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¿INOCENTEMENTE ERÓTICO? por Algodon de azucar3096

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Notas del capitulo:

Hola, estoy de vuelta con el siguiente capítulo, y asombrosamente no tengo nada que decir más que agradecer por el apoyo que está recibiendo esta historia de verdad es la historia más grande que he escrito y me alegra mucho que la hayan aceptado tan bien de verdad muchas gracias a todas esas personitas que leen les mando un súper beso con azúcar y también les mando un abrazo a las lindas personitas que me dejan un comentario.


Damocles


Lucy


Alex Makenshi

Corrí lo más rápido que mi cuerpo podía soportar, hasta el punto que en el cual me costaba respirar, podía jurar que mis pulmones estaban a punto de reventar pero aun así no me detendría no dejaría que Taiga viera las lágrimas que escurrían por mis mejillas, provocadas por la vergüenza, la impotencia y los celos, sinceramente en esos momentos me encontraba tan confundido que no sabía que sentir, una parte de mí se sentía humillada por lo ocurrido en la cafetería, otra se sentía completamente culpable por sentir celos de la relación que existía entre Kuroko y Taiga y la peor de todas se sentía avergonzada e impotente de tener que venderse a esa gigante uva azucarada, y es que durante mucho tiempo había escuchado comentarios acerca de ser un ofrecido alguien capaz de entregarse por dinero y aunque me dolían podía estar tranquilo porque sabía perfectamente que no era verdad pero… ¿y ahora?... ahora efectivamente era eso… un ofrecido… un fácil o como muchos me llamaban una zorra, cuando mi cuerpo ya no lo soporto más me detuve y me sostuve de una pared me encontraba tan agitado que sentía que podría desvanecerme en cualquier momento, coloque la palma de mi mano sobre mi pecho para intentar calmar mi respiración, estruje levemente la camisa al recordar que Taiga había visto las marcas de mi cuerpo, ¿Qué abra pensado al verlas?... seguramente lo peor… suspire pesadamente y me resigne después de todo no es como que le pudiera contar sobre el ataque sufrí en la cafetería ya que al parecer no se enteró de lo ocurrido debido a que estaba con Kuroko y conociéndolo se culpara por no haberme defendido y se sentirá realmente mal y eso es algo que no puedo permitir porque a pesar de tener el corazón roto por su culpa lo sigo queriendo y no quiero que se preocupe por mí, además ahora su pareja es Kuroko así que yo no debo interferir de ninguna forma, a fin de cuentas si Taiga es feliz yo también lo seré, así que por el bien de el será mejor que crea que estas marcas son resultado de los acostones con mi nuevo novio peli-morado, aunque pensándolo bien dentro de un rato eso podría ser más una verdad que una mentira, levante la mirada para percatarme que ya había llegado a la mansión Murasakibara, mi cuerpo comenzó a temblar levemente aún estaba a tiempo de huir de ese lugar, renunciar a la escuela y comenzar de nuevo, comencé a retroceder levemente diciéndome que era lo mejor, que debía terminar con todo esto antes de meterme en más problemas pero el recuerdo de mi madre llego a mi mente, el cómo se encontraba trabajando duro para que yo tuviera un futuro brillante, el hecho de que siempre me recalcaba lo orgullosa que estaba de que estudiara en este prestigioso instituto, caí de rodillas en suelo y nuevamente de mis ojos brotaron pequeñas lágrimas, ella era lo que más amaba de verdad no podía decepcionarla, pero… ¿Era correcto hacer esto? ¿Venderme?, intentaba engañarme a mí mismo, después de todo intente buscar trabajo antes y no funciono, de verdad intente hacerlo de manera honesta pero tal parece que la suerte no me quería, no había ninguna otra opción, recuperar la beca era algo completamente imposible y nadie además de Murasakibara estaría dispuesto a cubrir mi colegiatura, claro sabía que si le decía a Taiga tal vez el me apoyaría, pero… en estos momentos en los que sabía que el hecho de estar a su lado era algo prácticamente imposible  lo menos que quería hacer era depender de el…no me quedaba otra opción simplemente estaba desesperado, como pude controle mis sentimientos, limpie mis lágrimas me levante del suelo y comencé a caminar hacia la entrada de la mansión, una vez dentro ya no había vuelta atrás.


