Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

I Care About You (NamJin) (BTS - Yaoi) por ArShaBeuKPopLover

[Reviews - 27]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Mis ojos estaban fijamente puestos en el señor Kang, esperando alguna señal que me dijera que solo estaba bromeando. Sin embargo, con el señor Kang mirándonos a ambos totalmente serio, me dolía aceptar que esa era nuestra cruel realidad.


El incómodo silencio terminó cuando el señor Kang fijó su mirada en la mía para hablarme.


—Ya que ahora eres parte de este plan debes firmar este documento también— Habló, y extendió una de las hojas que traía consigo hacia mí, esperando que yo la tomara.


Con mis manos temblorosas tomé la hoja con temor, al mismo tiempo que giré mi rostro hacia Namjoon para saber cuál era su expresión entonces.


Con mi mano sosteniendo la hoja de papel, miré que Namjoon estaba cubriendo su nariz y su boca con una de sus manos; sus ojos estaban cerrados con fuerza, lágrimas comenzaron a brotar de ellos. Namjoon estaba tratando de contener su llanto.


—Toma…— El señor Kang llamó mi atención al decirlo mientras con una de sus manos extendía un bolígrafo hacia mí.


Extendí mi otra mano para recibir el objeto que el señor Kang me ofrecía, después, la voz de Namjoon fue la que esa vez llamó mi atención.


—Jin Hyung…, por lo que más quieras…, no aceptes esto— Con su voz en un hilo Namjoon habló, haciendo a mi corazón encogerse por el dolor que en su voz se escuchaba.


Pensé, pensé qué hacer mirando con el corazón roto a Namjoon, me partía el alma verle así, seguramente estaba destrozado sabiendo que ahora tenía que hacerlo conmigo.


Lo más probable era que se sintiera asqueado por saber que tendría que tocarme. Quizá eso fue lo que a mí más me dolió pensar, que Namjoon estuviese así porque no quisiera tocarme debido a que simplemente le daba asco por lo que soy, un hombre, peor aún porque soy un hombre que estaba enamorado de él en secreto.


Me sentía fatal. Ahí prácticamente sentía que estaba obligando a Namjoon a tener relaciones sexuales conmigo. Sin embargo, me fue imposible no pensar en que, si me echaba para atrás entonces, Namjoon no podría salir de ello, y tendría que hacerlo con la mujer que contrataron para él; y eso me daba náuseas solo de pensarlo.


Era yo, o dejar a esa mujer hacer lo que ella quisiera con Namjoon… Pero, ¡No, eso yo no podría permitirlo jamás!


Me llamarán un egoísta por ello, pero, prefería entregarme a él, que vivir con el pensamiento de que fui cómplice de la primera vez de Namjoon nada más y nada menos que..., con una prostituta.


—Lo siento, Nam...— Mi voz se quebró al intentar pronunciar su nombre.


Lloré, lloré escuchando el llanto que Namjoon no pudo apaciguar.


Lloré, mirando a Namjoon darse la vuelta y dirigirse hacia la cama para sentarse y esconder su rostro entre sus manos.


Lloré, volteando mi rostro hacia la hoja que tenía en una mano para escribir mi nombre en la parte inferior.


Lloré, al extender mi pulgar derecho para que el señor Kang lo llenara con la tinta roja, y luego, dejar caer mi dedo sobre mi nombre escrito en la hoja para sellar con mi huella digital el contrato.


Lloré, al escuchar las palabras del señor Kang para nosotros después de tomar de mis manos la hoja que le pertenecía.


—Sé que esto será difícil para ambos…, es difícil para todos los que sabemos de esto, de hecho…, sé también que nadie quiere quedar sin trabajo, y mucho menos nadie quiere dejar que siete chicos triunfadores acaben su sueño a causa de este problema…— Hizo una pausa sorbiendo su nariz. Después agregó:


—…Mis palabras de consuelo hacia ustedes son que, al menos se tienen el uno al otro. Son amigos, son familia, pero sin tener parentesco alguno, y no se están dejando solos en esto... Véanlo como una demostración de amistad que están haciendo por el otro, la máxima de ellas si ustedes quieren catalogarla, la prueba que traspasa todos los límites de su amistad. La prueba de amistad que los marcará para siempre…


Entre lágrimas, mis ojos observaban al señor Kang mirándonos a ambos al momento que hablaba.


