Se que mi niña escribe en esta pagina bajo el nombre de Rosa Negra y espero que lo lea para que me de una nueva oportunidad...o que alguien le avise...bueno no los molesto mas y lean...
Hola soy Carolina hoy en día tengo 18 años y esta es mi historia con un amor que se que no volverá...
Tendré que retroceder el tiempo cuando tenía 15 años. Yo me encontraba en mi casa sola esperando el regreso de mi hermana menor. Ese día podría haberme ido con mis amigas a pasear pero sabía que mi hermana vendría con una amiga, y siempre me ha gustado molestarlas así que decidí quedarme.
Estuve un tiempo esperando y ya que no llegaban decidí ponerme a leer un rato hasta que llegaron al principio pensé que vendría con alguna de sus horrendas amigas pero ese día fue diferente...
Llego con la criatura más linda que había visto en mi vida aun la recuerdo como si fuera ayer..., con un cabello lacio y negro, ojos marrones oscuros he infantiles que mostraban inocencia. Con una silueta delicada y de piel pálida.
A mi...que me gustan las mujeres me quede atónita mirándola. Me di cuenta que desvió la mirada porque se sentía nerviosa y no se porque pero me sentí como una autoridad y que podría hacer lo que quisiera con ella.
Fue una estupidez lo que pensé, pero así fue. Mi hermana la jalo de la muñeca ignorando mi presencia como siempre y se la llevo al cuarto.
Luciana, mi hermana, iba a sexto grado, así que era 3 años mayor que las dos...bueno de mi niña no lo se...me nuble tanto que ni siquiera le pregunte su edad...pero ya no importa.
Yo quería a esa chica para mi y haría lo que fuera por conseguirla sea o no heterosexual. Luego de un rato subí al cuarto de mi hermana y entre sin preguntar. Las enganche justo cuando pensaban jugar al cuarto oscuro.
Así que pregunte si yo también podía jugar, mi hermana puso una cara de enojo y confusión y mi niña no dijo nada. Al final y por suerte, las que teníamos que escondernos éramos yo y mi niña. Apagamos las luces.
Yo me fui a esconder al armario de mi hermana mientras que notaba que Lucia (es así como se llama en realidad) buscaba otro lugar más alejado...no iba a permitirlo.
La jale del brazo y la metí conmigo en el armario y cerré la puerta. Ya no podía esperar más. La rodee con mis brazos por la cintura y me acerque a su oreja y le dije que le iba a gustar...luego la mordí y rápidamente bese sus bellos labios.
Sabia que estaba sorprendida y por suerte no me había rechazado. No me quería despegar de ella luego de un rato y por notable falta de aire la solté.
Recuerdo que su cara estaba roja por la falta de aire. Luego de unos segundos apareció mi hermana.
Yo le sonreí con una sonrisa tonta mientras que Lucia estaba pálida. Mi hermana le pregunto si estaba bien. Lucia solo se limito a responder que si, pero que estaría mejor si salía del armario.
Una respuesta que me causo algo de gracia. Y así paso el resto de la tarde, mi hermana no se separo de Lucia, porque sabía que algo pasaba así que yo me tuve que resignar y me fui a ver televisión.
Y así paso la tarde mamá aun no volvía y note que Lucila estaba nerviosa ya que había traído a Lucia sin autorización y además Lucia tenía que estar en su casa antes de que llegue su madre.
No desaproveche y dije que yo la llevaría. Mi hermana choco las palmas y dijo gracias. Mi niña abrió lo ojos como dos platos pero no dijo nada. Me dijo la dirección y de ahí partimos.
Nosotros tenemos edificio con ascensor...una excelente oportunidad. Apenas toque el boten para bajar la acorrale en un rincón y la empecé a besar con toda la pasión que tenia guardada solo para ella.
Al salir la tome de la mano para que no se escape y la lleve hasta su casa. Fue un trayecto, lamentablemente, normal. Al llegar hasta su puerta le di un beso fugaz en la mejilla y luego vi como rápidamente subía las escaleras.
Muchas veces llame a su casa, todas esas veces me atendió su madre y yo ponía la excusa de que mi hermana quería verla...cuando en realidad era una mentira.
Lucia venia confiada de que estaría Lucila esperándola...cuando en realidad era yo...apenas la dejaba entrar, cuando ya me tiraba en cima de ella y la atacaba a besos.
Así siguió pasando el tiempo. Nunca supe la razón por la que Lucia no se quejaba. Me hice la estúpida idea de que me deseaba como yo a ella.
Un día que ella vino la agarre de los hombros y como siempre empecé a besarla mientras la llevaba a mi habitación...grave error.
Me empujo y me dijo que no quería eso. Su mirada infantil se había cambiado por una de enojo. Paso al lado mío sin mirarme abrió la puerta y se fue.
Me sentí una tonta por lo que había hecho, me di cuenta que había perdido lo que más quería y anhelaba.
Paso el tiempo, y yo no me atreví a mirarla a los ojos...me sentía inferior y sentía que me caería en mil pedazos si me encontraba con ella.
Hubo veces que mi hermana realmente la invito. Esas veces, de alguna forma sabía que yo estaba ahí. Iba y tocaba la puerta de mi cuarto. Quería hablarme y yo me sentía confusa y me hacía la que no estaba.
Así, fue que paso aun más rápido el tiempo. Lucia dejo de venir ya que nos mudamos más lejos, yo sentía que me deprimía cada vez más...
Y esa fue mi historia...hasta hoy en día nunca me volví a hablar con ella... pero de seguro que me recuerda...como alguien perturbado...he incluso miedosa...
Pero así soy...y ahora quiero hablarte...y que me des otra oportunidad...pensaras que soy una loca...hace 3 años que no hablamos, pero realmente no me importa.
Quiero tenerte aquí a mi lado...solo quiero que me digas que al menos podemos ser amigas...solo eso te pido...
Bueno eso es todo, espero que algún día veas esta finc...adiós...esperare...años si es necesarios...