No podía evitarlo.
Le gustaba salir, sentirse vivo, ser a veces el centro de atención…
Así era él.
Por eso no tardó en subirse al podium a bailar sin parar, moviéndose provocativamente, haciendo que Anthony lo observara, que se había negado a subir con él por vergüenza. ¿Quién iba a decirle que su pelirrojo tenía vergüenza a subirse al podium?
"¡Venga no seas tonto sube!" Gabriel le tendió una mano y Anthony divertido negó mientras bailaba junto a Johan y Erick que se reía al ver a Gabriel tan animado. "¡Eres un soso!" se rió bebiendo su bebida de golpe y viendo que un chico alto y moreno se subía donde él, haciendo que el pelirrojo pusiera sus sentidos atentos.
Gabriel sonrió torcidamente.
Comenzando a bailar otra vez, sintiendo como ese chico se iba acercando a sus caderas, intentando compartir algo de baile.
"Maldito…" Anthony entre dientes observó fulminante al chico que le estaba mirando descaradamente el trasero a su novio, y es que para no mirárselo… se contoneaba como el diablo, si, Gabriel había nacido para llamar la atención, era bello, pasional, eufórico…y bailaba…dios… "A la mierda…"
"Creo que se ha decidido…" Gabriel sonrió guiñándole el ojo a Erick que negó con la cabeza, su amigo no tenía remedio. Vio como el pelirrojo casi echa a empujones a ese chico y se posicionaba él detrás del castaño claro agarrando posesivamente las estrechas caderas. "¿Te decidiste?" miró divertido al pelirrojo que le mordió el cuello.
"Cállate…me sacas de quicio." Lamió el cuello, aferrándose a la estrecha cadera, haciendo que notara su virilidad. "…luego pienso castigarte…"
"Encantado…" sonrió ladeando el rostro, alcanzando los labios del pelirrojo, besándolo levemente.
"Esos dos siempre están igual…" Johan agarró de la mano a Erick llevándolo más hacia el centro de la pista. "¿Quieres tomar algo más?"
"No, no…creo que esto ya me ha subido un poco a la cabeza…" sonrió divertido pasando los brazos por el cuello de Johan comenzando a bailar.
"De acuerdo…" besó los labios carnosos del pelinegro.
Estuvieron bailando y divirtiéndose hasta tarde, Erick algo afectado por el alcohol estaba siendo algo más 'lanzado' de lo usual, sorprendiendo a Johan que intentaba sacarlo de encima de la barra y hacerlo salir a fuera a tomar un poco el aire.
"¿Nos vamos a casa?" Erick pasó los brazos alrededor de Johan, besando sus labios y riéndose ambos entre el beso.
"¿Y Gabriel y Anthony?" miró con ternura al menor, acariciando los cabellos de su frente y retirándoselos poco a poco. "…ellos tienen las llaves del coche."
"Pues vamos en taxi…además ellos dos creo que han ido al baño a 'divertirse' juntos…" se volvió a colgar del cuello del mayor dándole besos cortos en el cuello. "…y yo quiero divertirme contigo."
"Estas algo ebrio…" levantó la mano pidiendo un taxi que parara y ayudó al pelinegro a entrar dentro del auto. "…no quiero que pienses que me aprovecho…" le dio la dirección al taxista y miró a Erick que esta semitumbado en el asiento.
Las manos delicadas del menor lo agarraron del cuello de la camisa, haciendo que cayera encima de él, el taxista no les prestó mucha atención, debía estar acostumbrado a encontrarse ese tipo de situaciones.
"Bésame y cállate…" se rió alcanzando los labios del futbolista, perdiéndose en esa boca. Sorprendiendo agradablemente a Johan que correspondió efusivo al beso, sintiendo la lengua traviesa del pelinegro dándole juego, acariciando con sus manos el cuerpo fuerte del futbolista.
Y este, en estos momentos se sentía como el lobo…devorando a la caperucita roja.
Si, porque una parte de él se estaba aprovechando de la embriaguez de Erick para conseguir lo que quería.
