CAPITULO IV: ATERRIZAJE FORZOSO… MI REALIDAD
Corría lo más rápido que podía, pero el número de personas que circulaban el lugar limitaban su velocidad, llevándolo a chocar de vez en vez con uno que otro peatón y a soltar leves disculpas al aire. Maldecía el momento en que el taxi tomó la ruta rápida, un accidente vial había obstaculizado la avenida por largo rato.
-Disculpe, el vuelo a Manhattan?- preguntó agitadamente al primer empleado que vio.
-Puerta 311, pero…- Una sorprendida azafata señaló la ruta, dedicándole una mirada de extrañeza que decidió ignorar por completo – Espere!...
No se detuvo, no había tiempo, hasta donde recordaba su avión salía a las dos. Su móvil era historia y pararse a preguntar la hora solo lo retrasaría más.
-Naruto…- jadeo mientras corría. Necesitaba verlo… una vez más, por lo menos una última vez…
“Tu eres todo para mi, yo no creía mas que en ti, te llegaste a convertir en mi religión”
-Su boleto por favor- La policía que vigilaba bajo la puerta alzada con el número 311 le miraba con la mano tendida, en espera de un boleto que obviamente él no tenía.
-Necesito pasar- la chica le miró raro, rayos tenía que ser breve- Es urgente, necesito hablar con una persona a bordo, se llama Naruto.
“Tu eres todo y nada mas, eras mi voz eras mi hogar en medio de la soledad, una bendición”
-Naruto?- Preguntó la joven al momento de revisar velozmente la lista de pasajeros. Le miró de nuevo – No está en la lista, aunque si me da su apellido podemos buscarle en la red electrónica, es más rápido- Un incómodo silencio, hizo que la amabilidad de la frase cambiara a notable preocupación– Esta usted bien?
Sasuke palideció de una manera preocupante. Acababa de notarlo… ni siquiera sabía su apellido – Necesito subir… - Exclamó ahogadamente… por que seguía con esto?... era un extraño…
-Es imposible, el vuelo a Florida está lleno- refirió la joven con firmeza.
-A Florida?...- murmuró confundido - No!!, es el vuelo a Manhattan de las 14:00hrs puerta 311- empezaba a enfadarse… su angustia crecía. Ahora qué diantres iba mal?, obstáculo tras obstáculo...
-Ah el vuelo a Manhattan- repitió inútilmente la chica, acaso no era obvio que era urgente? – Es ese de allá- Finalizó señalando tras él.
Sasuke giró como en cámara lenta al intuir lo que vería, un enorme nudo se formó en su garganta. Caminó hasta llegar al enorme ventanal que le separaba de la pista y no pudo evitar posar una mano él… en esos momentos sentía que era una enorme barrera invisible.
“Pero algo extraño sucedió, mi cuento de hadas ya acabo, dijiste adiós y me rompiste el corazón”
-Por qué…- Susurró. Afuera, el avión despegaba de la pista… alejándose – Por qué no me dijiste nada… por qué no te despediste de mí.
Permaneció observando hasta ver el avión desaparecer en el horizonte. Estaba hundido en un profundo vacío interno que amenazaba con desbordarle en cualquier momento. Toda esperanza de hablar con él se había esfumado.
-Por qué no me gritaste a la cara lo de Gaara… – Sasuke negó enfadado.
Pero, qué rayos iba a decirle si lo hubiera alcanzado, que Gaara era su amigo?, que su familia lo detestaba, que deseaban que nuca se casarán y que lo trataban como a un extraño en su familia?... Para que mentir… pero de haberlo alcanzado… quizás, lo hubiera hecho. Se sorprendió mentalmente al descubrir lo que pensaba, hasta donde llegaría por él… en cambio Naruto… él se fue sin mirar atrás.
“Cuanto te quiero, cuanto te odioCuanto te llevo en mis sentidos, si no te olvido es por puro masoquismo”
–Es que de verdad solo fui eso para ti?, Una cana al aire?... acaso no valía la pena?- Apretó el puño totalmente enfadado - … Joder, porque te largaste sin preguntar!!!
Sin soportar más, descargó su furia pateando su maleta con fuerza. Quería odiarlo… odiarlo era lo más rápido, odiaba haberlo embaucado, odiaba haber ido a ese table dance, odiaba las fuentes, odiaba las bodas de nuevo, el helado, la música, todo… pero…
“Cuanto te quiero, cuanto te odio, cuanto te llevo en mis sentidos, si no te olvido es por puro masoquismo”
–No puedo… - susurró al final – Quizás tengas razón… pensar que fue solo un sueño sea lo mejor…
Ignorando las curiosas miradas a su alrededor Sasuke empezó a caminar en dirección contraria. No olvidaría nada, no podría… no quería. En un sueño, uno único… en eso se convertiría ese fin de semana, regresaría a su fastidio de vida, con su exagerada familia y sus inútiles intentos de entrar a la universidad… Gaara, el era lo único decente ahí… Sonrió sarcásticamente al notar que pese a eso lo había olvidado con suma facilidad, acaso no lo quería de verdad?... Si lo quería, pero… si quería a Gaara… entonces a Naruto…
“Tu eras todo para mi desde el principio y hasta el fin
no había como definir todo este amor”
-Uchiha Sasuke? - Ante la mención de su nombre sus pensamientos cesaron. El azabache levantó la vista sin mirar realmente, conocía esa voz…– Sasuke!
En una mesa exterior de una de las cafeterías del aeropuerto, un joven de largos cabellos castaños y ojos grises con matices blancos le miraba sorprendido.
-Neji – murmuró sin ánimos. Se acercó más por educación que por voluntad. Hyuga Neji, conocido de la infancia, compañero de instituto e hijo de una de las compañías asociadas a las empresas Uchiha.
-Regresas a Japón?- preguntó el castaño invitándole a sentarse, él, agotado por sus luchas internas aceptó sin chistar.
El siempre había preferido la compañía de shino y Kiba o, en su defecto, la soledad, pero ahora… no estaba de ánimo para estar solo, aunque tampoco quisiera compañía… rayos su cabeza era un lío.
– Sasuke… - Animo el castaño al verle de nuevo con la mirada perdida.
-Hn?... si… pero, perdí mi vuelo- mencionó con apatía.
-Ya veo… ya compraste uno nuevo? – Neji preguntó con obvio interés mientras revolvía su bebida, pero suspiró resignado al verle de nuevo con la mirada perdida – Una bebida fría te despejará, espérame aquí.
Sasuke apenas si escuchó algo pero no le dio importancia. Porque diantres no dejaba de pensar en lo mismo… ah!! Quizás porque se había vuelto loco por un dobe diabólico desconocido a quien le entrego nada más y nada menos que su virginidad en solo dos días, después de olvidarse olímpicamente que tenía novio… si, quizás esa era una buena razón.
-Aquí tienes- El tintineo de los hielos en la bebida que neji puso frente a él, le regresaron de nuevo a la realidad. Miró como el castaño regresaba a su asiento mirándole insistentemente – Yo invito.- agregó.
-Gracias – murmuró agitando la pajilla en el vaso.
