- Que quieres Hiroki?
- Ah... Bueno es que yo....
Su mirada inquisitiva, los ojos azules profundos clavados en ese ángulo negativo sobre mi diminuta persona que con cada segundo se hacía más y más diminuta.
- Yo...- Repetí por inercia ante la falta de retórica.
-Es que yo... Yo quiero decirte que tú me gustas mucho!
Su rostro, completamente contrario en su papel en la serie donde era mi cálido y romántico co-protagonista, su rostro en esos momentos era algo estoico, no había habido ni un mínimo cambio. Mirada fuerte, profunda y en esos momentos para mí... Vacía.
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Escena 14
Usami-san me llevo cargando hasta la habitación de su mansión escondida en los suburbios y me tiró en la cama con una alevosía manifiesta.
- Usami-san!
Pero este parecía un desquiciado y me calló con sus besos intensos mientras sus manos me manoseaban. Parecía un lujurioso campeón de apnea pues al parecer no tenía idea de dejarme respirar.
-Mmmmmm, mmmmmm!
Le exigía que me liberarse del beso de la muerte y no fue hasta que esté me vio casi morado por la falta de aire que me dejó ir.
- Usaaaaaaami san!- Le reclame dando una enorme bocanada de aire.
- Pésima condición tienes eh? Nomo.
- No es cierto!- Conteste aún agitado- Que esperas si intentas matarme?
- No quiero matarte, quiero cogerte.
- Basta ya! Suélteme Usami-san!
- Por?
- Por que tengo que regresar a casa a descansar, mañana tengo llamado!
- Ah eso... Que importa.
- Como que que importa?! No has sido tú el que siempre me has reñido por eso.
- Bueno yo y casi todo el mundo, pero eso es por tus pésimas actuaciones.
Me pare furioso y dije:
- Si son tan malas por qué no me despides?
- Ah?! Eso es fácil.....Porque estás curioso.
- Que?!
- Estás curioso, eres un nomo muy curioso y me gusta poseer cosas curiosas.
Sus palabras ya me habían hecho enfadar.
- Entonces déjame en paz! Entiende, no soy tu propiedad! No soy nada tuyo!
Este sonrió de lado con arrogancia y yo cerré el puño tome carrera y lo dirigí hacia su carota burlona pero Usami-san era más rápido y me tomo por la muñeca, me tumbo boca abajo en su regazo y torció mi brazo tanto que solté un alarido de dolor.
- Me la has puesto muy fácil Nomo, casi, casi te entregaste a mi.
-Suéltame!
Dije pataleando.
- No quiero-Este sonrió aún más- Lo que quiero es saber el por qué la prisa de regresar a casa?
- Por que mañana tengo que prepararme para el llamado!
- Ah?
- Tengo que estudiar el libreto para el día del llamado, toca filmar en el aeropuerto y sé que no nos dieron mucho tiempo para grabar! Usami-san toooonto!
Le grité ya muy enojado sin tener en cuenta que este siempre tomaba represalias en todo lo que yo hacía o decía, con Usami-san siempre era perder ó perder...
-Ah... Eh! Usami-san yo no quería.. Yo no...
Este entonces soltó el agarre a mi brazo y me levanto de su regazo. Yo estaba sorprendido, su mirada parecía entre alejada de donde estábamos y algo melancólica.
- Usami-san yo no debí...
- Tienes razón Nomo.
Este se levantó de mi lado y caminó al balcón mientras sacaba unos cigarrillos de su bolsillo.
-Ah?
Yo no entendía que sucedía pero seguro había ofendido a Usami-san de alguna manera, así que fui a su lado a disculparme.
- Usami-san yo.... Yo no quería ser grosero es solo que a veces es muy brusco conmigo! Pero aún así...- Hice una reverencia y dije- Lo siento mucho Usami-san!
Este giro un poco su cuerpo solo para voltear a verme y de inmediato sentí su mano enorme y cálida acariciando mis cabellos.
- Ah?- Reaccione sorprendido- Usami-san?
- No seas tonto Hiroki no te disculpes.
- Pero yo... -Yo subí el tono de mi voz y te dije tonto.
