Luego de ser presentado con Iruka, Tenzo se fue directo a entrenar. Le gustaba sentir el olor a césped y pino fresco.
Ya preparándose para terminar el día, fue a los casilleros por sus cosas. Adentro se encontraba Kakashi. No lo veía desde hace unas semanas, debido a una misión que le asignaron en el país del hierro.
- ¡Kakashi senpai! Que gusto de verte ¿Has llegado hoy de tu misión?
- Que tal Tenzo. Llegamos en la madrugada con el escuadrón, la misión estuvo algo agitada.
- Oh, pero tú siempre sabes que hacer ¿No senpai? De verdad es difícil fallar en algo si te encuentras al mando.
- Vamos, no seas tan halagador. ¿Qué tal tú por acá? ¿Alguna novedad importante?
Tenzo recordó la misión que le dio el Hokage y lo ridícula que era.
- Te has quedado callado. ¿Ocurrió algo?
- No, no, no, por supuesto que no. Recordé que llegarán nuevos reclutas este mes.
- Ya veo, más corazones oscuros.
- No sabía que pudieses ser tan poético, senpai.
En ese momento entro un compañero, Ryu - máscara de grulla, de ellos a la sala y cuando vio a Kakashi y Tenzo se acercó de inmediato a ellos con una sonrisa.
- Veo que volviste Kakashi ¿Qué tal el país del Hierro?
- Ya sabes, como siempre.
-Tan hablador como siempre- Dijo con cierta ironía- Vengo a invitarlos a mi celebración de cumpleaños, chicos. Lo celebraré el viernes durante la tarde. Habrá comida y bebida, y quizás alguna que otra malicia.
- Vaya, gracia spor la invitación- respondió con interés Kakashi- ¿Puedo llevar a alguien conmigo?
- Claro, mientras más personas mejor. ¿Qué hay de ti Tenzo?
Tenzo pensó en negarse de inmediato, pero no tenía ninguna excusa para ello. Siempre que había alguna celebración él se abstenía de asistir. No entendía el por qué lo seguían invitando, siendo que las negativas siempre abundaban en su boca y poco a poco se le iban agotando las excusas. Antes de que pudiera siquiera abrir la boca para decir alguna tontera su compañero lo interrumpió.
- ¡Que va, si puedes ven!
- Claro - dijo Tenzo por inercia- Gracias por la invitación.
Tenzo se quedó callado, y si bien por fuera se veía calmado, por dentro tenía cierto dilema entre asistir "por un lado estará el senpai, y además irá acompañado" o quedarse en casa estudiando el libro bingo "Por si sale alguna emergencia, me debo a Konoha".
Le dirigió una mirada a Kakashi, mientras este terminaba de arreglar sus cosas, si hasta él lograba ser alguien fuera del edificio, por qué él no se daba la oportunidad. Cuando Kakashi se inclinó se encontró con la mirada de Tenzo interrogativa
- Senpai, ¿Has ido a alguna fiesta antes?
Kakashi soltó una carcajada, encontró inocente la pregunta de tenzo. Le gustaba mucho como este preguntaba las cosas y a la vez le daba un poco de lastima, ya que toda su vida fue tratado como una sombra y que de frentón le digan que es libre es como soltar un pájaro enjaulado al bosque.
- Claro que sí, no soy de asistir a tantas, pero de repente es bueno distraerse, ya sabes, no nos encontramos solos en el mundo. Si quieres podemos ir, llevare a alguien más, pero creo que te caerá espectacular.
- ¿De quién se tr...- pero no alcanzo a terminar la frase, cuando un compañero de misión se asomó a la puerta.
- El Hokage pregunta por Kakashi, tiene algunas dudas acerca del informe de misión.
- Claro, voy en seguida- Dicho esto, miró a Tenzo y le dedico una mirada amistosa- Nos veremos luego Tenzo
- Nos vemos, Kakashi senpai.
