Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Goodbye my love [KyuSaeng] por Sora ELF

[Reviews - 15]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del capitulo:

Aqui:

10:15 am - 09/07/2018

 

La pizza sabia horrible, el refresco aun peor pero al parecer era el único en notarlo, no tan único. Kyu Jong no había tocado ni una sola pieza, mis padres estaban en lo suyo. Sonreían sin notarnos o eso creíamos.

-Las hijas del señor Choi son hermosas y perfectas para ellos – Kyu y yo nos miramos por unos microsegundos antes de fijarnos en mi padre quien había dicho aquello.

-¿Disculpe? – la sonrisa de mi padre se debilito, en cambio mi madre se mantenía tranquila.

-Su padre hablaba de la cita doble – ambos volvimos a mirarnos esta vez duramos unos segundos.

-¿Qué cita? – Kyu Jong no hablaría de manera clara pero yo sí.

-¿En qué mundo estás Young  Saeng? La cita que te mencionamos – pero yo no recordaba ninguna cita, ¿de qué demonios hablaban?

-¿Qué cita? – volví a repetir y la mire solo a ella con miedo a encontrarme con otra mirada aún más intimidante.

-Ay hijo, te la mencione esta mañana. Aceptaste gustoso – hice memoria pero todo lo que me vino a la mente fue una muy breve conversación con mi madre antes de dejarme en la escuela.

-¿Nada serio?

-No.

-Perfecto. Será simple.

-Uhumm.

¿Habían sido unas cortas palabras o había más? ¿Realmente había aceptado? La curiosidad pudo con él y giro hasta Kyu Jong, su mirada fue una mezcla de enojo y decepción. Joder. Que él no recordaba.

-No acepte nada – su madre soltó un grito de indignación y luego rio.

-No te hagas el gracioso Young Saeng, tu padre ya programo todo.

-Exacto. Como dije, ellas son perfectas – ellas… también iba a estar con Kyu Jong, entonces a él también debieron preguntarle. No era el único culpable. Cruce mis brazos y trate de devolverle la mirada. Funciono exactamente solo un segundo.

-… pero como ya se lo habías dicho a Kyu, todo fue rápido – volví a mirar a mi madre con un puchero. ¿Ahora de qué demonios hablaba? Una risa débil inundo la habitación y contagio a los demás, incluso a mí. Parecíamos una familia. Demonios.

 

Al llegar a mi habitación rompí en llanto.

¿Lo estaba aceptando?

Alguien toco la puerta y solo la abrí 30 minutos después cuando note que no eran mis padres y no se rendían. Rendía.

-¿Puedo … - hice ademán de pasar pero negué, antes él era a quien acudía cuando necesitaba abrazar a alguien ahora la idea me perturbaba.

-Yo siento lo de la cita – mencione sintiéndome culpable. Lo era. Ahora teníamos que ir a una estúpida cita con dos niñas que ni siquiera conocíamos – En mi defensa tenía mucho sueño como para entender de que hablaba a esas horas – él soltó una gran carcajada.

-¿No puedes dormir bien? – su pregunta estuvo llena de preocupación y entonces noté sus ojeras. Mentí asintiendo.

-Solo me ponía al día con algunos apuntes… - asintió sin estar muy convencido.

-Yo…

-Es hora de dormir, ¿Qué hacen aquí? – mi madre sabia en que momento interrumpir y no supe si estar molesto o feliz.

-Claro…Yuna – que él la llamara por su nombre siempre me causaba gracia. A mi mamá le encantaba.

-Adiós – dije y me metí a mi cuarto de inmediato. No soportaba más aquello.

 

 

Había sido una buena noche, sin pesadillas o sueños en general. Había sido una buena noche fuera de casa. Mire la habitación sin saber exactamente donde estaba. Trate de recordar que había pasado y cuando lo hice me dieron ganas de llorar. Había salido de casa como en los viejos tiempos y mi primera opción había sido un club pero yo nunca bebía solo iba a divertirme y lo hacía con mis amigos pero no los había llamado, debí hacerlo.

-Al fin despiertas – mire al chico frente a mí, era alto, la piel pálida, el cabello hasta los hombros e iba en bóxer. Él daba la impresión de ser perfecto y… iba en bóxer. Me mire y descubrí que también estaba en bóxer sin una sábana encima – tranquilo, no pasó nada.

-Bueno… pero yo – oh demonios, estaba seguro que estaba muy sonrojado.

-Cariño – otro hombre mucho más alto apareció y abrazo a este por la espalda, ahora todos estábamos en bóxer pero era el único confundido.

-Creo que voy a desmayarme – ambos rieron, se dieron un pico y luego el más bajo salió. El otro se acercó y apenas note que traía algo entre la manos. Era mi ropa y también mi teléfono que vibraba.

-Tranquilo, Heechul dice que en el club bebiste mucho y como no supo cómo llevarte casa te trajo además le pareciste muy lindo.

-¿Heechul? – señale la puerta y él asintió - ¿Entonces no hicimos algún tipo de trio? ¡¿Cierto?! – él negó riendo.

