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Y ante todo, ¿por qué él? por Miraku

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Notas del capitulo:

¡Holis!

Por fin me dio tiempo de publicar, sucede que solo puedo hacerlo los fines de semana que es cuando vengo a casa de mis abuelos. Donde vivo no hay internet, es como ir a través de un portal en el tiempo (?

Como sea, el capítulo ya está aquí, ¡espero que lo disfruten!

Sin más, a leer:

¿A qué carajos se refería Tony? Se supone que ya debían comenzar a trabajar, no a perder tiempo. Y eso sería después. Porque... la curiosidad quitó la responsabilidad de ambos chicos. Y sin querer que ese sentimiento les siguiera carcomiendo, fueron detrás del gemelo guitarrista rítmico. Andrew, como el caballero y buen amigo que es, empujó a Henri para tirarlo de la cama e ir abajo. Henri, una vez que se recuperó del sorpresivo ataque salvaje, lo siguió; irónicamente, su media coleta seguía en orden y perfecta armonía a su demás presentación.
            Ambos amigos bajaron por el elevador de acrílico y dieron a la planta baja, su atención estaba centrada en la pantalla led donde indicaba en cuál piso iban pasando. La vista de la ciudad jamás fue pelada por ellos dos. Cuando la compuerta se abrió, ninguno siguió esperando y salieron corriendo por el pasillo contrario que dirigía a la recepción. Teniendo que pasar por los baños de abajo, esquivar la señora ya avanzada de edad y sonrisa hogareña de intendencia, empujar ligeramente a las diversas chicas y chicos que laboraban en aquel gigante e imponente emporio. Y sólo así llegaron al jardín de mediano tamaño que tenía las oficinas de Ony Music Re:cords. Lo que se encontraron fue extraño y alucinante.
            Unos chicos que parecían trabajar en aquella casa productora estaban, literalmente, ahogando a Hinata con una manguera a propulsión, globos y pistolas de agua, y cubetas que le echaban su contenido al DJ. En ese instante, Henri no sabía si llorar, enojarse o reír... Ya que Luther, Tony y Charlie, que estaban allí presentes, no hacían nada más quedarse viendo con sorpresa. Aunque Henri estaba igual. Y ahí le cayó el clavo, ¿dónde está Vinx?
            Para cuando comenzó a buscar con la mirada a su mejor amigo, no tuvo que ir muy lejos, solo con girar unos veinte grados su rostro de ángel hacia la derecha, y sí: Vinx era ahora el que estaba a cargo de la manguera a propulsión. El baterista se ría cual desquiciado y se encargaba de dejar completamente empapado al chico, quien estaba tirado en el pasto tratando de evitar nulamente con sus manos de que dejaran de mojarlo. Los ojos de Hinata estaban fuertemente cerrados, al igual que su boca y toda su ropa estaba llena de lodo, pasto y, claro, agua. Pero el que Vinx aprovechara esta situación para hacerle de cosas a Hinata era de verdad pasarse un poquito e inmaduro.
            Sólo se necesitaron unos segundos más para que de pronto el agua cesara. Las cubetas y pistolas ya no tenían H2O y los globos se agotaron. La manguera dejó de lanzar líquido contra el DJ. ¿Qué pasó? Todo iba tan bien y era muy gracioso, en especial para Vinx, que eso pasara no era lo esperado. Y cuando el baterista volteó, encontró al señor McGiffen, su nuevo jefe, con la otra punta de la manguera desenroscada de la llave donde salía el agua. La sonrisa amigable de McGiffen le daba tanto miedo como confianza. Andrew no conocía a ese hombre, por lo cual no sabría qué decir sobre él. Sólo lo ha visto en televisión; y en persona, apenas, eso fue  ayer.
            —¿Se divierten en su primer día? —Preguntó con ironía el señor mientras se acercaba a Hinata para ayudarlo a levantarse.