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Había llegado completamente furioso a la mansión tanto que lanzo todo aquello que tenía a la mano estrellándolo contra el suelo, ¿Por qué demonios su Muro-chin quería tanto al pelirrojo? Le hervía la sangre de solo recordar como el azabache del lunar limpiada desesperadamente sus labios intentando quitar cualquier rastro de él, ¿por qué el azabache no podía fijarse en él?, ¿por qué no podía mirarlo solo a el y olvidar a Kagami?.


-¿Qué está ocurriendo aquí joven Atsushi? –Dijo Arata un poco molesto al ver los destrozos que había hecho el gigante-


-Muro-chin no se está portando como yo quiero y eso me hace enojar-El peli morado hizo un pequeño puchero mientras fruncía el ceño-


-Atsushi no puedes controlar a Himuro-chan a tu antojo, entiende él es una persona y tú no puedes hacer que las personas hagan lo que tú quieras.


-Pero Muro-chin es mío, el acepto ser de mi propiedad y por lo tanto debe hacer lo que yo quiera y si no lo hace lo aplastare…-Dijo en una voz más que tenebrosa lo que hizo preocupar al adulto.


-Atsushi deja de ser un niño berrinchudo por un momento y enfócate en lo verdaderamente importante, no sé exactamente como o porque te has encaprichado con ese pobre joven, pero créeme cuando te digo que no obtendrás nada con esta actitud tan infantil, a lo mucho solo conseguirás que él te termine odiando, así que se prudente y hazme caso deja esta actitud de una vez por todas.


-Si Muro-chin no se comporta como yo quiero que se comporte entonces prefiero que me odie…-El peli-morado comenzó a caminar hacia su habitación- El llegara pronto cuando lo haga dile a Kouki que prepare todo y lo lleve al cuarto especial.


-…-El adulto no dijo nada ni siquiera asintió, sabía que debía obedecer su joven amo pero de alguna manera debía demostrarle que no estaba de acuerdo con lo que estaba haciendo. 


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-Buenas tardes disculpe la molestia pero… vengo a ver a Murasakibara-san-Dijo avergonzado el azabache mientras era recibido por Arata-


-Claro joven Himuro adelante pase-Al entrar el azabache noto como el cuarto de sala estaba desordenado haciendo que se preocupara un poco-


-¿Qué sucedió?...


-Nada importante, un oso gruñón hizo algunos destrozos-


-¿Un oso?...-Pregunto confundido el azabache-


-En realidad es un pequeño gatito pero a veces parece un oso-Si el azabache antes estaba confundió ahora lo estaba muchísimo más- Bueno pero eso no importa veo que vienes muy agitado.


-Es que corrí de la escuela hasta aquí, no quería llegar tarde-Mintió el azabache-


-Bueno la próxima vez puedes llamar para que chofer te vaya a recoger


-Eso no es necesario…además no podría hacerlo


-Tonterías a partir de hoy todo lo que está en esta mansión se encuentra a tu disposición, pero dejémonos de rodeos, Furihata te acompañara y te dirá que hacer-El azabache dejo de recoger el destrozo que había hecho el peli-morado  y se dirigió al azabache del lunar-


-Sígame por favor joven Himuro-Le dio una amplia sonrisa-


-Sí, ha… se me olvidaba –El pelinegro busco entre sus bolsillo para entregarle el dinero que le había dado esta mañana el atento mayordomo- No lo utilice así que creo que lo correcto es regresárselo, de todas formas muchas gracias. –Posteriormente de entregar el dinero el azabache subió al segundo piso acompañado por el castaño, el hombre de mayor edad miro el dinero en sus manos y sonrió levemente-


-Me alegro que Atsushi te escogiera a ti.


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Ambos jóvenes se encontraban caminando en una especie de laberintos de pasillos, el azabache no recordaba cuantas veces habían dado vueltas por hileras e hileras de cuartos subido y bajado escalones realmente estaba confundido.


-¿Puedo saber a dónde me llevas?


-A su nueva habitación-El castaño le sonrió-


-Y es una especie de calabozo o algo por el estilo porque tal parece que se encuentra muy escondido.


-Pues no es un calabozo pero si está escondido de hecho solo el joven Atsushi, mi abuelo y yo sabemos de él.


-¿Y por qué están secreto?