-Entonces supongo que no has comprado tu regreso– El castaño le miró fijo temiendo que volviera a desconectarse de la realidad si le quitaba el ojo de encima. Sasuke negó en respuesta – Bueno, tengo un asiento libre, puedes usarlo si gustas - El azabache le miró con el ceño fruncido obviamente extrañado, así que Neji decidió agregar un detalle más – Tenía pensado traer a otra persona pero, de nuevo rechazó mi invitación… ella no pudo venir – Finalizó con un leve sonrojo en sus mejillas.
-Hn… alguien especial?… - Sasuke miró como Neji carraspeó levemente y continuó con su bebida.
Sasuke también regresó la vista a los interesantísimos hielos que flotaban en su vaso, pero frunció nuevamente el seño al sentir una vibra… rara. Alzó la mirada alcanzando a ver que curiosamente Neji apartó la vista de él con rapidez
– Gracias… - Neji lo miró extrañado - por el boleto- Agregó el azabache.
-Ah?, de nada somos viejos conocidos y compañeros de escuela es normal- El castaño negaba con las manos restándole importancia al tema.
Sasuke tomó de nuevo de su bebida, rayos… otra vez esa vibra. Levantó la vista de nuevo empezando a enfadarse, un tic apareció en su ceja al ver que Neji nuevamente giraba la vista en otra dirección disimuladamente… que rayos quería? Ya le había dado las gracias no?
Un momento… ahí va la vibra de nuevo y Neji no estaba mirándole ahora, le había dejado la vista encima todo el tiempo. Volteó y se percató que varias personas a su alrededor le miraban igual, algunas con discreción y otras sin tacto, descaradamente. Su enojó iba en aumento, empezaba a sentirse como payaso de circo y realmente su repertorio de emociones estaba muy reducido, en estos momentos solo contaba con frustración, enfado e ira.
-Que pasa aquí?- soltó con claro enfado a la gente, provocando que regresaran a sus actividades inmediatamente.
-Es que llamas mucho la atención Sasuke- soltó Neji ante su sorpresa captando de nuevo su atención. Este negó con una leve sonrisa al ver su rostro – Sinceramente tampoco lo había notado hasta hoy, pero te ves curiosamente bien… para serte franco brillas.
-Eh?- El total desconcierto en el rostro del azabache no hizo más que desatar una leve carcajada en el castaño.
-Tu pelo, tu piel, pero especialmente tus ojos… brillas- El castaño rió de nuevo al ver que el azabache seguía exactamente igual – Realmente te han atrapado Sasuke.
-…- Genial, ahora era mudo. Pero que responder, no entendía que se supone que significaba eso, bueno quizás ahora que el “brillaba”, seguro y se podía vender de generador eléctrico o algo así, seguro y en las vegas pagarían bien. Pero… atrapado?
-Toda la escuela habló de ti, hace un mes que sales con Gaara no?- Y otra vez la burra al trigo, Sasuke giró la vista… y que nadie se atreviera a decir que estaba huyendo de nada – Bueno pues desde que te conozco no te había visto así… estás en las nubes y radiante, ante la gente en general solo te hace ver más atractivo… Se pelearon?
-Que te hace pensar que estamos molestos?- mencionó con falso poco interés pero sin volver la mirada.
-Bueno tu actitud, estas ido… y no quiero pensar que haces en otro país – el castaño agitaba su pajilla al aire despreocupado – Pero en general te ves bien, eso me hace pensar que realmente estas enamorado - finalizó con su explicación y su bebida.
-Desde cuando eres tan sensible y observador?- el azabache le miraba con un leve tic en la ceja y levemente sonrojado ante semejantes comentarios… disparates!!... Uchiha Sasuke enamorado, si como no, y de hecho, quería estallar en carcajadas pero, por algún extraño motivo, no podía.
-Digamos que… me han contado del amor- Una leve sonrisa y una mirada soñadora aparecieron en el castaño– Darías todo por él, no?
-Si…- murmuró sin pensar, pero respingando al momento siguiente al notar su error – Digo!!… no!! - sacudió la cabeza frustrado, la imagen del dobe no debía estar ahí al momento de responder… hasta en su mente era un entrometido… pero – Quizás… - finalizó torciendo el labio y un leve sonrojo asomó en sus mejillas. Neji esbozó una sonrisa de lado al ver satisfecho su interesante reacción, para él eso era un SI más que confirmado.
0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0
Era su imaginación o la temperatura bajaba en el pequeño cubículo del baño donde se hallaba. Que importaba, estaba más concentrado por cambiar sus vendas que por verificar el clima del avión.
-Tsk… - Una mueca de dolor mal contenida apareció en su rostro al quitar la última vuelta del vendaje. Analizó con rapidez los cortes que se había hecho en la mano derecha, al descargar su furia contra la rockola - maldito aparatejo… y solo me dieron dos vendas en el hotel.
Sacó con rapidez la última venda de su chaleco, rompiendo el empaque a duras penas con la boca, pero todo intento de vendar tuvo que ser reprimido al ver como el piso empezaba a ser inevitablemente goteado con aquél fluido carmín.
-Kuso…– Abrió el grifo del lava manos empapando su mano con rapidez, limpiando los restos de sangre en ella. Secó con cuidado y miró mejor sus heridas– No son muchas… y no son profundas, porque escandalizan tanto ´ttebayo.
Empezó a vendar de nuevo, asegurándose de presionar los puntos que más sangraban. Al fin terminado, recogió con rapidez su desastre borrando sus rastros de sangre del cubículo. Tomó la perilla de la puerta para salir cuando un mareo le hizo ver de cabeza la habitación.
-Quizás deba sentarme- Como pudo se sentó al piso cubriendo sus ojos con su mano izquierda. Cerró los ojos tratando de relajarse, pero esa rockola se lo merecía, pensó enfadado y sin abrir los ojos- La canción estaba horrible… no me dejaba terminar de escribir.
Descubrió sus ojos, dejando el dorso de su mano en su frente. Miró al techo analizando su situación visual… genial, ahora veía lucecitas parpadeantes… le recordaban aquél amanecer en la fuente… con Sasuke. Pero la culpa la tenía él, y solo él, al haberse enamorado de nuevo de quien no debía…
-Sasuke- susurró. Cerró los ojos de nuevo deslizando su mano por su rostro, acarició sus labios lentamente con la yema de sus dedos – Suave… gentil… - Continuó cuesta abajo llegando a su cuello, mordiendo levemente su labio inferior al acariciar los lugares que Sasuke le había besado y marcado, porque las había visto al estar frente al espejo.
Abrió los ojos rápidamente, apartando sus dedos de su piel, debía dejar de soñar. Oh, oh, de nuevo su fastidiosa y resucitada conciencia… Y si realmente fue sincero?… Lo viste, lo sentiste, era su primera experiencia y se dejó hacer por tí… No pudo evitar reír tristemente, genial… su conciencia era una ilusa cuando debía ser realista, y una aguafiestas santurrona cuando realmente deseaba hacer locuras marca Naruto, de esas que solo a él se le ocurrían.
