Había cometido una tontería, una gran tontería...
Sus ojos se abrieron por corto tiempo antes de volver a su habitual expresión. Agradecía ser una persona inexpresiva la mayoría del tiempo de lo contrario estaría en pánico, quizá tratando de no desmayarse, o evitando vomitar por los nervios ante la temible situación.
El teléfono lo decía por si solo para su mala fortuna, en la pagina de noticias de ultimo momento; ''El afamado Akashi Seijuurou jefe de una de las corporaciones más importantes de Japón se encuentra en una relación con el aclamado modelo del momento, Kuroko Tetsuya'' junto con una fotografiá; donde por un lado estaba el imponente porte de un hombre del cual no había visto el rostro hasta ahora y por el otro él, donde se le veía con ropa de categoría y una pose por demás provocativa.
Si tan solo se hubiera ahorrado las palabras que lo afectarían de manera permanente, seguramente no se vería en apuros como en estos instantes.
Dios, solo cometió un error, ¡Un solo error! ¿Como rayos es que llego a estos extremos? No sabia, pero de tan solo pensar en lo aterrador que era le estremecía de pies a cabeza.
No había tenido intención, claro que no, ni en sus más locos sueños, en serio. Podría incluso jurar y perjurar a todos los dioses de todas las religiones de este mundo que su intención solo era repeler a una bestia que lo acosaba todos los días desde que se dio cuenta de su inadvertida presencia.
Al principio simplemente le llamaba para hablar unos minutos con él, conversando de si mismo y de lo genial que era. Con el pasar de los días comenzó a ser forzado por el hombre a comer junto a él en sus descansos en la cafetería del trabajo, y cuando ya no quiso seguirle el juego el hombre lo acorralo cada vez que pudo con excusas vagas, no por decir mediocres.
Lo había dicho por decir ¡Vamos, ni siquiera se había fijado en el nombre de la persona! (incluso dudaba que existiera) lo único que tenia en su pequeña mente era desaparecer de los planes de ese hombre petulante. Y cuando pensó que por fin había pasado por lo peor, la vida le hizo ver que apenas era el principio de un preludio de niveles apocalípticos.
Sabia que ese hombre había difundido la noticia, así mismo, no le sorprendería enterarse de que había vendido información falsa a los periodistas a cambio de dinero. No obstante, no significaba que no se encontrara molesto por el atrevimiento tan fatídico. De hecho, podía ver sangre deslizarse entre sus manos y el cadáver de su futuro ex compañero en bandeja de plata. Coraje brotaba sobre sus venas.
Considerando matarlo cuando tuviera la mínima oportunidad, suspiro y observo a cada uno de sus compañeros. La mayoría de las personas dentro del salón de fotografiá seguían haciendo lo habitual, casi se podría decir que no les afectaba de ninguna manera la noticia, pues se encontraban acostumbrados a ello. Sin embargo, Kuroko conocía a cada uno de sus compañeros y sabia que a pesar de que ya era algo normal, no paso a desapercibido. Podía verlo; esa curiosidad latente en ellos, las grandes ganas de tomar el control de la pantalla plana para confirmar si esto era real, o un simple rumor que seria olvidado con el pasar de los días, e incluso veía a las personas más osadas viéndolo y titubeando en voz baja, como si desearan preguntarle directamente y sin rodeos.
Dándose cuenta de que esto se estaba poniendo demasiado incomodo, se levantó de su asiento, y de manera que no lograran verlo, camino hacia el ventanal que separaba de la calle principal. Lejos de sus subordinados.
Las puertas del salón se abrieron y se escuchó pasos acelerados venir hacia él. Quien fuera la persona, no estaba de humor para soportarlo. A menos que fueran sus amigos.
— ¡Tetsu-kun! — Escuchando una voz conocida, volteo y observo con cierto deje de alivio a Momoi Satsuki, una de las personas a quien más apreciaba. Sin embargo, no duro ese pequeño placer.— ¡Dios, esta noticia se ha hecho viral en menos de tres horas! ¡Tres horas, entiendes! Se ha vuelto tendencia en todas las redes sociales.
