Corria a todo lo que las estilizadas piernas le daban, lo importante era poder solicitar ayuda. Trastavario por los largos pasillos tropesando con escurridizos y ocultos objetos en el suelo, una silueta alta y delgada le seguia muy de serca la huella, casi se podian rozar las pisadas mas sin embargo el hiba a paso veloz y hasta cierto punto tranquilo, la simple razon; No havia a donde escapara!!.
El temeroso muchacho corria con el corazon desbocado, las lagrimas se escapaban libres de sus brillantes ojos, esas orbes que parecian tener brillo aparte,esas orbes que enloquecian a su verdugo, esas orbes que un dia le dieron la mas grande dicha dentro de su insulsa y vacia vida, las mismas que ahora eran las culpables indirectas de su mas amarga angustia.Doblo en la improvisada esquina formada por una henorme pila de libros y con un cuerpo solido que era un gran librero destartalado, derrapando y semicallendo se empujo con la palama de la mano para sostenerse y darse un nuevo empuje, retomando su huida, el cabello se le pegaba a la frente victima del sudor que la adrenalina probocaba en su cuerpo, algunas conspiradoras ebras le entraban sin piedad a los ojos mermandole la vistay la poca luz de origen desconocido no ayudaba mucho al desesperado chico, el mas alto que hiba tras el sonreia con complacencia.
Miedo... miedo en los ojos que una vez lo enamoraron nadia lo abnadonaba, nadie terminaba con el y menos el ... menos el que era el dueño de su corazon, el dueño de su alma y cuerpo, escencia, vida y muerte, asi como el era dueño de escencia, vida y muerte de ese ser que corria pavorido por lo infinitos pasillos de aquel lugar, varita en mano chorros de luz apenas alcanzaba a esquivar el menor, maldiciones y sortilegios despechados le pasaban volando por un pelo, no entendia que pasaba, no entendia nada de esta situacion, los pantlones desgarrados, el cabello hecho una maraña, el cuerpo le dolia horrores y sentia que las fuerza hiban a abandonarle en cualquier momento, su cuerpo se adornaba con claras muestras de tortura cortesia de su acosador personal, daria lo que le queda de vida por tenr una varita en mano y poder someter a su perseguidor
- no hay escape cielo - la dulce he increiblemente atemorisante vos de su amado se dejo escapar desde lo profundo de su garganta causandole un efecto estremesedor - date por vencido amor - las facciones de aquel hombre que hablaba eran irreconocibles, totalmente transtornadas por la ira y la locura, sus ojos centellaban en rafagas rojas aciendo contraste con el color natural del iris, sus labios delgados y definidos, se contorcionaron en una mueca retorcida y enferma, jamas vista en el apesar de ser quein era, el en cambio de su desafortunado compañero vestia de forma pulcra y galante , de acuerdo a la ocacion, se dijo asi mismo en un pensaiento interno.
la presa dio una vuelta equivocada y callo en un callejon sin salida, la amplia y embrujada pared color rojo de fondo y a cada lado una nueva montaña de cachivaches y objetos diversos, aterrado paro en seco he institntivamente se dio la vuelta encarando a su novio, este por su lado llego tranquilamente frente a el con la varita en lo alto
- que te pasa? - la pregunta salio buscando una explicacion y el llanto asi como el temblor en el cuerpo eran acompañados por la entrecortada respiracion de su dueño- por que? ... que ise yo?... te amaba!!!! - los angustiosos gemidos se hubieran escuchado de no ser por el lugar en el que se encontraban
- me amabas?... osea que ya no me amas!!!! - no era una pregunta era una afirmacion y los labios cargados de ira gritaron al decir las palabras, mientras se acercaba con la misma agoniosa lentitud que havia estado utilizando desde el principio, el menor lo miro con panico y solo pudo temblar mas, con mas fuerza y mas violentamente- si lo asias al menos hasta hace un mes, no querido? - le miro con desprecio y hacio la varita fuertemente - si lo hubiereas hecho no estarias pensando en abandonarme
- mentira!!! - trataba de defenderse, buscar una manera en la que pudiera salir de esto, su desesperada cabeza pensaba mil posibilidades pero no daba con ninguna util
- si no eres mio... no seras de nadie - la voz salio tan tranquila que al menor le helo la sangre, lo sabia, sabia que era peligroso, que era un maniatico, se lo advirtieron pero el lo amaba, era cierto pero sus malos tratos le habian hecho añicos el amor y lo unico que lo mantenia a el era el temor, se movio aun mas contra la pared deseando que de esta se abriera la puerta por la que entro, pero esa no era la pared indicada, un nuevo reflejo de luz alumbro al raz de los ojos, ambos se miraban profundamente, uno con malicia y amor enfermo y el otro con miedo pero desicion calculando y pensando, la verdosa luz que emanaba de cualquier lugar mezclo las miradas grisaseas y verdes sin distincion
- tu no me amas, pero yo a ti si - sonrio con amargura - nunca lo iciste realmente pero ... prometiste estar con migo para siempre - lo miro con recelo y enfado - y lo cumpliras te guste o no - la mirada del menor se lleno de terror y panico cuando de la varita magico comezaron a salir destellos rojos que poco a poco fueron tomando forma, forma de llamas de fuego sofocante he inmensamente caliente, el mayor se acerco y tomo de la cintura a su novio, su pertenencia, lo unico que valia la pena en este mundo y que se le queria arrebatar forcejeando entre los brazos del fuerte capitan de qiditch fue domado poco a poco con cuidado pero si bacilar fue acercando sus labios despacio hasta que se juntaron y dieron el ultimo beso de sus vidas.
la sala de los menesteres se consumio lentamente devorando todo lo que a su paso encontraba, los secretos de las generaciones anteriores en howarts, las cartas y regalos de novios y novias despechadas, pociones malditas, muebles destruidos y entre sus victimas se sumaban los dos amantes que apesar de odiarse a muerte siempre se amaron
Draco sujeto con fuersa a Harry. En un abrazo cautivo, terminarian su vidas juntos como siempre devieron estar harry havia intentado abandonarlo por su mal estado de salud mental pero aun internamente el-niño-que-vivio amaba al dragon por lo que accedio a air a la sala de los menesteres donde ambos perecerian juntos hasta la aeternidad...
fin