Las calles estaban vacias, y eso que la noche aun no acobillaba la ciudad con su manto y la gente no solia abandonar la calle por el solo hecho de que sea algo tarde, Criaturas que son de la noche son las que suelen deambular por la zona, la oscuridad es su campo y las tinieblas su abrigo, entonces, cual era la razon de que no se viera ningun alma de este elemento, muy sencillo, ese jueves por la noches estaba lloviendo.
Era un jueves gris llovía
El cielo se apreciaba gris, una gran manta que por el poniente le destellaban rojos de fuego y por el este el azul escarlata luchaba para que en esa noche tuviera un poco de estrellas y la luna gobernaba este que es su reino, como él tenia el suyo...Admirar esa lucha por el predominio del cielo, era majestuoso, lento pero titánico. Unos ojos azules miraban atrabez de una ventana ese espectáculo, por unos gloriosos intantes le hacia olvidar el motivo por el cual estaba sentado en ese lugar, en ese sillom, frente a esa mesa que lucia un ancho vaso sobre ella, y dentro de ese vaso la sustancia mas embriagante que ese pichuriento lugar podia ofrecer.
Y quien era ese hombre, ese que se sentaba donde sea sin perder su porte y elegancia,. Kaiba era su apellido, su erencia, su prestigio, su legado, y tambien, su mas grande maldición. El actual empresario Sero Kaiba, actual precidente ejecutivo de las industrias Kaiba, llamado comercialmente como Kaiba Corporation, exitoso fabricante de, bueno, nada en especifico, tenia ramas en tecnología, electrodomesticos, entretenimiento, armas, comunicaciones, aviones etc etc... muchas marcas y muchas pequeñas empresas se unian a este gran imperio dirijido casi por un solo hombre. Gracias a sus multiples negocios podia darce multiples lujos, todo podia tener consigo, todo menos a una persona sincera...
Que tenia un maldito baño con agua de los montes suizos, que tenia un traje cosido con hilos de seda y broches de oro, que tenia todo eso y sin ni siquiera podia tener un mugroso acompañante que no le estuviera viendo con lujuria, que no estuviera esperando un cheque al final de mes o que le sacara una risa para poder obtener unas cuantas monedas de oro (cualquier cosa de valor), chinga no podia tener un ser humano a su lado solamente por que le agradaba su compañía, era mucho pedir... no, no lo era, como lo sabia? Por que conocio la dicha de un compañis desinteresada y lo mas amargo es que la habia perdido
Retiro sus ojos del paisaje y de sus pensamientos, pues algo que se le antojo como una aparicion distrajo sus cavilaciones
Pideme un remix decia
En el lobi de un hotel barato
- lo de siempre viejo? ...- un señor de mediana edad se le acerco para preguntarle lo que deseaba beber, era cliente frecuente de aquel hotel de quinta , pero ya que su belleza atraia a otros clientes le daban un trato especial
- no, estavez dame una de tus mejores mezclas, se me antoja el sun shine...- ralamio sus labios al pedir su orden, imaginándose ese dulce sabor decendiendo por su gargante creandole todos los efectos tan deseados, el mesero le contesto con un mirada de lujuria y se retiro a traer lo que se le habia pedido. Era un chico no muy alto, se sentaba en una de las mesas continuas a las que el ojiazul se encontraba, vestia de una manera muy provocadora, unos pantalones de cuero tan pegados como si fueran mu propia piel, cintura estrecha hombros de mediana anchura, sus ojos deliniados con negro que le daban un toque mas exotico del que ya tenia, En su voz se sentia un poco de fastidio y sus ojos expresaban una frialdad e indiferencia casi mortal... ese rojo intenso
su camisa visiblemente arrubada no opacaba ni un poco el cuadro
por muy grato a la vision que le fuese una persona, nunca habria volteado dignado a verle mas que una ojeada, menos quedarse a observar e inspeccionar como en aquel momento se, ejem.... si, lo dire, se comía vivo a aquel chico con la mirada.