            Todos seguían callados mientras veían cómo el señor McGiffen le extendía la mano al DJ y lo jalaba para que se parara del mojado y lodoso pasto de aquel jardín. Los chicos que comenzaron aquella emboscada acuática comenzaron a estallar en risas. Unas risas sumamente fuertes y hasta algo contagiosas. Henri, los gemelos y Andrew rieron levemente con ellos, tal vez para aminorar el tenso ambiente que estaban percibiendo. ¿Qué rayos había pasado en estos mismos instantes? Los misteriosos muchachos se acercaron a Hinata, los integrantes de CaNniBaL estaban a la espera de que el chico de cabellos morados explotara y les gritara cosas muy indecentes de pronunciar, y el DJ les sonrió ampliamente mientras los abrazaba con efusividad. Los integrantes de CaNniBaL estaban pasmados –a excepción de Charlie, quien siempre ha estado serio y de brazos cruzados– sus bocas y ojos bien abiertos y nada los sacaba del shock que les provocó toda esta situación. Nuevamente, ¿qué rayos había pasado en estos mismos instantes?
            Pasaron unos cuantos minutos y de nuevo todos estaban de vuelta en el nuevo estudio de lujo que McGiffen y Ony Music Re:cords les dio. Los integrantes de CaNniBaL, a excepción de Andrew que se encontraba sobre Laura, estaban sentados en un largo sillón de cuero negro viendo a McGiffen. El productor estaba de pie, en frente de todos, algo perturbado por descubrir que Laura es en realidad una cama matrimonial. Además de estar viendo con detenimiento a todos y cada una de sus nuevas minas de oro. Pero en especial a uno, uno que le devolvía con la misma intensidad la mirada.
            Por parte de Hinata, el chico se encontraba temblando con fuerza, su cabello goteaba, tiernas gotitas de agua caían del puente de su nariz, sus dientes castañeaban con deje de no querer parar, y se abrazaba a sí mismo con una toalla gigante que abarcaba casi todo su lindo cuerpecito. Para unos cuantos, esa imagen sería sumamente adorable, en especial por los vanos intentos de Hinata de verse enojado; pero para Vinx era la imagen perfecta para reírse del DJ de lindo trasero por un buen rato. Y es que el puchero que estaba haciendo Hinata era para soltar una expresión de suma ternura, lamentablemente, Hinata no podía ni lograba tener pintas de ser alguien malo.
            En estos momentos el ambiente era demasiado pesado, tan pesado que si Vinx intentaba hacer una broma, todos le terminarían reclamando. Pero parecía que el baterista igualmente palpó aquella tensión y siguió callado, con una mirada seria y porte seguro. Aunque dentro de él había una explosión de risas y comentarios sumamente estúpidos.
            —Eh, señor McGiffen —decidió por fin hablar Henri—. ¿Cómo quiere exactamente que comencemos el proyecto?
            El guapo y alto productor se quedó viendo algo embobado al vocalista de CaNniBaL. ¡Es que era inevitable! Ese chico era lo que le seguía de atractivo, y las fieras y discretas miradas que Henri le lanza de verdad que de vez en cuando lo desarmaban en su totalidad. Bueno, todos tenemos un lado débil, ¿no?
            —Bueno, yo sólo venía a saber si a Hinata le pareció bien su sorpresita.
            Los chicos que mojaron a Hinata estaban sentados en otro sillón: eran tres. Dos chicos y una chica.
            —Sí, señor McGiffen —sonrió honestamente el DJ—, gracias por traer a mis ayudantes.
            —Ya decía yo que la joven promesa hacía todo su trabajo solo —intervino Andrew con sarcasmo.
            —Disculpa, que yo sepa, tú estás en una banda, y estar en una banda es sinónimo de trabajo en equipo. Tú no podrías lograr nada de nada sin tu grupo, Vinx.
            —¡Ay, la joven promesa! Tu trabajo es tu trabajo, estamos hablando de ti, no de mí. Mi música es aparte y ese no es tema de discusión.
            Andrew se levantó de Laura y se acercó con rapidez frente a Hinata. Ambos chicos se vieron de forma asesina. Vinx comenzó a gruñir, en señal de que en cualquier momento era capaz de atacar.
            —¡Pareces perro con ese gruñido! —Se burló Hinata—. ¿Qué pasa, chucho?, ¿no te han sacado a pasear?
            —Ahora sí te mato.
