Mi Historia por Leo-chan y Kirito-san

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Notas del capitulo:
I: Tada, un nuevo capítulo, cabe aclarar que es algo corto porque no podia hacerlo más largo a pesar de todo el tiempo que tuve, pero es que es una de las partes en las que no sabes dónde parar o como continuarlo sin que suene... Mejor se los digo al final GHG

En chico peli-azul había vuelto al departamento con el ceño un poco fruncido, estaba enojado pero no quería que su amigo lo notará pues no quería que le preguntará el por qué de eso. Sin embargo su compañero sabía cómo detectar las emociones mediante un mínimo gesto en su cara.

El peli-azul no dijo ni una sola palabra desde que entró y el rubio tampoco, tomo los platos que había usado y se puso a lavarlos, le tocaba hacerlo ya que el rubio había hecho el desayuno de ambos mientras que el rubio se preparaba para salir.

Se miró en el espejo verificando que estuviera en perfectas condiciones, no le gustaba verse mal así que cada día antes de salir se miraba al espejo, peinado, un poco despeinado pero con buena apariencia, ropa, muy bien planchada y sin arrugas, rostro, sin granitos o cualquier otra cosa que dale su apariencia. Miró de reojo al menor quién se encontraba buscando ropa en su mueble de la ropa, pensó que era porque se iba a meter a bañar después de todo lo que cree que le habia pasado el día anterior.

-Entonces... ¿Me dirás qué pasó? -sabia que el menor no le respondería con certeza y con detalles la razón por la cual estaba enojado pero igual tenía que intentarlo.

El menor inhaló aire sin voltear a ver a su amigo- Es algo… complicado y extenso -dijo sin decir más.

-Ah, ya veo -dijo llevándose una mano a uno de sus codos y la otra a su barbilla pensando en algo que le pudiera servir- entonces… ¿Él era tu hermano?

-Era, si -lanzo una camiseta negra con mangas que le llegarían hasta un poco más del cuarto de su brazo a la cama.

-¿Y a que vino, exactamente? Si se puede saber -se recargo en el mueble de la ropa de Iceen mirándose ambos a los ojos.

-No te lo puedo decir, es… un secreto -saco un short negro que le llegaba a las rodillas.

-Vamos, Iceen, todo es un secreto aquí ¿Por qué tan reservado? -se aburría de la respuesta que siempre le daba- “¿Qué escondes, Iceen?” -se preguntaba siempre ante los secretos de este.

Cerró el cajón del mueble y cerró los ojos- Cayde, no tienes que hacer eso -dijo sabiendo lo que hacía su amigo a lo que esté alzó una ceja fingiendo no saber lo que decía- no tienes porqué ayudarme con mis problemas, estoy bien.

-“Osea que si tiene problemas” Iceen, te has estado excediendo últimamente, te estás sobreexigiendo y eso es malo -le conto- y he estado al pendiente de todos tus movimientos desde la semana pasada -eso hizo que volteara a verlo con sorpresa.

-Espera -hizo una pequeña pausa- ¿Qué? -pregunto sorprendido.

-Iceen, no lo sigas haciendo, no sé qué es lo que tratas de lograr con todo eso pero tienes que detenerte antes de que te suceda algo malo -¿Era posible que él lo supiera? ¿En serio sabía lo que trataba de hacer? ¿Pero cómo?

-¿Qué es lo que sabes? -pregunto firme y un poco nervioso.

-Solo lo que he podido observar en ti -decia preocupado- he visto todo lo que haces, desde ver como te unes a un equipo que fue elegido para cumplir una misión en específico hasta ver como descansas menos a propósito, como la otra noche poniendo de ejemplo -Iceen apartó la vista con las cejas un poco gachas escuchando atentamente a Cayde- no sé lo que tratas hacer con tanto trabajo y tan poco descanso, ni siquiera sé muchas cosas de ti aparte de lo que me muestras con el día a día.

