Gustavo Montalván era medio judío-latino pero él nunca le gustaba mencionar a su padre, era un rumor que corría en el colegio. A Derek nunca le importó esa cuestión, primero, pues ni si quiera era conocido del chico popular y segundo, no perdería el tiempo escuchando rumores que no le interesaban.
Antes le parecía fastidioso e inaudito cuando uno de esos del grupo se le acercaba. Gustavo lo hacía más a menudo desde que Lucas y Derek estaban distanciados.
--Supongo que estoy de tu parte, a pesar de que Lucas sea mi amigo-- dijo él mientras caía una lluvia torrencial en el patio del colegio--Hubiera tomado una foto de tu cara en ese momento.
--¿No tienes mejores cosas que hacer?
Ambos entendieron el sentido de la broma. Gustavo realmente tenía ese aire de no ser parte de lo común por sus rasgos.
--Hasta que vuelvan las cosas a la normalidad, puedo estar de un lado para el otro, eso no es problema para mi.
La atención de Gustavo se centró en la lluvia, con una mirada maravillada al ver las gotas de agua empapar el patio. Derek se cruzó de brazos y giró su gorra de beisbol a un lado. Lucas le mandaba mensajes al celular todos los día, pero no se atrevía a llamarlo, pues sabía que Derek nunca le respondería.
--Debo decirte que el numero 1 pregunta por ti.
--¿Ahora soy tan conocido que ese pregunta por mi?
Gustavo se encogió de hombros.
--Lucas revisa su celular a cada rato para ver si le respondes y todo el grupo se da cuenta de lo decaído que está desde que le dejaste de hablar.
--Simplemente no me puede olvidar--murmuró un poquito antipático.
--Ninguno de los dos se olvidan--Gustavo se acercó por un momento--Hazme el favor de poner las cosas claras para Lucas Que se está ilusionando contigo.
Derek mantuvo su distancia. No le gustaba mucho el contacto físico.
--No le he dado motivos--mintió, nervioso de sus propias absurdas emociones crecientes.
Movió si cabello con nerviosismo y Gustavo se puso a reír aligerando el tenso ambiente,
--No te pongas nervioso broh.
Fue el turno de Derek para reírse.
--A veces das miedo.
--Me han dicho eso muchas veces. Solo soy así cuando me toca defender a mis amigos.
Derek intentó poner cara de desentendido.
--Que buen amigo eres.
--Tenlo en cuenta-- dijo Gustavo dándole palmadas en el hombro.
--¿Me estás amenzando?
--Lo que te digo es una recomendación-- la mano se quedó en el hombro y Gustavo lo agarró del brazo en un gesto de confianza que aceptó Derek.
No es que estaban tan juntos ni con otras intenciones pero Gustavo no pudo defenderse cuando Lucas le dio un golpe en el rostro que lo hizo estabilizar. Viendo que Lucas era capaz de darle una paliza mientras el otro ni podía levantarse, Derek corrió a detenerlo.
Comprendió de la manera más terrible, que seguía siendo más bajo de ambos, y no servía de mucho jalar a Lucas de la camiseta o abrazarlo; la segunda opción resultó en una fuerte sacudida que lo dejó a un costado y adolorido. Lucas parecía no parar y sin pensarlo dos veces, Derek gritó y se puso encima de Gustavo para recibir todos los golpes. Los otros alumnos que salían de los salones se apresuraron a detener a Lucas y socorrer a Gustavo y Derek.
--¿Gustavo? ¿Estás bien?--preguntó Derek, palpando su rostro.
Como respuesta, el chico puso una de sus manos en la espalda de Derek.