            Y antes de que el desenfrenado baterista se fuera contra el pobre chico, que aún seguía temblando por el frío, Henri y los demás compañeros de banda del rubio fueron a detenerlo. Se lanzaron sobre él y lejos de Hinata. La escena hecha por la banda, avergonzó de alguna forma al DJ sensación. Sus ayudantes, y amigos, estaban viendo todo con un verdadero gesto de sorpresa. Y McGiffen, bueno, McGiffen seguía sonriendo, ¡no podía esperar a sacar a la luz el proyecto y que se venga la publicidad! Sólo debían de comenzar a trabajar y listo: el soltaba la sopa a los medios de comunicación.
            —Les dejo con mi secretaria, Lindsey, y con Suri para que empiecen el trabajo. —Sentenció McGiffen mientras se iba del estudio. Él, de todas formas, tenía otros asuntos que atender.
            Los integrantes de CaNniBaL andaban de alguna forma, si es que me es permisible explicarlo así, peleando por ver quién salía primero de la bolita que ellos mismos crearon. Y, de algún modo, Andrew salió victorioso y burlándose de los demás. Ya que el objetivo era atacarlo a él, y él logró salirse de aquella bobada.
            De pronto se volvió a abrir la puerta de ese extenso estudio y entraron por ella la chica con aspecto de universitaria y la secretaria a la que le urgía sexo –eso, según Andrew– con un gesto serio y más frío que el de ayer. Aunque al ver a Laura, Lindsey, se sintió confundida pero igualmente no quiso preguntar. Por su lado, Suri, la escritora y creadora del proyecto, estaba emocionada y feliz. Ella se consideraba la fan número uno de CaNniBaL, en especial de Vinx. Por lo que, para la escritora, ver a Laura fue de suma emoción, ella sabía que Vinx tenía esa cama para su inspiración divina.
            —¿Listos para comenzar a trabajar? —Preguntó con emoción la escritora del momento.
            Todos vieron a la chica, sabían que ella intentaba animarlos, pero la situación era otra: Vinx y Hinata serán el problema. Eran buenos trabajando, claro que sí, pero cuando se trataba del trato laboral, todos los presentes no estaban tan seguros de que ellos dos puedan presumir sobre ello. Son demasiado orgullosos. En respuesta para la chica de aspecto universitario, todos la vieron con expresión cansada y suspiraron con resignación. Sí que estaban listos.
            —Como sea —habló la secretaria. Esperemos que ella los ponga en su lugar—. Recuerden que deben entregar un limpio e impecable trabajo, o si no olvídense de ser pagados. Para comenzar, debo de darles las especificaciones de lo que se trata la historia, los géneros que deben mezclar y las condiciones. Primeramente, como tienen y deben de saber, estamos en producción de una película con temática fantástica, celta, romántica, triste y dramática. Esto último debe de darles ya más o menos una idea de lo que queremos que hagan, tomando en cuenta que deben de cubrir dos horas con cuarenta minutos de largometraje. Así que los géneros que hemos previsto y dado el punto de aprobación son los siguientes: Emocional, celta, orquestal, oscura, instrumental, celtic y folk metal, hard rock, dance, progressive house, trance y drumbstep. Todos esos géneros deben de ser combinados para ir creando la correcta ambientación de la película, ye les dije ayer: si no lo hacen bien, lo tendrán que repetir. Las canciones pueden darle una duración a libre elección pero con un margen de arriba del minuto con cuarenta segundos. Tienen que hacer, al menos, quince canciones para toda la película, incluyendo sencillos que podrán lanzar al mercado; estos sencillos deben ser para la presentación y créditos principales de la película y éstos son individuales y en conjunto. ¿A qué me refiero? Dos sencillos los harán cada cliente por su cuenta y otro lo harán tanto Hinata como CaNniBaL juntos. Ahora, no quiero tener que estar escuchando sus constantes quejas, esto va para los jóvenes Hinata y Vinx. Si llego a oír más de dos peleas entre ustedes dos al día y que no se solventen con una razonable conclusión, yo misma tomaré cargos del asunto. Mi jefe, el señor McGiffen, ya está preparando todo para que se dé a la luz que ustedes están a cargo de hacer la banda sonora de la próxima película basada en una novela de moda. Si todo sale bien, y de verdad se ganan el mérito, es posible que sea mediado su trabajo para ser nominado a uno que otro premio. Contamos con ustedes, no lo arruinen. Suri, continúa.