-Bueno esta mansión a pertenecido a la familia por generaciones y digamos que anteriormente los amos eran un tanto Mujeriegos...-El rostro del castaño se sonrojo levemente-así que esta era la habitación donde escondían a sus amantes para que sus esposas no se dieran cuenta de sus amoríos clandestinos, esta habitación está conectada a la habitación principal la cual pertenece al líder de la familia que obviamente es el señorito Atsushi claro desde que su abuelo falleció hace ya varios años.


-¿Murasakibara-san es el líder de la familia?


-Así es, ¿No lo sabía?...-El azabache negó-


-Entonces su padre...


-Bueno eso es un tema del cual no me corresponde hablar-El castaño se detuvo enfrente de una pared hemos llegado-El chico del lunar estaba completamente confundido, no veía una puerta solo una pared llena de cuadros de fotos antiguas, el castaño al notar si confusión le sonrió para posteriormente mostrarle una llave quitar un cuadro de la pared el cual ocultaba una cerradura, incrusto la llave dio vuelta e inmediatamente pared se abrió dejando ver un enorme y lujoso cuarto perfectamente adornado en un estilo moderno pero muy elegante-Sea usted bienvenido, espero le guste, nos esforzamos mucho para que la decoración le agradara todos los muebles son nuevos, el señorito Atsushi eligió la mayoría de un tono perla, blanco, gris y lila porque dijo que esos son los colores que más le que quedan al joven Himuro, ya que lo hacen lucir más hermoso inevitablemente el azabache se sonrojo -Sígame indico el castaño guiándolo al cuarto de baño el cual también era enorme, tenía una bañera muy grande, una ducha,  obviamente el sanitario y el lavamanos con un inmenso espejo, el cuarto estaba repleto de un aroma delicioso, realmente agradable – Estas son las fragancias favoritas del señor Atsushi-Dijo el castaño mientras abría una enorme armario que se encontraba al lado del espejo, en cual había una gran cantidad de frascos de vidrio con diseños realmente elegantes, además de otros accesorios de baño como jabones, shampoo, perfumes, tollas, batas etc. – El joven castaño tomo uno de los tantos frascos de esencias y se lo entrego al pelinegro, creo que olor a vainilla es el más indicado para esta noche, pero puede escoger la que quiera, hay de olor a chocolate, fresa, cereza, café, frambuesa, durazno -El azabache solo escuchaba un tanto aturdido ya que más que estar nombrando fragancias parecía estar diciendo la carta de un menú de postres- Los jabones, shampoos y perfumes también son de este tipo de olor, la bañera ya está lista, creo que la temperatura es la adecuada, y como el joven amo lo pido hoy usted tomara un baño de arroz con leche.


-¿Qué?... ¿Qué es eso?...-Dijo completamente confundido el chico del lunar-


-Es un postre extranjero que le gusta mucho al joven Atsushi, además dijo que la leche y el arroz ayudaría a que los moretones de su piel se desvanecieran más rápido-El castaño le dedico una tierna sonrisa-


-Pero… no crees que un desperdicio que yo me bañe en eso…-Dijo el azabache completamente avergonzado-


