Usado ese el mejor término que puede hallar Hansol para describirse: usado por su agencia como un extra, usado por amigos para ganar estatus, usado por Taemin como reemplazo.
Por mucho tiempo quiso negarlo y creer que algún día ese primer hombre lo amaría. Sin embargo, olvidó algo muy importante, ese primer hombre no era capaz de amarse a sí mismo y por consiguiente no podría amar a otra persona.
Hansol adoleció demasiado. Fue sumido a la categoría de una muñeca inflable, con privilegios de bailarín de respaldo. Taemin jamás lo besó, jamás lo acarició, jamás lo marcó, jamás lo amó.
El joven iluso quiso creer en las promesas sin palabras que le pedían tiempo a cambio de eternidad. Eran tan bellas sus fantasías que esperó el momento recostado en una fría cama, lleno de semen y lágrimas secas.
Hansol hizo planes futuros sobre una triste mirada y se enamoró del cariño nostálgico con el cual le observaba. Deseó hacer ojos ciegos a la manera en la cual se marchaba ni bien acababa, quiso hacer oídos sordos a los rumores que comenzaban a circular en la SM, más nunca pudo ignorar el aroma al otro alfa que acarreaba cada vez que follaban.
Sus compañeros no comprendieron su empeño por no dejarlo ir. TaeYong fue quien más se opuso. El joven alfa no comprendía cómo era posible que Taemin no se enamorara o, por respeto a sus sentimientos, no le pedía terminar con "eso" que tenían. Sin embargo, el alfa siempre lo recibió con los brazos abiertos cuando su corazón parecía estar por romperse finalmente. Más de una vez, en brazos de su compañero deseó con muchas fuerzas olvidar a aquel alfa y poder enamorarse de él.
Cuando llegó el momento de dejar la SM lo más que lamentó fue ya no tener excusas para encontrarse con Taemin. Sin embargo, se dijo a si mismo que si realmente deseaba tener algo con él, lo buscaría.
Sus compañeros de años lloraron todo lo que él no se atrevió. Los niños de Dream lo abrazaron fuerte, con la amenaza de encontrarlo en cualquier lugar si él se limitaba a desaparecer.
Ten y Yuta le aseguraron que siempre habría un lugar allí para él.
Taeyong le pidió que siguiera a su corazón.
Finalmente, solo en las cuatro paredes del sótano se permitió llorar todos sus años perdidos en promesas, las despedidas inconclusas y la marca faltante en su cuello.
Ahora, dentro de una nueva compañía esperaba poder desplegar sus alas y volar a lo más alto... O esa su idea hasta que "The UNIT" y los problemas financieros J-FLO Entertainment se interpusieron en su camino.
Taemin no lo había buscando en esos meses y ahora él tendría que rogar por una oportunidad para reiniciarse como Idol.
Algo dolía en su pecho, como si estuviera atravesando un paro cardiaco interminable.
Después de pasar la primera etapa cayó en la cuenta de que debía actuar frente a Taemin. Si bien recibió todo el apoyo de sus amigos, su cama aún seguía fría y cada vez era más difícil luchar contra su omega.
Taeyoung lo guió para elegir la canción del casting decisivo y lo acompañó en todas y cada una de las prácticas.
Poco antes de poder presentarse Hansol comenzó a sentirse débil, prefiriendo guardar el secreto de lo que le aquejaba, convenció a Taeyoung de que solo era parte del cansancio pero que de ahora en adelante prefería ensayar solo. Hansol notó que por cada vez que practicaba la coreografía, los síntomas empeoraban.
Cuando los mareos y los vómitos comenzaron a ser aún más frecuentes, deseo que la excusa de que dio fuera verdad.
Finalmente llegó el día de la presentación y a lo largo de muchas horas lo recorrió las ansias de ver pasar uno por uno el resto de los aspirantes, esperando su turno. A pesar del gran trabajo que hicieron en maquillaje, no pudieron tapar por completo su palidez ni las bolsas de debajo de los ojos de Hansol.
Ese día despertó con fuertes migrañas y éstas no hicieron más que aumentar cuando sintió la leve presencia de la esencia a mar de Taemin en la sala de espera. Mar y Sol, al parecer Minho había allí con el otro alfa.
Su omega pedía destruir la habitación y liberarla de aquel olor que tanto daño le causaba. Incluso, su parte humana lo llevó a salir del lugar más de una vez.
Hansol comenzó a fumar cuando se dio cuenta que no podía retener casi nada en su estomago y esa era la forma de sublimar su deseo de comer. Sin embargo, notó como la mayoría de los aspirantes estaban en contra de que un omega destruyera su cuerpo de manera y lo evitaban como la peste.
Fue en una de esos pequeños descansos que notó un beta de hombros y rostro de alfa.