Espera que...(?
Oh Dios...
Muy bien, demasiado bien. Ahora resultaba que las redes sociales se habían adueñado de la noticia y habían hecho de ella algo de que hablar. Perfecto. Ahora si tenía ganas de llorar.
Miro una y otra vez a la multitud que se hallaba en el salón para verificar que siguieran haciendo su trabajo, y una vez que lo hizo, con pesades, volvió a su teléfono y abrió instagram. Si había algo que odiara de su cuenta de instagram, era lo aterrador que podían ser sus seguidores cuando querían saber más de él, preguntándole más de la cuenta e interfiriendo en su trabajo cuando no respondía. No lo mal entiendan, amaba a sus fans y entendía ese interés por saber de su vida, pero es que lo llevaban demasiado extremo. Muchas veces tuvo que mudarse de departamento por ello. Y este era uno de esos casos. Su bandeja de notificaciones era una infinidad de comentarios donde más de cien veces había sido mencionado, fotografiás donde argumentaban las ventajas y desventajas de tener una vida amorosa con esa persona (de quien sabia poco, por cierto) encuestas, investigaciones en donde nada tenia que ver...
... Esto era demasiado para él.
''¿Sera qué Akashi Seijuurou, magnate, hombre de negocios haya encontrado el amor en Kuroko Tetsuya, el nuevo muñeco de la empresa más importante de modelaje?'' Pongan sus respuestas en comentarios ¡No importa el idioma!
@Alessa1414; ¿Entonces es cierto la noticia?
@NoemiTetsu; @Alessa1414 es claro que si, duh, las noticias hablan por si solas.
@GabrielEmperator; Yo no creo en la noticia de esos periodistas, fácilmente pudo haber sido un engaño de parte de ellos para que nosotros creamos en una relación inexistente entre el modelo y el empresario.
@ShakaV; Yo tampoco creo demasiado en la noticia ¡vamos! ni siquiera hemos visto una foto donde se encuentren juntos... Entonces ¿Por qué debería creer en ellos?
@LunePhantom; A mi no me importa demasiado si es real o no, yo solo quiero saber que opina @KurokoTetsuya sobre ello.
@GabrielEmperator; Yo también quisiera saber que opina @AkashiSei sobre ello.
@MirraMagic; ¡Al fin Akashi consiguió a una pareja, yei, yei, yei! No podía soportar ver al emperador sólito, de seguro ese modelo le hará feliz.
@CielHive; @MirraMagic De seguro usted es fan de Akashi Seijuurou(?
@Kimber589; Yo no estoy de acuerdo en ese tipo de relación ¿En serio? ¿Dos hombres? ¿Acaso la homosexualidad se ha vuelto normal? D: ¡Es una maldita plaga!
@MilesDev134; @Kimber589 Creo que dos personas tienen derecho a enamorarse, sin importar el genero. El amor es amor y eso no debería ser un obstáculo, que pésima forma de pensar tienes.
@YuryKatsuki1; Concuerdo con la persona de arriba :D
@SaoLinn431; No puede ser, no puede ser, no puede ser, mi Tetsu ¿como es posible que este en una relación? No lo acepto, ¡es mio!
@Mika1789; Creo que es demasiado para mí kokoro, Tetsu es muy lindo para ese hombre, ojala no confirmen la relación.
@Lena13434; Pff ¿están diciendo que @AkashiSei no es suficiente para Tetsuna o como se llame ese modelito? ¿No debería ser al revés? Por Dios, Akashi Seijuurou es un hombre codiciado entre la multitud, es obvio que la popularidad de el es más grande que el recién ingresado Kuroko Tetsuya. No me sorprendería si buscara más fama a través de Sei.