Examino mas de serca aquel cuerpo con exquisito plaser, su posición se lo permitia. Su camiza parecía que no se la hubiese quitado en dias, bajo el cuello tenia una rasgaduras y los primeros botones o donde deberían estar ellos, eran unos oyos que dalataban el intento desesperado por que esa prenda fuese retirada, desenbocando en su maltrecho estado. El chico saco en una mochila que llebaba un encendedor y tras el una cuchara, un objeto curioso pero enrealidad de muchos usos, calentó un poco la cuchara y después paso a ponérsela sobre el cuello. Al descubrir esta parte de su cuerpo pudo notar que en ella tenia manchas rosas y otras un tanto moradas
Viene de estrenar su piel un rato
Con la algarabía del deber cumplido
Acrobacias del placer fingido
El chico de mirada de fuego le dedico un rapido vistazo, pues sintio que estaba siendo observado (digo, si te miran asi quien no se da cuenta), pero regreso asus labores de inmediato, dándole poca importancia, estaba acostumbrado. Esa indiferencia le llamo la atención al empresario, quizas no lo reconocia, seria?. Su postura relajada se tenso un poco, su atención fue capturada y su interes se poso en el, junto con un idea algo loca..
- aquí tienes yami....- el mencionado elevo el rostro, interrumpiendo su tarea de bolsearse con algo de desesperación, al acerlo se topo con unos frondosos y exuberantes senos, que apenas y eran contenidos por una diminuta blusa, que de hecho parecia una mascada y no una blusa. Traia consigo su bebida.- la jornada esta pesada, verdad corazon?...
- hola Mai...- le dio un beso en la boca a la despampanante rubia y tomo de la charola el vaso amarrillo. En el interior hondeaban franjas rojas que en las puntas se difuminaban a un naranja palido... como rayos de sol..- y al rato se pone peor, tu verndras al rato...?
- claro que si muñeco, aquí se vive al dia....
- entonce te veo luego, no tardes mucho, por aquí se te extraña
un orgasmo de alquiler con ruido
pone boca en su carmin escaso
arañando el adoquin sus pasos
La rubia rio divertida y se despidio dándole un beso en la frente- nadie puede con un valentine.
Una vez que la chica se fuese continuo en lo que estaba. Se registro todos los volcillos que tenia y al no tener éxito siguió con su maleta, que vacio por completo en la mesa frente a el, le dio un trago grande a su bebida y prosiguió a buscar sin éxito entre todas cosas...
Quien tiene algo para la nariz pregunta
- alguien tiene algo inyectable?! o polvo de angel?! Dioses, necesito algo para la nariz...- dijo mas al aire que por que realmente se estuviera dirigiendo a alguien, la anciedad de su adiccion le estba poniendo algo irritante
el chico atractivo que tan insistente le observaba y que, por cierto se encontraba sentada apenas unos cuantos metros mas alla se puso de pie, con ese porte de caballero de fabula se la acerco caminando con elegancia, una leve sonrisa se le dibujo en el rostro al verlo asercarce y en un movimiento elegante de su manga saco un pañuero y se lo ofrecio con gentileza
Podria ser de utilidad mi pañuelo
Disfrace de ingenuidad mi ancuelo
- que estas idiota?!!! – exclamo borrando por completo su sonrisa y severamente enfadado...- que puta madre es esto, quiero coca, niño bonito, que esa jeta te quita coeficiente?!!!..- kaiba alzo la seja ante la hostilidad, pero el sabia que esa reaccion era natural. La furia se le bajo casi en un instante y la cambio por una insinuadora y coqueta mirada...
