Mas que un juguete por chibi_andru

Creíste acaso que soportaría todo lo que me decías? Creíste que cada palabra que me decían era como si se las llevara el viento? Creíste que nunca caería ante todo esos comentarios, demonio, asesino? 

Te equivocaste. 

Cada comentario esta aquí, guardado dentro de mi corazón, mente y alma. Nunca fui lo suficientemente valiente para aceptar mi derrota, ni lo suficientemente fuerte para poder ganar. 

Quería ser el único capaz de llamarte “mi amor” en una noche de tormenta frente a la televisión, quería darte una sonrisa cada vez que llegaras a casa. 

Pero lo que uno quiere es muy distinto a lo que tiene. 

Solo tengo tus pocas sonrisas, escasos “me gustas” y inexistentes “te quiero; gran variedad de “te deseo”, “eres apetecible” y “solo por esta noche”, la ultima mas seguido que el resto.  

Frases que, aunque vacías, me son necesarias para cada día, no me imagino sin ti ni uno de mis minutos.
Frases que, aunque insultantes, son lo único que me hace sentir importante, un juguete que esta ahí que, a diferencia de la mayoría, hizo al dueño encapricharse y no querer compartirlo.
Frases que me demuestran que, por lo menos, tengo más tiempo para ser usado o, la posibilidad de estar siempre guardado en un cajón, olvidado pero cerca del quisquilloso dueño. 

Un dueño que lo intento romper en mas de una ocasión, una para demostrar grandeza, y la otra simplemente por el rumor que dentro abrían dulces, dulces que te permitirían alcanzar lo que quieres.
Un dueño que no supo ver la importancia del juguete hasta que este se rompió, en ese momento lo dejo en el lugar de juego, esperando así que alguien mas lo pudiera arreglar; escapando de su deber, deber que todo dueño tiene con todo juguete. 

Pero yo no soy cualquier juguete, soy TU juguete, un juguete que se repara solo, que olvida todas las promesas de compañía eterna, que te perdonar y pide perdón.  
Yo soy ese tipo de juguete que, aunque no se encuentra en las tiendas, es mas solicitado por los niños; los cuales te envidian y tu solo presumes, otros solo te aconsejan y tu solo los ignoras, como a un juguete. 

Olvidas que yo soy el juguete y que solo a mi debes ignorar, romper e insultar.
Olvidas que soy el único capaz de darte lo que quieres, como cualquier juguete, pero cualquiera me puede dar o que tu me das, como cualquier dueño. 

Y cuando descubro esto entiendo que no soy un juguete, porque, aunque te lo aya dicho antes, si te pido que no me golpees, que no me insultes, que me duele. Demostrando que no soy un juguete, demostrando que ahora solo soy un perro. 

Tu perro. 

Al cual golpeas, dejas en la calle como callejero y en las noches acoges como diversión, que no dice nada, que no ladra, rasga los sillones o muerde. 

Solo repite en silencio la misma frase todo el tiempo, un triste alarido ignorado como el propio perro, repitiendo en silencio la preguntas que como perro, juguete, amigo, amante y compañero tiene solo una respuesta. 

Te equivocas  

Ya no seré un perro, ni un juguete. 
Se acabo. 
Búscate a otro. 

Lo siento mucho, pero te quedaste sin nada, ya no soportare tus golpes, desprecios e insultos.Pero aunque encuentres valor y seguridad en estas palabras, dentro de mí no soy capaz siquiera de practicarlas frente al espejo, un miedo me embarga y no me deja respirar. 

Je 

Es irónico. 

No tengo miedo de los enemigos, retos imposible, tampoco de la muerte; pero no puedo hablar enfrente tuyo sin que se forme un nudo en mi garganta, sucumbir al deseo, o fácilmente saludarte. 

Por eso es que esta carta está en tus manos. Para impedir cualquier tipo de rescate, para que no puedan salvarme, que no sepan donde estoy, para poder, aunque sea una vez, ver en tu cara alguna simple emoción que no sea deseo.

Para que nadie evite tu vergüenza cuando descubran que te acostabas con el ninja cabeza hueca numero uno en sorprender a la gente, Naruto. 

El demonio. 

El idiota. 

El usuratonkachi. 

La única persona con que la gente pensaría juntarte, el único capaz de desafiar a un Uchiha  y el único entre todas estas personas que espera impaciente tu regreso a casa. Y, posiblemente, el único que en la noches duerme como un tronco a tu lado.  

La única. 

Cuando pensé en mi pasado, solo me vi a mi mismo en un columpio al lado de la academia, pero, buscando y buscando, descubrí que también era tu juguete, sin pilas eso si, que esperaba que lo escogieras dentro de todo ese escaparate para poder jugar juntos, por suerte me escogiste a mí. 

Cuando analice mi presente, me vi a mi mismo sufriendo pero no en el columpio, en mi habitación, sobre mi cama sin poder levantarme por el dolor que sentía en una parte que no debería de afectar al resto, mi joven corazón.
Un corazón que confía demasiado pronto y previene demasiado tarde. 
Confió demasiado rápido en que podría curar todo rastro de tu dolor y ansias de venganza, y previno muy tarde que no era capaz de lograrlo.  

Cuando me permití visualizar un futuro, me busque, Corp. de un lado a otro, pero no me encontré; finalmente di con tu mansión, el otro lugar donde yo podría estar, pero ahí mi presencia no estaba, solo encontré a una criatura que rompió mis esquemas, una mujer.
No era cierto, pero también me logro sacar algunas lagrimas de mis ojos, pensando en que ese es mi destino, un juguete roto y viejo, un perro que ya esta grande y que es menos lindo que un cachorro pequeño.  

Cuando dejé de mentirme 

Acepte que nunca te tendría, pero también en mi cabeza se alojo la misma idea que desarrollo en este momento. 
Terminar con esto ahora. 

¿Para que sufrir lo que me toca, si puedo evitarlo? No tendría que esperarte todas la noches, no tendría que desafiarte para encontrarme con esos ojos negros, no tendría que espera a que la gente piense en alguien más para ti que yo. 

No tengo nada mas que decirles, todas las cartas están sobre la mesa y por suerte gana a casa. Solo quiero despedirme de las personas que sé que estarán ahí. 

Sakura: fuiste y serás mi mejor amiga, casi hermana, no te voy olvidar nunca y espero que no llores mucho, recuerda que el verde no combina con el rojo. Solo te pido que no mates al remitente onegai 

Tsunade-oba-chan: eres para mi como la madre que nunca tuve, con una gran pechonalidad y muy fuerte, por eso necesito que superes esto que va a pasar y guíes a la aldea como a mi me hubiera gustado. 

Iruka sensei: sea positivo y cómase todo el ramen que me quedo por comer, pero sin exagerar. No tengo mas despedidas, el resto quedo completamente claro en la carta y confió ciegamente en todos ustedes 

Sayonara.  

Nuncasabesloquetieneshastaquelopierdeycuandoloquieresrecuperaresdemasiadotarde  

Sollozos.

Eran los únicos sonidos dentro de una habitación decorada con guirnaldas, globos y regalos. En el centro de la gran sala estaba un moreno de piel pálida y ojos negros sujetando una hoja de papel que se encontraba justa en la entrada. 

No lo podía creer, su rubio estaba esta… no quería siquiera pensarlo. Nunca aceptaría la idea que su koi ya no estuviese, no importaba la carta saldría a buscarlo 

Y sin más salio corriendo de la triste sala preparada para el cumpleaños de Naruto…    

Continuara?????