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Dulce Fantasía por Nova22

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Notas del capitulo:

>3< Actualización >3<

Capítulo 2


— Tsukki ¿Vas a estar bien? — Yamaguchi, quien se había mantenido sentado silenciosamente sobre el sofá se atrevió a hablar — Podría ir contigo también.


Tsukishima apretó la botella plástica que sostenía entre sus manos, emitiendo esta un suave crujido que llenó el repentino silencio de sus pensamientos — No es necesario...está bien — enroscó y volvió a quitar la tapa de esta, entonces volvió a enroscarla distraídamente. Ya no era un niño, no necesitaba que cuidaran de él, sin embargo apreciaba ese gesto de su pecoso amigo — No debería tomarme más de media hora.  


— ¿Seguro?


El rubio ladeó la cabeza ¿No debería estarlo? Yamaguchi se preocupaba demasiado, había estado ansioso toda la mañana y prácticamente había entrado y salido una y otra vez del departamento solo para comprobarlo — Creo que sí puedo asegurarlo, este tipo es...— hizo una mueca ¿Asustadizo? Claramente estaba asustado aquella vez, no de él sino de lo que Tsukishima era — Debe ser inofensivo.


— Bueno, después de lo que dijiste que pasó, no sé si estoy muy seguro, pero...— Yamaguchi hizo una mueca que delataba su preocupación — ¿De verdad crees que está bien?


¿Si y no? Trató de no pensar mucho en eso ayer, la situación había sido muy extraña y desagradable, no imaginaba que pudiera ser mucho mejor ahora o que pudiera resultar nada de todo esto. Lo único que Tsukishima quería era que no lo molestara, olvidarse del asunto y de todo lo que este había traído consigo — Solo voy a escuchar lo que tenga para decir — se encogió de hombros, no estaba esperando nada de él, pero imaginaba lo que iba a suceder en esa reunión — Supongo que eso va a ser todo.


Ese chico probablemente había tenido tiempo suficiente para reflexionar lo que sea que hubiera pasado ayer, lo más probable era que le pidiera olvidar el asunto o algo similar. Era lo único que Tsukishima estaba esperando y lo único que quería de todos modos, antes solo estaba tratando de molestarlo. Parecía bastante inofensivo así que no tenía mucho porque preocuparse, sin embargo no era tan tonto como para ir con la guardia baja conociendo a uno de los autores intelectuales de todo esto. Sus barreras eran tan sólidas como de costumbre.


— ¿Puedes llamarme o enviarme un mail cuando estés ahí...? O si puedes dejar que te acompañemos al menos por la mitad del camino...


— Vamos a reunirnos al medio día...en una cafetería no en un callejón vacío o nada como eso.


— Solo esta vez ¿Si? — el pecoso le suplicó con la mirada — No creo que confíe mucho en esta persona.


Yamaguchi estaba siendo mucho más sobreprotector que su hermano mayor en este momento. No era el tipo de persona que insistía demasiado sobre algo. Miró el pequeño frasco de gas pimienta sobre la mesa, ese había sido un obsequio de Yachi, su rubia amiga tampoco estaba muy conforme con esta situación, supuso que esta había sido su manera de tratar de cuidarlo. Los dos estaban exagerando a su parecer, sin embargo sería muy difícil hacer que lo entendieran; los dos eran muy similares y entendía que no estarían satisfechos incluso si les decía que Kuroo era alguien inofensivo. Lo había intentado, lo sabía, sin embargo no sentía que fuera algo exasperante. Era más agradable de lo que debería a pesar de todo.


— Está bien, vamos por el mismo camino de todos modos.


Yamaguchi se levantó abruptamente del sofá, una sonrisa incrédula y esperanzada le adornaba el rostro — ¿De verdad? — entusiasmo brillaban en su mirada, fue todavía más intenso cuando Tsukishima asintió — Voy a decirle Yachi-san ¿Está bien? Ella también estaba preocupada — se precipitó a la puerta — Casi es la hora, vamos a pasar por ti ¿Está bien?


— Claro — la puerta se cerró ¿Por qué parecía que lo había hecho sonar como si vivieran a metros de distancia? Sus departamentos estaban a tan solo dos puertas, ni siquiera tenía que apresurarse — Bueno...— no había mucho que hacer ¿Verdad? Ellos eran así, a veces se sentía como un niño bajo su cuidado. Podía ser gracioso.


