Cuando me di cuenta... estaba en un lugar oscuro en donde nada se distinguía, escuche una voz a lo lejos, y una silueta se formo ante mis ojos ansiosos de ver quien era aquella persona tan extraña que me estaba hablando en ese momento...la persona volvió a hablar y la silueta se acercaba cada vez mas lento, como si tuviera miedo, la persona que en ese momento estaba frente a mi balbuceo algo que no se entendía, pero que yo quería entender, entonces, fue cuando entendí lo que quería decir "lo siento" fue lo único que dijo antes de huir, lo ultimo que quería escuchar de cualquier persona, "lo siento" es lo que debí haber dicho en ese momento de mi desdichada vida, en aquel momento en que el estaba mirándonos sin que yo lo notara, en aquel momento en que yo sabia que le estaba engañando pero que se lo oculte y por lo que quería decir..."lo siento", antes de que me diera cuenta, estaba corriendo detrás de esa persona a la que no había visto, llevaba un abrigo negro y largo, era de cabellos Rojos, cuando logre atraparlo, supe que era el, supe que era aquella persona a la que no podía mirar a los ojos y lentamente lo abrase mientras decía aquellas palabras que tanto odiaba, aquellas palabras por las que me había atrapado sin tener escape alguno, comencé a llorar desesperadamente mientras decía "lo siento", las lagrimas resbalaban de mi cara y caían al suelo, de pronto, comenzó llover de la misma manera a la de la primera vez que le engañe, y el escondía la cara, había engañado a la persona que tanto amaba, a la persona que no podía dejar de mirar, a la que me enseño que debía tener amigos, dije "lo siento" una vez mas y corrí para no volver a mirarlo a la cara, mientras recordaba cuando le conocí aquel día en el bosque, el primer beso que logre darle y la primera ves que le engañe, todo daba vueltas en mi cabeza, estaba mareado y sentía algo extraño en mi pecho, y sin poder ir a su casa, fui con la persona a la que odiaba, fui con quien le había engañado para terminar con cualquier engaño...sin embargo las cosas desde hace un tiempo no me salen como quisiera, y caí una vez mas en las caricias de mi amante...no podía dejar de pensar en lo mal que estaba, pero es que me había vuelto una persona tan espantosa que no lo podía evitar, todo el tiempo ese cabello rojo frente a mí, a cada segundo su aroma mareándome, a cada latido de mi corazón un puñal en mi alma por esa traición...
Desde ese día desaparecí, no puede volver a verle, ni siquiera de lejos, la sola de idea de que me descubriera y me rechazara me enloquecía, no podía acercarme, ni siquiera arriesgarme, por que la cobardía se pego a mi como la sombra que te sigue a todas partes y no la puedo dejar, tampoco volví con la persona que me llevo a engañarle aún sabiendo que le amaba como nunca había amado, pues era mi primer amor y por desgracia el último...Sabia que debía hacer algo para no verle nunca mas, algo tendría que poder hacer para lograr mi objetivo, pero cada cosa que intentaba no funcionaba, sabia que no podía verle, pero la idea de olvidarlo era aun peor, solo la idea de no volver a verlo era demasiado triste para mi...pero...no podría olvidarlo...malditos sentimientos que no me dejan pensar con claridad...si hasta había llegado a pensar en matarlos a todos, su amor, su amante y a si mismo, pero ¿qué ganaría con ello? Encontrarse en el infierno tampoco le ayudaría a calmar lo que ahora tenía dentro de sí...no podía seguir viviendo de esa manera, y ya no era hora de pensar más, llevaba demasiado tiempo pensando, ahora era momento de actuar.
Caminar a plena luz del día frente a tantas personas entre las cuales se podría encontrar su amor era por supuesto para una persona que se ha vuelto tan cobarde, algo inconcebible, por lo que fue de madrugada, aún estaba oscuro, casi no habían personas en la calle, solo unos cuantos autos pasaban de vez en cuando iluminando toda la calle. Yo solo podía pensar en lo que había hecho, en la cara de el cuando lo supo, pero, aunque sabia que debía alejarme de el, yo seguía amándolo.
No podía huir sin decirle lo que pensaba, pero no podía mirarlo para decirle que lo amaba, después de engañarlo tanto tiempo, tal vez solo debía irme para no verle ni lastimarle mas de lo que ya estaba... entonces lo decidí aunque no pudiera verle, aun podía decirle lo que sentía, fui a su casa, deje una nota en la ventana y espere en un árbol con vista a su habitación a que la leyera...
Al día siguiente yo seguía despierto esperando a que leyera la nota, el se despertó, se levanto, tomo la nota y leyó:
"Aunque te haya engañado, aun te amo y podemos arreglar las cosas, si aun quieres verme te espero en el parque y si me odias te espero de todas formas, esperare a que me des con tu látigo las veces que quieras, te espero el día que leas la nota después de que salgas del instituto..."