-No me permite cuestionar los deseos del joven amo –Le sonrió ampliamente y le entrego una muda de ropa- le traje esto como pijama espero le quede bien, bueno será mejor que me retire, siéntase libre de tomar lo que guste, el joven amo llegara después-El castaño se retiró del lugar, por su parte el azabache estaba un poco acomplejado y confundido no sabía exactamente que hacer todo esto era nuevo para él, suspiro profundamente dejo de lado la pijama, se desvisto con mucho cuidado de no moverse tanto para que no le dolieran sus heridas, retiro la curita de su cara y posteriormente se dirigió a la ducha para enjuagarse un poco con agua todo el sudor y suciedad que su cuerpo pudiera tener antes de ingresar a esa bañera llena de postre, algo dudoso comenzó a sumergir su cuerpo en la tibia mezcla blanca de olor dulce, sentía que solo con sumergirse en esa bañera podría morir de diabetes, inmediatamente sintió como su cuerpo se relajaba al tacto con esa extraña mezcla, cerro sus ojos y con tranquilidad suspiro el dulce aroma emergente del líquido, sinceramente era muy relajante, comenzó a pasear la palma de su mano por sus brazos, sus piernas, su cuello, este baño le estaba gustando más de lo que le había pensado, comenzó a delinear su nariz y sus labios con su dedo indicie, mientras se perdía en el exquisito aroma del postre y su cuerpo cada vez se relajaba más, posteriormente paso la mano por su hombro, delineo su clavícula y luego su pecho, sin querer había rosado uno de sus pezones lo cual lo hizo estremecerse un poco, su mirada se fijó en estos y noto como su color rojizo resaltaba al lado del líquido blanquecino, fue entonces que recordó como el peli-morado le había dicho que parecían unas pequeñas fresas, inmediatamente sus rostro se sonrojo al recordar como en aquella ocasión el gigante había intentado probar sus pezones, aunque tal vez dentro de poco lo haría, el cuerpo de azabache se estremeció con el simple hecho de pensar en cómo sería ser poseído por esa gigante uva morada, tenía algo de miedo después de todo el jamás había tenido sexo con alguien, incluso jamás se había masturbado, aunque a veces había sentido una especie de calor al imaginarse que Taiga lo tocaba, cerró los ojos lentamente, a veces fantasea con eso… con que el pelirrojo le diera algunos besos en los labios, en el cuello, que mordiera su blanca piel y dejara marcas en ella, que sus grandes manos recorrieran sus espalda, su pecho, su torso, su cintura, mientras pensaba en esto el azabache recorría con su mano las partes que anhelaba que tocara el de mirada de rubí, deseaba que su mano bajara por su pelvis y que tocara su parte más íntima, que lo marcara completamente y lo llenara de el , pero eso solo pasaría en su imaginación ya que ahora el pelirrojo era prohibido y él estaba a punto de acostarse con el peli-morado, era mejor dejar esas fantasías absurdas atrás, salió de la bañera, se enjuago un poco con agua en la ducha, se vistió con una pequeño short negro y una playera blanca que al parecer era de Murasakibara puesto que le quedaba enorme, coloco la esencia a vainilla detrás de sus orejas y en el cuello y se dirigió a la cama a esperar al gigante, solo deseaba que fuera suave en su trato, las beses anteriores el titán siempre lo lastimaba con sus toques bruscos y al menos le agradaría que su primera vez no doliera tanto, aunque conociendo al peli-morado eso sería prácticamente imposible, le parecía increíble como el peli-morado podía comer tantas cosas dulces y aun así ser tan agrio.


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Se escuchó como una especie de puerta se abría dentro de la habitación, la cual estaba escondida detrás de un librero, de dicha entrada se asomó el gigante de mirada purpura, traía puesto un pans de color blanco y su torso se encontraba completamente desnudo dejando ver su tan marcado abdomen, su cabello estaba recogido en una media cola y se notaba algo húmedo, al parecer también había tomado un baño, inmediatamente al verlo el azabache se puso nervioso y retrocedió un poco.


-Acuéstate –Ordeno el gigante, el azabache negó ligeramente y retrocedió aún más lo que hizo molestar al peli-morado, el gigante lo tomo fuertemente del abrazo y lo obligó a acostarse en la cama quedando encima de el- recuerda que ahora me perteneces y debes hacer lo que yo diga- El gigante hundió su nariz en el sedoso cabello del azabache para inhalar el delicioso aroma a vainilla y arroz con leche que tenía, simplemente con oler su fragancia estaba más que excitado, sin duda el azabache era un afrodisiaco para titán, comenzó a descender levemente por su rostro y por su cuello inalando cada porción de piel que su nariz tocaba, mientras sus manos comenzaron a colarse debajo de la playera que cubría su cuerpo, por su parte el pelinegro estaba entrando en pánico, el toque del peli-morado era brusco y errático provocando que las heridas en su trozo dolieran, estaba a punto de protestar y luchar en contra de las caricias del peli-morado pero recordó que no podía hacerlo, después de todo ese era el trato, hacer lo que el gigante quisiera, simplemente cerraría los ojos y esperaría a que todo terminara, fue entonces que sintió como la húmeda lengua del titán recorría su cuello y sus uñas comenzaban a enterrarse en la blanca piel de su espalda, un leve gemido de dolor escapo de sus labios, lo cual solo aumento el libido del mayor provocando que una de sus manos se dirigiera al muslo del azabache y lo comenzara a acariciar y a oprimirlo en busca de más contacto, la piel del azabache era tan suave que un simple rose con esta lo hacía perder el control, el mayor se colocó en medio de las piernas del de mirada grisácea haciendo que sus hombrías se rosaran entre si-