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Tenzo volvió de una misión a de último momento el viernes por la tarde. Venia exhausto, por lo que le encargó el informe a un compañero y se fue directo a casa con el uniforme y la máscara. Luego de comer, se metió a la tina y se relajó. Le gustaba el silencio, la tranquilidad. No tenía problemas con ello, siempre había sido así, solitario. Estos tres años que llevaba en el ANBU habían sido difíciles, no por sus compañeros, sino por él. El sentir emociones fuertes le ha llevado más de alguna vez a un colapso, específicamente retorcijones fuertes en el estómago, que concluían en vomito o una larga pausa en el baño. Había concluido que no era muy bueno para sentir, que en parte era un humano, pero el hecho de pasar el inicio de su vida en un estanque viendo a niños como él morir y desaparecer lo habían cambiado para peor. "Junto con los sentimientos, viene el odio" le había mencionado una vez Danzo, pero jamás le advirtió del miedo. Él miedo de ver a los que quieres morir, el miedo de estar solo. Al fin y al cabo, los vínculos humanos suelen ser armas de doble filo, y él no se sentía preparado.
Saliendo del baño se tiró en la cama. Y mientras cerraba sus ojos y colocaba la mente en blanco recordó la fiesta de Ryu, sintió un leve temblor en su estómago "No confirme jamás mi asistenci, y quizás con tanta gente en ella no se dé cuenta que no fui". Dicho esto, noto como su estómago se volvia a relajar. Nuevamente se disponía a dormir, mientras repasaba en su pensamiento el día siguiente "debo comprar más leche y se me antoja saori de almuerzo, debo terminar un informe acerca de los novatos ingresados y debo...debo verme con Iruka... mierda" abrió los ojos y se levantó rápidamente hacia el baño, el estómago no le aguantaba más "debo verme con iruka".
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Iruka despertó a eso de las 2 y media de la tarde. El sol entraba por la ventana y le llegaba directo en la cara. Se inclinó apenas y cerró la cortina para luego dejarse caer nuevamente en la cama. "Nada peor que el sol de la tarde en la cara", pero antes que pudiera dormir nuevamente recordó su compromiso.
Se levantó de inmediato y se dirigió al baño, mientras iba recogiendo las prendas que quedaron en el suelo de la noche anterior. "No alcanzo a ducharme, ni a tomar desayuno, aun me siento algo mareado por culpa del alcohol, ojalá persone mi retraso... ¿ Cómo es qué se llamaba?"
Mientras se inclinaba para abrocharse los zapatos, le vino un reflejo en el estómago y se inclinó hacia la taza de baño. "Será un día de mierda" pensó mientras tiraba la cadena.
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Tenzo había llegado temprano al lugar de encuentro. Había despertado a eso de las 6 de la madrugada, tomo desayuno y se dispuso a ordenar su hogar, luego se colocó el uniforme y fue a entrenar. Sin embargo nada de eso le ayudo a olvidar los nervios por la cita con Iruka, y cuando eran las 1 decidió ir al lugar de encuentro.
Sentado en una banca cercana, cerró los ojos e intento relajar su cuerpo. "Que estúpido, que llegue temprano, no significa que él también lo hará". Así estuvo, en una estado de meditación, hasta que dieron las 3. Comenzó a colocarse nervioso, se preguntaba por cual lado llegaría Iruka, tal vez debió haber traído algún presente en forma de amistad, pero habría sido complicado si no conoce sus gustos, y de ahí a preguntarle seria un enrpllo... Cuando ya eran las 3.45 el corazón se le agito "A lo mejor se ha olvidado, o quizás ya le contó todo la Hokage y este olvidó avisarme acerca de la suspensión de esta ridícula misión"
Sin más que hacer se levantó de la banca. Ya no le dolía el estómago, pero sentía cierta desilusión del plantón que le habían hecho, al fin y al cabo, en el fondo, sabía que la misión tenía cierta razón. Su equipo de trabajo en ANBU, era solo eso, colegas, y si bien habían sido muchas las oportunidades para congeniar, tal como la fiesta de anoche, le era difícil encajar en grupos grandes. Quizás en cierto modo confió en la decisión del Hokage, y esperaba de verdad lograr un lugar en la aldea, en vez de reducirse a un pequeño papel en el ANBU, o al menos, intentar oportunidad.
