-Que demonios crees que hacías?????!!!!!!!!!!! –pregunto un señor
-Yo solo......
-Yo solo, yo solo, siempre es lo mismo, cada que te pregunto algo responde con yo solo, que no te sabes otra frase niño inútil!!!!!!!!!!! –le dijo en un tono muy enojado e interrumpiendo al chico
-Lo siento padre, mis amigos me entretuvieron un poco y....
El chico de cabellos negros no terminaba de decir esto cuando su padre lo había golpeado con un látigo.
-Bien, en vista de que te interesan mas tus amigos que tu familia, te haré una pregunta y me tienes que contestar enseguida, ¿A quien prefieres a ellos o a nosotros? Elige –le dijo acercando su rostro al chico expresando un poco de enojo y de retándolo.
-Yo.......yo –el chico no sabia que decir, sabia que si elegía a sus amigos, su padre lo echaría de la casa y si elegía a su familia de todas formas le iría mal, así que no sabia que hacer, de pronto le llamaban a su padre por teléfono y se fue, a lo que el chico echo a correr y escapo, no sabia a donde iba, solo Coria bajo la lluvia.
Era una noche muy fría, tal vez la mas fría que pudieran imaginar y para colmo de los males estaba lloviendo muy fuerte, cosa que dificultaba el conducir y por lo visto iba a durar toda la noche, pero su casa ya no quedaba tan lejos. Le era difícil ver por el parabrisas hacia donde iba, pero de repente noto que un chico iba corriendo “Como puede correr bajo esta lluvia”-pensó el chico que iba conduciendo. De pronto el chico que iba corriendo se detuvo en una esquina y no se movió de ahí, el chico que iba dentro del carro lo volteo a ver y noto que lo conocía; detuvo el coche justo al lado del chico, el cual estaba empapado y al ver quien estaba dentro del coche se sorprendió, era un chico de cabello negro, estatura media como de 1.72, delgado, de ojos castaños y de piel blanca, los chicos se miraron por un rato, como tratándose de comunicar con la vista, a lo que el chico de cabello rubio que iba dentro del coche rompió el silencio.
-Que demonios es lo que estas haciendo ahí parado bajo esta lluvia, puedes enfermarte, ten por seguro que te dará un resfriado, sube, puedo llevarte a tu casa si quieres –le dijo abriendo la puerta del copiloto y estirando su mano
-Reita? Que estas haciendo aquí? –pregunto el chico pelinegro un poco confuso
-No hay tiempo para explicaciones, vamos entra que te estas mojando mas –dijo el chico de la bandita un poco desesperado
-E-Esta bien –diciendo esto, el otro chico entro al coche, acto seguido cerro la puerta
-Bien, te llevare a tu casa antes de que tus padres se preocupen mas por ti, me imagino que ya deben estar preocupados, pero dime que hacías corriendo, lejos de tu casa? –Pregunto un poco consternado el chico rubio
-No, no quisiera causarte molestias –decía el pelinegro cabizbajo
-No es ninguna molestia, además no esta tan lejos de aquí tu casa, bueno caminando si, pero en coche es mas rápido, no te preocupes –decía en un tono serio
-Lo que sucede es que no quiero ir a mi casa en estos momentos –dijo el chico mirando por la ventana de su puerta
Reita detuvo el coche unos instantes para preguntarle al chico porque no quería regresar a su casa.
-Pero Hiroto-kun porque no quieres regresar a tu casa? –pregunto un poco preocupado
-Es.......porque.........yo......tuve una pelea con mi padre –dijo pero sin levantar la mirada-puedo, puedo quedarme en tu departamento por esta noche? –pregunto
-Eh......esta bien –respondió el rubio
Reita había arrancado y pensaba en Hiroto, el normalmente no era así, el era feliz con sus padres y nunca había peleado con ninguno de ellos, porque lo habría hecho ahora?, pero Reita ya no le iba a preguntar, era obvio que Hiroto no le quería decir nada mas ya que no se conocen tan bien y no hay tanta confianza como con los demás integrantes de cada banda y no iba a presionarlo para que le dijera nada, simplemente se le hizo raro que le pidiera quedarse esa noche en su departamento.
Mientras pensaba iba volteando para ver de reojo a Hiroto, notaba que no alzaba la mirada para nada y la verdad es que le preocupaba un poco. Al llegar a su departamento, noto que Hiroto estaba dormido, así que salió rápidamente y abrió la puerta de abajo y luego se dirigió por Hiroto, al cual cargo por la espalda; aun seguía lloviendo y eso dificultaba un poco las cosas, ya que se le resbalaba un poco, pero tenia que darse prisa para entrar a su departamento para cambiarse y prestarle ropa a Hiroto.
Al legar al departamento, se acordó que estaba un poco desordenado, así que coloco a Hiroto en el sofá y se dispuso a ordenarlo un poco; Hiroto despertó momentos después y noto que se encontraba en la sala del departamento de Reita, pero Reita no se encontraba cerca ya que se había ido a cambiar de ropa, al salir de su habitación, noto que Hiroto estaba sentado otra vez con la mirada baja.