algo para no dormi idiota
si me das podrías pedir mi ropa
- trabajas en kaiba corp, no es sierto – el castaño no respondio a la pregunta, simplemente le dejo el pañuelo con el grabado de tan ilustre empresa a lado de su vaso, el amarillo contenido estaba por debajo de la mitad..- de verdad que no tienes alguna linea de cortecia....? - (entiéndase aquí como linea de cocaina)
Kaiba sonrrio cortes mente y negó con la cabeza
- bueno, no importa, se ve que tienes en que caerte muerto, no como los pobretones de por aquí. No te gustaria una noche de buen sexo, no cobro caro y se lo que hago...- ahora fue una risa baja la
que se le escapo de los labios al ojiazul, bajo la mirada y se puso la mano en la boca, como deteniendo la risa, regreso su mirada a el chico que ahora le veia desafiante, eso, que interpreto como burla, no le habia agradado, fuera lo que fuera no permitia que nadie se burlaran de el- si quieres, y si no como sea, tu eres ...oye..- estaba empezando a guardar sus cosas cuando el mas alto tomo una de sus manon, no dejándole continuar con su labor ni con su discurso.
En un gesto algo rudo y extrañamente delicado also su mano y deposito ahí un breve beso, cosa que sorprendio a yami, no estaba acostumbrado a ser tratado precisamente con delicadeza, mucho menos con dulzura, no pudo ebitar sonrrojarse hace mucho que nadie lo trataba con afecto, pero se recupero rapidamente del flachazo y volvio en el la compostura
donde encuentro nieve pal desvelo ahora
- no vivo muy lejos de aquí...- lejos, CLARO QUE VIVIA LEJOS, tenia su cochinamente monumental mansión a las afueras de la ciudad, pero últimamente se habia estado hospedando en un departamento en esa colonia, iba a trabajar y todo, pero iba ahí para estar solo y porder pensar
creo que 100 podria ajustar, te animas?
mi depa esta al cruzar la esquina
-por el dinero no te preocupes, pero quiero una condicion
- no, no, no, no nene, yo aquí pongo las reglas, ami nadie me dice como hacer mi trabajo..- estavez la risa que salio del Kaiba fue mas fuerte...- ja, bien, si te parece y si no, hay muchas otras putas que puedes joderte por la mitad de mi oferta...
- espera yami!..- el aludido fruncio mas el ceño, por su nombre solo lo llamaban sus amigos y las chicas del hotel..- no te enojes, te puedo tutear verdad?...- continuo antes de resivir respuesta- solo quiero que canceles tu noche
- a que te refieres con cancelar
- que yo sea el ultimo cliente de hoy, te quiero con migo toda la noche
estoy solo como tu fulana
te invito a estrenar la luz mañana
no te quiero pa desarreglar la cama
- estas loco!!? O solo pendejo?!!!...- el grito atrajo la atencio de algunos clientes..- no puedo hacer eso, tengo que sacar dinero de la noche si no, no podre sustentar mis gastos, crees que esto lo hago por placer? Te metieron guano por el culo y te llego al cerebro?
- cuanto ganas en una noche?
- eres tan pedante, ya entiendo por que estas solo.... pidiendo migajas de cariño... eres tan patético.- sin conocerlo no le impresionaria que al siempre fuerte e inquebrentarble Kaibe (frio calculador, orgulloso, petulante...etc) se le enjuagaran los ojos, claro, aun tenia el suficiente orgullo para no dejar salir las lagrimas
- cuanto? – repitio, esta vez mas como una orden, la paciencia no era exactamente una de sus virtudes
pero por suerte (no se si buena o mala) yami se compadecio de ese que se veia tan miserable, le dio una cantida un poco alta, si lo queria, literalmente hiba a costarle
- 900 000 yenes
- bien te dare 9 millones, toda la noche, nadie mas..- un chiflido de sorpresa le siguio
- que lujitos te gusta darte, pero no me importa, es tu dinero, has con el lo que quiereas – nisiquiera la cantidad le hiso cambiar su expresión a una de mejor animo, del enojo tan solo regreso a la de astio e indiferencia
- tan solo quiero estar contigo
- vamos..- no le conmovían ni un poco sus palabras, camino lento para que su, ahora cliente, le ajustara el paso, digo, el no sabia donde dominios vivia ese tipo
No es lo que haces con tu boca mi muñeca rota lo que solicito
Te puedes dejar la ropa mi muñeca rota no la necesito
No es mujer la calentura urgar en tu cintura lo que ando buscando
Es un poco de ternura para que ver si cura lo que estoy pasando
dijo si sin sonreir, camina
Le tomo apanenas unos segundos regresar todo lo de la mochila a dentro de ella, con el brazo y en un movimiento parejo recorrio todos los objetos al borde de la mese y estos fueron cachados por la boca del bolso. Ya listo, tomo del brazo de su acompañante y juntos se dirijieron a la salida, dejando tras de si a algunos clientes muy sorprendidod y compañeras con cara de lastima...