El señor Kang limpió las pequeñas lágrimas que se acumularon en sus ojos, después, continuó diciendo.


—Nosotros, los que sabemos de esto, estaremos apoyándolos en lo que ustedes necesiten…


Limpié mis ojos porque casi no le veía a causa de mis lágrimas.


—...También, hemos pensado darles el tiempo que necesiten para hacerlo, pero, tendrán…, una semana como máximo…— El señor Kang hizo una pausa, misma que yo aproveché para girar mi rostro hacia Namjoon y mirar que estaba limpiando sus lágrimas con sus manos tratando de no quitar su vista del señor Kang.


—El señor Lee no sabe nada de esto…, pero no se preocupen, yo iré a hablar con él cuando ustedes se vayan…, así que…, será mejor que lo hagan ahora, antes que el señor Lee venga a ver cómo va el video que supone estoy grabando con Namjoon— Aseguró, y en seguida, comenzó a caminar hacia Namjoon para colocar su mano sobre uno de sus hombros, y le dijo:


—Iré por tu ropa, Namjoon— El mencionado solo asintió con su rostro cabizbajo. Después, el señor Kang entró a la misma habitación donde la mujer había entrado hace un rato.


No sabía qué hacer, miré a Namjoon, pero él estaba sumergido en sus pensamientos; si Namjoon tenía deseos de mirarme eso no lo sé, pero sí sabía que no tenía ni la más mínima intención de hacerlo.


En unos segundos el señor Kang estuvo de vuelta con nosotros, traía en una de sus manos la camiseta y la sudadera de Namjoon, mientras que en la otra traía sus zapatos; apenas me di cuenta que Namjoon había estado descalzo todo ese tiempo.


—Ten…, puedes dejar la bata en la cama.


El señor Kang entregó la ropa a su dueño, y después, se acercó a mí diciéndome:


—Quiero decirte algo, ven— Solamente pude asentir a su orden y le seguí, ambos dándole la espalda a Namjoon para dejarle vestirse.


Cuando estuvimos a unos metros de Namjoon, el señor Kang se detuvo y se volteó para decirme:


—Tienes que llamar a tu Mánager. Al igual que yo, él sabe de todo esto. Él tiene unas cuantas cosas que decirles, a ambos…— Explicó, y giró a ver a Namjoon al referirse a ambos.


Le imité, y miré a Namjoon comenzando a ponerse su camiseta dándonos la espalda al señor Kang y a mí.


Al mirar lo mismo que yo, el señor Kang se inclinó hacia mí y habló en voz baja para decirme:


—Namjoon necesita comprender que su Mánager te ha ordenado venir acá… Y, tú también tienes que saber la razón por la que lo hizo…— Hizo una pausa, y giró nuevamente hacia Namjoon.


De igual forma le imité, ambos notamos que Namjoon se ponía sus zapatos.


Al igual que antes, el señor Kang volvió a hablar en voz baja.


—Háblale a tu Mánager…, él tiene muchas cosas que explicarles a ambos, pero creo que primero lo hará contigo, a Namjoon se lo explicará después…, tu Mánager sabe que tú comprendes más rápido que Namjoon— Aseguró, dejándome extrañado por lo que dijo.


Finalmente, el señor Kang deshizo su cercanía y volvió a caminar en dirección a Namjoon.


—¡Ya estás listo!…— Exclamó, palmeando la espalda de Namjoon cuando se levantó por haber terminado de atar sus zapatos; éste, le quedó viendo un poco incómodo.


En seguida, el señor Kang se detuvo a mirarnos a ambos y después, habló diciéndonos:


—Es hora de que se vayan, chicos…— Hizo una pausa y se giró a mí para decirme:


—Jin, háblale a tu Mánager cuando lleguen a su apartamento, recuerda lo que te dije hace unos segundos…— Asentí cuando hizo la pausa, y luego, se dirigió a ambos para continuar después de un suspiro.


—Lamento todo esto, chicos, de verdad que lo hago… Pero, por favor, asegúrense de hacer ese video… Piensen en las consecuencias que tendrán si no lo hacen… Así que, por favor, prométanme que sí lo harán— Pidió, en un tono de súplica.


Busqué la mirada de Namjoon para ver su expresión, éste, al sentir mi mirada, giró su rostro a mi dirección, pero sus ojos no se atrevieron a mirarme, miraba el suelo con una expresión que delataba sus ganas de llorar. Al no poder seguir soportando mi mirada, bajó su rostro, pero asintió en dirección al señor Kang.


