Aun era temprano lo sabia muy bien, pero el quería estar ahí, aunque llegara dos horas antes del encuentro acortado ahí se encontraba, esperando con su eterna paciencia, bajo los abrasadores rayos del sol sentado sobre aquel columpio, dejando que viento jugara con sus cabellos que le hacían competencia a aquellos rayos solares, aquellos cabellos rubios que ese día iban perfumados y bien peinados, su banda en la frente bien colocada y pulida, ese día iba como nunca antes, solo para esa persona.
Uno de sus amigos que por esos minutos pasaba por aquel parque lo vio y se acerco, lo saludo como siempre lo había hecho, solo que sonrió con picardía al verle sentado en aquel columpio y tan bien arreglado, el solo le sonrió como el solo sabia, con animo y sinceridad, a los pocos minutos aquel amigo se fue y le deseo lo mejor.
Las horas pasaban y el solo que ese día había decidido hacerle competencia a aquellos cabellos cual rayo de sol, desapareció dejando ver que una tormenta se acercaba, pero aun así el seguía ahí, sentado en aquel columpio esperando, los minutos pasaron y la lluvia llego mojándolo completamente, fue en esos momentos cuando el se dio cuenta, nunca llegaría...esa persona nunca llego a la cita acordada...
Nunca vio llegar aquel cabello negro, nunca vio aquellos ojos negros que con dureza y frialdad en ocasiones le llegaron a mirar y que con trabajo arduo logro hacer que eso no pasara mas, no le vio llegar a ese lugar.
Aun así se encontraba aferrado a las cadenas que sostenían el columpio, dejaba que la eterna lluvia mojara su cuerpo y rostro dejando que ella misma tapara las lagrimas que caían sin poder detenerse, sus ojos azules que antes se encontraban llenos de vida y brillo, ahora eran apagados y parecían muertos, eso era lo que el estaba...muerto en vida.
En esos momentos cerro los ojos con desesperación y tomo su cabeza, quería gritar, quería correr lejos de ahí pero sus piernas no le respondían, solo sentía como la lluvia mojaba todo su cuerpo, pero en un momento lo dejo de hacer, abrió aquellos ojos y vio unos tenis rosados, los reconocía sabia a quien pertenecían, levanto la mirada y se encontró con unos ojos cafés que le miraban con dolor.
Solo escucho un "Lo siento mucho" y vio como ella se agacho hacia el y le abrazo con dolor, la conocía, sabia como era ella y la abrazo también pudiendo llorar en el hombro de alguien que podía comprender su dolor, con trabajo aquella se lo pudo llevar a su casa a secar aquellas ropas empapadas por la lluvia, con trabajo pudo hacer que dejara de llorar y pudiera dormir en el sillón de su sala, y aun con mucho mas dolor en su corazón se callo que aquella persona que el esperaba, nunca mas llegaría a el, pues ya tenia a alguien mas.