@Mikaru789; ¿Crees que Tetsu es capaz de hacer eso? es uno de los pocos modelos que no le importa la fama o la fortuna @Lena13434 es estúpido que quieras argumentar contra él.
@Lenai13434; WTF(? ¿Argumentar contra él? Jaja, solo estoy dando mi punto de vista. Respeta eso por favor.
@DanielSoo12; Pues yo ya los shippeo o///o
@MinKwon; x2 Uh, uh, eres de las miás.
@JeanSol45; x3, sabia que había gente como yo.
@MizukiN19; Yo solo quiero ver el mundo arder :v
Cerro instagram por el bien de sus nervios y abrió facebook.
Grave error.
Si instagram estallo en publicaciones, facebook era el rey de ellas. No solo publicaciones, debates, encuestas, sino también había teorías locas sobre su inexistente relación con ese hombre del cual nunca conoció.
Kuroko estuvo tentado a caer.
— Momoi-san, esto es demasiado. — Murmuro, aun con los ojos cerrados, acordando de no desfallecer. Su corazón estaba estallando en angustia. — Si facebook e instagram se encuentra repleto, no me imagino Twitter o Snapchat, ahí debe estar en llamas, y en los foros, y la pagina principal de mi usuario de empresa debe ser el infierno. — Suspiro abatido al tiempo en que sus ojos se abrieron. — Soy hombre muerto.
— Y no te olvides de la televisión Tetsu-kun, en los programas de espectáculos sé está discutiendo sobre el tema. — Kuroko se encogió al escuchar que la televisión estaba involucrado más que nadie. Desafortunadamente eso no le ayudaba en lo absoluto. Dandose cuenta de su error, Momoi intento corregirlo rápidamente, en vano. —Tetsu-kun no te presiones demasiado, es normal que estas cosas pasen en el mundo del modelaje.
Y era cierto, para su pesar. Cuando entro a trabajar como modelo dentro de la empresa Kise Ryota; un modelo muy reconocido por todo Japón (y del quien seria su amigo más tarde) recalco en más de una ocasión que una vez que su nombre fuera reconocido en Japón como modelo instantáneamente seria blanco de criticas, suposiciones, rumores, y noticias de parte de los periodistas. Sin embargo, no sabia a estas alturas que una vez que se alardeara algo sobre su vida personal serian extremistas hasta tal punto.
No era la primera vez, reconoció. En realidad, sucedió en varias ocasiones, nada de que preocuparse si era sincero, con limitaciones y con muy poco tiempo de durabilidad. La gente solía olvidarse de algo netamente insignificante porque no eran noticias cruciales de su vida, pasando de ella sin llegar a mayores. Fue meticuloso, al no ser fácil de ser inmiscuido por profesionales y creía que jamas llegaría el día en que ellos obtuvieran una noticia bastante jugosa como para hacer su vida de cuadros. Pero se equivocó, y de la peor manera posible. Ahora estaba en un problema, en donde jugaba su vida personal y laboral.
>>Y hablando de su vida laboral...<<
— Pero mira a quien tenemos aquí... — Una mujer, un poco más alta que el se presentó ante su visión; curvas de envidiar, piel blanca y suave, rizos castaños sobre hombros frágiles, piernas delgadas y firmes, pechos esculturales, mirada verdosa venenosa, boca excesivamente pintado de rojo pasión y sonrisa de demonio incubo dirigidos a ellos, oh si, sin olvidar su ropa costosa y provocativa. Si, ella era, después de Kise Ryota, la mayor modelo reconocida en Japón, y fuera de, cabe destacar. Una mujer bella, pero demasiado engreída. — La muñequita celeste y su asistente rosada.
— Soy Momoi Satsuki, Mizu-san. — Hubo un tono de reproche en voz, del cual ignoro olímpicamente la anterior mencionada.
— Como sea rosadita. — Dirigió una mirada de desprecio a Momoi, antes de dirigirse a el unicamente. — Veo que te has beneficiado demasiado por la noticia, muñequita, siendo el centro de atención, cuando deberían poner sus ojos en mi y en mis nuevas fotos en la portada de revista. Demasiado conveniente para ti ¿No crees?
