Aunque la lluvia cese, no dejes de abrazarme.
En el medio de la aldea de Konoha, varias personas observaban el revuelo creado, por dos de los chunnin más revoltosos de la aldea.
-Otra vez tú, siempre molestando sabías-
-ah y tú que te crees, no sé como alguien te aguanta… además no deberías provocarme solo porque soy mejor que tú tebayo-
-¡pero que te pasa, si yo soy el mejor de todos, es más te lo demostraré ya mismo!-
-jaja si, haber inténtalo, chico perro-
-¡¿a quién le dices chico perro?!-
-pues a quién más que a ti-
-esta no te la perdono, Akamaru vamos con todo… ¡¿Akamaru?!-
Sin embargo el pequeño perro, lejos de hacerle caso a su dueño, camino hacia el lugar donde se hallaban los espectadores de ese duelo verbal, mordió el pantalón de un hombre de cabello blanco que leía una revista, solo para llamar la atención y luego con tranquilidad, espero hasta que el hombre hizo una invocación… luego de esto, el pequeño Akamaru se marcho seguido de una horda de perros, productos de la invocación.
-creo que Akamaru te abandonó, hasta él sabe que vas a perder- dijo el chico de cabellos rubios sonriendo con una mirada zorruna.
-guau, guau guau, guauuu- se escuchó a la distancia, uno de los perros que seguí a Akamaru, se acerco a los muchachos y sonriendo dijo.
-Naruto Akamaru dice que él sabe que ninguno va a ganar, ya que son muy tontos y no quiere perder su tiempo-
-¡Pakkun vuelve y repite eso!- gritó el rubio indignado.
-¿qué? No mates al mensajero, mata al emisor.- contesto el perrito alejándose para alcanzar a los demás.
-¿emisor?…y eso con que se come tebayo-
-jaja ¡no sabes lo que es un emisor! Akamaru tiene razón Naruto, eres tan idiota-
-oye si Akamaru tiene razón, entonces eso significa que tu también lo eres datebayo-
Y así nuevamente se enfrascaron en una pelea sin sentido, hasta que finalmente una vocecita apagada llamo la atención de ambos.
-etto… Kiba-kun, Naruto-kun no deberían pelear… yo, bueno, creo que ustedes son tan parecidos de personalidad y bueno… no sé, tal vez podrían ser muy buenos amigos-
Ambos chicos sonrieron, y se miraron.
-Nee Hinata todo esta bien, nosotros somos amigos, solo que nos llevamos así, a los golpes nos entendemos- contesto el de cabello castaño, golpeando la cabeza rubia.
-oye idiota no me pegues-
-solo mostraba un punto-
-pues que tal si yo te muestro un punto a ti- dijo mientras de una patada lo arrojaba al suelo.
-Naruto esta vez te pasaste, ¡me las pagarás!-
Y nuevamente comenzaron a golpearse, todos los presentes bufaron de frustración alejándose de la escena.
Hinata aún los miraba perpleja, cuando una chica de cabello rosa, le toco el hombro y le regalo una sonrisa.
-ya déjalos Hinata, estos dos son así, además desde que Sasuke se fue de la aldea, Naruto encontró en Kiba un reemplazo natural para tener con quien pelear-
Extrañamente al oír esto Inuzuka detuvo su ataque a Naruto, de hecho se distrajo a tal punto que no se dio cuenta que el puño de Uzumaki se dirigía hacia él, hasta que fue muy tarde y producto del golpe en su mejilla, terminó unos cuantos metros a la distancia.
-jaja te gané tebayo, yo sabía que no eras capaz de vencer al gran Naruto Uzumaki futuro Hokage de…-
-¡porque no simplemente te callas!- gritó un furioso Inuzuka, antes de marcharse.
Las chicas también lo miraron sorprendidas, desde hacía tiempo, las peleas entre ellos eran moneda corriente, pero no eran más que peleas tontas sin sentido, sin embargo esta vez el chico se veía realmente enojado…
Naruto siguió observándolo perplejo hasta que comenzó una carrera para alcanzarlo, lo consiguió largo rato después, en el bosque.
-chico perro que te pasa, no seas mal perdedor tebayo-
-no lo soy-
-¿y por qué te enojas?-
-¡¿soy un reemplazo?!-
-¿de qué hablas?- pregunto un perplejo zorrito.
-¿quién es tu mejor amigo?-
-jaja eso es fácil…- Kiba lo miro con algo más de calma, pero esta se esfumo cuando el rubio termino de hablar.