-Si quieres puedes darte un baño y tomar la ropa que quieras, somos de la misma talla no? –dijo mirando ala chico que estaba empapado y tomándolo por los hombros, a lo cual el chico salto un poco
-S-S-Si, gracias –dijo mientras se dirigía al baño
Reita se dispuso s ver una película mientras fumaba un cigarrillo, así la espera se haría mas corta.
-Que le habrá pasado a Hiroto-kun? El no suele salirse de su casa así como así, además tengo entendido de que su madre esta enferma, que habrá ocurrido.... –pensaba Reita mientras esperaba a Hiroto, no sabia si preguntarle que había pasado o no, el ambiente comenzaba a ponerse un poco tenso.
Mientras que Hiroto se relajaba en la ducha, pero no podía relajarse por completo, debido al daño que le había hecho su padre, le dolían mucho las heridas que no dejaban de sangrar, Hiroto pensó que tal vez Reita tendría un botiquín de primeros auxilios en el baño, así que al terminar de ducharse, busco el botiquín y se dispuso a curarse las heridas, pero el ardor y el dolor eran demasiado fuertes que a Hiroto se le salió una que otra lagrima. Se dirigió a la habitación de Reita para buscar una ropa que ponerse y al ver el tamaño del guardarropa de Reita, quedo sorprendido, ya que era un poco más grande que el de él; termino decidiéndose por una playera negra y unos pantalones blancos. Se vistió con mucho cuidado para evitar que las heridas volvieran a sangrarle y evitar que le dolieran. Al terminar salió de la habitación y se dirigió a la sala, observo a Reita unos segundos, aun se sentía mal y muy triste, pero no quería que su compañero lo notara, así que trato de actuar con un poco mas de naturalidad, cosa que le resulto muy difícil.
-Tardaste mucho –le reclamo Reita en un tono un poco un poco bromista, pero sin voltear a verlo
-Gomen nasai, pero no sabia que ropa tomar de tu guardarropa, no quería verme encajoso –dijo fingiendo una sonrisa y sentándose en el sofá, al lado de Reita
-A mi no me importa que ropa tomes, siempre y cuando me la devuelvas, exceptuando mis banditas –dijo parándose del sofá –quieres algo de cenar? Debes de tener hambre –le pregunto mientras se dirigía a la cocina
-Etto....en realidad no tengo mucha hambre, pero gracias –dijo apenado Hiroto, la verdad es que tenia mucha hambre puesto que no había comido nada desde la mañana, pero no quería verse aprovechado
Reita dudo un poco, no sabia si creerle a Hiroto o no. Se acerco a Hiroto y lo vio a los ojos, noto un poco de tristeza en la mirada de Hiroto, pero no iba a preguntar, no aun. Permaneció así unos segundos, Hiroto estaba un poco nervioso por la situación y mas aun cuando su estomago comenzó a hacer ruidos extraños, a lo que Reita echo a reír y Hiroto solo sintió mas pena aun, estaba un tanto rojito y con la cabeza agachada, pero en esta ocasión por la pena.
-Si tienes hambre solo dilo, que no te de pena, no soy tan buen anfitrión como Kai, pero al menos soy cortes, iré a prepararte algo de comer –decía mientras dejaba de reír y se dirigía de nuevo a la cocina.
Reita preparo algo sencillo y le dijo a Hiroto que se sentara mientras colocaba su plato en un lugar y el de el en otro.
-Quieres una cerveza o prefieres agua? –pregunto el chico rubio
-Agua esta bien, gracias –le respondió el menor
Fue una cena tranquila, Reita trato de evitar alguna clase de comentario acerca de lo que le habría pasado a Hiroto, por otro lado Hiroto solo esperaba el momento en el que Reita le preguntara que le había pasado, pero no fue así, Reita hablo acerca de Gazette y Hiroto un poco de Alice Nine. Al terminar de cenar Reita le pregunto a Hiroto que si quería ver una película y Hiroto dijo que sí. Ambos se sentaron en el sofá, uno cerca del otro. Había pasado un poco mas de la película cuando Reita noto que Hiroto dormía profundamente, pero Reita no quería dejar que Hiroto se durmiera en el sofá, así que decidió llevarlo a su habitación. Entro y lo recostó en su cama, al hacer esto, Hiroto se acomodo y Reita lo cubrió con las cobijas. Reita decidió dormirse en el sofá y terminar de ver la película, pero al poco rato también se quedo dormido. Unas horas mas tarde en la habitación de Reita Hiroto se movía mucho de un lado a otro y comenzó a sudar mucho, en realidad estaba teniendo una terrible pesadilla, de momento comenzó a gritar, gritaba demasiado fuerte, con lo que Reita se despertó e inmediatamente fue a ver que pasaba, noto que Hiroto se recocía mucho y gritaba “no, padre, no”. Reita trato de despertar a Hiroto, con lo que recibió unos cuantos golpes de parte de el, pero siguió intentándolo.