Sumido en sus emociones, y autocompasión exagerada, como solía denominar a esa sensación molesta de picazón en los ojos, no noto cuando una sombra le cubría la cara del sol.
- Lo siento mucho por el retraso, me encontraba con una fuerte indigestión - Dijo Iruka deteniéndose a tomar aire mientras se agachaba- El dolor de estómago no me dejaba levantarme del baño.
Tenzo se quedó observándolo y sintió el leve olor a alcohol de las ropas de Iruka "Esta bien, no, no hay razones de hacer esto, no va a funcionar" pensó olvidando su razonamiento de hace unos segundo
- Oh, no hay problema, yo había llegado hace poco y pensé que te habías retirado al no verme – Que no se note que estuvo las tres ultimas horas abandonado en la banca – Menos mal que me quede un rato más esperando.
-Bueno pues, tenía la esperanza de que postergarias la cita - Dijo Iruka, algo más recuperado de su trote suave- Ya sabes, no tenemos que decirle al Hokage sobre esto, podríamos redactar entre los dos el informe a entregar y luego nos vamos cada uno a sus asuntos.
"Ciertamente eres un holgazán" Pensó Tenzo, le chocaba que Iruka fueran siquiera pensar en mentir sobre los acontecimientos de una misión sin una razón fuerte, si este era el futuro de Konoha, el sexto debería recapacitar acerca de la misión que le otorgó, o más aun, debería cuestionarse su cargo, hacer que un ANBU este ocupado tratando de extraer información a un chico de su edad de la manera más arcaica, siendo que una sesión de interrogación con Ibiki bastaría para solucionar el problema "No es como si mi vida social fuera más importante que mantener la seguridad de la aldea"
- Vamos que tampoco puede ser tan terrible supongo- dijo Tenzo, algo distraído y desmotivado, y muy dentro enojado- Nos damos unas vueltas, nos hacemos preguntas acercas de nuestras vidas y envías el informe – "y si tengo suerte la misión queda donde comenzó"
- Oh bueno, si tú lo dices, vamos a comer, no he tomado ni desayuno- Dijo mientras se disponía a caminar- ¿Te gusta el ramen? Conozco un local muy bueno, aunque también debes haber escuchado de él, si llevas ya un tiempo en la aldea.
- Pero recién acabo de almorzar, no sé si te fijaste pero ya casi son las 4- dijo tenzo "aunque no tengo ganas de nada"
- ¡Los sábados y domingos son para almorzar tarde! No creo que seas de los que siempre almuerzan temprano ¿No? Vamos a comer, el Hokage paga- Dijo Iruka, ya algo alejado y con prisa de llegar.
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- Hemos llegado al lugar donde sirven el mejor ramen, mi local favorito de toda la tierra del fuego, el Ichirakuu- Dijo Iruka con cierta emoción en los ojos- Apuesto que ya lo conoces claro, ningún aldeano o forastero que no haya pasado a servirse un plato.
- Supongo que todos los platos saben ricos cuando estas con resaca- No pudo evitar pensar en voz alta
- ¿Qué insinuas?- Iruka tenia un gesto en la cara que Tenzo no supo como interpretar,
- Oh, nada. Entremos a comer, huele delicioso.
-Las damas primero- dijo iruka con voz burlona y cediéndole el paso.
"¿Lo dirá por mi cabello largo?" Pensó, Tenzo, quien sin replica ingresó y se sentó en la butaca de la esquina.
- ¡Qué tal viejo! ¿Como has estado? Te he traido un nuevo cliente- Dijo Iruka animado mientras sentaba.
- Que tal Iruka, no nos vemos desde... ayer jajaja- Respondio Teuchi divertido- Con que nuevo cliente ¿eh? ¿Cómo es que te llamas?
- Kinoe - Repondio Tenzo agachando la cabeza apenado.
Iruka solo esbozo una sonrisa, le parecía divertido que Kinoe fuese tan tímido hasta para presentarse, seria una misión difícil pero no por eso aburrida.