Listo, eso significaba que Namjoon también se había resignado a hacerlo conmigo. Casi hasta presentía que a Namjoon le daba igual hacerlo con quien sea.


Reprimiendo mis ganas de llorar, no me quedó de otra que asentir en dirección al señor Kang.


—Confío en ustedes, chicos... Pueden irse— Finalizó, y después, suspiró yéndose a sentar a la cama.


Namjoon y yo le miramos sin expresión alguna, después, Namjoon hizo una reverencia en su dirección y comenzó a rodearme para salir de ahí.


Repetí la acción de Namjoon hacia el señor Kang, y luego le seguí rápidamente ya que estaba dirigiéndose hacia el frente del foro.


—¿Dónde vas Namjoon?— Le pregunté, temiendo que ni siquiera me dirigiera la palabra.


Contrario a lo que pensé, Namjoon se detuvo para contestarme en el tono más normal que pudo.


—A nuestro apartamento, Hyung— Dijo, pero pude notar en su voz lo lastimado que se encontraba.


—Vayamos por atrás, será mejor que procuremos que no nos descubran— Pedí, deteniéndome detrás suyo para esperar por su respuesta.


—Está bien, Hyung… Vamos— Respondió, girándose hacia mí, y por primera vez en todo este tiempo, se atrevió a mirarme a los ojos para, con un gesto de manos indicarme que caminara adelante de él.


Giré, dándole la espalda, y comencé a caminar en dirección al camino por donde yo había entrado antes.


Mi corazón dolía por haber visto su rostro. Su expresión era de resignación total. A pesar de sus ojos enrojecidos por haber llorado, se notaba que estaba dolido con todo lo que le hice aceptar, de seguro estaría enojado conmigo desde entonces, apostaba a que ya estaba culpándome de todo ello.


Las ganas de llorar no me faltaban, pero sabía que debía mostrar una actitud fuerte ante Namjoon; pues sabía que, si en algún momento él me miraba destrozado por todo eso, haría lo que fuera para convencerme de no hacerlo. Y, aunque me diera mucho miedo hacerlo, no pensaba arrepentirme.


Caminé rodeando el escenario, sentía a Namjoon caminar detrás de mí, su mirada la sentía en mi espalda. No sabía lo que él iba pensando de mí.


Llegué a la puerta por la que entré, y la abrí tratando de no hacer ruido, aunque, esperaba que el pasillo aún estuviera desierto como antes.


Salí, corroborando que el pasillo estaba desierto. Dejé a Namjoon salir después de mí y luego, cerré la puerta para voltearme y disponerme a guiar a Namjoon para salir de ahí.


Cuando volteé, Namjoon me miraba fijamente, no tenía ni una expresión en su rostro, parecía estar analizando todos los movimientos que hacía.


Le quedé mirando, presentía que quería decirme algo.


Después de unos segundos de silencio en los que me sostuvo la mirada, preguntó:


—¿A dónde fue tu ropa, Hyung?— Relajó su expresión al preguntarlo, y miró por un momento hacia el traje que llevaba puesto.


—Llevo mi camisa por debajo. Mi sudadera la viste el hombre de la limpieza que aceptó ayudarme— Le respondí, de manera desinteresada.


Namjoon solo asintió ante mi respuesta, y después, sus ojos volvieron a clavarse en los míos. Con su mirada tan pesada, presentía que había algo más que quería decirme.


—Hyung… Yo…— Bajó su rostro al hablar, hizo una pausa y luego, subió su mirada para decirme:


—No creo poder hacer esto Hyung…, porque yo…— Dijo, pero algo dentro de mí me dijo que no estaba preparado para escuchar lo que sea que haya querido decirme, por eso, le interrumpí diciendo:


—No hablemos de esto todavía Namjoon…, por favor— Supliqué, esa vez fui yo quien bajó su rostro ante su mirada.


—Está bien, Hyung… Pero...— Dijo, haciendo una pausa, y en ella, tomó mi rostro con una de sus manos para asegurarse de que le mirara a los ojos mientras decía:


—...Prométeme que esto no afectará nada entre nosotros.


Con mi mirada asustada y clavada en la suya, sentía su tacto en mi mejilla quemando mi piel.