-Heechul es mi novio y no es una relación abierta.

-¡¡Aunque tú seas muy lindo!! – grito alguien desde algún lugar de… ¿La casa? ¿El departamento?

-Gracias- susurré.

-Puedes vestirte, comer y luego puedo llevarte a casa. Oh… De acuerdo.

-¿Tu nombre? – pregunte antes de que él abandonara la habitación.

-Siwon – respondió con una gran sonrisa. Me vestí con rapidez y al salir note que era un departamento, uno muy lujoso y lindo. Justo como él que uno quisiera tener al independizarse. Note que había una habitación principal y me alivio la idea de no haber dormido todos juntos.

-Ay pero si eres una ternura andante – Heechul había aparecido de la nada y había jalado mis cachetes con cariño, odiaba eso pero por alguna razón esta vez no. Heechul se sentía tan cálido – Ven a comer algo – me senté junto a ellos en una mesa pequeña que tenían en la sala y empece a comer sin preocuparme por mi teléfono, ellos no estuvieron tan tranquilos con eso o no quisieron estarlo – Te están llamando Young Saeng – Siwon tenía una Tablet entre las manos y pasaba cosas mientras comía, él estaba totalmente en otro mundo pero su novio no. Heechul me miraba de manera pícara.

-Devolveré la llamada luego.

- ¿Tus padres? ¿Novia? O ¿novio? – me atragante ante lo último.

-acabas de responder cariño – lo mire sonrojado mientras mi celular seguía sonando, atendí la llamada aun con comida en la boca.

*¿QUE?

*¿DONDE DEMONIOS ESTÁS? – Y tenía que ser la persona que menos deseaba en el mundo.  

*Ya llegaré a casa – y colgué sin esperar respuesta. Apague mi teléfono y seguí comiendo a pesar de las miradas de gracias de Siwon y Heechul.

 

Siwon era rico y mucho. Su auto era uno de ensueño y el edificio donde habíamos estado era jodidamente lujoso. Llevo a Heechul a una universidad donde él dijo que estudiaba leyes y luego me dejo en mi casa no sin antes guardar sus números en mi teléfono.

-Podemos seguir en contacto – dijo mirando mi casa con una gran sonrisa, era una sonrisa amistosa.

-Gracias por todo – sacudí mi mano y él se fue, solo camine unos pasos y ya tenía a alguien envolviéndome en sus brazos.

-No me hagas esto de nuevo Young Saeng, Joder. Nunca nunca – me soltó y sujeto mi rostro mientras repetía esto último muchas veces. Tan cerca…

-Te dije que había ido a… algún lugar de mala muerte – mi padre tenía su traje puesto y estaba muy presentable. Era todo lo contrario a Kyu Jong quien me abrazaba con el pijama puesto, el cabello revoloteado y ojeras aún más grandes. Acaricie su rostro sin poder evitarlo, se veía a punto de llorar. Ambos nos alejamos cuando mi padre se acercó.

-Hueles de maravilla. Kyu Jong, hijo… ve a descansar te ves mal – se subió a su auto pero el mencionado pareció no notarlo.

-Ellos dijeron que hacías esto a veces – asentí y empecé a caminar con dirección a casa – pero no pude estar tranquilo, si tú no estás aquí no sé si aguantaría esto.

-Ya estoy aquí, no importa – mi madre apareció en la entrada y nos sonrió a ambos como si nada. ¿Cómo podía estar Kyu Jong tan preocupado?

-Hablo en serio – dijo, subimos las escaleras de la misma forma hasta llegar a mi habitación que estaba abierta.

-Lo siento por eso, pero es que…

-Kyu Jong. Ve a descansar. Mi padre ya hablo, te ves mal.

-No importa. Tú si – su frase sonó tan lejana…

 

/Kyu Jong/

 

Yuna había dicho que él hacía eso a veces, que salía por las noches, que habían intentado detenerlo al principio pero luego solo lo dejaron ser. Era un adolescente y yo lo sabía, no debí haber entrado en pánico pero la idea de que no volviera me llego de pronto. Seria aquella casa mejor o peor de esa manera, sin un Young Saeng. Cuando pasaron las 10 am supo que era la segunda opción, necesitaba estar cerca de él.

 

-¿Has hablado con Hyun Joong? – quería preguntar dónde había estado, que había pasado y con quién  pero no quería sonar más paranoico de lo que ya estaba. La mirada de Young Saeng se volvió más comprensiva, me dejo entrar a su habitación y él se dejó caer en su cama.

-¿Tengo qué?

-Creo que no – se destapo un momento dejándome ver su rostro.

-¿Pasa algo? – negué de inmediato y me sentí nervioso ante su mirada.

-Debo cambiarme, yo… nos vemos luego.

- Kyu Jong – no pude moverme luego de que me llamara, no lo había escuchado decir mi nombre en mucho tiempo o tal vez corto - ¿Crees que llegaremos a ser una familia?

-¿Quieres eso? – y la conversación quedo ahí, él volvió a cubrir su rostro y yo salí con la esperanza de que volviera a decir mi nombre.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).