MÁTAME SUAVEMENTE
By Sayuki
Rasgando mi dolor con sus dedos,
Contando mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente con su canción,
Matándome suavemente con su canción,
Contando toda mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente con su canción.
Recorría mi cuerpo con sus manos y tocaba cada milímetro de mi piel con sus dedos, con la suavidad de aquella caricia que nunca antes había sentido.
El besaba cada palmo de mi piel descubierta y yo solo me dejaba hacer devolviendo las caricias con mayor intensidad cada vez escuchando sus suaves gemidos, sintiendo como se estremecía bajo mi cuerpo.
Comencé a prepararlo sintiendo la necesidad de entrar en el inmediatamente, sin embargo algo me detenía… un sentimiento de protección que había nacido de la nada y que me evitaba que lo dañara.
Al fin termine de prepararlo e introduje por completo y de una vez mi miembro en su cuerpo, notando como sus paredes se ensanchaban a mi paso, descubriendo que para los dos esta era la primera vez.
Una vez que lo sentí totalmente acostumbrado a mi cuerpo comencé a embestirlo suave y lentamente, poco a poco el movimiento se volvió cada vez mas frenético hasta llegar al orgasmo. Después solo nos quedamos recostados, ninguno sabia que decir… hacia apenas dos horas que nos habíamos visto por primera vez…
Solo nos vimos, porque nosotros de alguna manera ya nos conocíamos…
[Flash Back]
Escuche que cantaba una buna canción
Escuche que tenía un estilo
Y entonces vine a verlo,
Para escuchar un rato.
Y allí estaba él, este joven,
Un extraño para mis ojos.
Estaba hastiado de aquella reunión, llevaba ahí casi 1 hora intentando escapar de los reporteros, de los empresarios, y de cualquier muchacha estúpida que me quisiera coquetear… al final logre salir por unos momentos al balcón, encendí un cigarrillo, el fastidio y el estrés estaban acabando con mi paciencia.
-Joven Kaiba…- Un señor de edad ya avanzada que reconocí inmediatamente como Kitaiga, el empresario; un viejo conocido amigo de mi padrastro… al contrario de la demás gente, él era una persona preciada para mí.
-Señor Kitaiga… buenas noches-
-Parece algo fastidiado joven Kaiba, la fiesta no es de su agrado?-
-Sabe usted que estas fiestas nunca han sido de mi agrado-
-Siempre tan directo, me alegra saber que usted nunca cambia joven Kaiba… aunque me alegraría mas el que usted estuviera contento… su padrastro nos dejo hace algunos años, por que no se le nota feliz?- Lo que me faltaba, que aquel viejo supiera igual del desprecio que le tenía hacia mi padrastro
-Supongo que al final consiguió enseñarme todo lo que quiso, de cualquier forma el que piense o no de su muerte no me sacara de esta aburrida fiesta-
-Jaja eso lo puedo ver… quizá no pueda deslindarse de la fiesta, mi estimado, pero no creo que nadie lo extrañe si se desaparece por unas horas-
-Parece muy optimista señor Kitaiga, pero si regreso a casa no creo que me queden ganas de volver-
-Entiendo su sentir joven Kaiba, pero yo no dije en ningún momento que debía regresar a su casa-
-…?-
-Si, mire frente a este salón hay un pequeño bar donde hay música muy buena, puede darse una escapada y yo lo cubriré-
-Señor no creo…-
-Vamos, vamos a puesto a que le gustara, además hoy tocará el joven Joseph Wheeler-
-Un extranjero?-
-Eso no lo se, pero tenga por seguro que es muy bueno, quizá sea de su agrado-
-Está bien, iré… regresare para la rueda de prensa, con permiso-
-Espero se divierta- Di la vuelta y me dirigí a la mayor discreción hasta la salida de aquel lugar, de todos modos, cualquier otro lugar sería mucho mejor que ese…
Una vez que logre salir de aquella fastidiosa fiesta, cruce la calle llegando al fin a aquel bar que me habían recomendado. Deje mi gabardina, parecía acogedor, bastante privado, me figure que era por la zona en la que se encontraba… pedí una mesa, en esos momentos no me apetecía quedarme en la barra, me senté y lo vi directamente de frente… era como un ángel, rubio, de facciones finas y con una voz hermosa… Simplemente no me importo ni si quiera el hecho que mi mente estuviera pensando cosas así acerca de un hombre, al contrario, creo que tan pronto como intentaba alejar esos pensamientos de mi mente otros más fuertes y oscuros los sustituían.