-Haaa…-El azabache se removió un poco por tal rose, sus mejillas se sonrojaron mostrando su vergüenza, dicha expresión le fascino al mayor haciendo que se relamiera los labios, si el azabache podía verse tan jodidamente excitante con un solo rose imagínense como se vería cuando estuviera dentro de él-


-Muro-chin es muy lindo cuando se sonroja-Dijo mientras lamia los labios de azabache con deseo-


-…-En un intento de ocultar su sonrojo el azabache se dio la vuelta para hundir el rostro en la almohada-


-Moo…Muro-chin no debe ser tan tímido…-Le susurro mientras lamia su oreja- después de todo Muro-chin ya debe estar acostumbrado…a que otros miren su cuerpo… a que otros lo toquen… ¿verdad?-Coló una de su manos dentro de la playera del menor y comenzó a rosar ligeramente sus pezones- dime ¿Cuántos te tocaron antes de mí?...


-Eso no…-Intento defenderse el menor pero al sentir como la otra mano de azabache se colaba en su ropa interior y tocaba su entrada con uno de sus dedos de una forma tosca, las palabras no lograron salir, en su lugar sus ojos comenzaron a ponerse cristalinos debido al dolor que sentía-


-Responde a cuantos más te has vendido-El dedo del peli-morado comenzó a descender por la estrecha entrada, el lugar se encontraba tan cálido y realmente apretado, que le costaba ingresar, bajo aún más y su dedo índice se encontró con el himen del azabache intacto lo cual significaba que el menor aún era virgen, inmediatamente el gigante dejo de tocar la entrada y se alejó de él, estaba realmente conmocionado muchas veces antes el azabache le había dicho que él era puro pero jamás le creyó, pensó que solo era una farsa para llamar la atención, se maldijo mentalmente por lo que le estaba haciendo hace unos momentos, tocarlo esa manera tan brusca cuando el chico no tenía ningún tipo de experiencia, por su parte el azabache se encontraba temblando en la cama mientras intentaba cubrirse con las sabanas, de sus ojos salían lágrimas de vergüenza e impotencia, el peli-morado al darse cuenta de su estado se acercó a él y limpio sus lágrimas-


(No obtendrás nada con esta actitud tan infantil, a lo mucho solo conseguirás que él te termine odiando)


-Las palabras de Arata resonaron en su cabeza, haciéndolo sentir una extraña sensación en el pecho, hasta ahora había creído que el azabache era un berrinche más, pero al parecer comenzaba a significar algo mucho más importante y no estaba dispuesto a perderlo- Lo dejaremos por hoy…-Dijo en su característico tono de voz, mientras le daba un beso en la frente al azabache- Lo siento… -Después de decir esto el gigante se retiró de la habitación, por su parte el azabache intentaba calmarse, su cuerpo se sentía tan sucio, el toque del peli-morado le había parecido completamente desagradable, con todas la fuerzas se tranquilizó y se recostó en la cama, al parecer esa noche se había salvado, cerró los ojos e intento pretender que todo había sido una pesadilla.


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Arata se encontraba tomando un té en la cocina, cuando una cabellera morada se asomó por la entrada, el titán lucia bastante confundido.


-Buenas noches, ¿Se le ofrece algo joven Atsushi?-El peli-morado no respondió- si no se le ofrece nada me retiro.


-Ara-chin creo que tenías razón, Muro-chin me odia.


Continuara…

Notas finales:

Bueno espero que el capítulo les haya gustado espero verlos pronto y díganme ¿Qué opinan? Que creen que ocurra de ahora en adelante, nuevamente muchas gracias por leer, les mando un abrazo.(aclaración se que el hime solo se encuentra en las mujeres pero fue lo único que se ocurrió para que la torpe uva azucarada se diera cuenta que nuestro Himuro es un niño puro)


Quería comentarles que estoy pensando en retomar una historia que abandone hace dos años tal vez la conozcan se llama ¿Cómo vengar a un ángel? Es de KBN también el concepto original no es mío, solo narre los hechos de manera diferente si les interesa les dejo el link


 http://www.amor-yaoi.com/viewstory.php?sid=172501#sthash.V4l0Gh7P.dpbs


Aunque la verdad no es muy seguro que la retome. Sin más nos vemos en unos días.


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