Les tomo un tiempo, pero lograron levantar nuevamente su aldea, sus chozas de madera fueron sustituidas por pequeñas casas de adobe, de sus techos ya no se filtraba el agua y el frio de invierno era menor en esas cuatro paredes, puertas de resistente madera y colchones suaves.
La verdad era que el reino estaba arrepentido por todo el daño causado, así que les ofrecieron vivienda en el palacio, mas su respuesta fue negativa, a ellos les gustaba su hogar al aire libre junto del lago, por lo que les proporcionaron buenos materiales de construcción y alguno que otro objeto que les ayudase a estar más cómodos en sus nuevas viviendas, fue lo único que aceptaron tomar, muchas cosas les fueron ofrecidas pero ellos solo les pidieron vivir tranquilos.
El rey había renunciado al trono y la población pedía de regreso al príncipe Xiumin, “su príncipe de hielo”. Xiumin tuvo que volver al reino a aclarar las cosas, era extraño para él volver al sitio donde fue privado de su libertad por años y solo obtuvo rechazo, pero había caos y su alma siempre noble le impidió ignorar el problema, pero por suerte tenía a su lado a Chen y su eterna y fiel compañía.
Por eso las seis casas construidas en su aldea se sentían un poco vacías, no solo Xiumin y Chen no estaban; Kris y Tao no habían regresado de donde sea que anduvieran; Lay había marchado varias semanas atrás a visitar a algunos soldados y aldeanos que aun presentaban lesiones de guerra, lo cual le tomaría mucho tiempo; y por ultimo Luhan, quien después de terminar la lucha con hechiceros que aún se escondían y terminado con los huevos modificados, había decido marcharse, ni una explicación, de Kris y Tao no era extraño, pero que Luhan se fuera de esa manera era raro para todos, menos para una persona, Sehun, lo vio en sus ojos, algo le decía que no volvería y le dolió comprobarlo.
Aun así la aldea nunca había estado tan silenciosa como ahora, TaeYong y su equipo se estuvieron quedando a vivir algunos días con los chicos, pero un mensaje les había llegado del reino, Jung les había pedido de su ayuda y tenían que regresar al reino, por lo que fue difícil para todos que ya tenían formados lazos con sus pequeños hermanos y en especial difícil para Chanyeol, le gustaba tener a TaeYong a su lado, todo el tiempo perdido que estuvieron separados se compenso en nuevas experiencias y conocimientos del otro; sin embargo, Tae tenía que seguir, no podía abandonar a su equipo, ellos lo necesitaban, así que se despidieron prometiéndose mandar mensajes y visitar seguido.
***
Una semana tardo Chanyeol en aceptar la partida de su hermano, se le veía más feliz aunque sus chistes y bromas estúpidas no regresaban del todo, lo que le daba cierta paz a Sehun aunque mentiría si dijera que no extrañaba al ruidoso hyung y su compañero de bromas, Baek, pero se les veía felices y muy unidos al igual que a Kai y Do quienes siempre andaban molestándose y acompañando a todas partes, se sentía celoso era verdad, pero pensar en Luhan le producía mas enojo que cariño, se sentía traicionado, pensó que entre los dos todo podía ser bueno, pero su hyung siempre fue extraño.
Las cosas habían cambiado ese día en el que ambos decidieron entrenar solos, todo iba bien, Sehun le estaba dando gran batalla a su hyung y la pelea entre viento y esferas metálicas era intensa.
Luhan solo usaba esferas de tamaño pequeño y mediano, en la habitación se encontraban otras esferas de diámetro equivalente a su brazo, grandes y pesadas, con ellas practicaba su dominio y resistencia, pero nunca las uso en batalla con sus compañeros. Durante el enfrentamiento, Sehun logro aventar lejos las esferas con las que Luhan atacaba, por lo que los fuertes vientos dejaban poca visibilidad, observo una de sus esferas de tamaño medio a lado de las grandes, su intención era detener el paso de la corriente de aire con su esfera y después derribarlo, más su mente le fallo al levantar de la bola de gran tamaño, la esfera se elevó y se dirigió hacia la ráfaga, pero al sentir el peso mayor y voltear a ver lo que se acercaba, Luhan trato de desviarla, pero su control fue tardío y termino golpeando la cabeza de Sehun.