-Hiroto-kun vamos, despierta, Hiroto, Hiroto!!!!!!!! –gritaba desesperadamente el rubio
Hiroto despertó con lagrimas en los ojos y al ver a Reita empezó a llorar desesperadamente, Reita lo abrazo tiernamente y trato de tranquilizarlo un poco.
-Ya paso Hiroto-kun, ya paso. Solo fue una pesadilla –decía el chico en un tono muy tranquilo
-“Una pesadilla.......si, eso es lo que fue” –pensaba
-No sabia que golpearas tan fuerte –le dijo agarrándose el pecho y haciendo expresión de dolor
-Eh?? –Hiroto hizo una expresión de duda
-Me golpeaste cuando trate de despertarte –le aclaro Reita
-Ah, Gomen nasai, hontouni gomen nasai –se disculpaba Hiroto con una expresión de pena
-No, esta bien, no lo hiciste consiente, pero deberías de tratar de volver a dormir si? –dijo en tono consolador el chico de la bandita
-S-Si –dijo un poco desganado y se tiro en la cama, pero volteando al lado contrario de donde estaba Reita.
-No te preocupes, estaré aquí por si vuelves a tener una pesadilla, esta bien? –decía mientras cobijaba a Hiroto
-Hai, Arigatoo. Oyasumi nasai –dijo cerrando los ojos
-Oyasumi nasai –le respondió el rubio sentándose en un sillón que tenia al lado de la cama
Reita tardo en volverse a dormir, en realidad estaba preocupado por Hiroto. Hiroto dormía profundamente y se volteo hacia donde estaba Reita, el chico lo volteo a ver y lo observo por unos minutos hasta que se quedo dormido el también.
A la mañana siguiente, Reita se levanto temprano y noto que Hiroto aun dormía como un bebe, así que decidió darse una ducha y cambiarse en lo que se despertaba Hiroto, a pesar de que tardo un poco en ducharse y cambiarse, Hiroto todavía no despertaba y decidió hacer el desayuno mientras tanto. El desayuno estaba listo a los pocos minutos, pero Hiroto no había despertado aun, cosa que a Reita le preocupo un poco, el sabia que Hiroto se despertaba temprano, alguna vez se lo comento, así que fue a su habitación y vio a Hiroto aun dormido y como ya era un poco tarde, decidió despertarlo, pero al moverlo para despertarlo, Reita noto que Hiroto estaba temblando y que su respiración era un poco agitada, así que lo toco de la frente y se dio cuenta de que tenia fiebre, fue por agua y tomo una de sus banditas y se la coloco en la frente, momentos después, llamo a un medico.
Momentos mas tarde llego él medico, Reita lo esperaba en la sala e inmediatamente lo condujo a la habitación en la que se encontraba Hiroto y lo dejo a solas con el chico. Unos minutos mas tarde, él medico salió de la habitación un poco preocupado, cosa que Reita inmediatamente noto y ocasiono que se preocupara un poco.
-Que pasa doctor? Cómo se encuentra? –pregunto en un tono preocupado
-La verdad es que se encuentra mal, esta pálido y por lo visto no se ha alimentado muy bien, la fiebre indica que permaneció mucho tiempo bajo la lluvia y probablemente haya pescado un resfriado, tiene que cuidarse mucho si no quiere que le dé neumonía, esta muy débil y tiene varios golpes, tal vez lo hayan golpeado, no sabría decirle, debe de guardar mucho reposo y no le causen emociones fuertes por el momento, esta bien? Le voy a dar una receta que quiero que siga al pie de la letra y el tratamiento es por 1 semana mínimo. Será mejor que no salga de aquí –dijo por ultimo el doctor antes de marcharse
-Si doctor, esta bien. Muchas gracias –dijo acompañándolo hasta la puerta
Justo enseguida de que cerro la puerta, sono el teléfono.
-Moshi moshi –dijo con tono de voz preocupante
-Hola Reita,. Habla Kai, solo hablo para informarte que hoy tenemos ensayo a las 4 esta bien, no llegues tarde y te estaremos esperando –dijo el baterista
-E-etto Kai, lo siento, pero no podré asistir al ensayo de hoy, tengo otros asuntos que resolver –dijo seriamente el rubio
-Reita no puedes falta a los ensayos solo por flojera o por capricho y eso lo sabes, que te pasa, te escucho un poco raro –pregunto Kai
-Yo.....estoy preocupado por Hiroto-kun –dijo por fin
-Hiroto-kun?? El guitarrista de Alice Nine? –pregunto Kai un poco sacado de onda
-Si, el mismo –dijo Reita reprimiendo una risita
-Pero que tienes tu que ver con Hiroto-kun y que le sucedió, porque estas preocupado por el? –preguntaba Kai desesperadamente
-Escucha, no te lo puedo contar por teléfono, porque no mejor haces lo posible y cancelas el ensayo de hoy y después vienes a mi departamento y te cuento o.k? Te juro que es por una buena causa –le pidió el bajista
-Esta bien, haré lo posible, dya ne –se despidió el baterista
Reita colgó el teléfono y decidió hablarles al resto de los compañeros de Hiroto, no les daba explicaciones, solo les decía que fueran a su departamento y ahí les explicaría todo.