TODO POR AMOR

De pronto la puerta de la habitación se abrió y Julián quedó petrificado al ver quien entraba por la puerta, estaba preparado para enfrentar a una desconsolada Karen, pero no para un congelador e hiriente Andrés. Pensaba que ya no lo vería nunca más y mucho menos que lo escucharía, no, no quería escucharlo, sus palabras todavía retumbaban en su cabeza, no se callaban, por más que tratara, aparecían una y otra vez…

Andrés quedó parado en el pasillo y vio la hora: las 13:30, era tarde y debía llegar a su matrimonio, formar una familia y trabajar en la empresa de su padre, debía hacer lo que tenía hacer, lo que su padre le había enseñado, lo que su familia esperaba de él, debía hacer…

- Ándate Andrés… y llévate ese maldito amor a la tumba, porque aquí a nadie le hace falta.

Suspiró, no se permitiría perderlo, no ahora que lo había recuperado casi de la muerte, no ahora que estaba dispuesto a todo... Y comenzó a tejer un plan de conquista, él mejor que nadie sabía los gustos del chico y aprovecharía toda esa información para usarla a su favor, pero primero tendría que arreglar su otra vida y también pedirle perdón a otra inocente.

No quería admitirlo pero temblaba por dentro, no sabía si era miedo, ansiedad, amor, deseo y quien sabe, pero sólo sabía que todo esto era increíble, algo que tantas veces deseó y que por fin… por fin se hacía realidad. Andrés lo vio dudar y lo tomó de la mano, entregándole en su apretón fuerza y confianza.