Sehun cayo de lleno al suelo, el viento se había detenido, lo que le permitió a Luhan observar a su compañero, un lago hemático comenzaba a formarse debajo de su cabeza, Luhan intento despertar a Sehun, pero no había respuesta alguna, salió corriendo para pedir ayuda, por suerte ese día Lay se había quedado con Suho y lo encontró saliendo del laboratorio, lo llevo con prisa hasta su compañero herido, Lay de inmediato se acercó a ver a su compañero, poso su manos en su cabeza y comenzó a curar sus heridas, tardo un tiempo largo en regresar la sangre perdida a su sistema y tratar las heridas internas y externas, pero después del largo esfuerzo, Sehun comenzaba a abrir los ojos.
Primero emitió un quejido, Luhan y Lay lo ayudaron a acomodarse – Aun no te levantes, tuviste un buen golpe y es probable que el dolor se quede unos días, pero estarás bien, todo el daño interno fue reparado, aunque no alcance a quitar ese chichón y pronto moretón, fue un poco agotador, espero no te importe.
-¿Qué? – pregunto Sehun confundido.
-Lo lamento mucho, Sehun – Luhan agacho la mirada, pero Sehun alcanzo a ver sus ojos rojos aun con lágrimas y recordó todo.
-Lay, podríamos guardar esto en secreto, no quiero que nadie más se entere.
-Claro, como tú digas. Ahora si no les importa necesito regresar y descansar un buen rato y tu deberías hacer lo mismo – después se dirigió a Luhan y lo tomo del hombro – Solo fue un accidente, ahora él está bien, solo tienes que cuidarlo un par de días para que no se esfuerce de mas, siguiente a eso no tendrá ningún problema con volver a sus entrenamientos.
Lay los dejo solos y Luhan se encargó de llevar a Sehun a su choza, lo cuido más de lo normal, ni siquiera dejaba que asomara las narices afuera más que para hacer sus necesidades y ni así le daba su espacio, lo mimo y no lo dejo solo ni un momento, Sehun sabía que se sentía culpable, pero el solo quería de regreso a su hyung favorito.
-Luhan – lo tomo del brazo antes de salir, los días ya habían pasado y ni siquiera había ni rastros de su moretón, quería volver a entrenar, pero su hyung le decía que esperara un día más – Mírame, yo estoy bien y sé que te sientes culpable por lo que sucedió, pero no fue falla de nadie, esas cosas pasan, yo también te he provocado una que otra lesión.
-No, no es igual, casi te mato por no poder controlar correctamente mi poder, fue como aquella vez que lastime a mi madre por…
-Basta. Por favor, vuelve a ser el de antes.
Mas eso no sucedió, Luhan ya no entrenaba junto a Sehun, temía cada que el menor salía a algún lado, y cuando tenía que viajar en búsqueda de información nunca le permitió acompañarlo, así que ese día cuando el mayor volvió a herirlo durante la guerra, no lo aguanto más, era peligroso y no quería dañar a Sehun, la persona que más le importaba y que aprecia con todo su corazón.
Ahora Sehun solo tenía el recuerdo, nada pudo hacer para detenerlo, aunque en ocasiones dormía con Suho, no era igual y sabía que una vez que Lay regresara, él tendría que volver a su vacía casa.
Observo a la distancia a Xiumin y a Chen regresar a la aldea, todos estaban felices por su vuelta que sería permanente, pues Xiumin logro arreglar todo y propuso como nuevo rey al líder Jung, fue aceptado pronto por el pueblo y una vez ocupo el trono, la carga de Xiumin se fue y le permitió regresar con su familia, refiriéndose a todos los chico que tenía enfrente, pues ellos siempre fueron la familia que lo apoyo, y al parecer, TaeYong como una de las personas de confianza del ahora rey, se convirtió en el comandante de las nuevas tropas, guiarlos y entrenarlos seria trabajo suyo y de varios de sus compañeros.
Querían celebrar su regreso, así que se organizaron para dar una comida especial, pero el menor no veía por ningún lado a Suho, por lo que fue a buscarlo a su hogar, abrió la puerta sin tocar, después de todo, esa también era su casa desde un tiempo atrás, pero lo que vio lo dejo aturdido.