Suspiró. Se levantó de la mesa donde se encontraba sentado y devolvió la botella a la nevera. Hizo una mueca; se suponía que hoy haría las compras, al menos había conseguido encargarse de la ropa sucia y parte del aseo. Miró hacía el reloj en su muñeca, esta reunión no debería tomar más de media hora, podría pasar al supermercado de vuelta, debería tener tiempo suficiente también para pasar a la librería y terminar con el aseo.


Parecía una forma eficiente de organizar su tiempo, entonces podría olvidar más rápidamente a Kuroo y a la extraña situación en la que ambos se habían involucrado.


*****


— Entonces ¿Eso fue lo que pasó...?


— Si.


Una vez Kuroo expuso los motivos que lo llevaron a involucrarse en este absurdo todo fue mucho más claro para Tsukishima. Él no parecía una mala persona o tener malas intenciones, no lo conocía, sin embargo no sintió que tuviera motivos para dudar de él, era alguien honesto, pero también un idiota. El rubio no estaba tratando de ser malagradecido, apreciaba que hubiera tratado de ayudar, no obstante no lo habría culpado por haberlo ignorado, él en su lugar probablemente lo habría hecho.


Bastaba con ver la situación para darse cuenta de que estaba destinado a transformarse en un problema, cualquiera habría fingido que nada estaba pasando, pero probablemente también existían este tipo de personas ¿No? Tsukishima no estaba seguro de como sentirse al respecto o que pensar de esta situación, obviamente Kuroo quería huir en aquel momento, estaba tan desesperado que incluso llegó a concebir la idea de que podría estar a punto de llorar.


Hasta ahora aún no creía que hubiera sido imposible, pensaba que ese desesperado rostro había sido el mejor regalo que este tipo podría haberle dado, sin embargo había cambiado solo un poco de opinión.


— ¿Estás seguro de esto? — Tsukishima jugueteó desinteresadamente con la crema de su parfait de fresa, untándola delicadamente sobre un trozo de esta antes de tomarla y llevársela a la boca — Todavía puedes ir y decirles que esto salió mal y olvidarte del asunto.


Lo miró, Kuroo se tensó casi de inmediato, parecía incómodo, sin embargo se atrevió a sonreírle amigablemente. No era tan mal tipo. Tsukishima estaba tratando de ayudarle un poco aquí, si estaban vigilándolos cómo había imaginado, podrían montar alguna clase de escena. Algo como una discusión para hacerlo más creíble. Sería un desperdicio que perdiera su helado, sin embargo el moreno tenía un café que ya debería estar lo suficientemente tibio. Para como lo veía, una pequeña mancha como secuela por zafarse de esta situación no era tan mal trato.


Podría encargarse solo de todo lo demás, ya estaba acostumbrado a ese tipo de cosas; vivía en un pueblo pequeño dónde las personas preferían ocuparse de asuntos ajenos antes que los propios.


— Creo...— carraspeó Kuroo, apretaba el café entre sus manos — No es como que odie esta situación...digo...— volvió a carraspear, esta vez al mismo tiempo que se agitaba sobre su asiento — Los dos sabemos lo que esto es, ellos son las únicas personas a las que vamos a engañar ¿No? Trataban de haber lo mismo contigo así que creo que podría ser un poco justo.


— No parece muy justo para ti que tengas que exponerte a algo que no quieres — Tsukishima suspiró al mismo tiempo que apoyaba el codo sobre la mesa, ellos ni siquiera se conocían. Le estaba ofreciendo una salida aquí, solamente tenía que tomarla y ya, no tenía que ser un problema para ninguno — Solo déjalo ¿Está bien?


Esto tal vez podría enseñarle a pensar un poco más antes de lanzarse a una locura, podría verlo como una lección y reírse de todo esto en el futuro.


— Pero ¿No es más fácil así? Ellos podrían volver a intentar algo después.


— Bueno...— había dos opciones, dejarlo y volver a intentarlo. Terushima estaba algo así como interesado en él, era impetuosos así que podía imaginarlo volviendo a intentar usar algo como eso para tratar de abordarlo sin tener que admitir abiertamente que era lo que realmente quería. Era molesto, pero no era como que no entendiera lo que era el orgullo masculino — Tal vez, es...supongo que tienen mucho tiempo libre.


