Capítulo 4: Bienvenido a Sportia.
El transporte llevo a Aomine y su equipaje hasta un edificio de apartamentos el cual parecía de buen nivel, nada menos considerando que Akashi lo había conseguido. Ya ahí agradeció al conductor y procedió a entrar al edificio, el portero se dio cuenta de su presencia y de inmediato lo atendió.
-Bienvenido, ¿Es el nuevo inquilino no es así?
-Sí, Aomine Daiki.
-Sígame, lo llevare hasta su nuevo hogar.
Ambos subieron al elevador hasta que llegaron al séptimo piso, el portero lo guio hasta su departamento y procedió a mostrárselo.
-Hay una buena vista, cuenta con todos los servicios necesarios, electricidad, agua, gas, internet, todo lo que pueda requerir alguien en estos días.
-Se ve muy bien,
-Como puede apreciar esta todo amueblado, la sala, cocina, hasta la habitación, le recomiendo que tome una ducha y trate de descansar, debe haber sido un largo viaje desde su hogar. Cuide su llave, cada llave perdida va con un costo adicional al conseguir una nueva.
-Gracias.
-Cualquier otra cosa, puede preguntar en recepción.
El portero salió dejando a Aomine solo en su hogar, este fue hasta una de las ventanas del frente notando la inmensa ciudad que se extendía en todas direcciones, limitada solo por las montañas.
-Creo que no me había dado cuenta de lo lejos que estaría de casa hasta ahora.
Luego de tan tedioso viaje decidió tomar el consejo y darse una larga y relajante ducha, eso le ayudo a liberarse de todo el estrés acumulado, permitiéndole pensar correctamente en lo que haría de ahora en adelante. Tras salir observo lo tarde que se había hecho, pronto anochecería y no sería buena idea ir de noche a un sitio que no conocía, la mañana siguiente seria cuando comenzaría con su investigación, esa noche solo se quedó en cama y durmió con tranquilidad.
Un nuevo día comenzó, se preparó para su salida, tomo una pequeña mochila para salir, llevaba solo cosas básicas, como datos de lo que buscaba, su celular, así como dinero, afortunadamente su excapitán le había habilitado una cuenta, para obtener fondos sin necesidad de preocuparse. Salió de su departamento y bajo hasta el atrio del edificio, ya ahí fue con el portero.
-Buenos días, ¿Disfrutó su primera noche?
-Sí, me sirvió bastante. Quería pedirle su ayuda, vera he venido hasta aquí buscando a una persona, conozco la dirección pero temo que no sé cómo llegar hasta a ese lugar.
-Déjeme ver, ah es un barrio en el centro de la ciudad, no esta tan lejos, pero será mejor que tome un transporte, un uber seria preferente, puedo llamar a uno si prefiere.
-Lo agradecería mucho.
El uber llego en pocos minutos, Aomine subió y observo todo el camino para tener una idea de por dónde iba, así como para recordar donde ha estado y lo que hay cerca.
-Pronto llegaremos al barrio que va, está compuesto por viejas casas.
-¿Es conocido? ¿Popular entre la gente?
-Pues conocido sí, pero precisamente popular no, son comunidades viejas, pero actualmente en parte olvidadas, aunque igual puede que eso cambie, pues ahora quieren derribarlas para construir nuevos edificios y centros de atención, usted entiendo, atraer más gente.
-¿Y los que viven ahí?
-Se niegan a irse, pero imagino que deben estar bajo presión de pagos y rentas, creo que intentan echarlos lo más pronto posible.
-Qué horror, no me imagino lo que será que te echen de tu hogar de toda la vida.
-Pues los viejos dueños ya no viven ahí, ahora hay varios extranjeros como usted viviendo ahí, son una comunidad que se estableció hace mucho tiempo, pero no les conviene que los muevan tampoco, pues no podrían encontrar otro lugar donde permanecer juntos.
-¿Extranjeros como yo dices? ¿Cuánto llevan viviendo ahí?
-Muchos años, creo fácil unos treinta, es una comunidad vieja, pero joven por así decirlo, en cuanto a que ellos no eran del país sencillamente.
-Entiendo.
-¿Va a visitar a un conocido?
-Sí, busco a alguien por así decirlo.
-Pues entonces seguro lo encuentra, le digo todos ahí se conocen.
-¿Esa comunidad tiene algún nombre?
-Si uno bastante ridículo si me lo permites jajaja enserio es un nombre tonto.
-¿Cuál es ese nombre?
-Por alguna razón estúpida, la comunidad se llama Sportia, ¿Qué rayos es eso? Debe haber muchos mejores nombres que ese jajaja creo que no tuvieron muy buena imaginación al decidir instalarse.
El uber dejo a Aomine en la entrada de la comunidad, despidiéndose amablemente y que si necesitaba transporte de nuevo no dudara en contactarlo. Este por su parte vio la calle frente a él y empezó a caminar, no había mucha gente recorriéndola ni negocios, era como le contaron, una comunidad que estaba pasando por momentos difíciles. En la entrada estaba un viejo anuncio que tenía el nombre de la comunidad confirmando que estaba en el punto correcto, pero entre las distintas vecindades y casas sería difícil saber dónde comenzar a buscar a esa chica.