En ese momento no pude ver su expresión, solo que aún con la nota en las manos cerraba la ventana y corría las cortinas...
El día paso lento, ya que había leído mi nota no tenía nada más que hacer que seguir esperando...como odiaba esperar sin saber que pasaría ni a que hora llegaría, no había dormido en toda la noche vigilando su ventana...tal vez podría descansar un momento en el parque mientras lo esperaba y así con eso en mente busque un árbol en el cual poder tomar una siesta.
La tarde llego muy rápido, o más bien creo que fue por que me quede profundamente dormido, comenzaba a hacer frío y pronto caería la noche...sentí un terrible dolor en mi pecho al aceptar que no vendría...nunca salía tan tarde y ahora, simplemente no vendría porque después de todo fue mi culpa y ni el siendo tan bueno puede perdonar a alguien que le ha lastimado tanto...mis ojos se llenaron de lagrimas pero antes que una de ellas llegara a caer el me llamó...estaba allí, frente a mi, sin mirarme, solo de pie frente a mis ojos lagrimosos.
Baje del árbol de un salto, estaba yo también frente a él, podría haberlo tocado con solo estirar mi mano un poco, pero no me atreví, entonces lo note, estaba por primera vez mirándolo a la cara después de que nos separáramos...conocía tan bien esas esmeraldas que no pude evitar sentirme aún más culpable por su mirada triste y la irritación que yo mismo sentía hacia mi.
El tiempo pasó y nos mirábamos en el mismo lugar que antes, ya no quedaba nadie más que nosotros en aquel parque, solo nosotros y nuestro dolor, y mi vergüenza y mi miedo y mis temores y mis ¡odiosos sentimientos humanos!
Entonces me atreví, rompí el silencio tan maravilloso que teníamos y dije:
- yo... -las palabras se negaron a seguir saliendo de mi boca, todas las cosas que quería decirle y ahora que tenía la oportunidad, las malditas palabras se negaron a salir, se atoraron todas en mi garganta dejándome como un idiota con la cara roja frente a él, que seguía esperando con calma lo que yo no le podía confesar -yo...no...que...ria - mis ojos se llenaron de lagrimas y mis mejillas se enrojecieron y en ese momento fue cuando el hablo.
-lo siento...aunque fuiste tu quien me engaño, creo que debo disculparme-su voz se destrozo mientras decía esas palabras de las que yo no entendía su razón de ser y decidí decir lo que tenia que decir
-yo te engañe y me siento culpable y siento...cosas que no había sentido antes por...nadie, solo por ti- esas palabras no las pensé...solo sentí que era lo que tenia que decirle
- como las ganas de engañarme?- contesto el elevando su voz que cada vez se quebraba mas mientras comenzaba a llorar- siento no ser suficiente para ti, no haberte consentido, y...-no pudo terminar la frase, sus lagrimas no lo dejaban hablar, esperé un minuto en el que ninguno dijo nada, el dejo de llorar y volvió a hablar- no puedo perdonarte, porque no tengo nada que perdonar...
- podemos ser amigos, aunque sea...solo...un poco- no aguante mas, las lagrimas corrían de mis ojos y caían al suelo convertidas en perlas negras que rodaban hasta sus pies - lo siento, no pude contenerme de engañarte, en ese momento, era algo que no podía evitar, no se por que lo hice, no lo comprendo- aun tenia esperanza de que pudiéramos ser algo mas que amigos
- solo podemos ser amigos...solo eso, amigos
- pero...- había logrado algo, me consideraría amigo, pero aun así, yo quería algo mas que eso, quería todo y por una estupidez estuve sin nada, por un estupido sentimiento humano...y por sobre todo, las entupidas cosas que el me enseño y por lo que lo amaba
- sabes...estuve pensando luego de que lo supe todo, que tu no eres la persona indicada para mi, tal vez debería seguir mi vida como debería haber sido- yo estaba paralizado, no podía creer que el se arrepintiera del tiempo que estuvimos juntos, esos ocho meses que estuvimos los dos felices estando juntos
- solo una mas, solo dame una oportunidad para demostrarte que te amo - dije desesperado por que me dijera que si...pero las cosas cambiaron
- es tarde para eso...
- ¿porque? ¡No eras tú el que creías y decías siempre que todos pueden cambiar y merecen una segunda oportunidad! - le interrumpí impidiéndole terminar, no quería escuchar nada que no fuera un ‘sí'
- lo sé, pero yo estoy con...con alguien más
En ese momento me dio la espalda, ni siquiera se atrevía a mirarme, el muy cobarde no me mostraba su cara...pero como podía culparlo de algo cuando era yo quien había fallado, cuando fui yo quien le hizo sufrir, cuando fui yo quien le engaño...al menos estaba allí aún y no había huido como yo lo había hecho...estaba con alguien más...alguien más se había acercado a él y ahora lo tenía como yo alguna vez lo tuve y lo perdí...¡NO! no me resignaría a perderlo siempre y cuando no tuviera que matar a alguien conocido o tendrías muchos problemas conseguiría recuperar todo lo que perdí (menos el amante) al gran Hiei nadie lo derrota.
