilidad de que uno de ellos muera, o ambos, es algo alta y no es recomendable que lo haga solo. –La vida estaría riéndose en ese momento. –Thor no es una posibilidad, y yo soy demasiado joven para eso. Así que un amigo de Thor piensa hacer el trabajo, la verdad es que no se siente para nada obligado y tiene un interés muy marcado en él. Estoy seguro que tendré más hermanos después de eso, el primero tendrá ojos azules o castaños, como los tuyos o los de Tony, pero el resto serán todos verdes.


Aquello soltó una bomba atómica en la imaginación de Steve. No sólo era el hecho de ver a Tony enredado con alguien más, si no el que se viera forzado a tomar una decisión como aquella, ¡Ah! Eso  le rompía, el saberse insuficientemente fuerte, más fuerte que esa maldita enfermedad que parecía haber ganado la batalla a la razón, pero también el que Peter, un alfa con el que compartía una relación de complicidad, se lo estuviese contando con una naturalidad que le enfermaba, olía a traición.


Con una coordinación perfecta, golpeó los generadores de energía de su celda y en un parpadeo, la barrera entre el chico y él se vio inexistente. Nadie se movió por los primeros segundos y Peter respiró dos veces antes de escapar hacia la salida más cercana. Steve iba más allá del cólera y buscaba al culpable, primero mataría a Peter, por traidor, luego al alfa que estuviese entrometiéndose con su omega.


Casi se resbaló, patéticamente, jamás había visto correr a Steve de aquella manera, bien, no había sido taaaaan buena idea el hecho de usar a Tony como combustible para encender y explotar su lado alfa, las buenas noticias es que no estaban tan lejos de la intemperie como pensaban, pero mier da, mentiría que no sintió el alma salírsele del cuerpo cuando escuchó a Steve cortar cartucho. El aire golpeó el rostro de ambos, y eso hizo que el rubio detuviera su carrera, un dolor de cabeza le hizo tambalear, pero la oscuridad desapareció, la luz llegó a su mente y lo único que podía pensar, era que quería estar acurrucado en un nido de sábanas con el olor a chocolate de Tony haciéndole dormir.


Sí, estaba mareado, y sí tenía mucha hambre, sed, ganas de dormir, pero sobretodo de la cercanía de su omega, fue como cuando el agua limpia un sucio vaso de cristal, se fue llevando toda la suciedad poco a poco, y aunque todavía se encontraba un poco inseguro al momento de caminar, los recuerdos de su salvajismo experimentado en los últimos meses fueron llegando a él como una dolorosa llaga abriéndose paso por todo su cuerpo, sobretodo de la manera en la que habló y actuó con la persona a la que consideraba un pilar en su vida, que al haberlo desechado, todo parecía perder solidez.


-¡Peter! –Llamó al joven cuando no lo encontró por la mirada borrosa, intentó sostenerse de alguna manera, pero en la pista de aterrizaje se encontraba despejada y terminó por caer sentado y sin gracia. Demasiada luz en poco tiempo.


Entonces, el adolescente apareció, temeroso en un inicio, pero convenciéndose en su totalidad al ver su manera de actuar, que ya no era con pinceladas de demencia, sino de confusión, pero con una innegable cordura. A paso lento, se acercó, y cuando Steve lo miró, vio la integridad en su mirada, sabiendo que el viejo Steve estaba de regreso.


-¿Dónde está Tony? –Ahí estaba ese tono de preocupación infinita y pudo respirar nuevamente. -¿De verdad dejaste que otro alfa no lo respetara? ¡Qué te sucede! –Si hubiera tenido fuerzas para patearlo lo hubiera hecho. Peter se quitó la máscara y negó vacilante, pero tranquilo.


-¡No! O sea, sí había otro alfa, pero no pudo ni decirle los buenos días, porque Tony le disparó, ¡Nada grave! Sigue vivo pero sabe que Tony no va a darle entrada de ninguna forma. Como todos se trastornaron, pues no hubo otro lugar al cual ir que no fuera Asgard. –Todo comenzó a tener sentido en la mente de Steve, era claro que Tony jamás estaría solo, no cuando tenía a Dioses como amigos. Peter lo jaló para ponerlo de pie, todavía se encontraba dudoso a la hora de caminar y el arácnido amablemente se ofreció como apoyo físico.


Thor apareció poco después, con buenas noticias, no era un científico, pero podía asegurar que la ciudad se encontraba limpia hasta ahora, porque había recorrido cada metro de ella y la gente, aunque estaba en una fase de desconcierto y perplejidad, volvía a estar libre de esa terrible infección. Bien, habían restaurado una ciudad, y quedan miles todavía, pero las pequeñas victorias siempre eran opacadas por las grandes derrotas.

Notas finales:

Estoy bien emputada >:c porque esto lo actualicé desde ayer y por alguna razón, esta actualización, junto a Lujuria aberrante, fue borrada.

Bueno, repito nuevamente, sólo quiero que sepan que no estoy muerta ni nada, sólo estudio la universidad y cuando es así, dejo todo de lada para enfocarme.

Actualizaré enseguida LA y en estos días, antes del 16, porque me voy de vacaciones y nadie me verá hasta enero lol.


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