— Entonces está bien ¿No? — Kuroo sonrió más tranquilamente. No era como que tuvieran que hacer nada raro de todos modos y a Kuroo le gustaba hacer amigos, de alguna manera quería hacer las cosas de una mejor forma y compensarlo por haberle hecho pasar un mal rato antes — Tampoco voy a insistir demasiado si no es lo que quieres, solo pensaba que podríamos tratar de aprovecharnos de ellos o algo así...nada va a pasar de todos modos y ellos tal vez van a aburrirse y dejarlo antes de que lo notemos.


Kuroo podría tener un punto ahí, Tsukishima había considerado esa opción también. Nada iba a pasar y tampoco estaba esperando que sucediera algo entre ellos, ni siquiera una amistad, no estaba ni medianamente interesado en esta persona y obviamente el moreno tampoco. Sin embargo, había aún algunas cuestiones que necesitaban ser puestas sobre la mesa, había mucho que considerar aquí ¿No? Aunque tampoco tenía que transformarse en un problema si ambos sabían la verdad, no era nada demasiado complicado y probablemente podrían arreglárselas si quisieran.


Y repentinamente se encontró considerando esto como algo posible.


— ¿No piensas que tener a alguien como yo al rededor podría ser un problema?


— No creo que yo te guste mucho — Tsukishima se encogió de hombros ¿Lo había notado? Kuroo era más suspicaz de lo que parecía, ya comenzaba a verlo con una mirada un poco distinta — Pareces más...no como...bueno, lo que quiero decir es que te ves mas...como...— el moreno carraspeó ¿Trataba de decir que parecía normal? Era eso ¿Verdad? Quería preguntarle qué clase de impresión tenía de las personas como él, pero no quería perder el rumbo de su actual conversación...a demás podía imaginarlo, era siempre lo mismo para todos — Pareces un buen chico y si los dos sabemos lo que está pasando entonces es más fácil.


Ciertamente lo era y en realidad el que los dos fueran hombres no lo hacía tan complicado. Cualquiera que los viera podría decir que eran solo dos amigos pasando un rato juntos, no había nada extraño ahí y aumentaba la posibilidad de que los autores intelectuales de todo esto perdieran el interés muy pronto. Yamaguchi ya estaba al tanto de la situación, Kuroo podría encontrar la excusa que le gustara para contar a quien quisiera y ambos tendrían una cantidad agradable de dinero en el bolsillo al final del día.


Mientras más lo pensaba, más fácil parecía, en un mes o dos podrían volver a sus vidas normales sin alguna clase de daño colateral. Este desenlace le gustaba mucho más que el de cualquier novela adolescente o drama de televisión, tampoco era como que esto se pareciera mucho a aquello de todos modos. No era tan convencional o típico si los veían a ambos, pero no importaba mucho tampoco; en realidad era mucho mejor de esta manera.


— La mitad para cada uno ¿Verdad?


— ¡Oh! Si, por mi está bien...pero si quieres un poco más...


— No, está bien, podemos dejarlo así.


Tsukishima se encogió de hombros, Kuroo estaba demostrando su compromiso con todo esto, parecía alguien muy responsable así que el trato inicial le parecía justo. No tenía quejas, comenzaba a entusiasmarse en realidad, no tenía problemas financieros o nada por el estilo a pesar de que la vida por su cuenta en la ciudad podía ser costosa, sus padres y hermano enviaban lo justo. Su trabajo de medio tiempo era algo así como un seguro para posibles emergencias y gastos personales. Había algo que quería comprar últimamente, pensaba que debería tener suficiente para el próximo mes, pero esto aceleraba por mucho el proceso.


Si lo veía de esta manera, entonces este trato no era tan malo, sin embargo tendrían que decidir qué era lo que iban a hacer a partir de ahora ¿No?


— Ahora no tienes que arrojarme el café ¿No es genial?


Kuroo empujó la puerta del local en el que se encontraban, permitió que el rubio saliera primero con un movimiento de mano y ambos caminaron por la calle hacía un rumbo que los dos desconocían.