-Estaba ebrio… además… - Afiló la mirada recordando- “sasu chan te compré ropa, muero por ver cómo te queda, aunque creo que te verías mas sexi sin ella” - continuó débilmente –“te invito a cenar, creo que nos debemos una… “- se mordió el labio inferior pero ahora por frustración – “… una noche real”, “ sasu chan te… te… “- No pudo continuar recitando los mensajes, cerró los ojos con fuerza… su conciencia nuevamente estaba en shock… bueno, por lo menos se había callado.
Como fue tan tonto para no sospechar que tendría pareja. Tenía muy claro que un tercero en discordia siempre salía más lastimado que los otros dos, sin una garantía de que los que quedaran juntos realmente se amaran.
Además, ante la remota posibilidad de que Sasuke hubiera sido sincero en su entrega, definitivamente eso le dejaría un mal sabor de boca… nuevamente sería el villano de la historia, aquél llega y destruye todo a su paso… No… con recordar lo que había hecho a Deidara era suficiente, no lo haría de nuevo.
-Lo siento… Gaara de verdad lo siento– Susurró al aire. Sus ojos ya no le hacían jugarretas así que se levantó sin problemas, saliendo al fin del baño – Ahora somos extraños… tengo que olvidarte Sasuke.
0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0
La caída de las sales aromáticas al agua difundía rápidamente su aroma en aquél jacuzzi. Removió levemente el agua con una mano mezclando los remanentes y regresó a la habitación. Una leve sonrisa asomó su rostro al ver a su amor sentado de espaldas cerca del buró de la cama. Se acercó por detrás sin ser notado, rodeándole cariñosamente en un suave abrazo.
-Shino… que pasará cuando regresemos?- Kiba miraba con interés un fajo de papeles en sus manos pero sonrió levemente al sentir como el morocho depositaba suaves besitos en su espalda.
-Estamos juntos… eso me… basta…- respondió entre beso y beso.
-Siento ser tan aguafiestas- Respondió dejando de lado los papeles, antes de girar y devolver el beso a su morocho, besándole con dulzura y suavidad.
Repentinamente aquél fajo de hojas resbaló definitivamente, extendiéndolos por la alfombra del lugar, llamando la atención del castaño. Shino sonrió al notar aquél detalle así que se separó depositando un suave beso en la frente de Kiba.
-Guárdalos bien – Añadió el morocho mientras soltaba al castaño, quien le dio un corto beso de piquito en agradecimiento.
Kiba comenzó a recoger los papeles uno a uno, pero al recoger uno en particular esbozó una amplia sonrisa mirando como Shino también rió bajito al ver la dichosa hojita – El baño está listo- dedicó antes de abandonar la cama en dirección al jacuzzi.
-En seguida te alcanzo-Kiba terminó de su tarea guardando con sumo cuidado aquellos documentos en el interior de su maleta. Se desplazó al fin tranquilo a la sala de baño, relajándose ante el aroma que llenaba la habitación, despojándose de la bata que le cubría – Crees que hicimos bien en traerlo con nosotros?- Exclamó al momento de entrar al Jacuzzi.
-Supongo que fue lo mejor- mencionó Shino restándole importancia al supuesto papel, mientras se acercaba al castaño y colocaba una mano a cada lado del borde de la bañera, acorralándolo. Solo tenía ojos para Kiba en esos momentos.
-Y es que realmente… terminamos ahogados, pero… Sasuke y Naruto…- Exclamaba entre suspiros Kiba ladeando el cuello al sentir como Shino descendía por él, besándolo y empezando a repartir caricias por su cuerpo.
-Crees que recuerden todo?- Mencionó Shino repentinamente intrigado, dejando sus asuntos momentáneamente, captando el interés de Kiba, mirándose fijamente y totalmente serios.
-Como olvidarían!!- Dijeron a coro antes de empezar a reír como si les hubieran contado el mejor chiste del mundo.
-Entonces por qué les dejaste una carta?- Mencionó Shino retomando su juego de caricias mientras Kiba le abrazaba como osito de felpa, totalmente sonrojado.
-Por si…. Acaso… Mmmm… vas bien…- soltó Kiba mientras rodeaba el cuello de Shino con ambas manos, dejando que él le levantara con facilidad abrazado a su cuerpo, mientras él daba leves mordidas a su cuello. Quedó finalmente apoyado a la pared del jacuzzi– Hazlo ya…- le susurró al oído entre gemidos.
Kiba decidió interrumpir la “interesante” conversación para besarle de nuevo mientras repartía caricias por la espalda de su esposo y rodeaba su cintura con ambas piernas.
Ambos sabían que el agua les permitía saltarse el paso de la lubricación, así que sin dilación, Shino penetró de una sola estocada al castaño, haciendo que ambos jadearan extasiados ante el contacto. Se miraron por unos instantes y Kiba rió traviesamente al ver que Shino esperaba pacientemente por él.
-Ya…- murmuró feliz.
Shino le devolvió el gesto besándole de nuevo antes de empezar con las embestidas. El tono de los gemidos que emitía, aumentaba en fuerza y rapidez, acompasados con las penetraciones y estimulados por la sensación que el agua provocaba en sus febriles cuerpos, haciendo que en poco tiempo Shino tuviera que empezar a estimular el miembro de Kiba. Los espasmos de placer que sentían les hicieron llegar al clímax en sincronía, dejando escapar sus nombres entre jadeos.
-Gracias… Shino- susurró Kiba sonriendo, abrazándose fuertemente al morocho.
-Te amo y lo sabes- respondió Shino, aferrando también a su esposo pero este de forma protectora. Repentinamente, unos suaves sollozos en el cuarto hicieron que Shino se separara de Kiba con rapidez para mirarle el rostro – Te lastimé?
-Shino, crees que estamos perdiendo la pasión de nuestros encuentros?- exclamó Kiba con enormes cataratas cayendo de sus ojos, haciendo que una gota resbalara por la frente del morocho – Parecemos un matrimonio de viejecitos en lugar de recién casados!!!- exclamó a todo pulmón antes de soltarse en llanto a moco tendido y cubriendo su rostro con ambas manos.
-Recuerdas cuando te me declaraste?- Respondió Shino sonriendo ampliamente mientras retiraba las manos de Kiba de su rostro para entrelazarlas con las suyas.
-Si… en tu cumpleaños 12… cuando te regalé... Esa granja de hormigas- respondía entre sollozos.
-Recuerdas cuando lo hicimos por primera vez?- Shino besaba con ternura el rostro de su amor borrando el rastro de lagrimones, reemplazando su llanto por pequeñas risas ante las cosquillas que sentía por las dulces caricias y desencadenadas por los recuerdos.
-Como olvidarlo, escapamos de ese odioso evento de publicidad de comida para gatos que había organizado la corporación… era mi cumpleaños 14 y mis padres no podían estar conmigo- mencionó el castaño aferrando el rostro de su esposo entre sus manos devolviéndole una bella sonrisa – Me llevaste a la exposición de mangas… y me regalaste mi preciada colección de Dragon Ball.
-Sabes que en este hotel?- retomó Shino con intriga repentina – los ascensores tienen las paredes forradas?