- Vive hace tres años en el pueblo y nunca ha venido a probar tus grandiosos platos - Responde iruka mientras observa detrás Teuchi detenidamente- ¿Y esta señorita? – Preguntó apuntando a una pequeña niña, asomada desde la puerta.
- Ah les presento a mi hija Ayame desde hoy me va ayudar en el restauran por voluntad propia. Sueña con tener su propio negocio de comida. Saluda hija.
- Hola a todos, un gusto y que disfruten su comida- dijo la niña mientras se retiraba hacia la puerta del fondo con un cucharon en la mano.
- Parece que tiene más probabilidades de sobrevivir en la cocina que yo- Responde Iruka con una sonrisa.
- Oh, claro que sí, tiene permitido venir mientras no baje sus calificaciones en el instituto - Responde el viejo mientras observa a Tenzo- Kinoe por ser tu primer plato en el Ichikaru, la casa invita, mientras que por ser el quinto en la semana de Iruka le cobraremos el doble jajaja.
- Claro que no, el Hokage paga el piso, asi que se bondadoso con los platos. ¿Con qué carne deseas tu ramen, Kinoe?
- De vacuno po-por favor- responde Tenzo con un esfuerzo extra por no bajar la cabeza.
- Que sean dos- responde Iruka.
- Como no sabre cual es tu plato favorito- responde el viejo- Una vez que los pruebes todos Kinoe, podras decirdir tu plato, jamas olvido los favoritos de mis clientes frecuentes- dice el viejo mientras guiñe el ojo y se dedica a cocinar.
- Ya verás como me pedirás volver acá- Le dice Iruka a Tenzo- se demoran poco en prepararlo así que por mientras cuentamé acerca de tu semana.
- Mmm bastante tranquila, no he tenido mucho trabajo la verdad- respondió Tenzo, algo flojo.
- ya veo, ¿O sea que no has tenido tantas misiones?
- No puedo responder eso, ya sabes, mi trabajo es confidencial.
- Pero al menos han sido existosas?
- ...
- Vamos, ¿Que acaso me tomas por un bocón? ¿Puedo ser discreto sabes?
- Mmm pero esa información resulta confidencial, si fueses un espia o un traidor, te interesaría saber sobre nuestras misiones y movimientos, por lo que cualquier oportunidad seria útil para sacar esa información, y si dices ser discreto además...
- Ya vale, dejala ahí- "Que personaje mas pesado" pensó Iruka- Si quieres entablar una conversación no puedes ser tan cerrado, al menos invéntate otra cosa que distraiga. No todos tenemos segundas intenciones Kinoe, a veces es bueno confiar en la gente, y más si es en quienes proteges.
- Ay muchas situaciones que se podrían evitar si se mantueviera silencio.
- Pues el silencio tiene precio. Si debo enseñarte a sociabilizar debes tener un minimo de confianza con la gente, el solo hecho de preguntar como se encuentran o que tal les va, abre un poco camino hacia la amistad.
- Bueno si es asi, enseñame, ¿Que tal ha sido tu semana?- Pregunto Tenzo, con algo de orgullo, jamas espero un sermón, pero no valdría la pena discutir con él, ya que en esta ocasión para cumplir su misión, requeria de confianza de parte de iruka.
- Ah, la verdad es que muy buena, pasaron un capitulo de La casa de Kouro muy bueno, ¿Ves esa serie?
- Mmm no
- ¿Alguna serie que veas?
- Mmm, no tengo televisión.
- ¿A entonces quizás haces otras cosas?
- ¿Como qué?
- En tu tiempo libre hombre, no creo que te la pases de misión en misión sin descanso.
- La verdad que es posible, considerando que...
- ¿Te gusta la lectura?
- Si consideras como lectura los pergaminos de misi...
- ¿Pintas algún cuadro?
- Esto...
- ¿Te masturbas?
- ¿Como has dicho?
- Vamos que era una broma, no creo que seas de madera tampoco, mira que empiezo a sospechar que no eres persona.
- A pues si, que te crees... todos lo hacen o...no?
- Bueno ahí quizás tengamos un tema para conversar, con unos amigos discutíamos sobre quien tenia las tetas mas grandes, o Tanako...