            En definitiva, esa mujer le urge sexo. Asustaba a cualquiera.
            —Cla-claro, Lindsey... Igualmente, tienen menos de un mes para tener cada una de las canciones. Además de que tenemos que ver si sí quedan éstas con el trabajo que ya se está haciendo y preparar los videos de los sencillos. Queremos que comiencen con algo simple, para que entren en calor. Deseamos algo que se pueda estar escuchando mientras hay una escena de suma tranquilidad y un sentimiento cotidiano, ¿me doy a entender?
            —No realmente —dijo de forma sincera Andrew mientras intentaba procesar toda la información que le acabaron de lanzar.
            —Hagan una canción para un momento donde no hay peligro, donde hasta puede haber un poco de comedia. Una escena simple, casual y mediadora de la próxima aventura. Quiero que cuando compongan se sientan como si ustedes fueran antiguos celtas en medio de una guerra pero que, a pesar de todas las circunstancias, pueden tener unos míseros segundos de suma calma y tranquilidad. ¿Ya me di a entender?
            Todos comenzaron  a asentir lentamente pero con convicción. Por fin habían entendido que tenían que hacer una canción simple pero entretenida. Debían de hacer un trabajo espectacular si querían que la película fuera aún más famosa y eso porque fueron CaNniBaL y el DJ Hinata los encargados de musicalizar aquella gigante producción cinematográfica. Tanto la banda como el DJ y su equipo no estaban muy dentro de aquella materia, pero harían el intento. Si era hacer música, no debía ser tan difícil.
            La secretaria y la escritora sonrieron, aunque el gesto de Lindsey parecía más un rostro de asco, y se fueron de allí. Aunque comenzaron sus rezos para que puedan hacer algo de provecho esos chicos, lo que sea antes de que el DJ mate al baterista o al revés. Y esa segunda opción era la más posible. Vinx no es nada paciente.
            —Bien —comenzó Hinata viendo a los demás—, ¿alguna idea o sugerencia?
            Para esos momentos, el chico de cabellos morados ya no estaba muriendo de frío y estaba más seco.
            —Sí —comenzó Vinx mientras abría una lata de cerveza fría—, te sugiero que te vayas de mi vida.
            —¿Alguien más que no sea Vinx, por favor?
            Ese había sido un golpe bajo contra el baterista.
            —Flautas... —dijo de pronto Henri, llamando la atención de los demás—, sí, flautas, arpas, gaitas, tambores, violines, violas, chelos, ¡una orquesta! Hay que crear algo muy potente, y también algo muy calmado. Debemos combinar lo emocional con el celta para esta primera canción...
            —Bien —se ilusionó Hinata mientras comenzaba a anotar en su libreta—, podríamos crear una melodía, para lo que primeramente pidieron, que combine una flauta, arpa, tambores y sonidos naturales. Ya conforme vaya avanzando podemos agregar unas entradas con estilo progressive house y tal vez un riff de guitarra para darle profundidad...
           Los presentes, sin contar a Andrew, asintieron. La idea de Hinata y Henri no sonaba nada mal. De alguna forma, esto les emocionaba y mucho. Todos sin contar a Andrew. Ya por fin podrían comenzar a trabajar.
            Vinx está acostumbrado a que lo sigan a él, a que las ideas sean de él, que él sea la cabeza de la estructura. Ver cómo Hinata estaba tomando liderazgo en este absurdo proyecto le molestó. Realmente le molestó. Así no debía ser, se supone que Andrew obtendría una increíble idea para arrancar el proyecto y él sería la salvación de todos. Incluso la salvación de Hinata. Son celos de líder, tienden a pasar, pero Andrew debía comprender que no siempre todo debe girar en torno a él. Hay más opiniones y cabezas allá afuera, y, por ahora, también debía escuchar a Hinata. Así. Punto.
            Ya todo, después, tendrá que dar un giro.