- Eso es una bobera, además tenías razón.
Sus palabras me tomaron por sorpresa, jamás creí que Usami-san pudiera decirme algo así. Pero este siempre tenía algo extra que decir y ese algo extra arruinó el momento.
- Tú actuación es pésima y aunque me gustaría besar cada centímetro de tu piel y meterte mi puño tengo un compromiso hacia el show y hacia... En fin, no puedo dejar que se te siga viendo en un papel tan mediocre, no puedo intervenir tanto en tú trabajo así que saca tu guión que hoy estudiaremos en vez de disfrutar.
- Que?!
Este volteo con el gesto serio.
-Lo siento nomo pero hoy no te puedo hacer feliz, hoy tenemos que ser responsables ya es la recta final así que debes esforzarte, se lo mucho que querías que te lo hiciera de una manera sucia pero tendrás que esperar y trabajar duro para recibir tu premio.
- Que? En qué realidad vives?! Yo no quiero que me toques!
- Sí, como sea, traes tus libretos?
- En mi teléfono traigo el digital.
- Bien , vamos a repasar.
Saqué mi teléfono y Usami-san extendió su mano y me tomó por la muñeca, yo temblé un poco.
- Descuida no te haré nada.
Este me subió y me sentó en el balcón, a mí me daba miedo la altura así que este me metió en sus brazos y dijo.
- Sabes que jamás dejaría que te sucediera nada Nomo?
- Usami-san.
Este volteo a verme y sus ojos mostraban ese lavanda tan sereno.
-No seas malo conmigo Nomo, entiende que por muy malo que parezca jamás te haría daño.
En ese momento no estaba actuando arrogante como era siempre, parecía ser otro, yo no resistía aquella mirada así que pegue mi cabeza a su pecho.
- Basta Usami-san.
- Hiroki...
Dijo en un suspiro, su mano cálida tomo mi barbilla y la elevó para que nuestras miradas chocarán de nuevo.
- Hiroki....
Esos ojos... Sentía que estaban diciendo muchas cosas pero yo no comprendía ninguna, había una especie de tristeza, de rencor y de impotencia en él.
- Hiroki yo...Esto no se siente bien...
- Usami-san...
Este tenía urgencia de decir algo pero simplemente estábamos congelados en los ojos del otro. El tiempo entonces me pareció que se había detenido y deseaba saber aquello que Usami-san tenía que decir, deseaba que fuese algo amable, deseaba...El beso que esté me dio en ese instante.
Un beso que emanaba algo diferente a los otros, un beso que decía que estaría junto a mí, un beso que me hizo sentir tan desprotegido en un mundo lleno de dolor.
Después de ese beso nos quedamos callados un buen rato,yo dentro de sus brazos, nadie quería decir mucho y cuando al fin el rompió el silencio solo fue para decir.
- Te llevaré a casa.
Después de eso no dijo más. Solo me dejó en la puerta del edificio y se arrancó como loco.
Me sentí mal, quizás yo había hecho algo que lo había incomodado.
Me metí al apartamento, me puse la pijama, cene ligero y me fui a mi cama a intentar estudiar un poco el libreto pero no pude pensar en nada más que no fuera en mis manos que pertenecían ahora a Nowaki y en los ojos de Usami-san... No me di cuenta de en qué momento me quedé dormido, desperté al medio día con el tono de mi teléfono.
- Buen día!
- Buen día Kamijou san, soy Tanaka la asistente de dirección, para decirle que el llamado quedó para mañana a las siete de la mañana.
- De acuerdo, gracias Tanaka san.
Abrí los ojos con pereza y me estire un poco, luego otro poco y luego escuché su voz.
- Que no piensas pararte de la cama Kamijou?
Voltee a ver el marco de la puerta, ahí estaba él, vestido con una playera blanca tipo polo y unos jeans.
- Nowaki...
Después de susurrar su nombre, caí en cuenta de que estaba despierto.
- Nowaki????? Queeeeee?
Di tremendo salto de la impresión y me fui al suelo.
- Dueleeeee!
- Que manera de despertar. Cuando estés listo sal a desayunar.
