Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Together por LovelyDarkness

[Reviews - 2]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Yu-Gi-Oh! no es de pertenencia si lo fuera ninguna de las escenas altamente canons hubiera sido censurada y muy posiblemente se habría quedado con el concepto original. Sin más que decir espero lo disfruten.

 

Piensa en mí


Yugi mira con preocupación a su novio. Manejar el negocio familiar era algo ciertamente estresante y con un reciente problema que le había surgido con una empresa de la competencia su contacto con Yami se había limitado tanto que ni siquiera podían hablar más de dos minutos por teléfono. Por ello Yugi se había decidido a animar su día, así fuera por unos pocos minutos.


Mira el paquete en sus brazos esperando que le gustase su regalo. Se sonroja un poco y se remueve temeroso de que Yami lo considere infantil pero ya estaba allí y es demasiado tarde para arrepentirse y regresar. Pasa saliva y carraspea con suavidad para llamar su atención. Yami alza la vista e inmediatamente sus ojos se iluminan, deja los papeles que revisa en ese momento para ponerse en pie y en pocas zancadas está frente a él abrazándolo con fuerza.


—Yugi ¿cuándo llegaste? —pregunta acariciando su espalda y besando su frente.


—Acabo de llegar —miente con voz temblorosa siendo que lleva más de cinco minutos parado frente al escritorio del mayor considerando si llamarlo o huir antes que notase su presencia.


—Me alegra que estés aquí —el alivio no solo baña la voz de Yami sino también su rostro y suaviza sus ojos. Yugi suspira y acaricia las marcadas ojeras sintiéndose totalmente inútil para ayudarlo.


Yami ajeno a sus pensamientos lo guía hacia el sofá de su oficina y se sienta a su lado abrazándolo. Se quedan así por largos minutos, solo abrazándose sin emitir palabra hasta que Yugi se separa y lo mira apenado.


—Te traje un regalo —dice en voz baja con timidez. Yami lo mira curioso pues siempre es él el primero en regalarle algo a su pequeño, a excepción de las flores de su primera cita—. Sé que… sé que es algo tonto pero pensé que podría ayudarte a distraerte del estrés y que… y que pienses en mí.


Sus palabras aumentan su curiosidad por lo que deja que su pequeño abra el paquete que trae. Para su sorpresa Yugi extrae un peluche de el, pero no cualquier peluche. Es un pequeño y adorable peluche de lobo gris con alegres ojitos azules y las orejitas negras. A Yami se le hace vagamente familiar pero pronto recuerda donde lo vio; en una de sus citas en la feria había un stand con diversos peluches y entre ellos había un lobo similar.


Se parece a ti le había comentado a su pequeño señalándoselo. Cuando Yugi le preguntó por qué respondió que simplemente era tan adorable como un pequeño lobo, pero también fiero, fiel y leal cosa que había hecho sonrojar hasta lo imposible al menor. También recuerda que Yugi le había respondido con que él parecía un león.


—Entiendo… entiendo si no te gusta yo… —los nerviosos balbuceos de Yugi le hacen regresar a la realidad. Sonríe y le interrumpe abrazándolo con fuerza, aplastando el peluche entre los dos.


—Me encanta —dice bajo antes de separarse y tomar al peluche abrazándolo contra su pecho—. Lo llamaré pequeño Yugi —dice viendo divertido y encantado como el sonrojo vuelve a las mejillas de su pequeño.


—Bu… Bueno yo solo… solo vine a eso. Te… te dejaré trabajar.


Sin esperar ninguna respuesta Yugi se pone en pie y sale casi corriendo de su oficina. Yami ríe y regresa a su escritorio colocando a pequeño Yugi cerca de su campo de visión.


-------------------------------


Yami más pronto que tarde resolvió todos los problemas que había surgido en su empresa. Secretamente lo agradece al pequeño lobo que le acompaña siempre que no puede ver a su novio con la frecuencia que desea, debido a que siente que tiene a Yugi a su lado representado en la felpa y el algodón del peluche. Por ello ese día en que por fin podría ver decentemente a su novio había comprado un regalo en agradecimiento.


—Anda, ábrelo —le insta sonriendo. Yugi lo mira dudoso y Yami puede leer en sus ojos que si es un regalo muy costoso el joven se las arreglaría para hacerle pagar.


Yami ríe negando. Sabe que Yugi amará su regalo esta vez y para alivio de su modesto pequeño no era para nada costoso. Por supuesto siendo quién es y quién fue lo menos que merecía su pareja era ser cubierto en oro y joyas o ser adorado por todo el mundo, pero bueno si Yugi disfruta con cosas sencillas ¿quién es él para cambiar eso que tanto ama de su Aibou?


—Oh por Ra ¡Yami! —el mayor ríe al escuchar esa expresión. Si su pequeño supiera…


Yugi saca de la caja un peluche de león que le mira con ojos orgullosos y sonrisa prepotente. Incluso casi podría jurar que es la misma sonrisa que porta en esos instantes su novio. La melena es corta y alborotada de un marrón profundo con una parte en blanco, como si fuera un león adulto en tamaño miniatura.


—Me encanta, gracias Yami —lo abraza feliz y besa a su novio—. Pequeño Yami, tú tienes un lugar especial en mi cama —dice inocentemente el joven sin notar como su novio se atraganta con su propia saliva al mal interpretar sus palabras.


El mayor lo ve levantarse y correr a su habitación para dejar el peluche en ese lugar especial y ríe. Hará cualquier cosa para que su pequeño sea feliz y sobre todo para que siempre piense en él.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).