aun llovia afuera, el gris habia ganada y sin clemencia, las gotas se estrellaban sobre el pavimento. Suspiro el ceo. Caminaron por las calles empapadas, salpicados con las gotas que rebotaban del suelo, callados, en una admosfera casi incomoda, pero acompañada
Kaiba sostenia un paraguas nereo, uno muy grande que bajo su cobijo albergaba a los dos chicos, inmersos en su mutismo. Kaiba miraba cada tanto a yami, se puso a meditar que nisiquiera le habia dicho su nombre, que eso era de una pesima educación, valla momento para estar pensando en la educación, pero, quizas seria mejor que no lo supiera, si se lo dijera cambiaria su actitud, aun que su hostilidad no le era grata una fingida cordialidad le seria mucho mas desagradable, sea como sea ese trato era sincero, sin mascaras..... simplemente caminaban....
- em, yami, verdad?
-hu
- hace cuanto que trabajas en ese hotel..- bien, mala pregunta para empezar, genial kaiba, miles de cosas de las cuales hablar y tenias que sondear en ese terreno tan difícil, se reprendio a si mismo por la idea y prefirió mantenerce callado el resto del camino
- desde los trece, esa fue la edad en la que me fugue de mi casa...- no pudo ocultar su sorpresa el echo de que su pregunta optubiera respuesta, pero decidio no desaprovechar la oportunidad y seguir la platica
- y por que terminaste aquí?
-jaja, digamos que alguien me trajo....- era eso lealtad, se lo debia a lguien, o era una cuenta lo que debia saldar. Quizas le debia dinero a alguien de ahí, o quizas
- te puedo hacer otra pregunta...- seria que estaba ahí por gusto?
- supongo...- una gota fijitiba alcanzo a darle en la cara asi que se vio en la necesidad de limpiarla
dime si el sexo sin placer te enciende
- tu te..em..- nunca habia tenido problemas para deci las cosas, las cosas por su nombre le decian cuando pequeño, ese nerviosismo le resultaba incomodo, solo lo habia sentido en contadas ocacione, y como lo odiaba.- mm, te exitas con
- con mis clientes?..- le completo ante la noteble dificultad que tenia para expresar esa idea en especifico.- cuando tego sexo con ellos..- kaiba trago en seco, ser directo se supone que era su papel. Yami suspiro- te he de decir que hay muy buenos cliente jodiendo, algunos les gusta mas que los jodas tu, las mojeres he de decir que son bonitas, pero prefiero los hombres...hay hombres muy bellos..- acto seguido lo volteo a ver y le dedico una media sonrrisa que en el acto desaparecio. Kaiba no supo como interpretarla, le habia causado una profunda impresión..
solo si el cliente es mujer, entiendes
- ya veo, no es raro en estos dias..- pero aun asi no le demostraria su sorpresa. El trato que tenia con aquella compañera le hacia dudar de la preferencia ademas el hecho de que lo tratara con tanta indiferencia y frialdad le hacia penzar que quiza le agradaban mas las mujeres, le sorprendia enterarse que era lo contrario...- tenemos derecho a enamorarnos de quien queramos
sus propias palabras le habian lastimado y le hacian recordar el por que se encontraba esa noche en ese lugar
disimulandi argmente esta claro
no te creas que me parece raro
- creo que eso es lo unico bueno que tiene esta perra vida..
cada quien su gusto y su pasión le dije
sus pasos culminaron en las puertas del departamento, no era un lugar muy lujoso pero era un conjunto abitacional recien construido. Las paredes estaban recien pintasas, la serca era nueva, las calles estaban aceptablemente limpias y de los seis departamentos la mitad aun no habian sido ocupados, esto se podia notar gracias a que en sus ventanas no habia cortinas..