Pasaron, exactamente, dos semanas y cuatro días, y la composición de la nueva y primera canción iba de maravilla. Ya se comenzó la composición final. Hinata ya había empezado a crear melodías celtas por medio de su computadora, Henri ayudaba en lo que podía ya que él no tendría que cantar, no aún; Luther y Tony comenzaron ya a crear un pequeño ritmo y riff en compañía de una Les Paul 2008 para Luther y para su gemelo una Gibson SG, que les ayudaría por sus eficaces características de poder sonar acorde a casi cualquier género, viendo qué técnica quedaba mejor y llamaba más la atención, si un bending o un vibrato. Charlie igualmente ya comenzaba a ensayar en compañía de un bajo estilo Liverpool, que tenía mejor sonido con la música celta. Los ayudantes de Hinata se encargaban de la prueba y demás actividades en la cabina de grabación para que todo saliera a pedir de boca. Andrew, en todo ese tiempo, a penas y había tocado su bella batería de ensayos. De verdad que no se sentía con la suficiente inspiración, necesitaba hablar y desahogarse con Henri.
            —Henri —llamó el baterista la atención de su casi hermano—, ¿podemos salir un momento?
            Henri, al ver la pasividad de Andrew, se preocupó un poco. Ha estado viendo que su amigo andaba distraído y hasta algo callado durante esas semanas transcurridas. De que peleó con Hinata, peleó con él y le echó en cara barbaridades dignas de una boca de azufre como la de Andrew. Pero igualmente él no parecía estar en su elemento. Así que simplemente le asintió con comprensión a su mejor amigo y salieron del estudio. Hinata, quien ya por fin consiguió su estudio propio pero andaba viendo a los demás antes de volver a sus propias labores, vio cómo Andrew se iba junto a Henri y, muy en el fondo de su ser, se sintió molesto. ¡Ese tonto de Andrew era un bueno para nada!, ¡no ha hecho nada desde el comienzo del proyecto! Y ahora se salía con Henri, lo que le faltaba.
            Ya en el jardín trasero de las oficinas, Andrew se sentó en una banca y miró al cielo. Hoy estaba especialmente nublado y fresco. Ese tipo de día eran los favoritos de Vinx. Al baterista siempre le ha gustado quedarse en su casa y ver algo en la tele mientras hacía frío allá afuera. Pero ahora se sentía de ese modo: gris y nublado.
            —Bien, ¿qué sucede, amigo? —Comenzó Henri mientras prendía un cigarro.
            —Realmente... no lo sé. Sólo me quería salir de allí y respirar aire fresco, pero, por culpa tuya, ahora será tabaco lo que oleré...
            —Andrew...
            —¡No sé qué me pasa, hermano! Pero, enserio, enserio me molesta que Hinata esté trabajando con nosotros. Lo que no entiendo es por qué me cuesta tanto trabajar. Sabes que soy alguien demasiado sincero tanto con los demás como conmigo mismo, y estoy celoso. Me da celos ver cómo Hinata tomó el liderazgo tan rápidamente y que yo no haya podido hacer nada. Y me enoja que él me esté mandando. Un maldito gay me está mandando ¿y tengo que obedecerle? Parece que no hay de otra. Maldigo a este proyecto y maldigo a Alexis por aceptar sin pedirme permiso.
            —Calma, Andrew. Oye, sé que estás molesto, pero, por ahora, fue momento de Hinata para relucir. Habrá un momento en que tú tengas la siguiente idea y te sigamos; habrá un momento en que cualquier otro tenga una idea concreta, como ahora la tuvo Hinata, la queramos llevar a cabo, y, para eso, los demás nos seguirán. Tengo total fe de que eres alguien con talento innato, Andrew. Eres mi mejor amigo, te conozco desde que tengo memoria, sé cómo eres y sé que por ahora estás celoso. Pero, dale una sola oportunidad a Hinata para saber cómo trabaja. Ya sé que no quieres llevarte con él, pero al menos intenta averiguar su forma de laborar y luego tú le muestras la tuya.
            —Sí... lo haré, pero sólo lo haré porque tú me convenciste, maldito gay...
            Ambos sonrieron. Al menos Andrew recuperó su ácido sentido del humor. Y eso, alegraba en sobremanera a Henri. Sentía que, ahora sí, todo comenzaría a tomar camino y a mejorar. Tenía el presentimiento de que muchas sorpresas se venían.
            Y Henri tuvo razón.
            —En una semana tienen Vinx y Hinata entrevista con Lucy Moon —declaró McGiffen.