— ¿Te diste cuenta? ¿De verdad? — Tsukishima lo miró con la ceja alzada, de verdad lo había hecho ¿No? Kuroo era más impresionante de lo que parecía, Tsukishima sabía que no era tan fácil de leer, sin embargo también existía la posibilidad de que los dos hubieran tenido la misma idea; en cualquiera de los dos casos resultaba curioso e inusual — ¿Habría sido tan malo?


Kuroo arrugó la nariz en un gesto que se le antojó algo gracioso — ¿Por qué no podía ser yo el ofendido? Podríamos fingir que me hiciste alguna clase de propuesta indecorosa o que insultaste a mi madre o algo así.


— Porque se supone que soy la víctima aquí ¿Recuerdas?


Kuroo abrió la boca, sin embargo la cerró con un jadeo suave y ahogado. Tsukishima no se sentía mucho como una víctima para él o al menos el moreno no lo veía así, lo había intimidado antes. Era cierto que había sido su culpa, pero manejaba esto mejor de lo que creía y comenzaba a sentirse como un blanco fácil para esta malhumorada y maliciosa persona...también comenzaba a preguntarse porque de pronto se sentía más relajado que antes.


Todo había resultado mejor de lo que esperaba así que, si, estaba algo animado.


— ¿Qué tal una película? Creo que debería haber algo así como una oferta de fin de semana...un amigo me habló sobre eso ¿Vamos?


Tsukishima se detuvo al mismo tiempo que la pequeña multitud de personas también lo hacía frente a las indicaciones del semáforo y volteó a verlo — ¿No prefieres volver a casa? — creía que habían terminado al menos por hoy, podrían ponerse de acuerdo acerca de sus futuras reuniones y demás por mail ¿No? Quería ser más práctico y prepararse mentalmente para esto.


— Todavía es temprano — el semáforo cambió y los dos avanzaron nuevamente en la misma dirección sin darse cuenta — Vamos a pasar unas semanas al rededor del otro, podríamos comenzar a tratar de acostumbrarnos a eso.


Tsukishima hizo una ligera mueca con los labios, lo meditaba. No tenía tarea de fin de semana esta vez, Yachi y Yamaguchi probablemente iban a estar fuera del edificio hasta la noche. La verdad era que no tenía nada mejor o más interesante que hacer además de estudiar o limpiar, pero no estaba seguro de que quisiera ofrecer su preciado fin de semana de ocio a Kuroo....sin embargo este juego absurdo ya había comenzado ¿No?


Tanto como el moreno debía estar tratando de hacer ahora, podría tratar de comenzar a acostumbrarse a esto. Para Kuroo debía ser más difícil, estar con alguien como él no debía ser agradable. Lo sabía bien, así que podría tratar de ayudarlo un poco al menos esta vez como un favor y accedió, entonces los dos avanzaron hacia su próximo destino.


Iban a tener que verse mucho en estas últimas semanas y mientras menos incómodo fuera mejor.


— Estaba pensando que podríamos ver algo diferente — Kuroo señaló la pantalla que anunciaba las próximas funciones, una agradable sonrisa amistosa en sus labios — Parece interesante ¿No?


El rubio entrecerró los ojos. Una película de acción. Explosiones, balas, ruido, destrucción sin sentido y humor barato en frases y situaciones tan predecibles y monótonas que ni siquiera eran graciosas. No lo entusiasmaba para nada, no trataba de decir que no disfrutara de una película de ese tipo, podían ser muy emocionantes de vez en cuando, pero su elección era mejor. Había tenido muy buenas críticas. Alguien dijo que combinaba perfectamente el terror y el suspenso en sus mejores escenas, era emocionante y tenía muchas ganas de verla así que se decidió a señalarla.


— Creo que esta podría ser mejor.


Kuroo negó rápidamente con la cabeza — No, no creo...son muy ruidosas ¿No? ¿Viste la película de esa muñeca? Siempre se supone que hay algo ahí atrás y nunca hay nada, es un desperdicio de encuadres, de imágenes y de tomas, y también para los nervios de una persona...podrían haber hecho cosas realmente grandiosas ahí ¿Sabes? Pero decidieron perder una oportunidad muy buena tras otra, siempre es lo mismo.