Termine por rendirme… pedí un whisky, no había bebido en toda la noche… el chico aquel terminó de cantar y el público le aplaudió, el se levanto haciendo una reverencia y fue entonces cuando nuestras miradas se cruzaron… de pronto me sentí perdido en aquellos ojos miel tan cálidos.
Noté como aquel artista se sonrojaba y de pronto la inseguridad acudió a mi diciendo que no era yo a quien él veía, despegue mi vista viendo al mesero quien ahora me traía el trago que le había pedido…
-Buenas noches a todos- comenzó su discurso y procuré no prestarle atención… cosa que no logré –Me alegra mucho que estén acompañándome esta vez como todas las anteriores, y que me hayan acogido de una manera tan cálida en este que es de los países que siempre he admirado- me quede embobado con la sonrisa que mostraba a todos y cada uno de los presentes, de pronto la idea de hacer que ésta fuera solo para mí no me desagrado para nada –Para continuar con el número del día me gustaría contarles una historia… una historia que va dedicada a alguien en especial, que se que esta noche me está escuchando. Quiero que esa persona sepa que le amo con todo mi corazón y que gracias a eso me ha ayudado a llegar hasta donde ahora estoy- la frase “Le amo con todo mi corazón” resonaba en mi cabeza, de pronto aquel lugar me pareció igual o más fastidioso que la dichosa fiesta en la que estaba… me levante con intenciones de irme, mas él continuó y logró de nuevo que me detuviera –Por favor me gustaría que todos los presentes la escucharan… la canción se titula ‘Behind Blue Eyes’ (Detrás de los ojos azules) , espero que les guste-
Al escuchar el titulo de aquella canción algo dentro de mi salto y la convicción para irme se fue al demonio, me senté de nuevo a escuchar, perdiéndome desde un principio en aquella melodía que parecía entrar en mí y comenzaba a rasgar mis defensas…
Rasgando mi dolor con sus dedos,
Cantando mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente con su canción,
Matándome suavemente con su canción,
Contando toda mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente, con su canción.
No one knows what it's like
To be the bad man
To be the sad man
Behind blue eyes
And no one knows
What it's like to be hated
To be fated to telling only lies
(Nadie Sabe Como Es
Ser El Hombre Malo
Ser El Hombre Triste
Detrás De Unos Ojos Azules
Y Nadie Sabe
Como Es Ser Odiado
Estarse Disolviendo, Diciendo Solo Mentiras)
Cantó a capela, solo con el acompañamiento de aquella guitarra acústica que él mismo tocaba, le daba vida a todas y cada una de las palabras que salían de su boca y entraban tan dentro de mí, que sabía no se me irían en algún tiempo…
De pronto imágenes de mi vida pasaban frente a mis ojos, como si estuviera a punto de morir…
Me sentí sonrojado con fiebre,
Avergonzado por el público.
Sentí que él encontró mis cartas,
Y leyó cada una de ellas en voz alta.
Rogué para que termine,
Pero él sólo seguía.
But my dreams they aren't as empty
As my conscience seems to be
I have hours, only lonely
My love is vengeance
That's never free
No one knows what it’s like
To feel these feelings
Like I do, and I blame you!
No one bites back as hard
On their anger
None of my pain and woe
Can show through
(Pero Mis Sueños No Están Vacíos
Como Mi Conciencia Parece Estarlo
Tengo Horas, Solamente Solo
Mi Amor Es Venganza
Que Nunca Es Libre
Nade Sabe Como Es
Sentir Estos Sentimientos
Como Yo Lo Hago, Y Te Culpo!
Nadie Regresa La Mordida Tan Fuerte
En Su Coraje
Nada De La Angustia De Mi Dolor
Puede Ser Vista)
Mi corazón palpitaba muy a prisa, y la temperatura de mi cuerpo comenzaba a subir, no podía creer que con unas simples palabras me estuviera dominando… sentí frustración, odio, coraje, tristeza y soledad… todos los sentimientos que había guardado el día que el trato con Gozaburo se cerró, me dije que no era bueno que los tuviera, y de ello dependía mi supervivencia. Recordé de pronto mis deseos, siempre me dije “Esto terminara pronto” y me guarde todo lo que tenía que decir, mis sueños y esperanzas… ahora recuerdo, siempre las escribí en cartas, me dije que nunca los olvidaría… las colocaba en el buzón.