            Tan solo habían subido los dos amigos y se llevaron esa sorpresa. Se trataba de Lucy Moon. Una experta en medios y espectáculos que es conocida por sus inquietantes entrevistas. Conseguir una entrevista con esa mujer de cuerpo candente, según Vinx, era conseguir mucha publicidad y la entrada a muchas más, y de más prestigio, entrevistas. Pero eso sí que había sido una gran sorpresa para el baterista que recién volvía de aquel abismo de depresión a falta de inspiración e ignorancia.
            Nadie respondió, y ni tuvieron la oportunidad, pues como así de rápido llegó el señor McGiffen y les avisó de la entrevista, el productor se había ido. Así, sin dar especificación alguna al DJ o a Vinx para saber qué hacer, o cómo vestirse, si hay ensayo o qué carajos...
            Por parte de Hinata, la impresión era tangible a su alrededor. Llevaban tan solo dos semanas y cuatro días y ya los medios tenían pleno conocimiento sobre el nuevo trabajo que estaba haciendo en conjunto a la banda del momento, CaNniBaL. Pero lo que más le sacó de su sitio fue que la entrevista con Lucy Moon sería únicamente para él y Vinx. Sólo ellos dos, o sea, ellos dos sentados frente a una guapa periodista de espectáculos. Las posibilidades de que aquello no salga bien eran todas. Si el propio Hinata no comenzaba a quejarse, Vinx lo haría y mucho peor. El DJ sensación sólo pudo suspirar cansado. Si no lograba que Vinx ayudara con unos simples tambores, ¿cómo podría mantenerlo bien portado en una entrevista de suma importancia? Igualmente faltaba para ese momento, por ahora debía volver a su estudio y continuar con su trabajo.
            Vinx realmente no le dio mucha importancia a la salvaje noticia que el señor McGiffen le dio. Se sentía muy renovado y listo para hacer un esfuerzo por trabajar con Hinata. Se repetía una y otra vez que era por buenas causas: Una buena paga, mucha publicidad a su demasiada conocida banda y hacer feliz a Henri. Con esas tres condiciones, el baterista se daba por bien servido y entró a su estudio. Él estuvo sumamente feliz al saber que Hinata ya tenía su propio estudio. Así que tomó una copia de lo que se llevaba de composición, y así ver dónde iban las percusiones que le pidieron y que no ha hecho por estar contra Hinata. Cuando vio la copia y comenzó a leer, se encontró con varias fallas y desnivelaciones en la melodía; además de que le faltaban percusiones para lo que estaban creando (y porque el baterista quería más participación). Tenía que avisárselo a Hinata cuanto antes.
            Andrew tomó las copias de las manos de sus amigos, que se vieron confundidos, y salió volando hacia donde estaba el DJ. Entró sin permiso, como siempre, y gracias al cielo Hinata sí se encontraba y estaba trabajando y no haciendo cosas indecentes con algún tipo de cara linda que haya encontrado por ahí (Andrew ya ha visto en más de una ocasión ese tipo de escenas por parte de su peor enemigo). El chico estaba haciendo quién sabe qué cosas en una computadora proporcionada por la empresa, traía puestos sus cascos de color negro, a su lado derecho había una precioso teclado conectado al servidor y a su lado izquierdo había una malteada que, si hubiera sido otra situación, Vinx se la hubiera tomado sin permiso, como todo lo que hace. Pero no vino a eso, vino a hablar con el chico de cabellos morados. El cual al notar la poderosa presencia del guapo fundador de CaNniBaL, se quitó los cascos y le dio su máxima atención al tipo que más le molesta en este mundo.
            —¿No han hecho una prueba de melodía todos juntos, verdad? —Preguntó con ironía Andrew para comenzar la conversación entre esa intensidad de repudio que ambos emitían el uno por el otro.
            —No aún —respondió algo indignado el DJ.
            —Se nota, esta cosa tiene muchas desnivelaciones. Los cambios de ritmos están demasiado marcados y las entradas de Luther y Tony están muy mal ubicadas, esto sonará como un popurrí mal hecho. Y si se nota con simplemente leerlo, al escucharlo será mucho peor.
            Andrew puso las hojas sobre el largo escritorio de Hinata. El chico, al no saber mucho sobre el rock, no entendía sobre las entradas de las guitarras y los gemelos no fueron de mucha ayuda. Ellos sólo compusieron el riff y ritmo, más no le indicaron en dónde es bueno ubicarlo. Lo de los cambios de ritmo, él jamás se dio cuenta, creía que estaban bien. Pero que alguien por fin le dijera si había algo mal, a pesar de se trataba de Vinx quien se lo decía, le alegró. Andrew, como si ese estudio fuera el suyo, fue a buscar una pluma, de preferencia de diferente color, y sólo dio con muchos plumones delgados color rojo, bueno, eso serviría. El baterista tomó dos de ellos y una silla con ruedas para sentarse. Le pasó rodando un plumón al DJ. Eso sí, Vinx se sentó lo más lejos que pudo del DJ. Ambos, mentalmente, se agradecieron por ello.