Se preguntó cuantos grados habían bajado ante el tono tan mortífero de la castaña, como para que se viera ante la necesidad de frotar sus brazos con las palmas de sus manos.
Kuroko inspiro y exhalo un par de veces. La gente alrededor de repente se había calmado y el silencio reino en su lugar. Había tensión, lo sabia demasiado bien.
Los pares de ojos de repente estaban sobre ellos y él supo entonces que nuevamente estaba siendo el centro de atención junto a Mizu. No le gustaba en lo absoluto.
— Siendo sincero Mizu-san, creo que ser la joya dentro de este mundo le queda mejor a usted que a mí, sin embargo, no puedo quejarme.
En realidad si tenia mucho de que quejarse, pero no lo dijo en voz alta. No quería darle excusas para que esa mujer se burlara de él.
Ella bufo divertida.
— Entonces disfruta de tu fama momentánea muñequita, te aseguro, que una vez que se acabe tu buena fortuna seré el centro de atención una vez más como siempre debio ser.
— Y yo le recuerdo que tu solo eres el segundo lugar Mizu-san. Le aseguro que una vez que Kise-kun regrese de viaje seras olvidada nuevamente. — Una pequeña sonrisa se instaló en sus labios al ver de ella una negativa expresión. Difícilmente el era así de víbora como ella, pero situaciones inesperadas, medidas desesperadas.
Escucho un par de risas en el fondo. Era el grupo que odiaba a Mizu; todas ellas con un pasado demasiado aterrador como para contarlo. Según se entero, gracias a Kise (quien resulto ser un boca floja) que, tan pronto como llego a ser una de las modelos más queridas de entre la corporación se concentró en ser la persona más egoísta posible con todos los trabajadores. Suponía que el grupo fue el más afectado, por la forma tan grotesca en que a veces se referían a ella.
— Kise Ryota no me preocupa en lo absoluto, niño. — Susurró, con ojos maliciosos, formando una linea recta sobre sus labios, antes de proseguir. — Cuando menos te lo esperes esa pequeña perra sera olvidada por todos. Así como lo serás tú si no callas esa linda boquita tuya.
Esta bien, eso le molesto mucho, demasiado a decir verdad.
Estaba consciente de que una vez que te metías con la estabilidad de esa mujer nada iría bien después. La gente dentro de la empresa incluso le daba miedo a confrontarla por esa misma razón, sin embargo, eso no permitió que su cabeza diera un click cuando escucho a hablar mal de Kise. Ella podía insultarlo, porque a él no le importaba, lo tenia permitido, pero definitivamente no dejaría que su amigo fuera insultado tras sus espaldas. Y mucho menos ante una mujer tan frívola como ella.
— Como si fueras a hacerlo, Mizu-san — Alego, con firmeza, para sorpresa de todos los presentes. Momoi entre ellos. —, si no te has dado cuenta yo también soy importante en la industria, la nueva moda dentro de Japón, no creo que el jefe sea tan descabellado para echarme, pero si fuera así creeme que otra empresa me recogerá una vez más. Y esta vez no seré benevolente. — Lo último lo dijo en un tono más bajo, como si quisiera que solo ella escuchara. — Oh, y no importa cuanto empeño use usted para alcanzar a Kise-kun, no le llegaría ni a los talones.
Sonrió para sus adentros cuando esa carita perfecta decayó hasta el enfado.
— Estúpido... — Susurro. — ¿Quien te crees que eres para desafiar..?
La puerta de la sala de fotografiá se abrió y Kuroko de pronto se sintió tan liberado que no pudo evitar soltar todo el aire contenido en sus pulmones. Se salvo de un terrible pedestal.
No obstante, no duro mucho antes de observar quien era su salvador existencial.
— Kuroko-san, Nijimura-san desea verlo en su oficina.
Oh, oh...