Kiba le miró totalmente boca abierta – Voyerismo? – susurró esbozando una sonrisa totalmente pervertidilla - Ese mi papi!!! Por eso me encantas!!! – Exclamó el de marquitas con total emoción antes de besar de forma fogosa al morocho.
Shino sonrió divertido al ver como Kiba salía del baño a la velocidad de la luz llamándole desde la habitación. Definitivamente, esa la parte que más le encantaba de su adorado niño… su alegría.
0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0
Asomó su rostro al salir del avión. El frío del lugar no dudo en hacerle estremecer ni un momento. Indudablemente la temperatura había descendido en comparación con las que mantenía las vegas. Sin equipaje que buscar, se limitó a sacar una enorme sudadera de su nueva mochila, dándole dos beneficios, proporcionarle algo de calor y encubrir su reciente accidente, pues las mangas de dicha prenda rebasaban con facilidad sus manos. Regresó la mochila al hombro, desplazándose a la terminal del aeropuerto.
-Espero que no se haya olvidado de mí- mencionó mientras buscaba con la mirada. Una sonrisa afloró en su rostro al ver una mano agitarse al aire a unos metros de la entrada – Kisame!! – Exclamó emocionado encaminándose con rapidez.
-Naru chaaaannnn!!!, te extrañamos mucho!!!- El piel azulada le aferró en un posesivo abrazo de oso haciendo que unas líneas azuladas surcaran el rostro del rubio – Ah perdón, ja, ja, ja – recapacitó dejándole espacio para respirar.
-Yo también les eche de menos – agregó feliz el oji azul dedicando una sonrisa zorruna a su amigo, pero nuevamente la sorpresa surcó su rostro al ser nuevamente abrazado por el grandote, pero ahora de forma… melancólica? – Pero ya estoy de vuelta – Una gota resbaló por la frente del chico al ver que no se movía - todo estará bien… kisame? – Agregó al ver que no le soltaba.
-Perdón nuevamente Naru chan, es la emoción de los reencuentros y todo eso, tu sabes – Kisame empezó a reír sonoramente ante la extrañeza del oji azul – Nos vamos?
-Si – dedicó con su renovada sonrisa el pequeño al momento de empezar a seguirle al exterior.
Caminaron al estacionamiento saliendo en poco tiempo del aeropuerto, platicando acerca de los lugares que había visitado en su pequeña travesía así como de lo mucho que la banda lo había extrañado en esos días de ausencia. Naruto escuchaba atento con una enorme sonrisa, él solía visitar con frecuencia la universidad, así que en realidad también había pasado mucho tiempo con Kisame, konan y Tobi, todos lo trataban como a su hermano pequeño. Eso le hacía feliz de muchas maneras, le hacía sentir que tenía amigos y una pequeña familia en quien apoyarse.
-Paremos un rato aquí – Mencionó el piel azulada sacándolo de su trance. Aparcando el vehículo en las orillas de una gran arboleda.
-El parque central?- Naruto miró con extrañeza a su amigo quien le esbozó una amplia sonrisa.
Naruto miró sorprendido a su alrededor, dignamente camuflajeado entre la espesura del parque, un kiosco muy iluminado con un gran barquillo de adorno, se alzaba en el centro, rodeado por múltiples banquitas. Lo único que llamó su atención fue el hecho de estar casi completamente vacío, aunque quizás por la hora y el frío de la noche, era lógico que un helado a pleno parque abierto, no apeteciera a muchos.
-Lindo no?- Kisame le sonrió- Los muchachos lo descubrieron la semana pasada, y lo primero que pensamos, fue que no podías irte sin probar un helado de estos.
-Gracias- también río.
Inesperadamente, un rápido vuelco a su visión le hizo tener que sujetarse de lo primero que pudo para evitar caer, agarrando así lo más cercano que tenía a él, a Kisame.
-Naru chan!!!- un sorprendido kisame le ayudó a sentarse en una de las bancas cercanas- Que paso?... estás pálido…
-Lo siento-murmuró el ojiazul mientras soltaba a su amigo para aferrar el borde de la banca con fuerza, su visión empezaba a recuperarse, aunque con lentitud- Estoy bien.
-Naru chan… te has cuidado?
El rubio le miró súbitamente, había captado totalmente el deje de preocupación en sus palabras, sabría acaso algo de su salud?... sabría algo de los medicamentos que tomaba?
-Yo…- Que responderle… y si metía la pata?. Además, ya estaba advertido, si dejaba las medicinas podría recaer, eso se lo habían dejado claro. Para su alivio, Kisame solo le sonrió – Estoy bien.
-Espera aquí, traeré tu helado.
Naruto miró que Kisame llegaba al kiosco haciendo su pedido, pero su mente continuaba divagando en le mismo asunto… quizás si debería comprarse las pastillas después de todo.
-Toma- Kisame le extendió un barquillo sentándose a su lado, mientras probaba de otro.
-Gracias- No fue problema cambiar el tema mientras comían, pero… -Que tal está suigetsu, seguro que no le molesta si voy con él?- En verdad sentía que estaba causando muchas molestias.
-Suigetsu, al igual que todos nosotros, te queremos mucho Naru chan- El piel azulada devoraba lo último de su barquillo- Lo que hacemos es por que queremos tu bienestar.
- Y…- Naru le miró tratando de restarle importancia al tema, pero obviamente ansioso- Pudiste sacar algo de mis cosas del departamento?
El incómodo silencio que apareció después de la pregunta, le hizo pensar que quizás las pastillas esperarían, al parecer empezaría de cero y no le quedaba mucho dinero. Suspiro resignado, devorando también lo que quedaba de su helado, el cual por cierto… estaba insípido.
-Hn?-Un repentino intruso en su helado le hizo volver de su boca, dejando caer en su mano izquierda un pequeño objeto- Había algo en el helado- Miró que Kisame solo rió sin sorpresa y sin girar el rostro. Naruto por otro lado miró mejor, en su palma hallaba un anillo de oro blanco, algo ovalado y grueso pero con múltiples piedras blancas y azules al frente… debía admitirlo, aunque era grande, era bonito y con estilo – Y esto?...
-Bueno, hora de irme- El desconcierto aumento en el rubio al ver como su amigo se limitó a levantarse desperezándose en el camino mientras se alejaba – Esperaré cerca.
-Espera!!!- Naruto se levantó tras él con intenciones de sacarle una buena explicación, pero todo intento de avanzar fue llevado al fracaso al ser fuertemente abrazado por detrás… oh, oh, es aroma… esto no podía estar pasando… lo habían entregado – Suéltame- Murmuró apenas… trataba de calmarse sintiendo claramente como la persona tras él negaba con un leve cabeceo resistiéndose a liberarlo -Itachi suéltame por favor.
-No- susurró tras él aferrándolo con más fuerza – Y no culpes a Kisame, yo le pedí esto… y ese anillo es para ti.
Sus azules orbes se ocultaban tras su flequillo… como podía tomarse las cosas con tanta calma… esto no debía ser así, para ninguno de los dos.
-Por que me lo das a mí- Artículo al fin entre susurros – Pídeselo a Deidara… esto es innecesario, si el problema es el contrato, nos casamos y te doy el divorcio en seguida… lo demás sale sobrando.