¿Qué era esto? ¿Se suponía que ahora Kuroo era un crítico de cine? estaba poniendo demasiado esfuerzo aquí. No estaba diciendo que no tenía un poco de razón, había algunos puntos que podían ser válidos, pero esos argumentos estaban bastante lejos de hacerlo cambiar de opinión. A demás Tsukishima también podía jugar muy bien al sabelotodo aquí.


— ¿Crees que la tuya es mejor?


— Un poco más, sí.


— Te das cuenta de que solo se trata de una mala comedia ¿Verdad? He escuchado sobre esta película antes y he visto las secuelas...y creo que ya puedes darte cuenta de lo poco original que va a ser con tan solo ver el nombre...no parece que se hubieran esforzado mucho ahí — dijo — Las primeras dos fueron muy buenas, pero están explotando demasiado una idea que ya no está emocionando a nadie...esto va a ser solo una parodia de lo que alguna vez fueron muy buenas entregas anteriores, admítelo.


Kuroo lo había pensado antes, pero ¿Por qué este chico estaba leyendo su mente? No era como que estuviera tratando de llevarle la contraria, había visto el tráiler antes y había algunos aspectos que dejaban mucho que desear, pero aun así estaba emocionado por esto. Si iba a decepcionarse quería hacerlo de la forma correcta, no estaba dispuesto a admitir un sentimiento a medias...a demás no le gustaban mucho las películas de terror.


Solo había entrado a esa sala aquella vez porque la chica con la que salía y su grupo de amigas querían verla.


— Crees que eres muy listo ¿Verdad?


— Lo que creo aquí es que te estas esforzando mucho — el rubio sonrió con socarronería, parecía un poco más alto cuando alzaba esa respingada nariz de esa manera — Si tienes miedo solo tienes que decirlo.


Kuroo apretó los labios. Parecía que no iban a llegar a ningún lado aquí y la idea en lugar de molestar a alguno de los dos, pareció despertar su curiosidad e interés. Podían haber tenido opiniones distintas ahora, sus preferencias también lo eran, sin embargo también parecía que tenían algo que podían llamar común ¿No? Hasta ahora no habían hablado con nadie de algo como esto, era muy alentador, la mayoría de sus amigos no tenían una opinión tan profunda o eran tan observadores. Aun así, no tenía muchas ganas de ceder y tenía la impresión de que Tsukishima tampoco.


— ¿Sabes? No deberías juzgar una película antes de verla...podrías estarte perdiendo de algo grandioso.


— Podría decirte lo mismo.


Definitivamente esto no iba a ser muy fácil, tal vez deberían haber ido al árcade, ese lugar los habría mantenido ocupados mientras se acostumbraban a la presencia del otro y descubrían como hacer de esto algo menos silencioso y extraño, sin embargo aquí habían descubierto algo interesante también. Quizá no había sido tan malo, pero necesitaban tomar una decisión pronto.


— ¿Esta bien si usamos una moneda? — propuso Tsukishima y comenzó a buscar dentro de sus bolsillos hasta encontrar una. La tomó entre sus dedos, alzándola a la altura de su mirada — ¿Cara o cruz? Puedes elegir primero o ¿Tienes otra idea? Si es así me gustaría escucharla.


¿Una moneda? No parecía una propuesta tan mala a pesar de que la idea de que existiera la posibilidad de ver la película que el rubio quería aun existiera, era justo. Kuroo siempre había sido alguien con mucha suerte, se sentía un poco confiado y asintió sin oponer resistencia. Tsukishima le permitió examinar la moneda solo porque si y eligió la cara que esperaba encerrara su triunfo mientras esta estaba en el aire; ninguno de los dos se paró a pensar mucho en las personas que los miraban de reojo, era un momento crítico y casi se sintió como si el tiempo su hubiera detenido en el último segundo, entonces con el ritmo cardiaco a todo lo quedaba y sus emociones a tope, con todas sus expectativas a punto de una implosión salvaje y un cumuló de aire contenido en los pulmones, el moreno perdió.


Y decidió que, bajo la aturdida y perturbada mirada de Tsukishima, quería dramatizar, solo un poco y cayó de rodillas al suelo ahogando un lamento desesperado ¿Podía solo llorar? ¿Por qué una película de terror? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?


