El comienzo de todo
Ninguno de ellos estaba bien, la casa que ocupaban como escondite permanecía en completo silencio, apenas y tenían apetito, era como si sus vidas hubieran quedado en pausa, la única señal de que todo era real, era la televisión que aun cuatro días después de todo aquello, seguía encendida día y noche en cualquier canal de televisión que informara de algún nuevo hallazgo en el sitio de la tragedia, la agencia, era ahora la única institución de seguridad en la cuidad, el gobierno no emitió ningún comunicado, solo una breve declaración en la que se deslindaban de la responsabilidad de lo sucedido, asegurando que ellos no habían participado de ninguna forma, y que como prueba de que su única intención era mantener a la sociedad segura, se disponían a clausurar la división militarizada que actuaba en su nombre.
Por su parte la agencia insistió en la participación del gobierno, pero presentar pruebas solidas era exponer al grupo de los ángeles caídos al conocimiento de la sociedad y al mismo gobierno, y con kakashi al frente de la institución aquello era simplemente impensable, esos chicos de alguna u otra forma habían salvado a la mayoría de sus elementos, y tenerlos en sus filas como aliados anónimos era mejor que exhibir su supervivencia.
Aquel incidente fue recordado por meses, rumores iban y venían, erradicarlos fue casi tarea imposible, pero a casi un año, la mayoría de ellos se habían apagado.
…
Otra vez aquel olor, de nuevo la sangre cubriendo las paredes, el polvo entrando con cada respiración, un ojo rodando y chocando con su bota, el ojo de pupila e iris completamente negros, su voz, susurrando algo, su voz, pidiendo algo, una sombra que aparece de entre la neblina, un cuerpo que camina sin rumbo, una mano que se entrelaza a la suya, y aquella pregunta “¿Quién soy?” Antes de que todo se vuelva destrucción.
Naruto se levantó del suelo con la respiración forzada, de nuevo aquel sueño. Otra vez sasuke surgiendo en lo más profundo de sus pesadillas, otra vez esa sensación de culpa, lo tuvo entre sus brazos una vez, beso sus labios solo una vez, y por aquella maldita vez, el chico era algo inolvidable, un fantasma que lo seguía a toda hora, se puso de pie y camino al baño. Abrió la llave del lavabo y enjuago con el líquido frio su rostro, su teléfono volvió a sonar sobre el buro junto a su cama, sin ánimos fue a contestar la llamada.
- Es la cuarta llamada naruto - la voz de karin lo despabilo - pon el canal tres, el asesino volvió, juugo y siguetsu están heridos - el corazón de naruto se estremeció pero karin casi pudo adivinar su reacción – están bien, no es nada grave, - añadió para calmar a naruto- pero debes imaginarte que esto es un problema, ambos usaron sus habilidades, las forzaron al máximo.
- ¿Y aun así los venció? - pregunto naturo impresionado.
- Si - respondió con cautela - kakashi piensa que no es un soldado - continuo- nosotros tampoco lo creemos, e investigado pero parece que no es obra del gobierno…
- Sin embargo son los únicos con la capacidad, tecnología y poca ética para experimentar con humanos- reconoció el rubio
- Así es, pero estamos en un punto muerto, no podemos culparlos de algo de lo que no tenemos pruebas, aunque es evidente que este asesino es alguna clase de experimento, parecido a… nosotros.
- Karin, es posible que…- naruto no fue capaz de terminar la pregunta.
- Él se fue naruto, ya lo hemos aceptado, no niego la posibilidad de que estemos tratando con algún ser modificado genéticamente con base en alguna de nuestras habilidades, pero definitivamente, no es sasuke.
- Entiendo, iré de inmediato,- termino el rubio y corto la llamada
En las nuevas instalaciones de la agencia, cada uno de los elementos iba y venía con montones de documentos, los elementos activos buscaban sus roles de patrullaje y sus zonas de supervisión asignadas, cierta nostalgia se apodero de naruto, todo parecía tan normal como si lo ocurrido jamás hubiera pasado, como si aquella misión designada a atrapar a los ángeles nunca hubiera existido.
sonrió cuando en una de las áreas de entrenamiento cuerpo a cuerpo distinguió a juugo y a siguetsu, ambos con vendajes evidentes, y heridas en el rostro. Sigetsu miraba con ferocidad al de cabellos anaranjados, y naruto tenía claro el por qué, ni en sus más locos sueños se hubiera imaginado que el hombre con dientes puntiagudos sería tan celoso, y es que juugo se esforzaba por mostrarle a uno de sus discípulos la postura correcta de una llave, aquello necesitaba de contacto físico y eso era lo que odiaba el de cabellos claros.
karin solía decirles, que los celos talvez se acabarían cuando ellos contrajeran matrimonio, pero aquel anillo seguía yendo y viniendo, era entendible, más que un símbolo de pertenencia, el anillo significaba la esperanza de seguir juntos, sin importar lo peligroso de la misión, y tal vez por eso, el matrimonio era lo menos importante, pues se opacaba ante el amor que aquellos hombres se profesaban.
Kakashi salió a su encuentro, karin y sakura tras él.
La pelirosa saludo al rubio, un leve asentimiento y este sabía que la chica había descubierto algo nuevo.
- Dejaron una pista- comenzó sakura una vez que estuvieron dentro de la sala de juntas. – una muy leve, hasta parecería ser ambigua, siguetsu alcanzo a herir al asesino, parece que el traje que utiliza no es del todo blindado.