No sabía a lo que Namjoon se refería, tampoco sabía por qué lo estaba diciendo, pero lo único que sabía era que yo tampoco quería que nada de ello arruinara mi amistad con Namjoon.


—L-Lo prometo Namjoon— le respondí, y de repente, sus ojos se desviaron hasta mis labios, al mismo tiempo que la distancia entre nuestros rostros comenzaba a ser cada vez más mínima.


¡Oh!... ¿A caso Namjoon estaba a punto de…?


—Por Dios…, ¡Lo siento, lo siento Hyung!... Ahora no sé ni lo que hago— Rápidamente se alejó, quitando su mano de mi rostro y llevándola a su boca para taparla, con una expresión totalmente asustada en su rostro.


Yo, más que él, me encontraba totalmente sorprendido. Sin embargo, tuve que tranquilizarme para responderle.


—N-No te preocupes Namjoon… T-Tú, no has hecho nada malo— Le dije, y casi por instinto, mi mano subió hasta mi rostro y, como si con toda mi alma anhelaba ese beso, mis dedos acariciaron mi labio inferior, para satisfacer ese tacto que mis labios desearon.


Namjoon quedó mirando mis dedos mientras acariciaban mi labio inferior, pero, rápidamente sacudió su cabeza, y quitó la mano de su boca, a la vez que se volteaba en dirección al pasillo.


—Será mejor que nos vayamos, Hyung.


Estaba totalmente sorprendido, no comprendía por qué Namjoon actuaba de esa manera.


No es que el beso que estuvo a punto de darme me hubiera disgustado, al contrario, me hubiera gustado que me lo diera porque siempre había deseado sentir el sabor de sus labios. Sin embargo, todavía no llegaba a comprender por qué Namjoon había estado a punto de besarme, algo en mi interior me decía que, si Namjoon estuvo a punto de besarme, quería decir que no le daba asco, o talvez no del todo. Quizá fue solo una curiosidad que estuvo a punto de saciar.


—S-Sí..., vámonos de aquí Namjoon— Respondí, y acto seguido me adelanté, rodeándolo para comenzar a caminar por el pasillo.


Namjoon comenzó a seguirme, sentía sus pasos detrás de mí. Quería voltearme, preguntarle, encararle que si tanto deseaba besarme entonces por qué no lo hizo. Sin embargo, me contuve; pues sabía que Namjoon y yo tendríamos que hacer mucho más que eso muy pronto y, a pesar de las circunstancias, una chispa de emoción no podía dejar de revolotear en mi interior. Ya hasta comenzaba a sentirme culpable por ello.


En un completo silencio recorríamos todo el camino, a duras penas podía escuchar mi propia respiración de igual manera que escuchaba los pasos de Namjoon. Le sentía inquieto por hablarme.


En el último pasillo pude divisar el carrito de la limpieza que estaba bloqueando la puerta, cuando lo vi, corrí un poco hasta llegar rápidamente a él.


El carrito estaba intacto, como yo lo había dejado. Me giré buscando a Namjoon; le vi justo detrás mío, al parecer había hecho lo mismo que yo.


—¿Y esto, Hyung?— Me preguntó, desviando su vista hacia el carrito de la limpieza.


Sin perder más tiempo, me agaché para sacar el otro traje completo de limpieza que había dejado en la parte inferior.


—Esto…, fue lo que usé para poder llegar hasta ti sin que nadie descubriera mi identidad— Le respondí, con un poco de esfuerzo por la posición en la que estaba.


Mientras hablaba, le entregué el traje y la gorra a Namjoon; éste las tomó aún sin saber qué hacer con ellos, aunque, me imagino que ya se había hecho una idea.


—¿Tengo que usar esto yo también?— Preguntó, analizando lo que tenía en sus manos al momento que me levanté del suelo.


—Así es Namjoon…, será mejor que lo uses para así poder salir de aquí sin que nadie sepa que somos nosotros— Le respondí, mientras fijó su mirada en mí.


—E-Está bien…, lo haré entonces— Aceptó, entregándome la gorra para sostenerla mientras él se ponía el traje encima de su ropa.


Lo más rápido que pudo, Namjoon finalizó de ponerse el traje celeste; le quedaba un poco chico, pero no le importó, así que me pidió con su mano extendida la gorra que yo sostenía en mis manos, y tras entregársela, la acomodó sobre su cabeza.


—Listo Hyung— Dijo.