En un movimiento maestro y sin soltar el paraguas, abrio la puerta que necesitaba un movimiento de truco, pero sin dificultad alguna logro que esta se habriera y le dejara el paso libre. Una vez que el camino estubo depejado le señalo a su acompañante con la mano el interior del lugar, en un gesto cortes indicándole que pasara primero a lo que yani atendio enseguida. Dentro, otro ambiente se sintio...
- que te parece?...- comento kaiba de una manera tierna, como si estuviese entregando a su novia en regalo de cumpleaños.- crees que ha valido la pena venir conmigo?
- me han llebado a mejores lugares...- por alguna razon no le agradaba ese sujeto, no le gustaba que trataran de seducirle, la mayaria eran solo farsantes que trataban de conseguir algo de cariño gratis, aprendio a no acceder a eso de la mala forma
En un movimiento sueve deslizo su mano por el costado de su bajito compañero acariciando todo a su pasa con el dorso de su mano y culminando en la del otro, en un dócil intento por tomarla – puedo?...- pregunto rozando con sus dedos
te podria sujetar la mano?
- no te me confundas niño, aquí es 100% negocio si quieres que haya cariño entre nosotros tendras que pagar mas...
- tu crees que tengo problemas con el dinero?
- se que no, pero no emprendere ninguna accion sin haber negociado antes la suma
dame 100 para empezar y hablamos
ese chico si que le desquiciaba , por momentos parecia tan tierno y de inmediato le regresaba a la cruda realidad de que estaba comprando amor , no, nisiquiera amor es lo que con el estaba comprando, tan solo era compañía, pero por que no le dijaba soñar un rato
los busque en mi pantalón y nada
fui debajo del colchon y estaban
- no cargo efectivo con migo, tendras que aceptarme un cheque o tomar una de mis tarjetas
- aceptare el cheque se le agregas una bonificación al total
Elegante y habil como siempre, de su saco sacó una chequera, y por fuera de el una pluma de firmas. Garabateando con elegancia y movimiento un poco exagerados y por de tras todas las especificaciones para que solo tuviera que entregar el billete en la caja y de inmediato se le fuese entregado el dinero, sin saber mas que su nombre...
- ten, es un cheque al portador, cuidalo mucho, es realmente como dinero... mas aun, esta en blanco, puedes ponerle cualquier cantidad que quepa en el espacio,
se los di como quien compra un par de alas
y la liberaran
- en ese caso, me veo en la obligación de cumplir conmi parte del contrato...- de su mochila saco un libro, doblo el cheque a la mitad y lo introdujo como un separador, memorizando, aun que de esto no estuviera consiente Kaiba, el numero de pagina y la ecena que se interpretaba en ella, que irónicamente era una de amor
pasando este momento, regreso su mirada a la azulina, que seguia envuelta en tristesa y desconsuelo y era su obligación hacer que volviera aun que sea un poco su brillo. Acaricio con el dorso una de sus mejollas, siendo delicado y dulce, que no era my difícil por que estaba siendo bien correspondido...