— Si ya terminaste entonces...— el rubio le golpeó suavemente la cabeza con los nudillos, la atención de todos estaba sobre ellos ahora, algunas personas incluso se habían detenido solo para mirarlos — La película va a empezar pronto...si quieres ir por dulces yo puedo ir por las entradas.


— Dame un segundo ¿Si?


Tsukishima no podría haber imaginado lo difícil que seria que este tipo entrara a esa sala y en ese punto debería haberse marchado en lugar se de seguir con ese absurdo, odiaba las situaciones problemáticas y esta ya se había transformado en una, sin embargo tenia curiosidad ¿Cuánto podría asustarse un hombre de su edad y tamaño? Creía que Kuroo solo estaba exagerando, parecía ser ese tipo de persona. Nada demasiado interesante sucedió durante la primera parte, la película era buena por lo que el rubio pudo olvidarse fácilmente de todo lo demás al rededor, la primera parte lo mantuvo en total tensión y expectativa, estaba seguro de que lo que restaba de esta seria aún mejor, no quería que terminara, pero ansiaba llegar al final y saber lo que iba a pasar. Adoraba ese sentimiento conflictivo.


Estaba muy emocionado y pasó por alto cada jadeo o molesto ruido en la gran sala de cine hasta que este le pareció más cerca de lo que debería. Frunció el ceño. Solo bastó con voltear hacia su vecino para descubrir la razón y recordar que no había venido solo a ese lugar ¿Qué se suponía que estaba haciendo? No era lo que imaginaba. Ese chico había aferrado las manos al cabello e inclinado el cuerpo hacia el frente, su rostro como una gran amalgama de emociones que Tsukishima entendió. Era tan bueno que resultaba frustrante ¿No? Alguien iba a tener una opinión muy distinta ahora y cierta persona iba a regodearse un poco de ello. Sonrió.


— Eso fue muy bueno — suspiró Kuroo, Tsukishima tomó los últimos dos sorbos de gaseosa y asintió, los dos se habían ubicado en una de las mesas fuera de la sala — No soy un entusiasta del horror y todas esas cosas, pero esto fue mejor de lo que imaginé...no estaba llena de screamers, fue todo suspenso y ansiedad; creí que iba a gritar en algún momento — rió el moreno.


En realidad si lo había hecho, pero no iba a mencionar algo que el moreno ya debía saber por ahora, estaba de buen humor — Esa fue una buena actriz, fue muy fácil sentir empatía y los efectos también fueron muy buenos, te dan la impresión de que alguien podría estar observándote...es inquietante, también muy frustrante y desesperante, y los escenarios fueron muy buenos también, hicieron un uso muy inteligente de los encuadres, pero creo que no estoy tan conforme con algunos aspectos...solo algunos en la última parte.


— Si, el villano de esta película también lo hizo muy bien, era un bastardo muy bueno...lo odié tanto que creo que también lo amo. Tratar de adivinar donde o que podría suceder a continuación fue toda una locura o una tortura, a veces me sentía asechado...aunque creo que me habría gustado tener un poco más de información sobre algunas cosas... — dijo. Aun había algunos nachos en el plato de Tsukishima y preguntó con la mirada si podía tomar uno, el rubio asintió — Y la última parte, no lo sé...creo que podrían haber exagerado en algunas cosas, pero tampoco fue malo.


— Siempre exageran en algunas coas en este tipo de situaciones...siempre tratan de hacerlo dramático, puede ser predecible, pero fue una buena película...la volvería a ver.


Kuroo sintió. Esas fueron dos horas de una tortura que había podido disfrutar. Esta corta charla lo había relajado un poco más. Para Tsukishima también había sido una buena experiencia, Yamaguchi y Yachi no lo habrían hecho mejor que el moreno, y no habría podido compartir sus opiniones con ellos como ahora. Después de todo no había sido una decisión tan mala. Seguía siendo raro, pero ya no se sentía tan incómodo en su presencia. Era más entretenido de lo que parecía, tal vez las próximas semanas no iban a ser una tortura después de todo.


— Todavía es temprano ¿Quieres que veamos otra película? Esta vez puedes elegir, no voy a quejarme si quieres ver algo con dibujos animados — podía ofrecerle esto, eran algo similar a socios ¿No?


— Algunas películas con dibujos animados son muy buenas, hubo una que despertó mi espíritu navideño.