-…Sasuke es mi mejor amigo-
-eres un baka.-
-Kiba te lo estas buscando vuelve a insultarme y yo…-
-¡baka!…¡baka, baka, baka, baka, baka, baka, baka!-
-¡ya basta que diablos te traes Kiba!-
-¿por qué te la pasas conmigo si Sasuke es tu mejor amigo?-
-porque me gusta estar contigo-
-no, mientes, lo haces porque él no esta, y yo soy un reemplazo temporal hasta que Sasuke regrese-
-no es cierto y lo sabes… además dime Kiba ¡¿quién es tu mejor amigo?!-
Inuzuka lo miro como si fuera la pregunta más obvia y sin pensar respondió.
-pues Shino… cla…ro… yo-
-¿ves? si serás tonto, yo tampoco soy tu mejor amigo sin embargo te gusta estar conmigo ¿no?-
-…lo siento Naruto… no sé porque me moleste tanto-
-nee jeje no pasa nada- dijo mientras apoyaba las manos detrás de su cabeza y comenzaba a caminar de regreso a la aldea.
-oye Naruto espera, ¿de verdad te gusta estar conmigo?-
El rubio seguía caminando sin girarse, mientras contestaba despreocupadamente.
-mucho tebayo-
-yyyy… las peleas conmigo son mejor que con Sasuke ¿no?-
El rubio sonrió maliciosamente y luego se giró para encarar a Kiba.
-bueno, tanto así no… después de todo, Sasuke SÍ es un buen rival aunque odie admitirlo-
Inuzuka se quedo inmóvil un instante, hasta comprender la doble implicancia de esa sentencia.
-¡insinúas que yo no soy un rival digno!-
-jeje-
Una nueva pelea comenzó, luego de algunas horas, ambos se dejaron caer agotados sobre el pasto húmedo, observaron la luna y se quedaron pasmados, al ver que ya había caído sobre ellos la noche.
-oye deberíamos volver a casa, seguro que mamá va a regañarme ¡demonios!, suerte que no tienes que soportar cosas como estas y…-
Kiba se detuvo al ver que Naruto giraba el rostro para no mostrar una mueca de pena.
-oye Naruto lo siento, no pensé en lo que… ¡oye ya sé, ¿qué tal si vienes a dormir a casa?!-
Esta vez Naruto giro su rostro para observar a Kiba con alegría, pero esta se esfumo al recordar que la mayoría de los adultos lo odiaban.
-no, no te preocupes Kiba, seguramente tu mamá no estará muy contenta que lleves a alguien sin avisar-
Inuzuka no era precisamente el ser más brillante de la tierra, pero tampoco se caracterizaba por ser idiota, y comprendió de inmediato lo que ocurría, sabía que había metido la pata nuevamente, con su proposición.
-…oye y si yo me quedo en tu casa…-
-pero tu mamá…-
El chico de las marcas rojas, sonrió y luego lanzo un silbido al aire, un ladrido lejano se dejo escuchar poco después.
-listo…-
-¿listo?-
-Akamaru le avisará a mi mamá que me quedo en tu casa-
-eso parece muy útil-
-¿y qué es “eso”?-
-tu relación con Akamaru datebayo-
-jeje nadie es mejor que Akamaru-
-oye ¿ni siquiera yo?- pregunto inocentemente, Kiba sonrió.
-no tu tampoco eres mejor, aunque eres tan bueno como él.-
-¿¿me estas comparando con un perro??-
-¿qué tiene de malo?- pregunto un confundido Kiba.
-… sin comentarios…-
El resto del camino lo hicieron en silencio, casi incómodamente, no es que no estuviesen acostumbrados a estar juntos, sino que cuando lo estaban, generalmente peleaban por todo, sin embargo esta vez, ambos sentían que había algo diferente.
Cuando llegaron a la casa de Naruto, este tiro sus cosas en la entrada, Kiba se rió del desorden de su amigo, y luego de tirar sus cosas de igual manera que el rubio, corrió detrás de él, para ir a la cocina.
-¡tengo hambre!… Naruto prepara la cena-
-bueno, ¡pero vamos a comer Ramen tebayo!-
-etto, bueno, supongo que era predecible-
-¿qué insinúas?-
-nada, nada, de todas maneras es mejor que la leche caducada-
Naruto recordó las veces en que por algún motivo, Kiba se había quedado en su casa y en general o comían ramen, o tomaban leche vencida, así que finalmente comprendió a que se refería.
-jeje siento lo de la leche de la otra vez, pero ya te dije, que no fue mi culpa tebayo-
-si lo es-
-maldito Kiba-
-oye no me maldigas-
-entonces mejor te insulto, baka Kiba-
Nuevamente una pelea, aunque habían intentado evitarlo, era algo tan común en ellos, como alardear, aunque ambos sabían en el fondo, que solo era una manera de compartir su tiempo juntos.