Nowaki dio media vuelta y salió de mi habitación. Apenas si pude ponerme en pie pues me temblaban las piernas, intenté calmarme pero mi corazón estaba muy agitado. Que hacía Nowaki en mi apartamento? Cómo había entrado? A qué?
Fui al tocador y me miré, que pinta tan mas mala tenía! Me cepille un poco el cabello y salí un poco asustado a comprobar que no había sido un sueño, y no! Para mí mala suerte no lo había sido,ahí estaba él en el desayunador leyendo el periódico.
- Aún está caliente el desayuno, por favor come.
Miré que era un desayuno occidental, no era algo que me desagradara pero prefería algo más tradicional.
-Gracias por la comida.
-Apúrate que hoy tenemos mucho que hacer.
- Ah?! Tenemos....
- En la madrugada Akihiko me llamo y me dijo con severa preocupación que habías estado perdiendo el tiempo y no habías estudiado mucho el libreto y que te ayudará a ensayar hoy.
- Queeee?!
Ese maldito Usami-san, si fue por su culpa que había perdido el tiempo! Me la pagaría! Ya vería cuando nos viéramos.... En mi cabeza se apareció su rostro malvado con esos ojos siniestros clavándose en mi y en ese instante decidí que por mi propio bienestar sería mejor no tomar represalias.
- Hoy vamos a estudiar todo el día y toda la tarde.
- Pero...
La mirada helada de Nowaki dejó las letras del diario y se posó en mi.
- Tienes algo mejor que hacer?
- No- Dije apenado bajando la mirada- Gracias.
- No me agradezcas, no lo hago por placer sino por obligación.
- Gracias igualmente.
Este me extendió la mano y yo no supe que hacer.
- Dámela!
- Ah?!
- Dámela!
- No entiendo.
- Dame tu mano, ya te había dicho que es mía así que si tengo que pasar todo mi día aquí al menos quiero pasarla bien con lo que es mío!
- Ah sí!- De inmediato le di mi mano y este la tomó y luego siguió leyendo importándole poco como iba a comer yo con una mano.
Así nos quedamos hasta que a duras penas termine mi desayuno.
- Ahora vamos a ver, como te preparas?
- Como me preparo?
-Si, como te preparas.
- Bueno... Pues... Ah ya!
Corrí hasta mi habitación, tome el libreto y me reuní de nuevo con él.
- Que escena vamos a preparar?
- Que?
- La escena... La que vamos a...
- No es posible, no te preparas?
- Ah... No sé que a te refieres...
- Ponte ropa deportiva,vamos a entrenar.
- Ah... Esa preparación? Yo creí que...
- Rápido Kamijou!
Obedecí de inmediato y salimos del apartamento rápidamente hacia un área de los edificios que yo desconocía. Era un gimnasio privado.
- Apuesto a que nunca habías venido?
- Awww...- Eso desde cuando estaba ahí?
- Vamos a entrenar cuatro o cinco horas sin descanso.
- Sí.
Intenté sonreír pero yo no era un hombre de entrenamiento, bueno ya había dicho que esa era una enorme diferencia con mi personaje, yo había pasado todas las actividades físicas de la escuela sin pena ni gloria y ahora estaba sumergido en algo en lo que no podía negarme.
Nowaki entonces hizo de las suyas, se quitó la camiseta y presumió su bien trabajado torso, en ese momento quería llorar aunque no sabía si por el cuerpo hermoso y perfecto de mi coprotagonista o por qué sabía que no saldría con vida de esta sesión de ejercicio.
El calentamiento fue intenso, pero no fue nada comparado con la sesión intensa de cardio, Nowaki corría como si su vida estuviera en peligro, demonios! Era muy veloz, yo no podía seguirle el paso el la caminadora, luego elíptica y este no paraba ni un momento en cambio yo estaba muriendo.
- No... Nowaki puedo... Podemos tomar un descanso?
- Si, por qué no?
Yo pare la elíptica y este hizo lo mismo, pero en lugar de sentarse junto a mí fue a la caminadora y la puso en el modo escaladora con una alta velocidad y comenzó a correr.