-¿Pero qué..?
-¡Sehun! – grito Suho por la inoportuna intromisión, jalando una sábana.
-Pensé que tú eras nuestra madre y Lay el padre, entonces ¿Qué haces tú arriba de…
-Sehun ¿Necesitas algo? – pregunto Lay con delicadeza y parsimonia.
-¿A qué hora llegaste, hyung?
-Hace un rato ¿Algo más? – Sehun negó – Entonces, por favor vete.
Cerró la puerta sintiendo su cara totalmente roja. Decidió alejarse un poco para borrar la escena de esos dos, ahora si estaría solo en su casa.
-No es justo – iba reprochando por el camino - ¿Por qué todos regresan menos tú? – Pateo una piedra - ¡Imbécil, cabeza de chorlito, te odio, ¿Oíste? TE ODIO! – la piedra que había pateado regreso hasta chocar de nuevo con él, lo que le fue extraño - ¿Hay alguien ahí? – busco por donde había regresado la piedra.
-Es mentira – Sehun salto de su lugar al escuchar la voz detrás de él - Aún no han regresado Kris y Tao y si escuche, oí cada una de tus palabras – sabia de quien era esa voz aun sin voltearse, escucho pasos acercarse a él hasta que quedo de frente.
-Luhan ¿Qué haces aquí? – le recrimino.
-Pues, quería regresar a la aldea con todos ustedes, me topé con alguno chicos allá atrás y me recibieron de mejor manera que tú.
-¡¿Y cómo quería que te recibiera?! ¿Tal vez con un, oh, hyung, me alegra verte de nuevo, que tal tu día? – dijo con voz un tono más aguda y con falsa alegría.
-Yo también te extrañe.
-¿Qué? Acaso no escuchas bien, yo dije…
-Se lo que dijiste y que estas molesto conmigo, pero… al estar lejos de ti me di cuenta de lo mucho que te necesito y te quiero a mi lado, estaba asustado, asustado de mi hiriéndote de nuevo, Sehun, permíteme acercar a ti de nuevo. No de dañare más, lo prometo.
Sehun boqueaba tal cual un pececito fuera del agua, intentaba contestar a su hyung, nada salía las palabras morían en su boca, lo quería también a su lado era verdad, aunque eso no quitaba el tiempo que lo dejo solo y permitió pensar otras cosas – Yo… No sé qué decirte…
Sus palabras volvieron a morir una vez que Luhan abrazo con fuerza a Sehun, escondiendo su cara en el cuello, logrando estremecer al menor con su cálida respiración chocando contra su piel y entonces toda barrera se desvaneció, correspondió el abrazo y dejo que el ritmo acelerado de sus corazones se igualara, era todo, ambos se pertenecieron desde el principio y ahora Sehun no permitiría que su hyung se escapara nuevamente de sus manos.
-¿Eso es un sí, te perdono hyung?
-Sí, solo con la condición de que nunca más desaparezcas, que nunca te vayas.
Se separaron un poco, sus miradas chocaron y su espacio entre ambos se disminuía, ya sentía los labios en anticipación y entonces…
Un estallido se escuchó a la lejanía, haciendo que ambos cuerpo se separasen - ¿Pero que fue eso?
Regresaron con rapidez para reunirse con los demás, todos estaban igual de impactados por el fuerte estruendo, no había tiempo que perder, era necesario averiguar lo sucedido y proteger de las personas del área.
Kai los teletransporto a todos cerca de la zona del estallido, era increíble lo que sucedía frente a ellos, definitivamente hoy no sería un día tranquilo, hoy tendrían que luchar y Sehun solo creía que era un mal momento – Llegando a casa seguiremos con lo que no pudimos concluir ¿de acuerdo?
-Por supuesto – ambos sonrieron mirándose directo a las caras, hasta que un cuerpo conocido proveniente del cielo los hizo voltear, sabían de quien se trataba y estaban felices por su oportuna aparición.
-¡Me alegra verlos, Kris y Tao! – les llamo Suho - ¡Avancen! – ordeno a todos, ya listos y con adrenalina corriendo por sus venas.
**FIN***