- Que ya, que no lo hago- Responde tenzo con la cara como un tomate. Durante toda su vida se sometio a interrogaciones rigidas, torturas que le dejaron mas de alguna cicatriz y situaciones que para cualquiera seria traumáticas, sin embargo bastó que un mocoso le preguntará algo tan insignificante para que se quebrara- Que si, soy un insensible sin vida, una persona insipida y me siento bien así.
Luego del grito vino el silencio, o asi lo sintió Tenzo, como si todo se hubiese detenido tras aquella confesión. Podia sentir su sangre correr por sus venas, escuchar su corazón, sentía un dolor agudo en el estomago, de nuevo las ganas de vomitar. Habia desayunado unas fresas con café, seria un vomito de color rojo oscuro, ojala no salieran trozos sin digerir, se veía asqueroso... Oh no y luego iruka no querria volver a verlo y quizás le comentaría a todos, aunque el mismo se denomino como discreto, quizás si le pagaba no le diría a nadie sobre ese incidente... luego pediría una misión lo suficientemente lejos como para que olviden su cara, su voz...
- No creo que te sientas bien asi- Interrumpe iruka sus pensamientos- sino habrías utilizado esa misma determinación para negarte al hokage ante esta misión. No soy un doctor, ni terapeuta ni consejero, pero se reconocer a alguien cuando se encuentra como tú. Me recuerdas a mí cuando pequeño, en realidad a muchos, con tantos sentimientos y no saber que hacer con ellos. Quizás tu trabajo te esta quitando lo humano.
- ¿Me has dicho inhumano?- responde tenzo, no como repoche, sino como afirmación.
- Oh claro que no. Solo poco humano, ¿No es tan ofensivo o si? Ja- Iruka esboza una suave sonrisa, no de burla, sino de simpatía- Mira que ahí traen nuestos platos.
Tenzo no quiere girar la cara hacia frente, siente una enorme vergüenza sobre su comportamiento. Sin embargo es la simpatía del dueño quien lo hace tomar valor.
- Aquí tenemos un gran plato de ramen de vacuno para Kinoe, no olvides pedir un deseo por ser la primera vez- Dice el viejo mientras le pasa su jarrón- Dice la leyenda que todos los problemas se hunden en un gran jarrón.
- ¡Vamos viejo! Jamás he odio eso, no será en un buen vaso de alcohol jajaja.
- Eso es para las penas de amor Iruka, aunque pareciese que tu tienes muchas jajaja.
- Gracioso, gracioso tú- Reponde iruka mientras toma los palillos- Gracias por la comida,
- Gracias por la comida- Responde Tenzo, avergonzado, pero sin dolor en el estomago.
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No hablaron mucho mientras devoraban, o asi lo sintió Tenzo mientras veía a iruka tragar. Tras las insistencias, Tenzo se repitió el plato, mientras que Iruka ya iba por el tercero. Pagaron y Tenzo insistió en caminar, necesitaba reunir información de iruka, aunque fuera un poco.
- Tenias razón acerca de la comida del ichiraku- Dijo Tenzo intentando romper el silencio que los acompañaba.
- Oh no lo hiciste mal para tu primera vez, pediste tu deseo ¿cierto?
- Claro que sí, pero no te creas que te lo contaré.
- Jajaja, pero me avisas si se cumple. Seria curioso saber que pediste.
- ¿Y a ti que te gusta hacer en tu tiempo libre Iruka?-Responde Tenzo mientras se anima a iniciar la conversación.
- Bueno pues suelo leer y ver series, también tengo videojuegos. Aunque me encanta salir de fiesta.Suelo bailar y tomar mucho.
- Oh pero ¿No somos muy jóvenes para consumir alcohol? Se supone que no tenemos la edad.
- Espera, creo que en más de una ocasión has asesinado a alguien y sin embargo ¿consideras el alcohol como algo malo?
- No es que sean asesinatos con maldad, son necesarios alguna veces, supervivencia. Y el alcohol hace mal al cuerpo.
- Pues matar daña el alma. ¿Nunca has probado ningún trago?