"Erick…Erick…espera, espera…" se separó de los labios carnosos, viendo la vista humedecida del pelinegro y esas mejillas sonrosadas. "…¿oye, estas seguro?" parecía típico de preguntar, pero para él era importante. "…digo…estas algo bebido."
"Johan…te aseguro que si estuviera ebrio del todo ya habría caído dormido…tan solo estoy 'contento'…si no quisiera no hubiera empezado…y ahora hazme caso, y bésame de una vez…"
"Cómo tu ordenes…" volvió a abalanzarse encima del pequeño cuerpo, sintiendo una de las piernas del menor rodear su cadera, profundizando el beso, olvidándose que estaban dentro del auto. Aunque el conductor no ayudaba mucho a que se dieran cuenta porque seguía a lo suyo, conduciendo sin decir nada.
Las manos poderosas de Johan acariciaron con fuerza el abdomen del menor, parándose en el borde del pantalón, acariciando por encima de la tela la erección de Erick, quién seguía suspirando contra sus labios al separarse, buscando otra vez su lengua, volviendo el beso húmedo y excitante.
"Eh…vosotros parejita, llegamos." El hombre se volteó y Johan sin dejar los labios del pelinegro le entregó un billete.
"Quédese con el cambio…" sonrió entre los labios de Erick abriendo la puerta y saliendo con las manos pegadas del menor en su cintura, cerrando Erick la puerta del auto con el pie, volviendo a atacar esos labios, desabrochando la camisa de Johan, acariciando su trabajado pecho, sintiendo la excitación recorrer su cuerpo. "…ahm…vigila con la puerta…" entre risas y besos abrieron la puerta entrando torpemente y quitándose la ropa nerviosamente, dejándola olvidada en el piso mientras se dirigían hacia la habitación.
"Johan…" lo sentó en la mullida cama, subiéndose a horcajadas encima de él, sintiendo la mano del futbolista metiéndose por dentro de los jeans ajustados de Erick, desabrochando con nerviosismo el botón, facilitando el acariciarle. Sintiendo como se despegaba de sus labios tras mordérselos, dando un quedo gemido. Haciendo que una agradable corriente eléctrica recorriera su cuerpo, haciendo que su pantalón empezara a apretarle.
"Me vuelves loco…" lo agarró fuertemente de las caderas elevándolo y tirándolo boca arriba en la cama, quitándole los pantalones, desabrochándose los suyos, viendo el cuerpo expuesto de Erick, sintiéndose más excitado que nunca. "…Erick…"
Se puso encima de él, acariciando el pecho blanco, pellizcando sus pezones escuchando sus débiles gemidos, dejando un camino húmedo des del cuello blanco, mordiendo la piel que encontraba a su paso, llegando al borde los boxers negros. Lamiendo por encima de la tela la prominente erección del pelinegro, sintiendo las manos de este acariciar sus cabellos castaños, tirando eróticamente de ellos.
"Ahn…no me tortures más…" se mordió el labio inferior al sentir como Johan le quitaba lentamente la ropa interior, sintiendo su respiración en su parte baja, arqueándose levemente al sentir el contacto caliente y húmedo de la lengua en su miembro erguido, gimiendo sin pudor, los dedos del castaño acariciando sus testículos, la lengua de Johan recorriendo toda su extensión hábilmente, metiéndoselo de golpe en la boca, succionándolo, haciéndole desvariar. "…¡Ahhn! Déjalo…ahhn…o me-me correré…" se mordió el labio, respirando fuertemente.
Johan sonrió internamente.
Dejó su objeto de deseo, bajando hasta su entrada, lamiendo en aquel lugar, escuchando los fuertes gemidos de esa boca que le gustaba tanto, esa voz le estaba excitando más y más y su entrepierna le comenzaba a doler.