-No…. No quiero eso.
Era imposible seguir calmado, como podía decirle eso. Itachi le giró provocando que sus zafiros le miraran con enfado, que lo creía un niño estúpido acaso?… Rayos, su visión empezaba a fallar de nuevo, pero ahora tenía otros asuntos más importantes que dejar muy en claro.
Naruto negó con la cabeza extendiendo el anillo en su mano izquierda. Itachi lo tomó. Un gesto de sorpresa asomó en el rostro del rubio al sentir que le abrazaba de frente, pero lo separó al instante usando de forma inconsciente su mano derecha, al mismo tiempo que clavaba su mirada al piso… algo no iba bien.
-Naru chan… esto no es por el contrato- Itachi aferró su brazo izquierdo – En verdad quiero intentar hacerte feliz- Apartó su mano derecha de entre ellos, tomándola con suavidad... Naru no se resistía… algo no iba bien… no quería seguir ahí pero – En vedad te quiero Naru.
Imposible de evitar, Itachi soltó su mano izquierda para jalarle del mentó depositando un suave beso en sus labios. Naruto solo aferró con fuerza lo que tenía en manos, hasta su conciencia estaba de acuerdo, ambas sabían que algo iba realmente mal. Itachi se separó…al parecer también empezaba a notarlo… Naru solo le aferró con mayor fuerza provocando una mirada de preocupación en al azabache.
-Naru chan?- Si, Itachi estaba preocupado.
-No me sueltes – Susurró apenas, rápida y dificultosamente. Itachi empezaba a asustarse – Está muy oscuro… Me hundo.
-Naru!!!
Itachi alcanzó a sujetarlo a tiempo cuando cayera inconsciente, dejándolo de rodillas con el pequeño sentado en sus piernas.
-Naruto!!! – El azabache soltó al fin sus manos para levantarlo mejor, pero un llamativo tono en sus propias manos le hizo estremecer – Sangre- susurró. Buscó con rapidez en el rubio, hallando sin dificultad la empapada manga que cubría su mano derecha.
Sin perder más tiempo lo tomó en brazos, kisame estaba en el estacionamiento, debía darse prisa.
-Diantres... recayó- Murmuró sin detenerse- Maldición!!!
0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0
El hecho de estar al fin en Japón o que la retaguardia les doliera terriblemente después de un día entero de viaje, no parecía ser motivo suficiente para sacar a Sasuke de sus ideas, eso comprobó Neji al tener que recordarle que no podían irse del aeropuerto sin antes recoger su equipaje.
Y es que la tempestad de ideas que azotaban la mente del azabache no cedían, mezclando terriblemente unos hermosos zafiros que adornaban una cálida sonrisa con un traicionado y enfadado pelirojo. Se supone que a Naruto jamás volvería a verlo, lo había botado después de haber hecho que perdiera la cordura por un fin de semana… pensar eso le dolía, pero no podía descartar esa opción, de que realmente para él no hubiera significado nada. Por otro lado… Gaara, pese a ser serio y muy hermético, sabía que guardaba bellos sentimientos en su interior y realmente estaban cómodos juntos, tenían cosas en común.
Una gota resbaló por la frente de Neji al ver como Sasuke clavaba la mirada al techo por enésima vez, pero se sentía mal… por que no podía sentir lo mismo por Gaara?... SU NOVIO… y que diantres iba a decirle cuando lo viera.
-Sasuke- El castaño tuvo la necesidad de codearlo para hacerlo reaccionar. Frente a ellos un guardia con la mano extendida esperaba molesto – Tu pasaporte- Susurró Neji al ver que seguía estático.
-Hn?... ah sí- Sasuke extendió su identificación. Solo deseaba recoger su equipaje y encerrarse en su habitación; la escuela debía esperar, además… ahí estaría Gaara.
-Sasuke?- El policía le miró extraño- Uchiha Sasuke?- El azabache asintió enfadado, ese tipo interrumpía sus importantes depresiones internas – Está usted detenido- Soltó el policía al momento de chasquear los dedos al aire, ante la atónita mirada de ambos.
-Un momento!!!- Sasuke ahora si estaba enfadado – Pero qué?!!!- Un enorme temblor recorrió el cuerpo del azabache al ver abalanzarse sobre él una montaña de policías, derribándolo al instante y dejándolo sepultado debajo de la pila de enormes guardias- Que diantres pasa aquí!!!!
-Ya saben a donde llevarlo- Exclamó el primer guardia mientras atendía su móvil.
-Por qué lo detienen?- Neji miraba asombrado como la enorme pirámide de guardias se llevaban a un furibundo Sasuke.
……
Un sonoro portazo tras ser arrojado con “delicadeza” al interior de la habitación, le dejó totalmente solo y prisionero en…
-Está… es una prisión?- Exclamó sasuke ahogadamente.
Frente a él, en su prisión, contaba con juego de sala, centro de entretenimiento, frigo bar, y cama entre las mas llamativas. Se dejó caer agotado en el comodísimo sofá de piel, mientras encendía el televisor, solo para ambientar, por que en realidad no tenía cabeza para entretenerse.
-Estás cómodo eh?
El azabache se sentó con rapidez mirando perplejo como un sonriente Neji cerraba la puerta tras él, tomando asiento en otro sofá.
-También estás detenido?- Preguntó Sasuke con interés, pero una leve carcajada del castaño le confundió aún más.
-No vas a creerlo Sasuke, mira- El oji blanco señaló un reportaje en la televisión.
-“Y regresando al tema, aún no se sabe nada acerca del paradero de los tres jóvenes desaparecidos desde el viernes. Responden a los nombres de Uchiha Sasuke, Inuzuka Kiba, y Aburame Shino, hijos de las familias de dos de las compañías más grandes en Japón: INDUSTRIAS INUZUKA-ABURAME y CORPORACIONES UCHIHA. Aunque se han desmantelado varias asociaciones repentinas que han pedido rescate, no se descarta el secuestro, aunque la posibilidad de fuga del hogar cada vez convence más a los expertos en el tema”.
Sasuke miraba boquiabierto como cambiaban de la pantalla una fotografía de los tres, para pasar varias tomas de la escuela a la que asistían.
-“Aquí en vivo desde la escuela privada Konoha School, entrevistando a uno de los compañeros de los jóvenes”- Neji casi muere de un ataque de risa, mientras que a Sasuke casi le daba un paro, al ver a Shikamaru en la Televisión.
-“Que opina acerca de la desaparición de tres de sus compañeros de clases?”.
-“Tsk…” – Lo aburrido hasta en la tele –“Que problemático, ya nos entrevistaron tres veces… bueno, como ya he repetido antes, son amigos así que yo apoyo la teoría de fuga del hogar y viva la parranda”
-“Gracias, bueno, ahora tenemos a dos hermosas jovencitas de primer curso, que dicen ser comadronas, ejem, quiero decir conocedoras del tema”- En la pantalla asomaban una rubia oji azul y una peli rosa de verdes esmeraldas- “Bueno chicas que opinan de esto?”