Verlo ahí sudando y poniendo su cuerpo a prueba me excitó. Estaba empapado en sudor mientras corría, su respiración agitada como si pudiera darme algo más, sus músculos contraídos haciendo todo ese esfuerzo, comencé a morderme el labio y sentí la presión abajo. Mierda! Estaba muy apuesto ahí corriendo, parecía una estrella deportiva, bueno Nowaki lucia como un estrella siempre y justo en ese momento en el que exhalaba poco a poco sentí como me ponía muy duro, maldición, no ahora!
De inmediato di media vuelta y me marché o al menos lo intente pues mi compañero de un salto bajo de la escaladora y me aferró por el hombro.
- A donde vas Kamijou?
- Ah?!
Yo no voltee, solo reí nervioso y respondí.
- Ahhhhh, jajajja quiero ir a ducharme, ya no aguanto estar sudado.
- Pero aún no hemos terminado.
- Ya se, pero... Yo siempre me baño dos o tres veces durante el entrenamiento, tú sabes...
- Supongo tiene sentido, bien vamos!
- Que?!
- También me daré una ducha, no quiero ser el único que huela mal, así que lo haremos a tu modo.
Nowaki me acompañó hasta las duchas y de inmediato tomé un par de toallas demasiado mullidas y me envolví en ellas, carajo! Piensa en cosas feas Kamijou, piensa en cosas feas!
Entonces lo peor sucedió; sin ningún pudor Nowaki se me desnudó enfrente. Carajo!
- Waaaa! Qué haces?
- Me voy a duchar por? Dime Kamijou, no te vas a duchar?
- Si, si pero...
Sentí la sangre agolparse en mis mejillas y baje la vista pero al ver que estaba desnudo por completo de inmediato mire al techo.
- Pero...
- Pero es que...
Nowaki se acercó a mí caminado peligrosamente con un paso elegante y felino.
- No me digas que te da pena que te vea?
- Ammmh no, no es eso... Es...
- O acaso será que... Me deseas?
Me quedé petrificado por completo y el acomodo uno de mis mechones de cabello, estaba muy cerca de mi, maldición.
- Dime Kamijou... Acaso tú...
Ay no! Ay no! No! No podía ser, no de esta manera! Entonces este soltó una risotada y se alejó de mi para poder reírse más a gusto.
- Pero que bobo eres! Jajajaja no puedo creerlo jajajaja hubieras visto tu cara! Ay pero qué ingenuo eres, no hay duda de que eres un niño jajajajajaja!
Puse mala cara ante la evidente burla hacia mi persona y me di media vuelta.
- Me alegra divertirte Nowaki, con permiso.
- Espera Kamijou, era broma jaja ya! No te enojes, además acaso no ya se te bajo la tremenda erección que tenías?
Me quedé helado, y me detuve en seguida, mire hacia abajo y me di cuenta de que era cierto. El coraje me había bajado el ánimo. Sentí vergüenza de que se hubiera dado cuenta de ello.
- Nowaki perdón, yo... Es que yo...
- Acaso creíste que no me había dado cuenta?
Asentí y este respondió.
- Es algo bien natural Kamijou, más cuando las personas me ven.
- Ah?
- Ahora termina de ducharte que aún hay mucho que hacer.
Asentí sin decir nada.
Nos duchamos y regresamos a entrenar, ese Nowaki tuvo que sacarme cargando pues yo no podía moverme más, nunca en mi vida había hecho tanto ejercicio y en medio de unos levantamientos para hacer pecho; un tirón en mi espalda seguido de un quejido me hizo poner fin a mi historial deportivo, carajo no sería una noche fácil con tanto ácido láctico causándome dolor y la contractura muscular en la espalda
- Siento mucho generarte molestias Nowaki.
Dije en sus brazos.
- Por que no me dijiste que te estabas sobre esforzando?
- Bueno es que... Supuse que entrenar era importante para ti.
- Lo es y debería serlo para ti, por eso te pasan estas cosas! Por que no entrenas tu cuerpo, lo actores no pueden darse el lujo de andar de flojos.
Me mordí el labio ante el regaño y este me depósito en la cama con cuidado.
- Traeré compresas y una pomada espera aquí.