De pronto todo a mi alrededor se nubló… aquellas cartas las envié a un remitente desconocido, sacado al azar de un directorio… como un grito desesperado de ayuda… mas sabía que nunca llegarían a su destino, era imposible que alguien las encontrara y eso me dio seguridad para seguir enviándolas…
Rasgando mi dolor con sus dedos,
Cantando mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente con su canción,
Matándome suavemente con su canción,
Contando toda mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente, con su canción.
No one knows what it’s like
To be mistreated, to be defeated
Behind blue eyes!
No one knows how to say
That they're sorry and don't worry
I'm not telling lies
(Nadie Sabe Como Es
Ser Maltratado, Ser Vencido
Detrás De Unos Ojos Azules
Nadie Sabe Como Decir
Que Lo Sienten Y No Les Preocupa
No Estoy Diciendo Mentiras)
Toque mi rostro con la llema de mis dedos, y sentí algo húmedo que hacía años no sentía… aquel sabor salado lo confirmo, el rubio que cantaba con la mayor pasión que no recuerdo haber visto me había hecho llorar… discretamente sequé las lágrimas que corrían por mis mejillas, procurando que nadie me hubiera descubierto… voltee hacia todas direcciones, mas todos los presentes tenían la vista fija en aquel chico, para mi sorpresa las palabras no solo habían llegado a mi corazón, sino al de todos aquellos que ahora parecían perdidos en otro mundo, pero sintiendo lo mismo, ya que la mayoría tenia rastros de aquellas gotas traicioneras…
Cantaba como si me conociera
En todas mis penurias.
Y luego miró justo a través mío
Como si yo no estuviera allí.
Y simplemente siguió cantando,
Cantando claro y fuerte.
No one knows what it’s like
To be the bad man
To be the sad man
Behind blue eyes.
(Nadie Sabe Como Es
Ser El Hombre Malo, Ser El Hombre Triste
Detrás De Unos Ojos Azules)
Sentí como si alguien me llamara, alcé de nuevo mi vista y me topé directamente con aquellos ojos mieles quienes también lloraban diciéndome con ello que me entendía y que sabía porque era así… dándome a entender que no estaba solo y que él había llegado a este lugar solo para estar conmigo…
Aquellas tonterías surcaban mi mente mientras él seguía cantando, y mis ojos no se despegaron de él… de pronto recordé que si había llegado hasta este punto fue porque mis sueños se quedaron solos, en aquellas cartas que nunca encontré, que nunca volvía a ver y que estoy seguro que nadie más conoció…
Me separe de su vista y me levanté, esta vez si me iría… pague la cuenta y salí de aquel lugar, no sin antes darle el último vistazo al rubio de ojos miel…
Rasgando mi dolor con sus dedos,
Cantando mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente con su canción,
Matándome suavemente con su canción,
Contando toda mi vida con sus palabras,
Matándome suavemente, con su canción.
POV Autor
Joey vio como aquel chico de ojos azules se iba antes de que terminara la canción, era extraño, de alguna manera cuando entró supo que era él a quien estaba buscando por tanto tiempo, pero parece que el chico elegante de mirada fría no pensaba lo mismo…
Desganado termino de cantar, agradeció al público y se fue, lo único que quería era descansar y pensar que aquel chico no era quien tanto andaba buscando.
Salió de aquel bar la noche estaba bastante fría… acomodo su abrigo y observo como muchas personas salían del salón de fiesta que estaba justo enfrente de donde trabajaba y entre todos lo divisó a él… aquel chico que había llegado esa noche a su bar para oírlo cantar ahora tenía una expresión relajada… se sonrojo violentamente, mas algo llamo su atención, del brazo de aquel chico se encontraba una bella señorita fuertemente sujetada, y supo que quizá no era él a quien buscaba.
Siguió caminando, de todos modos no valía la pena atormentarse por alguien al que no conocía… un golpe en su hombro le hizo caer directo al piso, levanto la vista dispuesto a decir una y mil maldiciones mas pero unos ojos verdes hicieron que se callara…
-Oh mil disculpas, no miré donde iba- aquel extraño le ofreció su mano y el la acepto
-No hay problema, yo tampoco iba poniendo mucha atención realmente- le regalo una sonrisa propia de él, cuando sintió que le cogían de un brazo y le daban vuelta.
-Mi nombre es Duke Devlyn-
-Eh… yo… mucho gusto, soy Joey Wheeler-
-No me digas que eres el cantante-
-Si, algo así- No noto que mientras hablaba con aquel extraño unos ojos azules los miraban desde la distancia con una frialdad aun más aguda que la que esa noche azotaba las calles de Domino, sin poder soportarlo se acercó lentamente buscando la manera de intervenir.