- “Kyaaaaaaa!!!!!!, Sasuke Kun regresa!!!!, tu club de Fans te apoyara hasta la muerte pero vuelve!!!!”- Ambas ondeaban una manta con corazones con la foto del azabache impresa en la tela.
-“ Bueno ahora vayamos con el compañero Rigo san”- Cambiaban la toma a un lugar que Sasuke reconoció inmediatamente haciendo que se pegara de más a la pantalla de plasma.
-“Aquí Rigo San en vivo desde Residencial Konoha, hogar de las familias Uchiha, en el hogar de Uchiha Fugaku y su adorable esposa Mikoto”- La madre de Sasuke lloraba a mares en el sofá mientras su padre palmeaba su espalda en consuelo.
-“No se que hicimos… mal, snif…. Sasuke vuelve”- Mikoto volvía al llanto.
-“Bueno también nos acompaña Aburame San, díganos Sr. Cree que su hijo volverá?”
-“…”- Solo en silencio y con sus típicas gafas, si estaba tal y como Sasuke lo recordaba, solo que ahora una enorme aura depresiva detrás parecía habérsele pegado con cola loca o algo más potente aún.
-“Se nota que esta muy preocupado eh?, bueno vamos con la Sra. Inuzuka, Sra usted…”
La televisión fue repentinamente apagada ante la sorpresa de ambos jóvenes que giraron contemplando en la puerta a un peliplata cuyo ojo izquierdo estaba cubierto por un parche, y con una enorme bufanda tapando la mayor parte de su rostro.
-Kakashi sensei- Neji le miró con leve sorpresa, mientras el rostro de Sasuke aún era un poema.
-Sasu-chan!!!!!-El peli plata se abalanzó a llorar a moco tendido hacia el azabache, pero siendo rápidamente recibido por el puño cerrado de un recién reaccionado Sasuke.
-Que no me digas así!!!- Sasuke se cruzaba de brazos totalmente enfadado mientras Kakashi sobaba su adolorida nariz- Y dime que significa todo este teatro!!!
-Eso quisiéramos saber nosotros, donde estuviste todo el fin de semana?.
Una gota resbaló por el rostro de Kakashi y Neji al ver como una intensa aura depresiva crecía consumiendo a Sasuke en su interior en cuestión de segundos.
-Wari, wari, “sasu chan”, no me digas si no quieres- el peli plata tembló al ver como el aura cambiaba de depresiva a asesina- Gomen “sasuke”, pero por lo menos hubieras avisado que te ibas.
-Pero se supone que Kiba y Shino avisaron a papá que me iba con ellos- Sasuke se justificó recordando los sucesos del jueves por la noche.
*+*+*+*+*+*+FLASH BACK*+*+*+*+*+*+
Los tres caminaban a la salida del instituto llegando en instantes al auto de Shino.
-Bueno, entonces a las Vegas!!!!!- Kiba animaba eufórico desde el asiento del copiloto.
-Esperen!!, yo aun no compro mi boleto!!- Sasuke asomó al frente del vehículo al ver que tomaban la desviación al aeropuerto.
-No hay problema- Shino sacó de la guantera tres boletos dejando dos en manos de un sonriente Kiba y uno en manos de un asombrado Sasuke.
-Pero…- El azabache miraba la hora de salida – Ni siquiera me dará tiempo de hacer mi equipaje.
El auto aparcó ya en el aeropuerto y una gota resbaló por el rostro de Sasuke al ver sacar a sus amigos el equipaje de la cajuela dándole una maleta a él.
-Es la ropa de dejas en mi casa cuando te has quedado a dormir ahí y algunas nuestras, solo iremos tres días, así que relájate – Kiba comenzó a caminar hacia el aeropuerto haciendo que Sasuke le siguiera de prisa mientras Shino entregaba las llaves del auto a un joven que pasaba por ahí, alcanzándolos en breve en los pasillos del lugar.
-Por lo menos avisaré que salimos- Sasuke hurgó entre sus ropas y unas líneas azules surcaron su rostro al no hallar su objetivo – Eh… Chicos han visto mi celular?
-Oh no Sasuke!!!- Kiba le tomó de los hombros zarandeándolo de atrás a adelante mientras Shino guardaba “algo” en su bolsillo – Si no tienes cuidado pueden robarte todo en lugares tan concurridos como este!!, pero no te apures que vienes con papi y mami!!!
-Nos vamos?- Shino señalaba una bocina en las cercanías que anunciaban la salida de su vuelo al terminar de documentar su equipaje.
-Pero no he avisado!!- Sasuke se safó del agarre de kiba empezando a enfadarse.
-Tranquilo Sasu chan- Ahora el azabache era empujado por el pasillo mientras Kiba se colocaba el manos libres- Hola?, si?.... Fugaku san?.... Kiba, Inuzuka Kiba… solo para avisar que Sasuke pasará el fin de semana conmigo… si, y con Aburame Shino… no, salimos a Estados Unidos… no, es viaje de placer… si, el lunes al medio día, hasta entonces, chiao!!!
-Boletos- Shino señaló a la chica que pedía los pasajes para entrar al avión, Kiba se los entregó y ambos miraron a Sasuke sonrientes y brillando.
-Esta bien, estoy conforme- Dijo resignado al ver como ambos subían por las escalerillas, entregando su boleto para empezar a seguirles- Pero… por que siento que algo se me escapa…
*+*+*+*+*+*+FIN DEL FLASH BACK*+*+*+*+*+*+
Neji y Kakashi retrocedían empezando a temer por sus vidas al sentir asfixiarse dentro de la enorme aura que emanaba de un sombrío Sasuke, quien murmuraba cosas incomprensibles.
-Eh, Sasuke- Kakashi trataba de acercarse cubriéndose aún más con su bufanda, quizás aquél gas fuera tóxico o algo así- Tranquilo, aún así, que nunca vieron la televisión o notaron las llamadas perdidas?
-Hn?- Sasuke recuperó al instante su actitud fría y calculadora empezando a dar vueltas alrededor de la habitación, y al parecer después de unos angustiosos instantes de meditación interna soltó entre sorprendido y aliviado- No todas eran de Gaara?
-Gaara?- repitieron a coro ambos presentes.
-No creo, bueno ya lo hablas con él después, entonces por que no respondiste el móvil?- Kakashi se mostraba realmente interesado, mientras Neji sonreía empezando a comer los bocadillos de la mesa, esto realmente sonaba interesante.
-Bueno…- susurró Sasuke con un leve puchero en su rostro- Mi móvil es historia, así que no los leí todos…- finalizó girando para evitar que miraran un leve sonrojo en su rostro.
-Pues que le pasó a tu móvil?- Kakashi y Neji retrocedieron de nuevo al ver una discreta mirada asesina en el azabache… pregunta equivocada- Es decir… entonces te fuiste con Shino y Kiba, ellos donde están?
-Estarán bien- finalizó Sasuke como si nunca hubieran mencionado nada y obviamente más tranquilo- Quiero ir a casa, papá y mamá deben saber que estoy bien, y avisar a los demás que el teatrito del secuestro, parranda o lo que sea ese, se terminó.
-Claro- Kakashi reía nervioso secándose el leve sudor con insistencia- Neji, vamos de paso, te llevamos?