Este desapareció por la puerta y yo me quedé mirando mi lugar, al final siempre terminaba dándole molestias, que chasco.
Él regreso con unas bebidas, pomadas, y compresas.
- Quítate la camisa.
- Ah?
- Quítate la camisa Kamijou, acaso no entiendes lo que digo?
Yo asentí y nervioso me la quité con toda la torpeza del mundo.
- Recuestate boca abajo.
De inmediato obedecí y me rendí boca abajo, este se sentó a mi lado y comenzó a frotar mi espalda, en realidad estaba dándome un masaje con sus deliciosas manos frías pero contrario a disfrutarlo yo estaba demasiado estresado de que algo allá abajo se volviera a poner firme.
- Que carajos, mira nada más cuánta tensión?
- Ah sí, este... Así soy yo...
- Relájate o esto no funcionará.
- Lo intentaré...
Contesté nervioso aún y cerré los ojos .
Sus manos heladas y enormes recorrían mi espalda veloces y agudas, ávidas de encontrar tensión que deshacer y provocandola en otras partes.
- Tienes una piel muy suave Kamijou, y además linda.
- Gracias...
Dije algo sonrojado.
- Creo que también deseo tu espalda.
- Ah?
Me gire un poco apresurado y un dolor me hizo soltar un alarido de dolor.
- Waaaa!
- Pero que tonto eres!
- Lo... Lo siento...
Las manos heladas de Nowaki me devolvieron a mi sitio y dijo.
- Ahora quédate quieto.
- Si, lo siento.
Este término el masaje y luego froto un poco de ungüento sobre mi espalda, el cual al contacto con la piel se hizo una bola de fuego que se fundía entre sus manos y mi piel.
- Tsk!
Hice un sonidito pero de inmediato me mordí los labios.
- Te duele mucho Kamijou?
- No, no! En absoluto.
Dije intentando conservar un poco de mi hombría... Pero en realidad quería ponerme a gritar del ardor que me producía la sustancia.
Cuando Nowaki terminó y me indióo que ya me podía vestir me sentía un poco más aliviado, aunque algo incómodo de haberlo hecho pasar esos momentos.
- Ahora hay que ensayar, necesitas algo más?
- No, estoy bien gracias.
- Tus libretos?
- Ah... Iré por ellos.
- Yo iré, dime dónde están?
- En la mesa de la cocina.
- Bien.
No tardó mucho en regresar y comenzamos a ensayar, yo estaba en definitiva muy distraído pues no paraba de pensar en el momento en el que estábamos, Nowaki y yo ensayando juntos, parecía irreal, era como una de esas telenovelas extranjeras donde lo protagonistas tienen una especie de momento íntimo, este leía su parlamento con una expresión de serenidad que me dejó atónito, atónito y distraído.
- Kamijou? Kamijou que pasa?
- Ah?
De golpe desperté a la realidad gracias a que él me pegó con sus dedos en la frente.
- ouch! Nowaki que te pasa?
- No! Que te pasa a ti?
- Nada. Por?
- Por? Pues por que llevo veinte minutos esperando que digas tú dialogo y nada más te me quedas viendo con cara de idiota!
- Ah! Yo... En serio?
Lo mire con incredulidad y vergüenza.
- Ah... En donde estábamos?
- Creo que será mejor comer algo...
Baje el libreto y miré mis manos algo avergonzado.
- Lo siento.
Nowaki me miró enfadado y de inmediato se puso en pie, yo iba a seguirlo pero fui detenido en ese instante por sus palabras.
- No te esfuerces, seguro tu espalda aún está resentida, quédate ahí y yo veré que nos procuro.
Desapareció sin decir más y la pena me invadió, más molestias nos es así ? Por que no podía yo ser el que lo atendiera aunque fuese un vez a él? Aquella persona confiable en la que él pudiera apoyarse? Por que no podía ser más allá de una molestia? Sensei seguro no le daba tantos problemas como yo... Sensei...
No me di cuenta cuando había regresado pero este puso una sopa ramen frente a mí y una en su regazo.
- Con razón tienes tan poca condición física, si solo comes esto!
Mire mi sopa avergonzado y él suspiro.