- me encantan tus mechones...- susurro kaiba acercándose a sus labios para besarlo, beso yami predijo frenetico y apasionado, y dulce y desesperado pero que simplemente fue dulce y elicado. Kaiba estaba muy interesado en mantener la delicadeza en ese encuentro. El pasillo que fue testigo de esa negociación tambien los vio partir como una pareja joven de enamorados, que caminaban una abrazado del otro y ambos cobijados por la noche gris que sernia en la ciudad, ajenos de este hecho y muchos mas
Yami intento arrancar una situación surgerente de los hechos, pero no pudo, pues cada vez que se le arrimaba, le acariciaba el torzo o le miraba lujuriosamente para que intempestivamente se le abalanzara ensima y terminaran haciando el amor en el pasillo, kaiba simplemente reia, de vez en vez se sonrojaba y le dedicaba los dulces besos que parecia desde hace mucho habia estado reprimiendo, cosa que lo confundia...
- que no me deseas? – le susurro en el oid, en un reproche gracioso y casi infantil, pero sin olvidar salpicarlo con lujuria y deseo
- claro que te deseo...- le contesto en el mismo contexto, pero con una voz mas ronca, tan cargada de deseo que sentia estremecerse en cada fibra y rincón de si, algo como un escalofrio le recorrio el cuerpo y culmino en su entrepierna- tienes un cuerpo que invita al pecado y a la lujuria...- cada palabra parecia pronunciada por la misma locura...- pero hay solo quiero tenerte a mi lado, mi pequeño sol
Abrió la puerta y en su interio se encontro en un elegante departamento, con una dmosfera un poco lugubre y solitaria. Era com otro mundo, nada en relacion con el edificio y sus alrededores, era casi como entrar a otra dimension
La respuesta parecio desilusionar un poco al tricolor, que se paso a la habitación, pensando que nunca habia estado con un cliente tan raro y conflictivo
La luz fue encendida, y al voltear kaiba manejaba una agenda electronica y al perecer desde ahí daba ordenes para controlar la casa. La luz tomo un tono rojizo, el estereo se prendio y toco una musica relajante y romántica, la chimedea ardio sobre los leños y estos asu vez empezaron a despedir un olor agradable, (seguro serian troncos tratados).cuantos lujos, ya no se le hacia tan raro que el dinero no fuera un problema, y empezo a replantearce la imagen de ese sujeto, seguramente era mucho mas rico de lo que le parecio en un principio...
No es lo que haces con tu boca mi muñeca rota lo que solicito
Te puedes dejar la ropa mi muñeca rota no la necesito
No es mujer la calentura urgar en tu cintura lo que ando buscando
Es un poco de ternura para que ver si cura lo que estoy pasando
Volteo a seguir examinando el departamento y se encontro un cuado muy peculiar. Una pintura que colgaba de una de las paredes de la sala y que con la luz de la leña deba la impresión de que se estuviera incendiando. Este cuadro le dejo severamente intrigado, en su mente un pequeño recuerdo se sucito“no te guistan? a mi me encantan lo girasoles” y el recuerdo de alguien. Eran los girasoles de Van goh, una pintura de gran belleza que te hacia estremecer como si un calero que encendía en tus entrañas, seria el original?, penzo en preguntarle a su anfitrio acerca de la autenticidad del cuadro, aun que prefirió contecerse, eso no le serviria de nada, pero algo muy dentro de si le dijo que era el original
- te gusta?
- que?!! ..- giro con rapidez la cabeza al verse sacado del golpe se sus pensamientos
- a mi me parece un cuadro muy hermoso, me inspira muchos recuerdos...
- es solo un cuadro...- intentaba desviar el tema de los jirasoles, no queria compartir su alma con un extraño. Kaiba rio bajito, tapándose la boca como la vez anterior para no disgustar a su invitado, claro, sin dejar de ver con aquel fuego ese cuadro... - ven, quiero mostrarte la vista, es muy bella...
como siempre, sin esperar respuesta, se dirigio a la recamara principal, dejando la puerta abierta tral el para que pudiese seguirle. Tras un ultimo vistazo al cuadro le sigui los paso, la habitación principal era amplia, con una cama mas grande que una king sice en su centro, los muebles, las cortinas, todo parecia de una finura sin igual, mas aun cuando lo comparabas con ese barrio de miseria, por un momento se preguntaba por que alguien como el estaria viviendo en un lugaro como ese. Y en el ventnal...