-Te lo agradezco- Neji volvió a mirar levemente al azabache al salir de “la prisión” ahora sin problemas, pues según la seguridad del lugar era para detenerlo mientras avisaban a su familia si los veían por ahí, lo demás era faena y media.
En poco tiempo salían los tres a la avenida principal en busca del auto de Kakashi, cuando… Una gota resbaló por la frente de los tres al ver como frente a ellos circulaba un pequeño carrito con el altavoz a todo lo que da.
-“Extra, extra!!! Fotografías a colores, fotografías a colores!!!, Aparece el primero de los tres desaparecidos del fin de semana!!!, compre su periódico”
-Las noticias vuelan no?- mencionó un sorprendido Neji mientras los tres seguían aun con la vista a la carcachita que doblaba a la esquina mientras era seguida por una multitud embravecida- Yo quiero Uno- Neji desapareció en instantes regresando al minuto con una enorme carcajada y el periódico entre sus manos.
-Que dice?- Kakashi y Sasuke también se acercaron al dichoso periódico.
Kakashi tuvo que ahogar una carcajada mientras sasuke afilaba la mirada al ver el primera plana, donde casi toda era abarcada por su fotografía, en ella un Sasuke con un gesto totalmente idéntico con el que miraba la foto, se hallaba de pie en una tarima, con una VERGONZOSA banda en su cuello que marcaba “SEXAPEAL KONOHA SCHOOL” y otra encima que marcaba “TOKIO IDOL”
-Eh sasuke- mencionó Neji aun entre risas- No son las bandas que quemaste tras la escuela una vez terminaron los eventos?
-Quien diantres tomó la foto!!- Sasuke arrebató el periódico a Neji, quien por obvias razones no opuso resistencia mirando aun divertido como el azabache descargaba su furia contra el inocente periódico- Pero lo que es más, quien diablos le dio esta foto al periódico!!!
Una risa mayor apareció en el rostro de Neji al ver a Kakashi del otro lado de la calle, mientras les gritaba que el enorme tráfico de la ciudad no les dejaría cruzar por el momento.
-Lo voy a matar- murmuraba Sasuke mientras esperaba el verde del semáforo- Y se hace llamar mi tío… lo repito, mi familia está loca… quizás si debí desaparecer….
Después del que Kakashi escapara milagrosamente a la venganza de Sasuke y Neji lograra llegar a salvo a su casa, aquél auto llegaba al fin a la casa principal de Residencial Konoha, y ante la sorpresa de Sasuke tanto su padre y madre esperaban ansiosos y felices en la puerta.
-Sasu- chaaaaaaannnnnn!!!
El azabache tuvo que reprimir todo intento de huir definitivamente, soportando la sarta de besos y abrazos que le brindaron sus “exagerados” padres antes de lograr entrar a la casa, lo único que lo aliviaba era que su objetico final estaba cerca… muy cerca.
-Me voy a mi habitación- agregó al fin después de una corta y resumidísima explicación a su familia, donde incluyó la leve mención de que Kiba y Shino no volverían mientras, pero que estaban bien… nada más.
Sasuke respiró al fin tranquilo al entrar a la seguridad de su habitación, pero todo asomo de la misma se esfumó con la misma rapidez al escuchar cerrarse la puerta detrás de él. Tragó pesado girando a la puerta que ahora hacía parecer su refugio como un obvio calabozo… y el piso a sus pies desapareció al encontrarse cara a cara con esas verdes esmeraldas fijas en él.
-Sasu!!!- Gaara se abalanzó a él aferrándolo en un fuerte abrazo, mientras Sasuke sentía que el aire le faltaba… su boca estaba seca… que hacía que hacía… que le iba a decir…
-…- Genial, ahora agregaba mentalmente… como se lo iba a decir si era mudo… joder su vida apestaba.
0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0.o.0
Se removió un poco buscando calor sintiendo que su cuerpo aún dolía, temblaba un poco y el frío que sentía se negaba a irse. Abrió los ojos comprobando que aún no era de noche. Se removió de nuevo provocando que los brazos que lo aferraban le soltaran para dejarse acomodar con libertad. Giró clavando sus azules orbes en esa oscura y tranquila mirada.
-Todavía tienes frío Naru chan?- Dedicó entre susurros el azabache. Naruto solo asintió en un cabeceo. Sin más, Itachi se levantó colocándole en poco tiempo una nueva manta encima – Mejor?
-Le tocan las medicinas – El rubio miró con sorpresa que Kisame se levantaba de un sofá cercano a la cama. Eso no se lo esperaba, según él, su amigo se habría marchado del departamento al anochecer.
Sin pronunciar palabra, Naru se sentó en la cama ignorando el dolor de su cuerpo. Itachi le pasó una a una, cuatro tabletas, haciéndole beber agua con insistencia para luego mirar de nuevo que las vendas en su mano estuvieran limpias y comprobando que la herida donde había tenido el suero no sangrara.
Naruto miraba con detenimiento los cuidados del azabache… por que seguía aferrado a cuidarlo. Después de haber perdido la conciencia la noche anterior, había estado hospitalizado, pero después de una transfusión por Hemorragia y anemia severa, y surtiéndolo de un nuevo armamento de medicamentos habían consentido darle el alta. Sin embargo el frío y el dolor en su cuerpo parecían haber llegado para quedarse, haciendo que Itachi no le soltara, aferrado a la idea de darle calor propio, aunque… el frío realmente disminuía cuando lo abrazaba.
-Me siento mejor, gracias – Dedicó repentinamente tomando por sorpresa a ambos presentes, que rieron en respuesta – Kisame, dormiste en el sofá?
-Si tiburoncin, te dije que no era necesario que te quedaras- Exclamó el azabache en tono juguetón y de falso enfado.
-Y dejar a Naru chan solo contigo? Ni loco… Pervertido!!- Finalizó señalándolo.
Una enorme roca con la inscripción de pervertido derribó a Itachi mientras Naruto reía divertido.
-Que dices!!- Un recuperado Itachi le encaraba de pie arriba de la cama – Está enfermo Baka!!, no soy un descerebrado para intentar hacerle algo!!- Le miró provocando que múltiples chispitas emanaran de aquél par de miradas, mientras el oji azul solo podía reír.
-Kisame, Ita me ha cuidado antes sin molestar a nadie, estaré bien, pero gracias por preocuparte.
-Naru chan!!!- Un Itachi chibi aferró a naruto llorando a moco tendido a su pecho- Tu si me comprendes!!!- Una gota resbaló por la frente de kisame mientras el rubio se limitaba a palmear la espalda del azabache en consuelo.
Repentinamente un gruñido del estómago de Naruto llamó la atención de los tres.
-Muy bien, algo de comer para Naru chan- Itachi se levantó feliz en dirección a la cocina- Itai!!!- Ahora sobaba un inesperado chichón cortesía de kisame que arrojaba un bate de sus manos en dirección a paradero desconocido- Tenías un bate en la habitación?!!!
-Solo por si acaso- Kisame elevó los hombros restándole importancia y salió de la habitación dedicando una última mirada gélida al interior, que hizo que el ojiazul volviera a temblar de frio al ver congelarse la habitación- Yo le traeré de comer, seguro y tu le das comida chatarra o Ramen.