- Tampoco te pongas así Kamijou, la verdad no está tan mal.
- Ah?
Subíun poco la mirada y este dijo:
- Hacia años no comía algo de esto.
- Años?
- Si, casi diez, cuando llegue a vivir con el viejo, él me lo prohibió, me dijo que si quería ser un actor profesional no podía meter está basura a mi cuerpo pues es lo que proyectaría en el escenario, me gustaba mucho comer este tipo de cosas pero no quería decepcionarlo, sabes? Así que deje de comer ramen y pastas y dulces y cambie mi dieta al estilo de lo profesionales del teatro, me costó mucho trabajo olvidar el sabor...
- Lo siento mucho Nowaki, si quieres podemos pedir algo y dejar esto...
- Ya te dije que está bien, ahora come.
Ambos comimos en silencio, yo pensado en lo que Nowaki me había dicho. Él había dejado de comer esas cosas que le gustaban por complacer a sensei y por volverse buen actor, podría yo ser capaz de hacer algo semejante? No. Aunque sea algo pequeño? No sabía, pero si había algo que deseaba saber y eso era como había sido su vida antes de todo esto, pero no tenía el coraje de preguntarle algo así.
- Sí, ese viejo me hizo dejarlo pero el muy infeliz ahora come con tranquilidad!
-Sensei come con tranquilidad?
- Claro que si, yo he visto que compra ramen barato en la calle.
- Y tú entonces...
- Yo no, ya te dije que yo no lo como debido a él.
- Pero... Si el come y tú no... Solo por que él te lo prohibió...
- Lo sé, soy un idiota Kamijou pero esta es la única forma en que pueda quizás sentirme unido a él aún... Pfff por que te digo esto?
Yo lo mire con atención, no parecía ser el mismo Nowaki de las producciones ni de las revistas, tampoco estaba actuando, eso sí lo sabía y creí que era un buen momento para acercarme.
- Nowaki... Que... Que otras cosas te gustaban?
- Ah?
-Perdón! No! No tienes que contestar si no deseas!
Respondí nervioso.
- Mmmmh que otras cosas? Mmmmmhhh no lo recuerdo... La verdad no recuerdo mucho antes de ese viejo....
- Ah?
- Llegue aún siendo un niño a su casa y este me apantallo con su aspecto, ya sabes... Su cara estoica y esa imponente altura, cuando lo vi por primera vez creí que se trataba de la estatua de un emperador de la antigüedad que había cobrado vida, también recuerdo que no tenía buena cara por tener que ocuparse de mi pero supongo que no le quedó de otra.
- Nowaki... La pasaste muy mal en esos momentos?
- Pasarla mal?
Sus ojos en definitiva estaban vacíos al hablar.
-Que cosas, claro que no. No es como que lo hubiera elegido, pero pase de dormir en la calle a tener un techo, de tener que comer basura reciclada de las sobras a comida caliente y bueno ni que decir de poder tener a alguien, aunque el viejo siempre ha sido algo antipático eh? Esa cara no le ayuda en nada de nada, la verdad tenía miedo de él jajaja!
La risita que Nowaki soltó me pareció muy bella y natural y sin pensar solté lo primero que me vino a la cabeza.
- Debió dolerte mucho separarte de él no es así?
De inmediato al escucha eso, Nowaki clavo su mirada más afilada en mi y se enderezó, parecía más tenso de lo normal. Mierda! Lo había dicho en voz alta!
- No me separé de él Kamijou, solo... Solo es una ligera distancia por trabajo! Entiende Miyagi y yo seguimos juntos!
- Si bueno... Lo siento es que yo... Yo... Yo ya no sé ni qué digo- Termine la frase suspirando por ser un idiota.
Terminamos de comer la sopas en silencio y de inmediato nos dispusimos a ensayar.
La verdad se notaba muchísimo la diferencia entre la actuación de un profesional como él contra la de un amateur como yo. Nowaki seguía cada pauta, cada indicación en el guión, parecía que se lo sabía de memoria, dios! Podría apostar a qué así era, seguro se lo sabía, yo lo había estudiado un par de veces pero de eso a saberme kanji por kanji, eso no!