Le miré de pies a cabeza, no pude evitar pensar en lo lindo que se miraba aún vestido de esa manera, por eso, una sonrisa se plantó en mi rostro al observarle.


Desgraciadamente, esa vez no llevaba mi cubrebocas para esconder mi sonrisa, y al contrario de otras veces, en ese momento Namjoon sí la notó.


—¿Qué pasa, me veo mal?— Preguntó, y su rostro se contagió de una sonrisa al preguntarlo.


Enseguida, tuve que responderle que estaba equivocado.


—No, no Namjoon, no te ves nada mal— Dije, bajando mi rostro para tratar de esconder mi sonrisa.


—Oh, qué alivio entonces Hyung…, por lo menos sé que vestido de esta manera no te desagrado— Afirmó, con una expresión de alivio en su rostro.


Pero, de igual forma, no pude ignorar sus palabras.


—Tú no me desagradas Namjoon… Vistas lo que vistas jamás lo harás— Aseguré, tratando de decirlo en una forma que él supiera que estaba diciendo la verdad.


Namjoon sonrió tiernamente antes de responderme y, acto seguido, se acercó un poco más a mí.


—Te creo Jin Hyung…, Y, sabes…— Dijo, e hizo una pausa antes de continuar.


—...Es la primera vez en todo este día, que sonríes de esta manera— Aseguró, a la misma vez que sus manos se permitieron tomar mi rostro por medio de mis mejillas.


Me quedé inmóvil ante su tacto, de nuevo, su toque quemaba cada centímetro de mi piel que él tocaba. No me había dado cuenta que había plantado una sonrisa en mi rostro al hablar así de Namjoon.


—Y-Yo…— Traté de justificarme, aunque ni siquiera sabía bien lo que iba a decir, pero, afortunadamente Namjoon habló antes que yo diciendo:


—Sé que no es momento para hablar de esto todavía Seokjin...— Dijo, en un tono que no sabía cómo descifrar, donde, por arte de magia pude sentir que la ausencia del "Hyung" no significaba una falta de respeto.


—También, sé que no es adecuado que lo diga en un momento como éste, por la situación a la que ambos estamos atados…— Continuó. Sentía mis mejillas arder bajo su tacto.


—…Pero, creo que es necesario que sepas que, tengo miedo… Tengo miedo a lastimarte, tengo miedo a lastimarme a mí mismo…—


—No vas a lastim…— Quise interrumpirle porque sabía que no me iba a lastimar si lo hacía despacio, aunque, no entendía por qué iba a lastimarse a sí mismo también. Pero, él no me dejó continuar, ya que…


—Shhh…— Dijo, colocando uno de sus dedos sobre mis labios. Y agregó:


—A pesar que tengo miedo de todo esto, lo haré…— Afirmó. Pero yo aún seguía sorprendido por todo lo que me estaba diciendo.


—Lo haré, pero… Lo haré con la condición que tú me digas que estás seguro de hacer esto...— Dijo, mirándome fijamente a los ojos.


—Seokjin… ¿Estás seguro de que quieres hacer esto conmigo?— Preguntó, y en su rostro pude notar que estaba temiendo mi rechazo.


A esas alturas yo estaba más que seguro de querer hacer todo con él. Ni siquiera soportaba imaginar que quien estuviera ahí preguntándome eso y de la manera que él lo estaba haciendo, fuera alguien más que él.


Él y nadie más que él era el dueño de mis pensamientos, ¿Cómo diablos no podría estar seguro de querer entregarme a él si solamente él era el dueño de mis sentimientos?


—Estoy totalmente seguro de querer hacer esto contigo Namjoon— Le respondí, tratando de que en mis ojos pudiera darse cuenta de todo lo que yo sentía por él.


Cerró sus ojos, y asintió quitando sus manos de mi rostro.


Mordí mi labio inferior. No sabía por qué actuaba de esa manera.


—Está bien… Haré que sea muy especial para ti, entonces— Finalizó.


Seguidamente, besó la comisura de mis labios justo antes de abrir la puerta para dignarse a salir con el carrito de la limpieza.

Notas finales:

Adelanto Capítulo 7...

Entonces más que antes, deseaba con todo mi corazón que, si tenía que entregarme a Namjoon, sería porque ambos lo deseáramos, porque ambos nos amáramos y porque es lo que ambos quisiéramos para nuestras vidas. Pero no era así, jamás iba a ser así. Y eso, era lo que más me costaba aceptar.


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).