- Claro que no, y no me parece adecuado.
- Bueno, pero te advierto que esto no puede terminar sin que vayas a una fiesta conmigo, puedes mantener si quieres tu posición acerca del alcohol, pero me acompañas igual. Jajaja, cuando te sientas listo eso si.
- Pensé que no estabas muy de ánimo acerca de esto.
- Oye quiero lograr mi cometido con el Hokage, ya sabes, poder hacer lo que quiera, a parte eres simpático, poco humano, pero simpático, además- iruka tomo un tono burlo- Si te portas bien te enseñare a jalártela.
- ¡¿Que- que te crees?¡- Tenzo sintió el calor subir por su cabeza- Eres un pervertido igual que...
- Vamos que es broma jajajaja. Eres bastante expresivo en tu cara jajaja.
- Ya deja- Dijo tenzo, intentando calmarse- ¿Y qué quieres hacer en vez de ser un shinobi?
- No lo sé en verdad, a veces dudo que pueda lograr algo.- Tenzo noto el cambio de tono en la voz de iruka, un tono mas triste y bajo- Me gusta divertirme, pero cada vez siento mas cerca el futuro y el deber y me resulta algo complicado seguir intentan...
Tenzo noto como la voz de Iruka se desvanecía, había dado en el clavo, si lo presionaba un poco en este momento de debilidad quizás sacaba la información necesaria y se acababa todo, sin embargo su estómago había comenzado a contraerse y la presión era mucha... necesita terminar rápido con esto, inclinarse un poco, tocarle el hombro y decirle que le cuente que sucede, sin embargo al realizar un paso no fueron las palabras las que se escaparon, sino otra cosa.
- ¿Qué fue eso Kinoe?- Iruka levanto la cabeza, con los ojos bien abiertos, Tenzo jamás olvidaría la expresión previa de iruka antes de echar una carcajada- ¿Te has pedado? Ajajajaja
Tenzo sintió un zumbido en sus oídos y su visión se tornaba de puntos blancos, no podía escuchar la carcajada de iruka y el aire le faltaba. Por reflejo solo pudo echarse a reír, como nunca había reído.
- Crei que me ibas a decir algo importante, pero vaya manera de cambiar de tema- Dijo Iruka apenas, con la respiración agitada y los ojos llorosos, se agarraba el estomago.
- Lo siento- Es todo lo que pudo decir tenzo, presionaba los ojos tan fuerte como si con eso lograría desaparecer de ahí- He andado algo mal del estomago.
- Oh no te preocupes, mejor afuera que adentro, jajajaja. Que me has tapado la boca jajaja.
Era vergonzoso, no digno de un shinobi de elite, pero aun asi, Tenzo sentía que por primera vez en su cara se usaban todos los musculos, la risa a destajo era para el algo nuevo.
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Se despieron de manera rápida, quedaron para el dia domingo de la semana siguiente. Iruka llegó con buen humor a su hogar y después de quitar de la mesa el desorden que guardaba se dedico de inmediato a redactar su informe. Agrego el itinerario de la cita, los gastos que hubieron y por ultimo sus primeras impresiónes de tenzo "Muy reservado, serio y silensioso, pero posee simpatía e interés en continuar" Iruka omitio todo acerca del episodio final. Muy satisfecho con su salida decidió irse a la cama, sin embargo alguien toco a su puerta, interrupiendo cuando se colocaba el pijama.
- Estas no son horas de venir, pero ando de buen humor, adelante- Dijo Iruka, de una manera coqueta a su visitante.
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Por otro lado Tenzo se fue con cierta euforia a su hogar. Tenía muchos recuerdos que analizar, debía concentrarse en sus próximos pasos para obtener información. Al llegar a su hogar dio gracias por el silencio. "Al fin en paz", pero no duró mucho, el deber ya se encontraba en su puerta.
Listo para partir, echó un último vistazo a su hogar y por fin lo vio, "un lugar vacío, donde reside alguien insípido" no pudo quitar la imagen de Iruka de su mente junto con sus palabras "No creo que te sientas bien asi", no pudo aún cuando ya había cruzado las puertas del pueblo.