"Joder…" subió otra vez besando los labios de Erick, sintiendo las caderas del pelinegro contra las suyas, moviéndose levemente, haciendo fricción, enloqueciéndole. "…me pones tan caliente…ahhh…" cerró los ojos al sentir la mano traviesa del pequeño recorrer con algo de timidez el miembro erguido y excitado del futbolista, para luego masturbarlo con firmeza, haciendo que roncos gemidos salieran de su garganta, mientras Erick mordía y lamía el cuello ancho de Johan, dejando su marca. "…voltéate…ahh…" acarició el rostro de Erick, mordiendo los labios carnosos. Este asintió y se volteó elevando sus caderas, sintiendo las manos de Johan agarrar fuertemente sus caderas. "…quédate así a gatas…" sonrió perversamente.
Erick se agarró a la almohada sabiendo lo que el futbolista planeaba. Sintiendo por segunda vez el contacto de la lengua de Johan en su entrada, lubricándole placenteramente, una de las manos masajeando el miembro excitado de Erick, mientras la otra acariciaba le entrada estrecha, sintiendo que la lengua le abandonaba pero que uno de los dedos de Johan entraba en él.
"Du-duele…" gimió débilmente, esa intrusión era molestosa.
"Te aseguro que te va a gustar…" masturbó fuertemente el miembro de Erick, haciendo que se olvidara de ese dedo, pudiendo introducir otro, moviéndolo lentamente, sintiendo como los gemidos de dolor de Erick se volvían en unos de puro placer. "¿Ves? Te esta encantando…"
Se lamió los labios.
Erick le volvía completamente loco…
Era mucho mejor de lo que se podría haber imaginado…
Y todavía faltaba lo mejor…
"Ahhn…quiero ma-más…métela yaa…" gimió entrecortadamente, haciendo que el deseo de Johan creciera a más no poder, sintiendo el miembro duro contra su entrada, viendo de soslayo como Johan cogía un preservativo y se lo colocaba, para agarrar con sus manos las estrechas caderas. "Ahhn…" gimió anticipadamente al sentir como Johan presionaba su miembro contra su entrada.
Sintiendo las manos de Johan agarrar erótica y fuertemente sus nalgas. Entrando en él poco a poco, haciendo que gimiera fuertemente, sintiendo una corriente recorrer por completo su cuerpo, tensándose y atrapando deliciosamente el miembro del futbolista.
"Dios…ahn…eres tan estrecho y caliente…" besó y mordió la nuca de Erick, moviéndose lentamente dentro de él, sintiendo su miembro completamente atrapado y apretado, acariciando al ritmo en que entraba y salía de dentro de ese cuerpo el miembro de Erick, empezando a moverse más rápido al escuchar los fuertes gemidos de placer de Erick y los ruegos por más, y él le daría mucho más. "…¡aaah!"
"¡Ahhn, más rápido!" las estocadas cada vez eran más fuertes, más profundas, llevándole al completo placer, sintiendo como tocaba ese lugar que le hacia gemir más fuerte, llevándole a la locura. "¡Johaan, ahn!"
"Me-me corro…" arremetió contra el trasero de Erick, sintiendo como llegaba al clímax, gimiendo fuertemente, sintiendo como Erick también llegaba derramándose entre su mano. Mordiendo eróticamente la nuca del menor, cayendo exhausto encima de él, respirando fuertemente. "…ah…"
Salió de dentro de él poco a poco.
Saliendo de encima de él y quedándose justo a su lado, volteándose y abrazando el cuerpo caliente y cubierto de sudor de Erick, compartiendo la intimidad y los restos del orgasmo, mirándose a los ojos. Para luego besarse lentamente.
"Te adoro…¿lo sabes?" sonrió ampliamente acariciando el rostro de Johan que sonrió ante ese comentario.
"Te quiero…" besó su frente y lo arropó con una sábana, mientras los brazos de Erick abrazaban el cuerpo del futbolista, sintiendo que el sueño les invadía.
Y que juntos, caían en los brazos de Morfeo.
Se despertó por la luz que entraba por la ventana, abrió los ojos pesadamente, gruñendo hasta que sintió su cuerpo y boca pastosa, sedienta, abrió los ojos y se encontró con el pecho de Johan, sonrió tímidamente, recordando la noche anterior, sonrojándose. Pero feliz. Se apoyó sobre sus codos y miró el semblante dormido de Johan, retirando con una de sus manos los cabellos que le caían por la frente. Miró la hora, eran casi la dos del mediodía, volvieron tardísimo, y luego…con el cansancio durmieron mucho.