El piel azulada salió de la habitación dejando a ambos chicos con cascaditas cayendo por sus ojos mientras murmuraban cosas como “No soy tan pervertido, no lo consiento mucho” y “El ramen también tiene vitaminas, no lo como seguido”.
-Y bien?- Itachi se sentó en la cama abrazando a Naru nuevamente- Aún tienes frío?
Naruto negó en silencio, por qué… por qué…. Necesitaba saberlo.
-Ita… por que yo?... jamás podré pagarte lo que haces por mí- Murmuró pero el abrazo solo se hizo más fuerte… se sentía realmente mal, pero debía ser honesto – Ya ni siquiera podré pagarte con amor… te quiero pero, ya no te amo, perdóname Ita.
Tal y como lo esperaba, aquél abrazo se disolvió pero ante su sorpresa Itachi solo le sonrió, empezando a desabotonar los primeros botones de su pijama. Naruto solo miraba con extrañeza su reacción, pero un enorme sonrojo asomó su rostro al sentir como Itachi tocaba suavemente el lugar donde tenía las marcas en su cuello… lo había olvidado, pero era muy tarde para moverse.
-Es por él?- Preguntó Itachi haciendo que tragara pesado… no podía mentirle así que asintió ocultando sus ojos tras su flequillo… otra vez se sentía realmente mal y no por dolencias físicas- Irás con él?, siente lo mismo por ti?.
Esto si lo había tomado por sorpresa… miró de nuevo a Itachi, quien solo veía con nostalgia sus marcas delineándolas con suavidad. La tristeza volvió a él y negó en silencio.
-Tiene una vida diferente y una persona que lo quiere- Murmuró decidido a no agregar un solo detalle más de ese fin de semana de ensueño, ahora el asunto a tratar era otro – Igual que tu, por eso no puedo estar contigo… estoy estropeando tu vida, no he hecho más que estorbar, ser un mantenido y gastar en pruebas médicas.
-Te equivocas- Le hizo volver a mirarle- Aunque no me creas, tu me has enseñado cosas valiosas. Antes… hice muchas cosas, la mayoría malas, me burle y destruí muchas vidas sin importar quienes fueran, buenas o malas daba igual, la delegación era como mi segundo hogar en Japón, mis padres no sabían que hacer, al final, abandoné mi hogar harto de sus sermones y de la vigilancia policiaca.
Itachi volvió a mirarle riendo ligeramente al ver su rostro, es verdad que estaba impresionado, pues el azabache nunca le había contado nada de su pasado.
-Kisame y Suigetsu vinieron conmigo, nos abrimos paso… de mala manera. Luego… pese a todo lo que había hecho la vida me sonrió, pude aspirar a una carrera, conocí a… personas especiales… también gané amigos… después, te conocí… eres como mi lección en la vida, eres huérfano, te explotaban y tu salud no es nada envidiable, pero… siempre me regalaste tus atenciones y tu cariño.
-Pero estás sacrific…
-Sshhh- Itachi posó un dedo en sus labios y negó con una sonrisa- Siento que dejarte irte… al orfanato, con orochimaru o a donde sea lejos de mi vida, sería regresar a lo que era antes. Quiero hacer algo bien por una vez, por alguien más. Te quiero… me quieres, y eres la persona que quiero cuidar hasta el final de nuestros días- Naruto respingó ante semejantes palabras clavando inevitablemente sus zafiros en aquellos frascos de medicinas en su buró, pero continuó callado – Se que puede funcionar… si no irás con el, quédate conmigo, intentaré hacerte feliz.
Incapaz de seguir conteniéndose Naruto miró de nuevo a Itachi rompiendo a llorar.
-Perdón, perdón, perdón, perdóname- Naru solo negaba aferrando con fuerza la camisa del azabache quien le miraba extrañado su reacción.
-Perdonarte?... estuvimos igual Naru chan- Itachi le tomó del rostro obligándole a mirarle- Perdonarte que?
-No soy... tan tonto sabes?…- articuló el pequeño entre sollozos- Crees que no me iba a dar cuenta?... se que algo va realmente mal conmigo… Me estoy muriendo verdad?- Un leve temblor en las manos de Itachi le hizo comprobar sus sospechas no estaban tan mal después de todo– No quiero tu lástima- susurró enfadado.
-Te quiero mucho Naruto, me niego a darte sobras y no pienso dejarte morir- La seguridad en sus palabras estremeció al rubio- Quieres pagarme lo que he hecho por ti? Esta bien, este será el pago… Vive – Naru se soltó nuevamente al llanto pero Itachi no le dejaba voltear la mirada- Vive cada día sin arrepentirte de nada, cásate conmigo, no por el contrato, vive y sonríe, búrlate de todos como sueles hacerlo, con tus travesuras y niñerías… y para que un día me pidas el divorcio gritándome que te he hartado con mis perversiones y tonterías.
-Yo… yo- Las lágrimas no le dejaban mirarle, y el llanto no le dejaba hablar- No sé…
-Y si la vida no te deja… al menos dame el honor de ser quien esté a tu lado en el momento en el que decidas dejar de luchar.
Naruto lloró más fuerte aferrándose al pecho de Itachi… por que ni siquiera podía enfermarse en paz… pero, sus brazos aliviaban enormemente su dolor, sabía lo de Sasuke y seguía de allí, de pie, adelante… por qué… realmente él merecía una oportunidad?... “Estuvimos igual Naru chan”, ninguno amaba, pero… quizás podría intentarlo… se lo debía.
-Te casarás conmigo?- Murmuró el azabache sin soltarlo. Naruto asintió en silencio- Iremos a Japón, necesito que conozcas a mi abuela.
Al fin de un rato y mas desahogados, deshicieron el abrazo y el azabache le revolvió los cabellos juguetonamente tal cual hermano mayor… acaso en eso se estaba convirtiendo Itachi?... quizás, pero ahora serían algo más… y aunque le doliera, esto significaba… tratar de olvidar a Sasuke.
-Ah!!! Solo quiero advertirte una cosa Naru chan- El azabache le miró duramente y ante su sorpresa, sacó de su bolsillo una monedita que comenzó a frotar con fanatismo en su cuello- Este rubio y sexi cuerpecito es solo mío, oíste?!!!
Una leve carcajada salió de los labios del oji azul al pensar que ese curioso amor fraternal también era celoso y posesivo, pero una mueca de dolor reemplazó lo gracioso del momento.
-Ita me duele!!- Gritó el rubio empezando a forcejear con el azabache- Déjalo así!!! Déjame!!!
-No te resistas Naru chan, las borraré!! Eres mío y solo mío!!!
Repentinamente una nube de polvo entró velozmente a la habitación lanzando al azabache a volar por los aires, haciendo que una gota resbalara por el rostro de un sorprendido Naruto.
-Lo sabía!!!, Naru chan no está seguro contigo- Kisame fulminaba a Itachi con la mirada mientras extendía una pequeña bandeja de “comida sana” al rubio quien solo reía nervioso ante la escena- Yo cuido que comas tranquilamente.