-Ah, esto será más difícil de lo que pensé.
-¡Muévase!
-¡Oh lo siento!
-Uno tiene prisa, no se quede de pie en la acera.
Un chico de estatura promedio y cabello negro revuelto paso mirándolo despectivamente, en definitiva era alguien de ahí, pues era extranjero igual que él.
-Parece que no todos aquí son muy amables.
Aomine continuo caminando confirmando los límites de la comunidad, aparte de la entrada principal había otras tres principales, casi formando un circulo perfecto. Una vez delimitado todo, se dispuso a buscar a esa chica de nuevo, sin embargo por más que revisaba no encontraba indicio alguno de la presencia de la joven, después de una hora infructífera y tratando de evitar dar malas ideas a los vecinos, fue a sentarse en una banca de un parque cercano.
-Ah, no debí pensar que esto sería fácil y rápido. Puede que haya llegado hasta este lugar al otro lado del mundo, pero sigo sin tener idea de cómo empezar. Ah, ojala Akashi estuviera aquí, el suele tener buenas ideas.
La pesadez comenzaba a presentarse en él y solo se dedicó a observar el área del parque y alrededor. Todo era bastante pacifico en ese sitio, las personas parecían observarse en paz sin muchas preocupaciones, aparte de algunos negocios abiertos en las calles opuestas, no había mucho movimiento.
-¿Estaré haciendo lo correcto? ¿Qué tal si solo me equivoque al venir aquí? Después de todo, nada en verdad sugiere que Tetsu esté aquí.
-¡Hey lindura ven aquí! ¿No quieres divertirte?
-¡Vete a la mierda imbécil!
-¿Ah? ¿Qué está pasando ahí?
Los gritos lo hicieron voltear en una dirección notando como unos hombres en una camioneta le lanzaban piropos ofensivos a una chica y no solo era una chica, sino precisamente la que buscaba, May Valentine, la cual parecía estar bastante molesta por la actitud de esos sujetos, su molestia creció y tomo preocupación cuando noto que la camioneta avanzaba en reversa siguiéndola.
-¡Lárguense! ¡No me interesa hablar con unos viejos como ustedes!
-Pero ya nos estás hablando preciosura.
-Ven con nosotros, te llevaremos a un lugar genial.
-¡Que me dejen en paz! ¡Ya se los dije!
-¡Hey ya oyeron a la dama! ¡Déjenla en paz!
Aomine se puso en frente de ella con una actitud protectora, su presencia desconcertó a May y solo molesto a los otros dos hombres.
-Nadie te invito a esta fiesta.
-Ya oíste extraño, vete por ahí y lárgate con unos perros.
-No me importa lo que digan, déjenla en paz.
-¿Y si no lo hacemos qué?
-Creo que lo descubrirán en 3, 2, 1…
¡CRASH! La camioneta por ir en reversa choco contra otro automóvil quedándose atascados, el conductor contrario salió de inmediato muy molesto mientras los otros dos sujetos no hallaban como excusarse de lo sucedido, antes de darse cuenta, los dos jóvenes ya no estaban presentes y un oficial de tránsito llegando era justo la prueba de que no podrían escaparse de la situación. Por otro lado, Aomine y la chica se habían escondido tras un árbol, saliendo solo al confirmar que era seguro.
-Parece que salió como pensaba.
-Hey tú, Gracias por ayudarme con esos sujetos, siempre pasan por aquí a esta hora a molestarme y ahora con su camioneta en esta situación seguro no volverán.
-No fue nada, no soporto a ese tipo de patanes.
Aomine observo por un momento a la chica, era idéntica a como se la mostraron y ahora que la observaba con cuidado era muy bella, tan bella como esas chicas de sus “educativas” revistas, pero desde que acepto sus sentimientos por Kuroko se había desecho de ellas y prometido que no miraría a ninguna chica ni a nadie más, pues ahora solo exista su Tetsu para él.
-De cualquier forma te agradezco, soy May Valentine.
-Aomine Daiki.
-Es un placer, ¿No eres de por aquí o me equivoco?
-Correcto, recién vengo llegando.
-¿Buscas a alguien?
-Am, se podría decir que sí. He venido desde Japón porque ha ocurrido un par de incidentes haya y…
-Ah, estás hablando de las escuelas esas que colapsaron de la nada ¿O me equivoco?
-Sí, ¿Cómo lo has sabido?
-Salió en las noticias, es algo bastante extraño si uno lo piensa, ¿Es cierto que nadie murió? Porque por las imágenes esa destrucción fue terrible.
-Nadie murió, ese incidente fue por la noche, las escuelas estaban vacías, pero me temo que si hay algunas personas perdidas.
-Como era de suponerse, de esas cosas es extraño que todo salga bien.
-Sí, tienes razón.