Le sonrió de manera amable y le invitó una pitada del cigarrillo. Dicha invitación fue declinada pero se quedó a su lado y comenzaron a hablar de trivialidades, sin mencionar en ningún momento sus nombres.
Si eran competencia, en ese preciso momento era lo que menos le importaba.
─Puede sonar un poco meloso, pero estoy aquí para poner orgulloso al omega que amo─ las palabras fluyeron con tanta facilidad que él mismo se sorprendió que el beta se abriera de tal forma con él.
─ ¿Omega?
─ Sungwonnie es el omega más maravilloso que puede existir. Ahora está trabajando duro promocionando junto a otro grupo, pero todo su esfuerzo es para que no caigamos en el olvido. No pude evitar sentirme insignificante para─ el beta hizo un silencio y Hansol ignoró la manera en la que se aclaró la garganta─ ¡Dios! Quiero decir, suficiente tiene con estar en pareja con un beta, en lugar de un alfa. Él no se merece un beta fracasado que le impida volar tan alto como merece.
─No deberías hablar de esa manera de ti mismo. Sungwoon-sshi es un afortunado por tener a alguien que lo ame de verdad e incluso luche para sobrellevar sus sueños juntos. No debes subestimarte por ser un beta, hay alfas que por solo el hecho de ser alfas, renuncian a todo lo que le implique esfuerzo.
Ambos quedaron en silencio, Hansol aprovechó para dar la ultima calada y despedirse dando palmaditas al hombro del beta.
─Gracias.
─No hay de qué.
La sala de espera siguió vaciándose y el dolor que sentía en su pecho iba en aumento.
Minutos antes de su presentación, le pidieron que se cambiara y un joven omega le retocó el maquillaje.
La espera detrás de bambalinas aceleró los latidos de su corazón y secó garganta, cuando las luces se apagaron y la compuerta se abrió fue inundado por el aroma a mar del alfa que lo había abandonado. En ese momento desaparecieron todos sus dolores y lo único que pedía su omega era destruir. Su omega le quería demostrar a ese alfa que lo usó y lo desechó que él valía mucho más que unos cuantos polvos.
Toda su determinación se fue por la borda al notar la mirada fría y calculadora con la que lo recibió, sin embargo en ningún momento desvió su mirada de él. Trató de ignorar la sonrisa casi burlona que surcaba sus labios al momento de presentarse, pero el dolor que sintió por la indiferencia al escuchar la canción pudo con él.
Los movimientos comenzaron a ser más bruscos de lo que había practicado por mucho tiempo. Taemin por fin tenía pruebas reales de cuanto lo había roto y lo único que rogaba Hansol era que lo usara en su contra.
Siguió la corriente de la música, esperando que todo aquello terminara rápido, sin estar dispuesto a rendirse, continúo hasta que todo se volvió blanco y escuchó el vitoreo de la gente.
─¡Super Boot!
Hansol podía asegurar en ese momento que su corazón iba a salirse de su pecho. Dando la espalda un segundo al jurado, contuvo sus ganas de llorar.
─Hansol-ssi, ahora que obtuviste el Super Bott, pasaste─las palabras de Jung Jihoon y la sonrisa que suavizó sus rasgos, calmó un poco su nerviosismo.
Sin embargo, antes de darse cuenta, Taemin tenía el micrófono en mano, mientras era observado atentamente por Rain.
En sus ojos había un brillo que nunca había visto, pero pronto lo ignoró al ser presentado como un bailarín de respaldo de su concierto. Por un momento quiso hablar, y preguntarle porque no lo presentaba como el puto con el que follaba cada vez que estaba en celo o Minho lo dejaba con las ganas de tener algo. Por solo una fracción de segundo quiso hablar por el simple hecho de hacer un poco de daño, aún cuando Taemin jamás le había prometido una relación.
─Deberías aprender controlar tus emociones, solo así llegarás a ser un profesional.
Las palabras ocultas en ese discurso motivacional eran más que suficiente para su omega dañado. Ni bien Taemin terminó con su devolución Hansol comprendió que lo había perdido para siempre, o mejor dicho, jamás había encontrado el corazón del alfa.
─Estaba muy nervioso─ respondió con voz algo cansada. Su cabeza había comenzado a palpitar y sentía un fuerte tirón en su pecho─ , pero fue un honor presentarme frente a los mentores hoy.
Evitó mirarlo de frente y luego de un último agradecimiento se marchó.
Caminó amplios pasos hasta llegar a los baños. Estaba comenzando a sudar frío y se creía capaz de desmayarse a causa dolor. Comenzó a apretar las manos a modo de distraerse, pero el temblor en sus piernas era cada vez más evidente. Llegó casi arrastrándose a los cubículos, para vomitar bilis mientras su vista comenzaba a nublarse.