- Por las tomas que recuperamos de las cámaras en los trajes de juugo y siguetsu- continuo karin- las zonas en donde hay articulaciones están menos protegidas, hasta ahora, era casi imposible acceder a ellas, la rapidez con que pelea el asesino es sobre humana, paneas se le puede seguir el rastro a los movimientos.
- Pero siguetsu hizo algo, - continuo sakura,- el plan se había puesto en práctica en ocasiones anteriores sin que diera frutos hasta ahora, - se detuvo frente a una computadora y presiono algunas teclas, una pantalla se deslizo hasta quedar en el medio de la pared frente a ellos y un video se reprodujo al instante – llámalo suerte si quieres.
Naruto presencio aquella batalla en un principio solo juugo y sigetsu contra aquel hombre o mujer que vestía totalmente de negro, una pañoleta cubriendo su cabello y una especie de gafas en sus ojos, en algún momento todos ellos creyeron que a aquel ser era una especie de androide, nunca habían visto algún indicio de que fuera humano, hasta que en una de sus pelas juugo logro romper la careta que llevaba puesta, exponiendo una parte de su mejilla, la piel delato al ser como un humano.
La batalla no era para nada pareja, ni el de cabellos blancos ni el de cabellos naranja peleando a su máximo nivel, parecían hacer frente al asesino, hasta que de entre las sombras, varios elementos de la agencia aparecieron con torretas en mano, y haciendo equipo con otro elemento. Los disparos eran como estrellas fugases, miles de ellos al mismo tiempo, en ese momento ninguno apuntaba al asesino más bien, apuntaban a cubrir todo el campo de batalla.
- ¿Como rayos se les ocurrió eso?- pregunto exasperado el rubio, mientras veía por la pantalla, como algunos disparos rebotaban en la piel rocosa de juugo, pero no así en siguetsu que apenas y podía contenerlos con sus paredes de hielo.
- Suguetsu- contesto sakura- el plan debía desarrollarse como siempre, ellos en el combate a corta distancia, mientras los otros elementos los apoyaban a la distancia, pero siguetsu les pidió que no tomaran como blanco al asesino sino todo el lugar.
- Pensó que de esta forma, el asesino no tendría un patrón de batalla al cual responder, por un lado sabía que ellos le harían frente mientras los otros le disparaban desde lejos, solo a él, así que imagínate su desconcierto cuando el campo de batalla fue inundado con balas, no había un lugar al que se moviera en el que tuviera libertad.
- Me sorprende de ti karin. - ´protesto naruto- poner en riesgo a esos dos no es de tu agrado
- No lo es, pero confió en ellos, y sinceramente, mis planes habían fallado uno tras otro, incluso cuando la última vez fui como apoyo y avance 6 segundos en el tiempo, no pude cambiar el rumbo de la pelea.
- Bueno, lo acorralaron, pero ¿que se logró de todo esto?- volvió a cuestionar el rubio mientras se apretaba el tabique nasal, el mismo se sentía como un estúpido, solo tres segundos demoro en batalla contra el asesino, de no ser por uno de sus compañeros que lo saco a rastras del lugar siendo protegidos por juugo y Karin, habría muerto, y cuando pensó que aquello era vergonzoso y que no podía ser más inútil, el informe médico arrojo que dos de sus costillas estaban astilladas y su hombro dislocado, así que fueron seis semanas de recuperación, hasta hoy que se presentaba a ser testigo de cómo un plan, no planeado, les había dejado una “ pista”
- La sangre en una de las navajas de hielo de sigetsu se conservó, sakura la está analizando poniendo como referencia a todos los delincuentes clasificados como extremadamente peligrosos.
Naruto no podía creerlo era la primera vez en tanto tiempo que tenían una prueba contundente como esta, en ocasiones anteriores a pesar de la brutalidad de los combates, ni un solo cabello de los que fueron hallados correspondía a alguien que no fuera de la agencia.
- Debido a lo preciso que debe ser el examen creemos que podría arrojar un resultado en por lo menos una semana.
- ¿Una semana? - pregunto con sorpresa naruto,
- Podría ser más, - confeso karin- algunos de los delincuentes en la lista, son aquellos con los que el gobierno experimento, tenemos los registros del sistema, pero, no sus claves, la división de informática deberá entrar a apoyarnos, y si bien el gobierno cedió sus archivos, se aseguró de que encontrar y jaquear las claves fueran una tarea casi imposible.
- Lo sé, la última vez que se investigó para rastrear algunos de sus acreedores, la división de informática e inteligencia tardo casi tres dias – afirmo el rubio.
- Así que en este tiempo solo nos queda, seguir investigando, intentar anticipar a cada movimiento del asesino, y proteger a las posibles víctimas, tenemos de nuestro parte el hecho de que conocemos a sus objetivos.
- Sí , todos aquellos que formaron parte de la división de investigación del gobierno, aquellos que con tal de obtener indulgencia, se han acercado a nosotros para ser testigos protegidos- analizo kakashi
- Y valiente protección les hemos dado, - apunto el rubio- todos han muerto y los tres que quedan no hablaran hasta que vean muerto al asesino.
Ambas mujeres se quedaron pensativas por un tiempo, el rubio tenía razón, tenían tan cerca la posibilidad de destapar toda la porquería en la que el gobierno participo de forma activa, y ahora este ser venía a interponerse en su camino.