-He venido hasta aquí, am… buscando…
-¿Buscando a alguien desaparecido? Pues lo lamento pero aquí no ha llegado nadie nuevo, todos han vivido aquí siempre y no suelen venir parientes ni nada.
-Am, no, yo estaba buscando un nuevo lugar donde vivir.
-¿Dónde vivir?
-Sí, es que han sido muchas cosas haya y pensé que nuevos aires me sentarían bien y cuando escuche de esta comunidad, creí que tal vez podría probar suerte.
-Ah, bueno lo entiendo y perdona que no te dejara terminar, pero me temo que no tendrás suerte, puede que haya algunas casas vacías, pero me temo que son propiedad privada ahora, seguro las demolerán.
-Oh rayos, bueno lastima, tendré que buscar en otro lado.
-Si lo siento, pero oye eres bienvenido cuando quieras, vienes del mismo lugar que nuestros viejos, así que estarías entre gente como tú, es agradable tener un nuevo rostro cerca.
-¿Viejos dices?
-Nuestros padres y mayores, ya sabes lo que se establecieron aquí.
-Claro, tiene sentido, y gracias, seguro que vuelvo.
-Perfecto, bien ya debo ir a casa, además ya me tarde para mi próxima publicación en Instagram, espero verte de nuevo, adiós.
-Disculpa, antes de que te vayas, me gustaría preguntarte algo, ¿Siempre has vivido aquí? ¿Nunca has estado en el país natal de tus padres?
-¿Japón? No, nunca he estado haya y sobre cuánto tiempo he vivido aquí pues… desde que puedo recordar, nunca he salido si te soy sincera.
-Ya veo, gracias no te quito más tú tiempo.
-Por nada.
-(Esto es demasiado extraño, no cabe duda alguna que es la misma chica, ¿Sera que miente? Si es el caso es realmente buena en eso, aunque siendo honesto me pareció como si estuviese hablando con la verdad todo el tiempo. No entiendo nada de lo que está pasando aquí).
Aomine pensó que lo mejor era retirarse por ahora, había tenido éxito en encontrar a la chica y todo indicaba que tenía su confianza, eso era un excelente paso para luego continuar con su búsqueda de Kuroko. Puso marcha de vuelta al sitio donde lo dejo el vehículo, observando con más detenimiento el sitio, la chica decía la verdad en algo y es que varias de las construcciones estaban abandonas, quizás próximamente el lugar cambiaria lo cual no podía ser tan malo después de todo.
-¡Demonios ya es tarde!
-¡AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!
Una puerta de la que pensó era una casa vacía se abrió súbitamente asustándolo por completo, haciéndole caer hacia atrás, un chico de cabello que parecía anaranjado más bajo que Kuroko apareció de la casa, cerró la puerta y puso de nuevo unos tablones en la entrada, solo entonces se percató del contrario que lo miraba confuso desde el suelo.
-¡Hay por dios! ¡Lo siento mucho en serio! ¡Disculpa pero tengo mucha prisa! ¡Ya es bastante tarde! ¡Luego se lo compenso adiós!
-Ah…
El chico se fue corriendo con una mochila al hombro, luego de eso casi fue arrollado por un conductor ya que no se fijó en la calle antes de cruzar, sus rápidos reflejos fueron lo que salvaron su vida, el conductor por su parte se veía molesto y por su ventana le grito al chico.
-¡HEY SHOYO HINATA! ¡Ya es la 5ta vez en esta semana! ¡Ten más cuidado porque si te arrollo ya no será mi responsabilidad!
-¡Lo lamento mucho señor! ¡Discúlpeme ya llevo prisa!
-Parece que esto es habitual, bien ahora si debo irme de aquí antes de que algo más llegue a pasar.
Camino un poco más rápido para no pasar más tiempo en ese misterioso vecindario, cuando llego a la entrada se sintió tranquilo pues dejaba todo atrás, en ese momento un taxi se detuvo un poco antes de él y vio a dos chicos bajar de la parte trasera. Uno de estatura promedio, cabello negro y ojos azules, otro más bajo, cabello negro y ojos del mismo color, además de que era moreno, calculo que fácil se llevaban 10cm solamente. El más alto pago y ambos jóvenes comenzaron a ingresar.
-Podía pagar yo Haru, no era necesario.
-Descuida, sé que la pasas mal económicamente como casi todos aquí, y yo ahora pude pagar el taxi, no es ninguna molestia.
-Haruka Nanase, recuerda lo que dicen los viejos, no hay que malgastar el dinero.
-Y yo te he dicho que no me llames por todo completo, con Haru me basta.
-Bien, como tú digas.
Aomine los observo alejarse antes de volver a pensar en regresar, su primera visita a este lugar estaba resultando bastante bien, no solo localizo a la chica, sino que escucho los nombres de otras dos personas y aunque no supo el del moreno de baja estatura, por lo menos podría confirmar algo con los otros, como si estaban entre los desaparecidos también.
-Sportia, presiento que pasare mucho tiempo por aquí ahora.