Login
Amor Yaoi
Fanfics yaoi en español

Matrimonio por obligación....lo corecto por La_Oscura_Reina_Angel

[Reviews - 38]   LISTA DE CAPITULOS
- Tamaño del texto +

Notas del fanfic:

Soy yo la misma The Dark Queen Angel, ahora con nueva cuenta pues la anterior no fue solo jaqueada si no al pareser borada, pero yo soy cabesadura y no se rendirme asi que nuevo emeil, nueva cuenta y a la carga de nuevo.

 

"¿Por que? ¿Por qué el maestro de Hyoga me hace esto?"

Se preguntó Shun de Andrómeda llorando en silencio, ya sin intentar escapar. Resignado a la violación de Camus de Acuario, maestro y mentor de su mejor amigo.

Shun se lo había buscado en parte. Había ido a ver cómo estaba Camus. A ver cómo estaba tras la muerte de Cefales, el maestro de acuario. Y lo había encontrado borracho. Pero en vez de irse, había llevado a Camus a sus aposentos anexos al templo a que pasara la mona y ahí estaba el resultado. El guapo y fuerte maestro de Hyoga lo estaba violando, tomándolo en contra de su voluntad y robándole su virginidad.

Camus le tenia sostenido de las muñecas y le acariciaba con la boca el pálido pecho. Le había desgarrado sin ninguna dificultad la camisa verde y lo mismo había pasado con sus pantalones blancos y su bóxer. Shun hizo un nuevo esfuerzo por intentar zafarse del guapo caballero de Acuario pero solo consiguió que éste le agarrara con mas fuerza las muñecas, haciendo que a Shun se le escapara un gemido de dolor.

Camus lo besó en la boca y sin previo aviso le separó los pies con los suyos, para a continuación penetrarlo sin previa preparación. Shun gritó de dolor, sintiendo como si lo partieran en dos y sus lágrimas se intensificaron. Camus lo ignoró, se sentía feliz en su borrachera de estar doblegando a la reencarnación de la persona que le había quitado a su maestro, a su padre, porque eso había sido Cefales para él. Un padre.

Camus empezó un ritmo de vaivén algo brusco sin importarle los quejidos de Shun, hasta que se desahogó dentro de él con un gemido. Luego de un segundo se dejó caer a su lado y lo abrazó con fuerza hundiendo su cara en el cabello verde de él y quedándose dormido sin soltarlo. Mientras Shun lloraba humillado y en silencio sin poder zafarse de él. Había pasado de ser uno de los mejores y más fuerte santos de Atenía, a ser un mar de lágrimas que no se había podido defender de los actos de alguien que no era consiente de lo que hacía...

-¿Shun? ¿Shun? ¿Que pasó? Despierta. ¿Que pasó?

La voz de Camus lo sacó del profundo sueño negro donde había caído. En cuanto abrió los ojos y lo vio despierto y erguido sobre él, Shun se encogió lleno de pánico. Entonces Camus comprendió lo que había pasado.

-Shun, por favor dime que no pasó. Que no te... violé. -Le rogó Camus acercándose a él.

-¡No me toque! -Le gritó Shun, temblando-. ¿Es que no me ha humillado ya lo suficiente? ¿Es que acaso no ha tomado ya lo que quería de mi cuerpo?

Le grito Shun, histérico. Llorando. Camus bajó la cabeza avergonzado sin saber qué decir, ni hacer. Entonces vio la mancha de sangre en las sábanas. Había forzado a un virgen... a un virgen, que lo miraba asustado y casi histérico.

-Shun cálmate. Yo...

-¡Me robaste mi virginidad! -Le gritó él.

-Yo...

-¿Por qué? ¿Qué te había hecho yo? -Le reclamó el pequeño peliverde, histérico.

-No lo sé. Estaba borracho, Shun. Lo siento, lo siento tanto... -Se lamentó Camus, mientras Shun temblaba sollozando.


-¿Qué te he hecho? -Se lamentó Camus tomándolo por los brazos y acunándolo en su pecho. Shun se tensó, pero luego empezó a llorar contra el pecho de él, aferrado a él. Balbuceando incoherencias mientras él le susurraba frases tranquilizadoras en francés, su lengua materna. Después de un rato al fin Shun se tranquilizó.

-De... déjame ir. -Tartamudeó el peliverde. Camus lo soltó pero antes lo sostuvo de una muñeca.

-Lo siento tanto Shun, soy un desgraciado. -Se lamentó Camus, quebrado.

-No. No fue tu culpa. Cuando vi que tú estabas borracho, debí de haber buscado a Shura o a Afrodita, en vez de hacerme cargo yo. -Murmuró Shun.

-No, no te eches la culpa. -Le ordenó Camus-. Aquí el culpable soy yo.

-Fue mi culpa. ¿¡Acaso crees que Ikki no me ha advertido lo peligroso que puede ser un borracho, para alguien como yo, tan aniñado!? -Le gritó Shun.

-Mierda... Shun si quieres matarme no me voy a oponer... o si Ikki quiere vengar tu honor, no me opondré. No presentaré batalla... -Le juró Camus, con la cabeza baja. Shun dio un brinco ante estas palabras. Si su hermano Ikki, caballero de bronce de fénix se enteraba, mataría a Camus... de pronto le tomó la mano al maestro de su mejor amigo.

-No, Camus. Ikki jamás debe saber esto. -Le imploró Shun.

-Pero...

-¡Jamás! -Repitió el peliverde. Camus asintió-. ¡Gracias!

-No me des las gracias, merezco que tú o tu hermano me maten. -Murmuró Camus.

-No. Lo merece Acuario. Sólo olvide lo que pasó... y ya. -Le pidió Shun, mientras se vestía lentamente debido al dolor en su retaguardia. Camus lo notó y se maldijo mentalmente. Se acercó al santo de Andrómeda y le puso una mano en las caderas.

-El frío es un buen anestésico. -Le dijo Camus, encendiendo su cosmo y de inmediato Shun sintió un gran alivio.

-Gracias...

-Es lo menos que podía hacer después de haberme comportado como un animal. -Dijo el santo de Acuario, también vistiéndose.

-Eres un buen santo Camus de Acuario. Y siempre lo serás. Leal, fuerte y justo. -Le dijo Shun. Pero cuando Camus se viró hacia él, Shun ya se había ido dejándolo solo.

Continuará...

 


Si quieres dejar un comentario al autor debes login (registrase).