La escena que más me costó fue aquella en donde yo lo tenía que golpear en el aeropuerto, demonios! Yo era violento pero no tanto.
- Que sucede Kamijou? Aún te duele tu espalda?
Pregunto Nowaki ante mi evidente incomodidad.
- Mmmmh nada, nada, es solo que esto es algo exagerado no crees?
- Esto?
- Golpear a alguien solo por que se marchó... No es como que sea importante, si ese alguien no quiere estar contigo pues total... No es el fin del mundo.
Dije aquello mirado a un lado intentando decirle lo que yo sentía, que si sensei no lo amaba no era el fin del mundo, muchos otros si lo hacíamos.
Jamás adivine lo intuitivo que podía ser Nowaki y respondió algo que me dejó callado.
- Seguro que no harías eso, solo te dejarías enfermar al punto de que te llevarán al hospital no es así?
- Ah?!
De inmediato lo mire sorprendido.
- Acaso crees que soy estúpido Kamijou?
Acaso él recordaba aquella vez que se había metido en mi cama?
- Nowaki yo...
Mis ojos se fijaron en los de él y un miedo se apoderó de mi, él sabía! Recordaba lo que había pasado... Entones... Por que no había dicho algo? Por que... Se había quedado callado? Su silencio me había dolido mucho, acaso era tal su grado de desagrado hacia mi?
- Nowaki...
Entonces una vez más tomándome por sorpresa, Nowaki hizo aquello me mejor sabía hacer. Sorprenderme.
Tomó mi mano y dijo.
- Hay que seguir ensayando, esa parte debe quedar bien debido a que es el intro del episodio.
Su mano estaba fría y la mía caliente, y pude sentir el choque de nuestras temperaturas como si dos cohetes hubiesen colisionado.
Me quedé atontado y este puso un gesto de incomodidad evidente.
- Ya te dije que tus manos son mi propiedad, no es así? No me gusta tener que repetirlo.
-Ah sí, si!
Respondí nervioso, este cerro su mano en torno a la mía y yo hice lo mismo y seguimos leyendo, de vez en vez volteaba a verlo y él parecía muy sereno, ese gesto me encantaba en Nowaki, luego me distraía y este soltaba mi mano un momento para ponerme un golpe en la cabeza.
- No te distraigas Kamijou!
Entonces volvía a tomar mi mano y continuábamos la lectura, en repetidas ocasiones este me hizo correcciones en dicción y en entonación.
Lógicamente como estábamos pasándola muy bien el tiempo se fue rápidamente, para cuándo me di cuenta el sol se ponía y mi estómago comenzó a molestarme con gruñidos muy vergonzosos.
- Será mejor cenar algo, pediré un servicio de comida para cada uno.
Este se levantó, tomo su teléfono y de inmediato ordenó la comida, me gustaba ver esa faceta de Nowaki, se miraba más relajado.
La comida llegó rápido así, tanto como las malas noticias.
Fue mi estupidez prender el televisor, mi total culpa, tenía metida en la cabeza el tener una cena normal con Nowaki, ya que estaba viviendo la fantasía del momento, quería la estúpida fantasía completa, entonces él tomo asiento frente a mí cabecera y yo tuve que hacer esa tontería, prendí el televisor. La primera noticia....
" Se les vio muy acaramelados comiendo y sonriendo muy juntos, eso nos hace pensar que Miyagi sensei está en planes de reconciliación con su ex esposa la actriz..."
De inmediato los ojos pasivos de Nowaki se tornaron en un verdadero tifón, viendo las imágenes que la prensa japonesa había obtenido de aquellas dos figuras públicas, sensei sonreía encantador y ella mostraba una mirada enamorada. En verdad parecía que algo resurgiría del fuego,
mis manos actuaron torpes e intente apagar el aparato pero el me arrebató el mando y siguió observando. Los presentadores parecían encantados del suceso.
" Entonces quizás pronto tengamos una linda reconciliación eh?"