            —Mira —llamó Vinx la atención de Hinata—, será necesario una transición menos marcada, tal vez si bajan el volumen del arpa y lo dejan con una constante de tambor, no se notará tanto. Sería mejor si la entrada de Tony y Luther fuera a la mitad de la aparición segunda de la flauta y no al final, así, se disfrutará más del bending que ellos agregaron y también de una melodía no tan estruendosa, los he estado escuchando y suena bastante bien como para no aprovechar. Las melodías que has agregado están perfectamente acomodadas pero les falta los sonidos naturales, si pones una distorsión se oirá muy falso... debe realmente parecer música celta, así que...
            —Sería mejor si quito la distorsión y agrego los sonidos naturales con una entrada de bajo volumen...
            —Eso suena mucho mejor. ¡Ah! Y hay que agregar más percusión para tener un ritmo base que dirija a los demás, no creo que el violín sirva ya que ésta se sale varias veces. Un tambor grande bastará. Escucha.
            El chico de alucinantes ojos verdes oscuros fue por un tambor, de los muchos que habían traído para el trabajo por parte de la empresa, y se sentó en un pequeño banco que había en el estudio de mediano tamaño para el DJ.
            —¿Ya tienes la melodía? —Preguntó Vinx y Hinata le asintió ante su pregunta—. Pues reprodúcela.
            El chico desconectó sus cascos y subió el volumen a un nivel considerable y dio clic en ‘play’. La música comenzó, era una suave y amigable. Se escuchaba un violín que comenzó a llevar la melodía y que le dio espacio a una suave flauta hacer su labor y Andrew, buscando una entrada, pronto comenzó a tocar el tambor con un golpe, luego dos seguidos y así, fue creando él mismo la verdadera base de la canción con un ritmo en contraste y sumamente pegadizo. Y realmente el tambor era la base de la melodía, llevaba el camino con más potencia e intensidad. Los ojos de Hinata brillaron ante la pasión con la que Vinx tocaba. Fue haciendo la canción más interesante. El baterista tomó una baqueta y decidió repetir el ritmo, sonaba mejor pero no lo suficiente. Tomó una baqueta mucho más gruesa y lo volvió a hacer: encontró la indicada, la música te emocionaba, el tambor llevaba al violín y a la flauta de una manera más fuerte. El baterista paró y con la mirada le pidió a Hinata que pausara. Si esto era una prueba y sonaba bien, cuando se haga la grabación final, sería magnífica.
            —¿Qué tal así? —Preguntó Andrew con una sonrisa.
            —Suena mucho mejor...
            —Y sonará mejor cuando agreguemos en donde dije la guitarra y si le agregamos unas partes con gaita y un coro de Henri será perfecto. Lo de Henri será leve y algo bajo pero le dará mejor ambiente, y-
            —Puede tapar los cambios de ritmos. —Dijeron los dos al mismo tiempo.
            Ante eso, los dos chicos rieron levemente, pensaron en lo mismo. Pero eso era bastante obvio, de música ambos conocían y el que se usara una voz para tapar algún cambio ayudaba de sobremanera. Tanto Vinx como Hinata se vieron directamente a los ojos y dejaron inmediatamente de reír. Andrew se levantó de su asiento, lanzó lejos aquel tambor y se fue del estudio. Esa había sido la primera vez donde ellos trabajaron juntos y lo habían hecho perfectamente. Eso les había molestado y también les había puesto sumamente felices. Hinata tomó el plumón rojo y la copia que Andrew traía (y que por su orgullo de macho olvidó) y traspasó a la suya las anotaciones que el baterista había hecho mientras le explicaba los errores.

CONTINUARA
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Perdón por las faltas de Ortografía.

Notas finales:

Buenoooo, ya en el siguiente capítulo es donde de verdad comienzan los problemas *haciendo pose de villano jorobado*. Como ya mencionés, espero que lo haya disfrutado.

Me gustaría saber su opinión,sugerencias, preguntas, quejas, pedidos, ¡lo que sea! Me agradaría saberlo, así que que espero sus reviews con muchos ánimos.

Les deseo lo mejor,

Los Quere Musho, Miraku, SAYO~


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