-Vaya soy un gran admirador tuyo- dijo el tipo consiguiendo que Joey se sonrojara bastante –Dime no te gustaría platicar un poco con un servidor…- Duke se acercó demasiado a Joey, logrando que éste retrocediera –Vamos te puedo ofrecer algo quizá, nada me haría más feliz que trabajar con un artista como tu- esto último lo dijo de una manera bastante seductora, haciendo que el rubio sintiera unas ganas desesperadas de salir corriendo, aquel tipo no le gustaba para nada…
-Yo… no muchas gracias, en verdad tengo que irme- con cada palabra el ojimelado daba un paso hacia atrás, mientras Devlyn seguía empecinado en seguirlo.
-Vamos, puedo ser muy bueno, quizá hasta te inspire un poco… no se para crear una nueva canción- la mano del pelinegro sujetó la de Joey haciendo que el rubio se echara violentamente hacia atrás chocando con lo que parecía ser el torso de alguien, al momento en que unos brazos rodeaban su cintura alejándolo por completo del ojiverde…
-Devlyn, no sabía que seguías por aquí- una voz gruesa y sensual hizo que su mente volara lejos… más específicamente hacia el ojiazul que aquella noche le abriera una esperanza… -Supongo que te debo agradecer el haber encontrado a mi novio… que tengas buenas noches Devlyn- quiso voltear, pero el miedo que su sueño se fuera hizo que se quedara quieto y vio como el pelinegro se alejaba, mientras aquellos brazos seguían rodeando su cintura. Pero todo por servir se acaba, así que juntando fuerzas de donde no tenía se soltó de aquel agarre y cuál fue su sorpresa al ver que su sueño se había hecho realidad.
-Yo… muchas gracias, em debo irme- dio la vuelta intentando correr, mas una mano apresó la suya haciéndolo chocar de nuevo con aquel dragón de ojos azules…
-Te llevaré a tu casa-
[Fin de Flash Back]
POV Seto
Y terminamos en este lugar, con él encima de mi pecho, no me arrepiento de nada, pero la quebrantada moral del planeta no me deja de gritar que hicimos algo malo… Siento como se mueve de encima de mí, incorporándose de manera que los dos quedamos frente a frente…
-Seto… Seto Kaiba?- mi nombre en sus labios logró que me sorprendiera, no hubo tiempo de presentaciones antes, ninguno de los dos sabíamos exactamente si la persona que estaba enfrente era quien creíamos…
-Si…- me atrevía a decir pensando internamente si era yo aquella persona amada para ese chico rubio, las lagrimas que cayeron de sus ojos hicieron que me estremeciera, secándolas tímidamente con mi mano, cosa que hizo que se levantara de prisa recogiendo su ropa y de pronto volví a entender que los cuentos de hadas no existen en la vida real…
Pero queriendo contradecirme, aquel chico sacó del abrigo que llevaba unas cartas… aquellas notas perdidas de mi infancia, que bien crearían un libro…
-Yo… estas cartas llegaron a mi casa- comenzó a llorar y se aferro de nuevo a mi cuerpo… no entendí lo que sucedía en esos momentos, pero el continuó –Cuando mi padre me lastimaba yo quería morir, pero… encontré sus cartas en mi buzón, comencé a leerlas y entendí que al igual que usted yo podía seguir con vida haciendo algo en lugar de solo .llorar… usted me salvo la vida- me miro a los ojos esperando una respuesta, sujete su rostro con cuidado besándolo de manera suave y lenta… Aquel día ambos encontramos todo aquello que buscamos por mucho tiempo.
Hola!
Como estas? Espero que mejor que yo… este día se ha vuelto de los más tristes de mi vida… hoy mi hermano murió, yo no pude hacer nada y solo se me ocurrió llorar, mi padrastro me golpeó diciéndome que aquello no se debía de hacer, que los sentimientos eran una pérdida de tiempo… no creo que tenga razón.
Después del entierro me fui en silencio a mi habitación, evite llorar, no porque me lo haya ordenado mi padrastro, sino porque sé que mi hermanito aun me cuida desde el cielo y yo no quisiera que estuviera triste… así que hoy recuerdo con cariño todo aquello que viví con el…
Sabes? Un día me dijo mamá que todos los que van al cielo nos observan desde allá y nos guían para encontrar a alguien con quien estaremos toda la vida y no nos sintamos solos. Ahora sé que mi hermanito y mis papás hacen eso por mi… espero encontrar pronto a esa persona… creo que no todo es tan malo.
Espero que estés bien y ojala un día podamos vernos.
Saludos
Seto