" Es lo más seguro Kahmi, recordemos que ellos en su tiempo fueron una pareja muy importante para la industria del teatro y el cine japonés"
" Que bueno, me alegro por ellos, se les puede ver el amor aún dentro de sus corazones"
De inmediato Nowaki se lanzó en una patada iracunda contra el televisor y me sentí aterrado.
- Maldito viejo idiota! Es mío!
Su pie estaba sangrando pero no me atreví a moverme.
- Son unos idiotas! Él está conmigo!
Dijo dirigiéndose a mi.
- Lo voy a matar!
- No!- Dije yo por instinto.
- Si! lo voy a matar y luego me mataré yo!
- Nowaki!
- No te metas Kamijou, no tiene nada que ver contigo!
Él se marchó de inmediato aún con el pie herido. Intenté seguirlo pero fue inútil, llegué a la puerta y ya no estaba.
Terminé yéndome a dormir de inmediato, aún me dolía algo la espalda y no tenía ganas de llorar, esto era demasiado para un solo corazón.
No recuerdo cómo fue pero el ruido de afuera me despertó en la madrugada, era la voz de Nowaki. De inmediato me levanté a ver qué sucedía.
- Te odio! Te odio musho!
Abrí la puerta un poco y con cuidado de no hacer ruido y ahí estaba Nowaki, parecía un desastre, traía unos zapatos deportivos pero no llevaba calcetas, el mismo pantalón deportivo de hacía rato y la misma sudadera.
- Basta niño, deja de hacerme berrinches, ya te dije que pasa.
- Estabas con ella! Esa mujer te hizo daño! Acaso eres estúpido?
- Haz todo el berrinche que quieras Nowaki, no me importa.
Dijo sensei abriendo la puerta para entrar a su departamento.
- Ya se que no! Para ti solo soy un vaso roto!
De inmediato Nowaki se levantó y corrió contra sensei con los puños apretados, yo creí que iba a hacerle algún mal, no pude evitar lanzar un grito ahogado pero antes de que lo alcanzará, sensei le dio un golpe en la cara tan fuerte que lo noqueó de inmediato y el joven cayó al piso.
Intenté guardar silencio pues estaba asustado pero sensei me tenía cubierto.
- Descuida lindura está muy ebrio, estará bien.
- Yo no... No estaba espiando es solo que el ruido me despertó.
- Entonces no me estabas celando?
- Pero que tonterías dice sensei?
- Lo siento amor, anda ve a dormir.
- Se hará cargo de él?
- Claro que no mi vida, si se embruteció solo con tanta bebida; que se cuide solo.
- Sensei!
- Nada le va a suceder si se queda ahí a dormir.
- Tsk! No lo voy a dejar! Aunque sea podría ayudarme a llévalo adentro.
- Si me das un beso con gusto.
-Oooff!- Bufé enojado y me acerque a Nowaki para levantarlo, sensei estaba dispuesto a cumplir su amenaza cuando miré la gota de sangre que rodó por la manga de su chaqueta.
- Ah?
Entonces fue que vi que algo no estaba bien, Nowaki estaba helado y pálido, de inmediato intenté averiguar de dónde venia el hilo de sangre. Abrí su chaqueta y me sentí aterrorizado, nunca antes había sentido tanto miedo.
- Ay no! no! No! Nowaki!
Sensei volteó de inmediato al escuchar mi tono de alarma y yo abrí a todo lo que dio la chaqueta de Nowaki.
Debajo su camiseta empapada en rojo, rápido busque su torso desnudo y encontré una cortada en el pecho enorme que dejaba escapar un hilo de sangre, una en le estómago más gruesa y cortadas donde sus venas se unían.
De inmediato sensei se arrodilló y le busco en las muñecas que obviamente tenían cortes pequeños pero profundos, Nowaki se desangraba poco a poco.
- Niño idiota, que hiciste? Rápido Hiroki llama a una ambulancia!
Estaba petrificado, miraba solo la sangre que ya había manchado su camiseta por completo.
-Hiroki! Hazlo ya!
Corrí al teléfono marque el número de emergencia, el resto fue historia. Sensei se subía a la ambulancia con Nowaki, yo me quedaba... Después de todo yo no era algo de él no es así? Nowaki... Terminó haciéndome llorar...
Amor Yaoi
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