Justo cuando parecía que la pelea se iba a tomar mucho tiempo, las luces de la casa se cortaron, mientras unos rayos se dejaban ver en el cielo a través de las ventanas.
Naruto detuvo sus movimientos por unos instantes y se abrazó a Kiba buscando protección, el otro se sintió extrañamente bien, pero no analizo sus sentimientos, solamente se dejo llevar por su personalidad.
-jaja no puedo creer que le temas a una pequeña tormenta eléctrica-
-no le tengo miedo- dijo separándose de inmediato, pero un fuerte trueno, lo hizo volver a aferrarse al otro chico.
-jeje reconócelo y ya no te molestaré-
-maldito #@&#…- justo cuando Naruto comenzó a “alabar” a Kiba, la tormenta se intensifico.
-esta bien, tengo miedo contento- dijo aferrándose con demasiada fuerza a inuzuka.
-no, no estoy contento, me asfixias-
-ups lo siento-
Inuzuka abrazó el cuerpo de Naruto con cuidado, cuando el rubio aflojó la presión de su agarre y lo acompañó hasta la habitación.
-tal vez sea mejor que nos vayamos a dormir-
Naruto asintió sin quejarse, realmente odiaba las tormentas, siempre que había una, él estaba solo en esa pequeña casa, sin nadie que lo distrajera de lo triste que sonaba la lluvia, o de lo solitario que lucía todo bajo ese clima, nada era peor que la lluvia, porque lo hacía sentirse aún más odiado y solo.
Cuando llegaron a la habitación, ambos se acostaron en la cama, estaban acostumbrados a compartirla, ya que el rubio, no tenía demasiado espacio en su hogar, para agregar otra, sin embargo ambos se sentían cómodos y más allá de lo que su personalidad sugiriera, a la hora de dormir, ambos eran muy calmos y no se molestaban.
-buenas noches- soltó Kiba pensando en darse vuelta, pero Naruto no lo dejo.
-… ehh, Kiba, yo… ahhhh, ¡¿temolestasiteabrazo?!…-
-¿qué dijiste?-
-por favor no me hagas repetirlo-
-pero no te entendí-
-esta bien, ¿puedo abrazarte?-
-eh, si, bueno, es decir no hay problema-
Kiba también lo abrazo, el contacto con la piel de Naruto no le molestaba y en esa noche, le resultaba más cálido y reconfortante, que cualquier otra cosa existente.
-gracias-
-…Naruto…-
-¿si?-
-¿por qué le tienes miedo a las tormentas?-
-…porque me hacen sentir muy solo tebayo… mucho más que de costumbre-
-no estas solo-
-jeje lo sé-
Ambos se miraron y en ese momento la ventana se abrió debido al viento, logrando un sobresalto en ambos, algunas gotas de lluvia comenzaron a colarse a la habitación, Naruto no tardo en levantarse y cerrarla, aunque su rostro se lleno de las pequeñas gotas, aunque eso no le importo puesto que en unos instantes se hallaba nuevamente sobre la cama.
-estas mojado-
-mhh si pero no importa tebayo, ya me voy a secar-
Inuzuka miro al rubio iluminado por algunos rayos y sonrió, con delicadeza impropia en él, comenzó a acariciar su rostro secando las gotas de lluvia, hasta llegar a los labios, que delineo apenas rozándolos con la yema de sus dedos.
-ahora estas seco Naruto-
-si, si lo estoy-
Y sin poder contenerse Uzumaki se acercó al otro y dejo que sus labios se encontrarán con los de su compañero.
-y… ¿por qué fue eso?-
-no lo sé tebayo-
-Naruto ¿qué somos?-
-…¿a-ami-migos?…-
-los amigos no se besan-
El rubio estuvo a punto de replicar, pero Kiba lo detuvo.
-el accidente que tuviste con Sasuke no cuenta como beso-
-ah… entonces no sé…-
-…somos mucho más que amigos ¿verdad?…-
-… me importas mucho más que un amigo-
-entonces no importa que es lo que somos, siempre que podamos estar juntos-
-…Kiba…-
-mira dejo de llover-
Ambos observaron la ventana por un instante, Naruto suspiró y apoyó su cabeza en el hombro de Kiba.
-no me dejes de abrazar-
-…nunca pensé hacerlo Naruto…-
-gracias-
Ambos volvieron a besarse, el clima era frío por la lluvia, fuera del hogar del rubio las calles lucían desiertas, deprimentes… pero por un tibio momento, nada de eso importó.
Owari.