— Creo que también vi esa, fue diferente a lo usual...la animación era interesante.


Los dos se levantaron, esta vez Tsukishima fue directamente a la zona de dulces y fue el turno de Kuroo para obtener las entradas. Ya podía imaginar cuál sería su próxima película, podía permitirlo. Sin importar que tan buena o mala fuera la función, tenía la impresión de que los dos podrían disfrutar alabándola o destrozándola. Era extrañamente emocionante y quizá si no hubiera decidido quedarse no lo habría descubierto jamás...esto de verdad no había sido tan malo.


*****


— Creo que va a darme una indigestión...— murmuró Kuroo, estaba comenzando a arrastrar los pies a cada paso que daba, no lo estaba logrando, era imposible y Tsukishima consideró la idea de abandonarlo y seguir con su camino. Tenía sueño, no podía creer que ya pasara de la media noche o que hubieran estado en esa sala de cine hasta la última función, estaba hecho polvo — ¿Podemos descansar un momento?


Dormir era lo que quería en realidad, solo unos metros más cuesta arriba y estaría en su departamento, había sido una sorpresa demasiado extraña que vivieran en el mismo vecindario. Había pasado un año desde que se había mudado ahí, sin embargo no recordaba haberlo visto una sola vez. No era una pregunta cuya respuesta le obsesionara, pero le parecía curioso.


— ¿Quieres sentarte un rato en una banca del parque? Está a solo diez metros de nosotros, supongo que puedo llevarte hasta ahí — o tal vez arrastrarlo, Tsukishima podía ser más alto, pero Kuroo parecía ser más pesado. Tenía la espalda más ancha que la suya y una complexión un poco más atlética — Solo no vomites sobre mí.


— Creo que puedo intentarlo, solo tienes que empujarme ¿Está bien?


Esa idea le gustaba más y sin duda fue mucho más fácil que la primera imagen que había formado en su mente. No tomó más de dos o tres minutos llegar hasta ahí, no había sido demasiado, sin embargo Tsukishima estaba cansado y decidió tomar asiento junto a él. Solo un minuto debería estar bien, quería recuperar un poco de energía y cerró los ojos. La noche le pareció tranquila y tibia, había una ligera brisa agitando las hojas de los pocos árboles y arbustos alrededor, anunciaba lo que sería un inevitable verano y traía vestigios de lo que alguna vez fue la primavera en sus matices. Pequeños insectos nocturnos acompañaron el silencio solo roto ocasionalmente por el motor de algún ocasional auto y lejanos bocinazos.


— No sabía que también vivías por aquí — habló finalmente el rubio aun sin abrir los ojos.


— Tampoco sabía que tú lo hacías — rió el moreno, había una cosa curiosa más para agregar a la lista de hoy — Quería estudiar en una universidad que estuviera cerca de casa, pero mi padre dijo que no debía limitarme...él quería que tuviera mi propio espacio y ahora estoy aquí, no fue tan malo, el lugar donde me estoy quedando es de un familiar...está trabajando en el extranjero y yo cuido todo mientras no está — Kuroo bostezó largamente — ¿También te estás quedando solo? No eres de por aquí ¿Verdad? Ese chico lo dijo antes ¿Qué te hizo venir?


Tsukishima abrió los ojos, el cielo nocturno en la gran ciudad era algo opaco y distinto, extrañaba un poco las estrellas de su ciudad natal, sin embargo no estaba arrepentido de haber venido — Quería hacerlo, no hay una razón demasiado profunda...solo quería hacerlo y ya — quería, al menos un poco, sentir que no era alguien extraño y tal vez encontrar un lugar en el que sintiera que encajaba — Hoy estuvo bien —  susurró para sí mismo.


Creía que sería imposible, pero si, lo fue...mejor de lo que imaginaba.


— Lo sé, eres más agradable de lo que pareces — murmuró Kuroo — Creo que podríamos ser buenos amigos...casi olvidé eso...eso que dicen, pero no tiene que ser raro ¿Verdad?


¿No era muy pronto para imaginar algo? No sonaba mal, pero no podía decir que le gustara, tal vez porqué estaba acostumbrado a que otras personas lo evitaran. Aquí nadie lo conocía y podía pasar medianamente desapercibido, era más cómodo, sin embargo todavía lo asustaba un poco. No quería una amistad, Tsukishima sentía que estaba mejor tal y como estaba, que el plan que habían trazado era el indicado.