-No trato de demostrar nada, es solo que… -se quedó callado.

-¿Iceen? -el peli-azul se sentó en su cama con sus manos a lado de su cuerpo, miro el suelo un poco triste. El rubio lo imitó solo que con sus codos recargados en sus rodillas y las manos casi pegadas (como muchos se sientan), sentado a lado derecho de Iceen- te prometo que no le diré a nadie, y si quieres no volvemos a hablar de esto después, quiero ayudarte… pero no me dejas -llevo una de sus manos al hombro derecho del menor en forma de apoyo- dime ¿Necesitas ayuda?

El menor asintió cerrando los ojos frustrado por todo lo que le pasaba- es solo que… las cosas no son como antes Cayde, todo ha cambiado y yo… simplemente no pude hacer nada para evitarlo -se sincero.

-¿Y qué? Nadie pudo haberlo evitado, ni siquiera se pudo haber previsto el ataque de los demonios -decia tratando de hacer que no se estrenará o se descontrolara como cualquier otra persona.

-No lo entiendes… esto que llevo dentro -llevo una mano entre el estómago y el pecho- estos secretos, las heridas emocionales que tengo -lo estaba consiguiendo, estaba logrando hacer que su amigo se confesará con él.

-Vamos Iceen, no te estreses, no te desanimes -sin embargo a pesar de estar emocionado también estaba escuchando atentamente y serio al chico comportándose comprensivo hacia él.

-¿Sabes cuántos años tengo? -el mayor pareció pensárselo un breve instante.

-Segun mis cuentas tienes unos 16 años.

-¿Y sabes cuántos años tenía hace 11 años? -esta pregunta le confundió, pero igual respondió.

-¿5 años? ¿6?-en ese momento no estaba muy seguro de lo que decía, el menor negó con la cabeza confundiendo más a su compañero.

-Hace 11 años yo tenía 15 años -no sabía que cara poner ante tal respuesta ¿Estaba bromeando o lo estaba diciendo en serio?

-Eh… ¿Iceen? -el menor sabía que el mayor estaba confundido, muchos lo estarían al igual que los pocos que saben su estado lo estaban.

-Si quiero que comprendas entonces tienes que estar preparado para lo que te diré a continuación porque esto va más a allá de lo que muchos piensan -se miraron a los ojos, el mayor asintió tragando hondo, el menor se puso serio, no le gustaba tener que pasar por eso- lo que pasa es que yo… hace 11 años el día 7 de Julio… del año 784 yo -se detuvo dejando un pequeño suspenso para que las cosas no sonarán tan ridículas y se notarán seria- yo viaje a otra dimensión.

Notas finales:
I: Bueno, ahora sí, llegue a una de esas partes que no sabes cómo continuarlas o extenderlas aparte de poner algo que está pasando en otro lugar pero es que aún no es tiempo de poner lo que pasa en otras partes, no hasta el capítulo 5 y pues lo tuve que dejar corto como tipo suspenso.

En fin, una cosa que no aclare en el capítulo anterior fue (1) que no sabíauy bien que tan avanzada estaba la tecnología en FT como que si había refrigerador, que si tenía tipo aire acondicionado y pues lo básico, teles no tienen porque hay están las lácrimas que se encargan de transmitir las imágenes y eso. Aparte no tengo suficiente tiempo para volverme a ver todo el anime detalladamente D:

Y otra cosa que me acabo de acordar ¿En el anime usan calcetines? Porque solo he visto que se ponen las botas o zapatos y no sey si estoy ciego o no pero no les veía el calcetín, en ese entonces no prestaba mucha atención, por eso queria pedirles si me podían aclarar esas dudas, por favor, a aquellos amantes de Fairy Tail.

También haré como un plano de lo que sería la habitación de estos dos para que no se confundan mucho y menos yo a la hora de estar describiendo 1001 palabras sobre la habitación XD

Creo que eso es todo y nos vemos en el próximo capítulo, adiós.

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