Besó sus labios y se volteó para sentarse, sintiendo un pinchazo recorriendo su espina, sintiendo su trasero adolorido y sonrojándose levemente.
Hasta dentro de un rato no podría caminar con total 'normalidad', debería vigilar al sentarse y sobretodo delante de Gabriel o Anth, o ya estarían todo el día con los comentarios salidos. Se sobresaltó al sentir unos brazos en su cintura, volteando su rostro encontrándose a Johan que le besó la espalda.
"¿Te duele?" besó su mejilla y acarició los cabellos despeinados de Erick.
"Un poco…no te lo negaré." Sonrió algo vergonzoso y se levantó poco a poco, caminando algo 'extraño', Johan intentando controlar su risa. "¡A mi no me hace gracia!" puso morros y se fue al baño. "…me estoy duchando…" cerró la puerta, le convenía ducharse, lavarse bien y a ver que podía hacer con ese dolor en el trasero.
Johan feliz se tumbó boca arriba, dejando su cabeza colgando por el borde de la cama, sintiéndose completamente feliz, satisfecho…y para que decir sumamente seguro de lo buena que había sido la noche anterior.
"Vaya, vaya…" la voz grave de Anthony hizo que mirara hacia la puerta, viendo al pelirrojo del revés por su posición. "…te va a bajar la sangre a la cabeza idiota."
"Me da igual…me puedo morir feliz de una maldita vez." sonrió triunfante y Anthony lo miró con una ceja enarcada, comprendiendo al cabo de un rato, correspondiéndole la sonrisa cómplice. "…ni una palabra delante de Erick o me mata."
"Pero si se le va a notar al caminar…precisamente creo que pequeña no la tienes." Sonrió sentándose al lado de Johan que se sentó a su lado riéndose ante el comentario. "…a Gabriel le pasó lo mismo, era gracioso verlo caminando…de esa manera." Se rió dándole una palmada en la espalda. "…como el desayuno hace tiempo que os lo habéis pasado…la comida estará dentro de poco."
"Ok…gracias." Le sonrió a su amigo que se encendió un cigarro algo nervioso. "¿Ocurre algo Anth?" miró a su amigo que lo miró de soslayo con esos ojos oscuros.
"Mis padres vendrán esta tarde…quieren saber que haré, me quieren mandar fuera a estudiar…" miró al futbolista que le prestaba toda la atención. "…aquí hay una universidad cerca de la de arte a la que quiere ir Gabriel, tenía pensado estudiar administración y dirección de empresas…aunque si me quieren mandar fuera a una de sus 'prestigiosas' universidades de las que conocen ellos que tan solo van gente de élite me pelearé con ellos…"
"¿Se lo has comentado a Gabriel?" miró a su amigo que asintió.
"Bueno llamó delante de él…y teníamos el manos libres puesto mientras estábamos medio haciéndolo…" sonrió cínicamente viendo la mirada desconcertada de Johan.
"Dios…eres tan descuidado Anthony." Miró con una sonrisa divertida al pelirrojo que le sacó la lengua divertido. "¿Y que dice él?"
"Nada…no me comentó nada, entiéndeme Johan…ahora que las cosas con mi angelito van bien…no quiero fastidiarla, total mis padres siempre me han ignorado, si me peleo con ellos no va a suceder nada." Chasqueó la lengua dándole una calada al cigarro.
"Cómo tu quieras…¿saben que estas con Gabriel?" su amigo negó débilmente. "¿Saben que te gustan los hombres?" enarcó una ceja.
"Bisexual querido, bisexual…y pocos hombres me han llegado a excitar, para mi que solo mi angelito…" apagó el cigarro mirando a Johan. "…a ellos eso les da igual, tengo un primo que es homosexual y sinceramente no les importa si estoy con un chico o chica…"
"¿Entonces cual es el problema?" miró a Anthony intrigado.