Una vez esto terminara ambos podrían seguir con sus vidas y eso sería todo, no tenía por qué ser diferente.


— Hey — lo llamó — Creo que debería...— Tsukishima movió la cabeza en dirección al moreno y calló inmediatamente el tranquilo rostro de aquel chico durmiente apareció en su campo de visión, su cabeza estaba apoyada contra el hombro del rubio y sus manos caían a sus costados sin ninguna clase de fuerza mientras que su tranquila respiración delataba lo que estaba sucediendo — ¿Kuroo?


Esto no era en serio ¿Verdad? Le agitó el hombro, el moreno gruñó suavemente al mismo tiempo que apretaba los párpados. No parecía que esto fuera una broma, había un ligero ronquido emanando de esos labios ligeramente entreabiertos. A esto se refería cuando hablaba de situaciones problemáticas ¿Qué se suponía que iba a hacer ahora? No podía quedarse ahí toda la noche, añoraba su cama y Tsukishima decidió empujarlo.


Trató de ser un poco delicado, sin embargo tampoco lo intentó demasiado, no podía permitirse ser suave o no despertaría, entonces el cuerpo de Kuroo se impulsó hacia atrás. No fue suficiente para que cayera y lo notó entrecerrar los ojos suavemente. Se tambaleó con letargo y volvió a gruñir suavemente. Los cerró, su propio peso llevándolo devuelta a su punto de partida. Casi. Fue solo un ligero movimiento por parte del rubio, quizá solo un error de cálculo que, en lugar de marcar al hombro del rubio como su destino final, lo llevó a caer sobre su regazo.


Fue inesperado y en un principio Tsukishima no supo cómo reaccionar, no había tenido tiempo de nada y no sabía qué hacer. Este chico parecía estar poniéndose cómodo ahí abajo, incluso le había frotado la mejilla contra el muslo y suavemente. Lo transformó en su almohada, este tipo era de verdad increíble y molesto ¿Podía golpearlo? Ese rostro tan sereno y tranquilo lo irritaba, pero ¿Qué era eso?


Las pestañas de Kuroo eran más largas de lo que parecían a simple vista, casi le acariciaban la piel del pómulo, su labio inferior parecía un poco más relleno que el inferior, había un lunar muy pequeño justo sobre el borde de este y una muy pequeña cicatriz justo sobre la zona de la ceja. Todo perfectamente simétrico, masculino y agradable a la vista.


— De cerca ya no eres tan feo — le picó la mejilla, Kuroo arrugó el entrecejo y gruñó.


— Soy hermoso, cállate...— Tsukishima parpadeó ¿Que había eso? ¿En serio?


— Hey — lo llamó ¿Estuvo fingiendo todo este tiempo? Entonces ¿Por qué parecía roncar suavemente? De verdad estaba dormido ¿No? Tsukishima comprobó su teoría volviendo a picarle la mejilla, Kuroo solo gruñó como repuesta y volvió a agitar la cabeza sobre su regazo, entonces el rubio ahogó una carcajada ¿Qué rayos pasaba con este tipo? Qué desagradable, que molesto...y aun así...— Hoy fue un poco divertido, pero...


Repentinamente Tsukishima frunció el ceño ¿Había sido divertido? Se divirtió ¿Cómo se había transformado en algo como esto? En un principio no era el sentido de todo esto, tenía una idea distinta y muy pocas expectativas. Hace tan solo doce horas atrás estaba completamente seguro de que esto no sería agradable, lo confirmó después de la corta e incómoda charla que sostuvieron en aquella cafetería, pero ¿Por qué de pronto cambió?


No lo esperaba, probablemente Kuroo tampoco lo hacía, sin embargo había sido bueno. No sé recordaba tan entusiasmado antes, nunca perdió así la noción del tiempo o se permitió perder sus tan preciadas horas de sueño. No lo habría hecho por alguien que acababa de conocer y del que no sabía nada.


Sin embargo no estuvo mal y aun así...aun así no estaba seguro de que esto le gustara.

Notas finales:

>3< Gracias por leer >3


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