Parte 2
Es que estos sentimientos en algún momento me darán un respiro, tan solo mi mente ya está llena de tus recuerdos es que eso no basta al parecer, anhelo tener tu calidez, quiero volver a ver la luz al final de camino, pero como el un suspiro te desvaneces en el sonido sordo de la puerta cerrándose.
Volteo rápidamente para ver quién es el responsable de no haber podido llegar a impedir la salida de Severus, la ira fue lo primero que sentí quería golpear a esa persona y exigirle que me soltara ya que tenía esperanzas de poder llegar aun a él, el tiempo no perdona, pero en al instante la sorpresa me invade.
-Regulus –creo que si me mirara aun espejo en este instante vería como mis cejas se vuelven uno de tanto fruncir el ceño.
-Sirius, tanto tiempo –agarra mi mano en un apretón de manos es ahí donde salgo de mi sorpresa.
-si ha pasado bastante – digo algo incomodado, aunque fuera mi hermano se sentía como un extraño ya que desde hace bastante tiempo nuestra relación nunca había vuelto hacer la misma.
- ¿qué haces aquí? No me respondas estas por el hijo de Potter no –dijo con una media sonrisa, no me agradaba el tono en que lo dijo, además como sabia eso, antes de que pudiera llegar a preguntar, Harry llega en su rostro veo preocupación me di cuenta que iba dejar a Harry solo en la tienda, que clase de padrino era.
- Sirius la señora de enorme sonrisa me dijo que ya está listo nuestro pedido –dijo algo tímido debe ser porque es la primera vez que ve a regulus.
- oh muchacho discúlpame por lo de hace momento, déjame presentarles él es regulus mi hermano
-hermano? No sabía que tenías uno –iba a explicarlo, pero cierta persona me interrumpe.
- es normal que no lo sepas ya que tu padrino y yo no nos hemos visto en un gran tiempo no es así james Potter –noto que james está detrás de mí con la mirada extrañada dirigida hacia regulus, pero después la dirige hacia mí.
-regulus black que novedad verte por aquí sin tus amigos serpientes –james nunca le agrado y siempre que podía al igual que severus se ponía a pelear, severus, otra vez al igual que las mariposas has volado lejos de mí.
-veo que nos has cambiado nada desde el colegio –debía detener esto antes que se arme algo además la gente que había en el lugar nos empezó a mirar, no es como si me importara, pero no quería llamar la atención hoy.
Fue algo complicado separar a esos dos, por merlín deseaba que lili estuviera aquí, solté un suspiro de alivio, pero solté otro ya que para desviar la conversación sugerí ir con regulus con la excusa de ponernos al día con nuestras vidas, ahora aquí estamos tomando café en una cafetería de acogedor aspecto sin james por suerte.
El silencio es como si se empezara materializar formando una barrera que ninguno de los dos al parecer no está dispuesto a romper, pero no pasa mucho tiempo y regulus es quien comienza la conversación.
-haz cambiado sirius debo admitir que el tiempo te ha favorecido –un alago proveniente de el es una sorpresa y a la vez un mal augurio no sé por qué pero lo siento, es absurdo sentirlo.
-umm gracias –en un estira y afloja era la conversación para poder entablarla llegando a un punto un poco más flexible aunque en momentos mi mente se desviaba al momento en que lo volví a ver y de lo que había estado tan cerca de poder volver a sentir su calidez, la textura de sus manos.
-te doy un galeón por tus pensamientos sirius
-disculpa a veces me pasa eso –dije en un tono que ocultara mi aflicción, dirige mi vista a regulus en eso noto algo muy familiar de color plata muy brillante en uno de sus dedos en mi mente el recuerdo de que severus usaba el mismo anillo que mi hermano, alarmas se encendieron en mi cabeza decidí ignorarlos, porque regulus y severus siempre habían sido amigos recuerdo que de eso estuve celoso casi la mayoría del tiempo y que su relación parecía ser mejor que la que tenía conmigo hasta rumores había de que ellos eran pareja, porque me duele tan solo recordarlo. Sacudo mi cabeza un poco para alejar esos pensamientos además en si esto es una oportunidad el debe saber dónde puedo encontrar a severus.
-regulus quisiera hacerte una pregunta –dije
- clara me puedes preguntar lo que quieras –dijo mientras tomaba un sorbo de su café.
-quisiera saber de severus
-por qué? –pregunto rápidamente, en realidad no quisiera decirle mis motivos, siento que es muy personal.
-solo es simple curiosidad –le dije en una vaga escusa, empiezo a juguetear con mis manos.
-es extraño que tú quieras saber de él, bueno por la historia que tuvieron en el colegio –sabía que aquello tarde o temprano me persiguiera, sentía que estaba entre la espada y la pared. Como si leyera el ambiente empieza hablar de el, suavemente como si vapor del café que sostenía hace rato se volvió más cálida y una sonrisa sincera por primera vez se asoma en mis labios, hasta rio de como el se convirtió en maestro de pasiones , nunca lo hubiera creído pero a el siempre se le había dado bien esa materia, como no olvidar que tenía que rogarle para que saliera conmigo para ir a cualquier parte de Howard o cuando no tenia la necesidad de mirar el mapa de los merodeadores para saber donde estaría pero en medio de la conversación habría un punto que cambiaría todo.
- hermano si estabas tan interesado porque no preguntaste a Lupin directamente pensé que vivian juntos –aquello que dijo me desencajo completamente.
-no entiendo, como remus sabría de severus –regulus me miro con incredulidad sintiéndome más perdido
- en serio no te lo dijo – solto una risa
- que debería saber –esto empezaba a molestarme.
- sere directo contigo, se nota que lupin te estuvo ocultando muchas cosas sino no me preguntarías por severus –de que estaba hablando, no lograba entender solo provoco que frunciera el ceño en señal de molestia.
-tu no lo conoces, no debería estar hablando si de el
- lo conozco ya que estuvo con lucius –como balde de agua fría me impacto – al ver tu reacción supongo que no y seguro que también no te conto que el es madre del niño que viste junto a severus- justo en ese tiempo sentía que iban a estallar mi alarmar- corrijo mi esposo.
En estos momentos no soy capaz de ver mi realidad con tanta información en tan pocas palabras.
“No lo entiendo”
-mientes –es lo único que atino a decir, en que momento todo se volvió oscuro, nunca note como el tranquilo rostro de regulus se volvía a uno furioso.
- pregúntale a la perra de lupin como abandono a lucius y a su hijo recién nacido quien sabe por qué a ver si tu lo averigua, pero en si era algo de esperarse ustedes están cortados con la misma tijera –lo último lo dijo con un tono que reflejaba rencor.
-que?
-ahora te haces el desentendido, por favor se todo de ti y tu historia con severus , te doy gracias a la estupidez que te cargas porque ahora severus es mio –con eso dicho el salió del lugar.
Ahora solo el vacío, no hay nada ni cuando james llega a preguntar no logro escucharlo, mis pasos son lentos camino mecánicamente como si de un títere se tratara. Las frías lagrimas que se congelan en el cielo caen con gentileza, toco mi rostro rio al principio por no haberlo notado y después se va convirtiendo en un llanto, duele, duele demasiado en eso veo tu imagen alejándose de mi nuevamente, al intentar alcanzarte desapareces como si de burbujas de jabón se trataran una ilusión. Cuando miro delante de mi noto donde estoy, cruzo el lumbar de mi casa pero de repente siento que esto ya no puedo considerarlo hogar. La voz de remus se escucha, no se qué sentir lo único que se es que tengo que aclarar las cosas que dijo regulus de el, ya que no se si podré volverlo a llamar amigo después de esto.