"Mis padre estás podridos de pasta Johan…no es para fanfarronear…pero es así, y el problema es que cuando vean que Gabriel no tiene una posición social alta o que no tiene tanto dinero como yo empezaran a poner pegas. Y sinceramente a mi digan lo que digan me da igual…pero me preocupa lo que llegue a pensar Gabriel…" se cruzó de brazos y el futbolista le observó.
"Coméntaselo…antes de que vengan tus padres, prepárale para lo que le puedan llegar a decir, así no habrá conflictos."
"Vaya…ahora veo que verdaderamente piensas." Se rió divertido recibiendo una almohada por parte de Johan. "…me voy a ayudar a Gabriel en la cocina, hasta ahora."
"Espera…una pregunta…¿Por qué le llamas angelito a Gabriel?" miró curioso a Anthony.
"Porque Gabriel es un nombre de arcángel…por eso angelito. Aunque también lo hago porque es lindo…" sonrió.
"Estas enamorado ¿eh?" miró a su amigo con una sonrisilla en el rostro.
"Pues si…y ahora si me disculpas voy a ayudar a mi angelito, no sea que se vaya a cortar…a parte de que tengo que hablar con él claro…"
"Si, si…¡Y no os lo montéis en la cocina que vendremos dentro de poco!" escuchó como el pelirrojo se reía ante el comentario y se levantó desperezándose, agarrando ropa limpia. Se acercó a la puerta del baño. "Oye…¿Estás bien Erick?"
"¡Si!" salió de la ducha ya vestido con unos pantalones anchos blancos cortos y una camiseta de color rojo. "…todo el baño para ti, voy a ver la televisión un rato mientras la comida se hace." Se acercó a los labios de Johan, besándole. Este aprovechó y se aferró a su cintura.
"Erick…"
"¿Mm?" se separó de los labios del castaño, acariciando con sus manos el rostro del mayor.
"¿No estarás arrepentido?" miró preocupado al pelinegro que sonrió.
"Mira que eres bobo…claro que no…¿dónde esta la confianza salvaje de anoche?" le pellizcó la mejilla haciéndole sonreír.
"Te quiero." Besó la sien del menor que se rió por lo bajo.
"Y yo…ahora ve a la ducha." Besó su mejilla y se fue intentando caminar bien, sintiendo aún algún que otro pinchazo en su trasero. El sexo estuvo genial si, pero este dolor en esos momentos le sobraba en el cuerpo.
"Así que esta es la situación…" Anthony que estaba sentado en la encimera miró a Gabriel que estaba justo delante de él, con sus manos en las rodillas del pelirrojo, mirándole fijamente. "…quería ponerte al corriente de cómo son mis 'adorables' padres…" acarició el rostro de Gabriel, con el pulgar acariciando sus labios entreabiertos. "…no quiero que te comas el coco con tonterías…"
"Por eso no te preocupes…soy bastante egoísta, y sinceramente no creo que debas irte a la otra parte del país para sacarte la carrera universitaria si aquí hay de buenas…aunque claro, a veces el dinero pudre el cerebro…" desvió la mirada. "…no quiero ofenderte Anth…pero es lo que pienso."
"Yo también lo pienso…tranquilo." Besó su frente reconfortando al menor. "…después acabamos de hablar que allí viene Johan con Erick que debía estar en la sala viendo la televisión…" se bajó de la encimera y se sentó en la mesa ya dispuesta.
"Que hambre…" Johan se sentó rápidamente y se comió una patata frita, Gabriel cogió la ensalada y la puso en medio de la mesa, sentándose al lado de Anthony, Erick disimuladamente se sentó lentamente en la mesa, disimulando el pequeño dolor que le causaba. Dándole una patada por debajo de la mesa a Johan que se reía. "¡Auch!"
"¿Qué ocurre?" Gabriel miró a la pareja que negó débilmente. "¿Tu lo sabes Anth?"
"¿Yo?" miró a Johan que disimulado le hizo una señal para que dijera que no o Erick le iba a cortar en trocitos. "…Que va."
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