la ventana era del tamaño de la pared y en ella dejaba ver una esena muy peculiar, de entre las gotas de lluvia se dejaban ver pequeñas lices que querian sal y alumbrar con desesperación, puntitos de luz que se ahogaban en los rios que llovían esa noche, por que ya era noche. Mas al fondo, dos montañas naciasn orgullosas desde el horizonte y en us faldas otra ciudad presumia su basta colección de foquitos. No era muy impresionanate, pero aun asi era bonito...
- cuando amanece todo se pinta de rojo y ver salir el sol por aquellas dos montañas es lo mas mejestuoso que he visto
- Seto Kaiba, no es asi?
Kaiba abrio grnado los ojos, con el cuerpo aun viendo a la ventana, pero serrandolos pocos segundos después y bajando la cabeza, con una sonrrisa triste en sus labios, lo abria reconocido ya?
El corte en su discurso y en su inspiración le indicaba que lo habia estado ignorando y la alusión a su nombre le decia que lo habia reconocido.
dijo si sin sonreir, MOMENTO
- asi es...
- dime, es verdad que estuviste casado?
- si es cierto
Yami bajo la cabeza y con gesto sombrio se acerco a un buro de los costados de la cama, lo contempleo un momento y después acaricio la parte de arriba del marco, que por cierto se encontraba en medio del buro y era la mas grande de todos los cuadros
si es tu ex la del buro no hay trato
- el era tu esposo? ...- volteo a verle, ya muy serio. En el cuadro estaba la imagen de un rubio ojos miel, de aspecto dulce y alegre, muy agradable a la vista. Sonreia solo como una persona verdaderamente feliz sabe hacerlo
con su mano señalo el retrato
-eso que tiene que vero con esto?...- fruncio el seño y una resolución simple se vio en sus ojos. De su morral saco el libro, del libro saco el cheque y este lo rompio en dos justo en frente de kaiba..
- se acaba el juego, no hay trato..- los dos pedazos de convirtieron en cuatro, los cuatro en ocho y estos ocho pedazos los arrojo en la cara del ojiazul justo antes de darce la vuelta y emprender su camino a la salida
la conoces pregunte, confuso
- espera un momento!!..- la llamada que parecia un ruego salio de los labios de kaiba y como quien no quiere la cosa se obligo a si mismo a recobrar su caido orgullo- alto!!..- estabes mas energico y recuperado repitio la orden con otras palabras y al verse ignorado tubo que alcanzar al chico que le ignoraba y ozaba retar a Seto Kaiba. El Ceo habia intentado mantener lejos de ese asunto se tan retorcido temperamento, esas ancias de mandar y por un momento, frente a un extraño que le desconocia y con el cual no tenia que guardar las apariencias solto el lado humano y humilde que habia descubirto recientemente que tenia... pero ahora, ya no era un extraño, si no un bien identificado empresariop que no podia dejarse intimidar por un plebeyo cualquiera y que tenia que demostrar su autoridad y poderio
movido por esta y no por otras razones fue como Kaiba apresuro el paso hasta darle alcanse a yami y a tenerlo cerca cojerle del brazo para ebitar que la fuga se siguiera ejecutando
- te ordeno que me digas en este instante que sabes de Wheeler...
yami se quedo en la misma posición, a munos metros de la puerta, dándole la espalda a Kaiba y con la mano hacia atrás que el mismo ojiazul cojia en una demanda de que se le viera a los ojos, cosas que no conseguia
- contesta cabron!! Que sabes de el?
aun sin voltera safo su mano aprisionada de su fuerte captor, ya que este no tenia fuerzas para seguirlo reteniendo dada la imprecion de haber escuchado la ultima frace del tricolor y asi sin mirar ni un solo momento atraz, se fue
- fue por mi quien te dejo, iluso –
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