Vio puntos de luz a su alrededor y, por primera en sus veintitrés años de vida, sintió que iba a morir dentro de aquel baño y que posiblemente nadie lo iba a encontrar hasta que hicieran una limpieza general.
Cerró con fuerza los ojos, sintiendo como lagrimeaban, deseo que alguien llegara y lo llevara un lugar seguro. Su omega estaba desgarrando su interior y no sabía cómo frenarlo. Pensó en sus padres, Taeyoung, Yuta, los dreamies, Taemin y se dejó sumergir en esa obscuridad que prometía parar con el dolor.
─…amos, chico, despierta ¡Vamos!─ Sintió palmaditas en su rostro y un agradable aroma a tierra mojada y jazmines lo inundó.
Sin poder abrir los ojos sintió la presencia de otro alfa, este emitía un olor característico a un alfa con crías –su olor a café se mezclaba con el olor a la cría recién nacida-.
Lo manipulaban de manera delicada, posiblemente ninguno de los alfas sabía la manera en la cual debían actuar frente a un omega descompensado. Sintió como su cuerpo era acomodado en una superficie más cómoda y era tapado con abrigo impregnado de uno de los alfas.
Hansol puso toda su fuerza de voluntad para abrir los ojos. Frente a él había un joven, quizás poco mayor que él, con un paño húmedo en su mano.
─Rain-sunbaenim, Hansol-sshi ha despertado─ la voz del alfa era como una suave seda y el tacto de sus manos sobre su rostro se sentía cálido. El joven colocó la tela con el toque de una pluma y acarició sus mejillas de manera amable antes de sonreírle.
─Mocoso, no sabes la suerte que tienes de que Kwang Sukkie haya decido ir al baño antes de marcharse. ¿A qué clase de alfa se le ocurre dejar a su omega por tanto tiempo? ¿Ya no se respetan los tiempos de gestación?
Hansol quiso reír pero cuerpo dolía demasiado. Sus superiores habían puesto en palabras la mejor opción que había pasado por su mente semanas atrás.
─Se lo agradezco mucho Rain-sunbaenim, Kwang Suk-hyungnim, pero no estoy en cinta.
─¿Lo niegas el Super Boot?─ Inquirió el mayor de los tres con incredulidad en su voz─ Tae Hee-yah pasó por casi lo mismo durante los primeros dos meses.
─Claro que no, de ser así, ustedes sentirían un cuarto olor.
─Hansol-sshi…— la pena en la voz del joven alfa delató su pensamiento.
─Exacto hyungnim, mi omega está muriendo porque su alfa lo ha rechazado.
Algunas veces piensa sobre lo que hubiese ocurrido con él si Kwang Suk no lo hubiera encontrado inconsciente en el baño. Luego de su pequeña charla que derivó en silencio, llegó la ambulancia y se realizaron chequeos generales.
Últimamente su agenda no coincidía con la de los miembros de NCT, pero Taeyoung se hizo el tiempo de armarle y enviarle una caja repleta de fotos y otros objetos personales al enterarse que se mudaría a los dormitorios de The UNIT.
Recuerda las risas del otro lado de la línea cuando les contó las reglas absurdas que tenía el programa. Sin contar con la fantástica idea de dividirlos por sexo y por la dinámica alfa/beta/omega. Si bien era posible que dos omegas o dos alfas de diferentes sexos tuvieran no relación, no era tan peligroso como exponer a un grupo de omegas a compartir dormitorio con alfas. Además de todo eso se realizaba con el fin de no romper la regla de oro: Nada de relaciones dentro del programa.
Claro que Hansol se mofó de ello al contar en la manera en la que Kanto y Kijoong escondían algo que solo sabían ellos por ser compañeros de grupo. Hansol era sumamente feliz al ver las interacciones que esos dos tenían y la manera en la que el joven omega reaccionaba ante la falta de palabras para sus propios sentimientos. Era común verlo abrazados en rincones donde la cámara no los captaba o tapar pequeños roces como bromance. Kanto intentaba hacer sentir seguro al omega, llegando incluso a evitar el contacto visual con mujeres por miedo a que reaccionara de mala manera.
Eran tiernos y no podía evitar pensar lo bello que sería un relación en donde el también fuera amada.
Dejó la foto que tenía en su mano –una vieja fotografía de SMrookies- y le dirigió una mirada a Timoteo.
─¿Cómo haces para no odiarlos?─ Hansol muchas veces en el pasado se hizo la misma pregunta, especialmente cuando era invitado a ver todo desde tras bambalinas. En esos momentos parecía que sus amigos habían cumplido sus sueños y lo habían olvidado de manera cruel.
─¿Eh?