Di un paso hacia él y lo obligue a mirarme a la cara, las lágrimas bañaban su rostro tan pálido que parecía en cualquier momento se desmayaría, una fría brisa invernal nos rodeo en ese momento y se estremeció en mis brazos, sus cosas del instituto quedaron regadas en el suelo cuando quiso poner distancia entre nosotros pero no se lo iba a permitir, solo consiguió poner sus manos en mi pecho cuando quiso empujarme y se lo impedí.
- ¿con quien? ¿con quién estás? - me sorprendí de lo calmado que podía llegar a estar en esta situación a él solo lo alarme aún más.
- eso no te importa, ya no tiene nada que ver contigo - nuevas lágrimas cayeron por su rostro, el dolor en su mirada también me dolía pero debía saber.
- si no me quieres decir, entonces... - en ese momento use mi jagan para ver lo que había hecho desde que me había ido dejando todo atrás, me parecía impensable estar tanto tiempo lejos de aquella criatura que amaba con tanta desesperación y todavía mas increíble que estuviera con alguien más.
Vi...vi con tanta claridad como corría mientras lloraba, como le sonreía día a día a su madre, a sus compañeros de clases y seguía fingiendo como siempre, pero yo pude ver más que eso, sus hermosos ojos verdes nunca pudieron mentirme, igual que ahora, había pasado un mes horrible sufriendo, culpándose, sintiéndose mal...pero aunque se le habían acercado otros que como yo lo conocían he intentaban animarle, ninguno, nadie había podido quitarle ese dolor, nadie le había vuelto a besar, nadie le había dicho que lo amaba tanto como lo había hecho yo, nadie.
Acaricie ese suave cabello rojo con olor a rosas en el que tanto me gustaba descansar, entonces me fije en sus labios entreabiertos y sin pensarlo dos veces le bese...sus labios fríos y secos no me respondieron como hubiese esperado, fue mejor, después de tanto tiempo, me sentía vivo de nuevo, algo dentro de mi nacía una vez más y me daba ánimos para continuar, pero él se alejo de mi mordiéndose el labio inferior mientras ocultaba su cara tras sus manos, quise acercarme nuevamente pero se alejo una vez más negando con la cabeza, finalmente las piernas le fallaron y cayó de rodillas al suelo, entonces me miró una vez más esta vez diferente nunca le había visto esa mirada, vacía sin emoción alguna, ya no lloraba.
- cuando te fuiste me prometí que no volvería a besarte sin importar cuanto lo deseara, no dejaría que me tocarás una vez más, pero ya vez, he vuelto a fallar, por esto me engañaste y me dejaste ¿cierto? - sin esperar respuesta alguna siguió hablando - me prometía a mi mismo algo que no pude cumplir, porque a pesar de todo yo quería a cada segundo del día estar cerca de ti...darte una segunda oportunidad es como estar dispuesto a que me vuelvas a engañar y que yo también te falle, por eso no habrá una segunda oportunidad, solo te daré la última por que no me puedo cumplir una promesa como la que ya rompí pero si, puedo caer ante mis propias palabras...
- tu no fallaste fui yo...pero, ¿sabes una cosa? - me arrodille frente a él - no te volveré a fallar, es una promesa... - sus ojos se cerraron y cayo sobre mi, sabía que no estaba bien, lo cargue hasta una banca y recogí sus cosas, tome de sus bolsillos unas monedas y le compre un café en una maquina que estaba frente a una fuente, cuando volví había despertado.
- toma, ¿acaso no has comido en todo el día? - dije sarcástico ya recuperando mi manera habitual de ser
- no, la verdad desde que leí la nota en la mañana que he estado observándote desde el otro lado del parque - sonrió como solo el lo podía hacer.
- baka, no te despreocupes de ti...eres muy importante para mi - lo último lo dije en un susurro, pero sé que él me escuchó
- gracias - nos abrazamos y nos quedamos así hasta que sonó su móvil, sacándonos de nuestro mundo perfecto.
Era su madre, no preste atención a lo que hablaban solo quería estar cerca de él, de pronto estaba de pie tomando sus cosas, y me llevaba casi a rastras a su casa...y mientras reía me dijo: ‘esta vez no te dejaré escapar'
No entendí a que se refería hasta que llegamos y me presentó a su madre como su ‘novio' y que a partir de ese momento viviría con ellos, la que nos gritó, jamás pensé que tuviera tremendos pulmones y que alguien conociera mas palabrotas que yo, pero al final aceptó y pues aquí estoy contándote la historia de mis días pasados, en verdad amó a ese pelirrojo y nunca más le he mentido, por supuesto que no lo haré, somos felices y espero que así sea por siempre...tal vez es verdad que el amor te cambia, a mi creo me ha vuelto mas...humano, aunque sea solo un poco...