─No me malinterpretes, pero no me creería capaz de sostener una amistad cuando veo a mis casi hermanos triunfar mientras que todo el mundo se olvida de mi.
Hansol quiso ser mordaz y tomar el punto débil del beta. En la punta de su lengua aguardaba la pregunta sobre sus sentimientos acerca de ver triunfar a su omega mientras él casi requería el aval de un alfa.
─¿Odia a Taemín?─ La pregunta salió de su boca tan casual que él mismo se asombró.
─Él es especial.
─Ellos son especiales para mí.
Guardaron silencio.
Si hubiese aguantado un poco más dentro de la SM¿ Hubiera él, Ji Hansol, haber llegado a ser especial para Taemin?
─Sabes que yo sé sobre la relación que tuvieron con Taemin ¿Verdad?
─¿Sexo? Toda al SM tuvo que saberlo. Además, no comprendo desde cuando algo relacionado únicamente con eso puede ser llamado una relación─ su respuesta casi que suena rota y el dolor que había creído olvidar vuelve a tomar posición en su pecho, justo donde debería estar su corazón.
─No deberías ser tan cruel Tae no es un mal hombre.
Hansol se cree estúpido por haber creído que aquel beta que conoció en el descanso pudo haberle ofrecido una amistad verdadera. Algo en él está seguro que fue enviado por Taemin, seguramente, ese hombre no pararía hasta verlo retorcerse en su propia penuria. Y pensar que Hansol llegó a creer que algún día podría llegar amarlo.
─Es el alfa perfecto: joven, apuesto, sexy, fértil, todo lo que un omega puede buscar. Es una lástima que no sea el tipo de alfa que busca un omega, mucho menos un varón.
─¿Lo dices por Minho? Lo de ellos fue imposible desde que…
─Desde que Taemin se presentó como un alfa y no como el omega que ambos esperaban. Es posible que la sociedad ni la naturaleza acepten su enlace, pero por más que muera por cada vez que lo admito, el sentimiento que desarrollaron va mucho más allá de eso. Ellos son almas gemelas pero sus cuerpos no son compatibles con lo tradicional ─respondió con veneno en su voz. Podía jurar que si hablaban un poco más sobre Taemin se destruiría allí mismo ─. Puedo jurarle que hay ocasiones en las que deseo no haberlo conocido. Aunque hayan pasado las semanas aún siento el fantasma de sus manos tocándome, como si fuera una cosa y lo peor es que no creo merecer más de eso. Fui el triste reemplazo de Minho-hyung.
─Desearía poder ayudarte.
─¿A olvidar? No creo estar listo.
─Sabes Hansol, me encantaría entenderte, pero no puedo. Conozco a Tae desde antes de su debut y no es ese tipo de hombre de que tú crees.
─Es un beta y es claro que ni aunque quisiera podría sentir la sensación de suciedad que tengo en este momento. Nunca sabrá lo que siente que el alfa que lo tuvo en brazos y lo llenó de palabras bonitas lo mire con la indiferencia con la que él me miró. Jamás entenderá lo que siente creer que tu cuerpo le pertenece a alguien que no puede amarte─ la presión en su pecho comenzó a aumentar. Hansol deseó con fuerza que Kwang Suk estuviera cerca para llevarlo lejos de todo─. Es claro que no va a tener que sentir como su lobo desespera por el rechazo y poco a poco comienza a morir. ¿Sabe cuál es la peor parte? No seré capaz de soportar el toque de ningún otro alfa. Taemin me arruinó, él me rompió.
─No deberías culparlo por tu incapacidad para satisfacerlo. A lo mejor no eras suficiente para él y en lugar de responsabilizarte lo marcas como si fuera un hijo de puta.
Aquello fue el punto final, su respiración comenzó a acelerarse mientras sentía como su pecho era desgarrado. Quería gritar, pero aún retenía los instintos de su omega le pedían castigar al beta por faltar a su posición. Su omega quería venganza, aún cuando fuera sobre un tercero.
Sintió a Timoteo acercarse a él, pero solo atinó a chillarle, queriendo que se alejara, con miedo a herirle realmente. Sentía como el frío recorría todo su cuerpo y cientos de puntos blancos aparecieron frente a sus ojos.
Instantes después se vio recogido en unos brazos que lo incitaban a envolverse en el aroma a tierra mojada y jazmín que emanaba de su cuello.
En su estado de semiinconsciencia escuchó los gritos de su hyung ahuyentado a Timoteo.
─Deja que muera─ susurró─ si él muere mi vida será más fácil. Deja que muera.
Hansol se prometió a si mismo que si salía de esa y su corazón no dejaba de latir, le pediría disculpas al joven beta por enamorarse y no ser suficiente para su mejor amigo